El Gran Señor Fobio

Fobio llegó al salón, un lugar amueblado con glamour que no lo hacía menos que un noble.

Nadie esperaría jamás que una sala como esta existiera en lo profundo de las montañas.

Y sin embargo…

—Vamos a averiguar qué pasó, ¿de acuerdo? —murmuró esto y se dirigió a un rincón de la habitación donde había un espejo colgado en la pared.

Se tomó uno o dos minutos para observar su atractivo rostro y su cuerpo perfecto. Era extremadamente hermoso, e incluso su 'herramienta' allá abajo era demasiado grande para ser cierta.

Muchas mujeres habían testificado esto.

Solo después de mirarse un par de veces Fobio se recordó a sí mismo que había venido al espejo por un propósito importante.

… Además de mirar su cuerpo, por supuesto.

—Muéstrame qué está pasando afuera. —Al decir esto Fobio, el espejo dejó de reflejarlo y, en su lugar, mostró el caos que estaba teniendo lugar dentro del almacén.

'Todos están huyendo, ¿eh? Interesante…'