un reencuentro y un regreso

Al fin, las armaduras están listas. Usaré ambas en batalla. La segunda es por si debo escapar si todo sale mal, así que un día las probamos en un lugar apartado de la ciudad. Convoqué varias sillas porque había varios invitados: mis esposas Zanoba, Cliff, Elinalise y Nanahoshi, quien insistió en ir. A papá Norm y Aisha les ocultamos esto, así que no tienen idea de nada, sobre todo Paul, que insistiría en acompañarme y no quiero arriesgarlo por nada del mundo. Esta es una lucha mía.

Probé la primera y es bastante buena, tal como la que usé en ese diario del futuro, aunque tal vez sea diferente, quién sabe. Duplica mi velocidad y puedo atacar casi el doble de rápido. Es ligera y bastante genial, lo mejor es que usa poco maná. Bueno, no poco, a Silphy y Roxy las dejaría secas en unos días, pero yo podría usarla eternamente.

En cuanto a la armadura, copia del dios de la lucha,o como me gusta llamarla la Mark I, (ya saben, por Ironman), me consume cantidades ridículas de maná.

No creo poder usarla más de medio día, pero vuelve mis capacidades mágicas a niveles monstruos casi se multiplican por 10, y alcanzo velocidades casi de un Fórmula uno , sin siquiera usar mi aura de batalla. Aunque esto consumió casi toda mi fortuna, mis inventos están generando buenas cantidades de dinero y es un flujo constante. Aun así, fue mucho el dinero que gasté, y deberé hacer algo si salgo vivo de esto, para generar los recursos.

Hoy, para probarla, combatiré con Zanoba ,Elinalise y Cliff me lanzará hechizos, obviamente no los atacaré, es más bien para ver sus capacidades. Cuando estábamos por empezar e iba a entrar a la armadura gigante, Elinalise se excusó diciendo que se sentía mal y se fue a cuchichear con Roxy.

- Oye, Cliff.

- ¿Sí, qué pasa?

- ¿Tu ojo de la identificación puede ver si alguien está embarazada?

- Sí, ¿por qué?

- ¿Puedes mirar a Roxy? Sospecho que está embarazada, tiene un poco abultado el vientre y ha tenido náuseas.

- Vaya, felici...

- Shhhhhh, ¿quieres bajar la voz?

Quiero que ella me lo diga, pero quiero comprarle algún obsequio cuando lo revele.

Ya veo, esa es una hermosa idea, viejo. Déjame acercarme a hablar con Elinalise y me sacaré el parche para mirarla mejor. Una vez Cliff se sacó el parche y estaba por mirar a Roxy, su mirada se posó en el vientre de Elinalise.

Esto no puede ser cierto,

Cliff. ¿Qué pasa? ¿Estás bien, amor?

En eso, Cliff metió su cabeza en el vestido que traía Elinalise, poniendo su cabeza frente al vientre de Elinalise.

Oye Cliff eso es para la noche dijo coquetamente la elfa.

Jajaja, esto no puede ser, Liz, ¿estás embarazada?

Pffff, muchas gracias, Cliff. Era una sorpresa, te lo iba a decir esta noche en la cena.

Lo siento, amor, es que iba a ver otra cosa y justo te miré a ti. Estoy muy feliz, seré padre. Y Cliff salió corriendo como un lunático gritando "¡Voy a ser papá!".

Cuando finalmente se acercó a mi lado, le dije:

"Felicitaciones, viejo".

Gracias.

Pero ni siquiera miraste a Roxy.

Lo siento, Rudeus, es que me deje llevar por la emoción.

Cliff tenía una gran sonrisa. Recordé el diario, donde Cliff había muerto y nunca conoció a su hijo, pero esta vez será diferente, estoy muy feliz por el.

Bueno. ¿qué tal una práctica? Me puse la Mark I , Zanoba trato de darme un golpe y se rompió la mano. Me cubri con el escudo de su ataque , Zanoba lanzaba grandes gritos de dolor y tuvimos que usar magia de curacion para el pobre.

Los hechizos de Cliff tampoco le hicieron daño alguno, la armadura era muy poderosa, probablemente bastante cerca de la armadura del dios de la lucha ( creo). Probé la ametralladora que acoplé al brazo y es brutal, lanza cientos de cañones de piedra. Si bien no tan rápido como las balas de mi mundo, son veloces, tal vez como los mosquetes antiguos.

Estos resultados me dejaron bastante contento, amplían mis capacidades de combatir a un punto que tal vez sea posible derrotar a Orsted. Pienso enfrentarlo pronto, debo hablar con Roxy y Silphy aún. Aun cabe la posibilidad de que muera, pero tampoco quiero preocuparlas. Aun no sé qué decirles, creo que tendré que mentirles. Si pierdo, ese imbécil irá por ellas.

No debo ganar, no puedo arriesgarme a que les pase algo a las chicas. Es mi única opción, debo ganar como sea, hable con Ariel sobre esto y me recomendo un veneno, fui donde un tipo transfugo que ella me recomendo y me dio un veneno , que segun dijo ni la magia imperial podría curar, el tipo ni me cobró , dijo que era una peticion de su majestad ( ¿de donde rayos Ariel conoce a estos sujetos?.)

Mientras me preparaba mentalmente para todo eso, un día llegué de la universidad y toda la familia estaba esperándome, incluidos mis padres, Norm y Nanahoshi. Habían preparado una gran cena.

- Hola, ¿qué pasa? ¿Qué estamos celebrando? - pregunté.

- Pasa a la mesa, hay que hablar de algo - me dijo Silphy seriamente.

Maldita sea Nana conto todo -pensé-, maldicion, ¿cómo rayos salgo de esta? Cuando estaba en la mesa, todos estaban muy callados y yo transpiraba frío pensando en lo que les diría.

Cuando finalmente se sentaron Roxy me hablo.

Rudy, ¿sabes por qué estamos todos aquí? -dijo Roxy.

- No, no lo sé -respondí haciéndome el idiota listo para dar una respuesta.

- Bien, debo decirles una importante noticia a todos.

- ¿Qué, Roxy? ¿Estás bien, amor? -pregunté.

- Sí, estoy bien, tranquilo, Rudy. Bueno, yo, estos meses, me he sentido algo rara y hace poco Silphy me llevó con el médico, y bueno, tengo 2 meses de embarazo. Vas a ser papá nuevamente.

Eso ya lo sabía por el diario, pero no evitó que me pusiera muy feliz por la noticia. Me acerqué a Roxy y la besé suavemente mientras todos aplaudían y nos felicitaban. Me agaché y abracé a Roxy poniendo mi cabeza en su vientre, y dije silenciosamente a mi bebé.

- Prometo por mi vida que no te pasará nada, lo juro -mientras rompía en llanto recordando ese maldito futuro que pasó mi futuro yo cuando perdió a Roxy.

- Oye, ¿por qué lloras, Rudy? Yo también estoy feliz, pero no debes llorar jejejeje.

- Lo siento, Roxy, estoy muy contento. No puedo creer que la chica que llegó

A mi puerta cuando tenía 3 años y le tomaba en brazos, ahora lleva a mi bebé en su vientre.

Oye Rudy, cuando lo cuentas así, me haces sonar como si fuera una asaltacunas.

Jajajaja lo siento amor, es que estoy muy feliz, igual de feliz que cuando supe que Silphy esperaba a Lucy.

Después de eso, todos felicitaban a mi esposa. Papá estaba muy contento, pero fue mamá la que hizo un gesto que hizo que todos lloraran. Se acercó a Roxy, le acarició la mejilla y le sonrió por un segundo. Realmente creo que ella está consciente de nosotros, solo que no puede hablar.

Fue un día muy feliz, miraba a Roxy sonreir y ver como Silphy mis hermanas Lilia y Nana le acariciaban la barriga y ponian su oido en la panza de Roxy, y yo solo pensaba que debía salvarla como sea. Papá me sacó de mis pensamientos mientras me entregaba una copa de licor.

¡Felicidades, hijo! Tu segundo hijo viene en camino.

Gracias papá, ¡salud!

Va a ser un bello niño, Rudy, de seguro tendrá el pelo azul.

Jajaja, eso espero, me gusta el pelo azul.

Jajajaja, ya lo creo, recuerdo cuando Roxy llegó a enseñarte, y tú dijiste que era muy bonita, y ahora 15 años después ella es tu esposa y seran padres, jajajaja , es increíble como la vida une a las personas.

Supongo que sí, creo que Roxy me gustó desde que la vi, y me enamoré de ella cuando la vi en el continente demoníaco.

Jajajajaja, eso fue muy notorio en el laberinto cuando fuiste a rescatarla como un lunático.

Oye, hermano -dijo Aisha sacándonos de la conversación.

Felicitaciones de nuevo.

gracias.

Oye, el arroz que plantamos se fue bien y tendremos buena cosecha.

Perfecto, Aisha, muchas gracias. Dile la buena noticia a Nana, eso la pondrá feliz.

Jajajaja, lo haré. Por cierto, hermano, quiero que me entrenes en el Dios del Norte más seguido.

¿Por qué?

Norm me derrotó y planeo vencerla.

Oye, Aisha, no quiero que estén peleando.

Tranquilo, Rudy, la competencia es buena, crecerán juntas y su vínculo se hará más fuerte.

¿Estás seguro, viejo?

Claro que sí.

Pff, lo que digas.

Luego de la celebración, me quedé con Roxy para mimarla esa noche.

¿Te sientes bien, amor?

Sí, algo nerviosa pero estoy muy feliz, siempre soñé con ser madre.

Pensé que no te gustaban los niños.

No, no me gustaban hasta que te conocí a ti, Rudy.

Siempre te he amado, Roxy. ¿Sabes lo feliz que me hace saber que vas a tener a nuestro bebé?

Hay algo de lo que quieras hablar, te ves nervioso.

Si es sobre la armadura y lo que haré, escucha, Roxy. Si algo sucede, quiero que tú y Silphy...

¿No debería estar Silphy aquí y que nos digas esto a ambas?

Sí, tienes razón, espera.

Así que fui a buscar a Silphy. Cuando entré, ella estaba abrazando una almohada, riendo y pataleando, diciéndole a Lucy que tendría un hermanito y que tal vez pronto tendría otro porque estaba tratando de hacer uno todas las noches

Oye, Silphy.

¡Aaaagh, Rudy, qué haces aquí, me asustaste!

Lo siento, amor, ¿puedes venir conmigo y Roxy?

Rudy, está embarazada, no puedes obligarla a tener un trío.

¿Hey, por qué piensas que solo quiero sexo?

Porque todas las noches tenemos sexo, Rudy, bueno, tú al menos.

Jajaja, ven, amor, debo hablarles de algo importante.

Una vez reunidas, les conté la verdad.

Escuchen, chicas

Quien nos quiere atacar es el Hombre Dios, un ser que se aparece en los sueños, tratando de hacernos daño a ustedes dos. Si no fuera por el Miko, lo habría logrado. El Hombre Dios me dijo que la única manera de dejarnos en paz es enfrentarme a Orsted y derrotarlo.

"Estás demente, Rudy. Él no fue quien casi te mató", dijo Roxy.

"Así es, pero solo era un niño, y ahora tengo la armadura. Puedo ganar, confíen en mí."

"Yo confío en ti", dijo Silphy. "Con esa armadura, dudo que pueda hacerte algo, pero me preocupa más este Hombre Dios. ¿Confias en su palabra?"

"No, no confío, pero no tengo opción. No quiero que les pase nada, amores."

"En caso de que me pase algo, por favor, tengan cuidado."

"No digas eso, Rudy. Sé que volverás", dijo Roxy.

"Bien,mañana. Iré a combatir a Orsted, no quiero que nadie lo sepa, ni Nanahoshi. Por eso tuvimos una fuerte discusión."

"Pero mañana debemos ir a la universidad. Ella se dará cuenta cuando no vayas a los experimentos de los círculos."

"Sí, si pregunta, solo díganle que salí de negocios.

Bien, Rudy, confiamos en ti.

Esa noche dormí con ambas chicas pero no tuvimos sexo. A la mañana siguiente, muy temprano, quizás a las 4 de la mañana, me levanté, acaricié a Lucy y le besé la frente en su cuna, se veía muy hermosa. Antes de irme, besé a Silphy y Roxy, y le besé la panza a Roxy, quien lleva a mi futura hija (bueno, al menos eso fue lo que dijo el hijo de perra pixelado). Me puse la armadura pequeña, pasé por una cabaña que había comprado hace poco, donde Zaboba guardó la armadura grande, y llegué al lugar del enfrentamiento que estaba a las afueras de la ciudad en medio de un bosque, bastante alejado para evitar daño colateral. Estaba armado con mis espadas, mis dagas, no llevé a Aquahartia. Dejé la armadura detrás de mí y entré a una antigua ruina de una cabaña abandonada, respiré profundamente y activé el anillo para llamar a Orsted.

Vi que Nanahoshi me convoca ¿que habrá pasado?, rápidamente me dirigí a Sharia, pero está muy lejos, cerca de unas ruinas completamente abandonadas. ¿Qué pasará? ¿Por qué me llama aquí?

La señal venía de una cabaña. Cuando entré, me topé con una gigantesca armadura parecida a la del dios de la lucha, pero de un color grisáceo. Sentado frente a mí, había un hombre, claramente un espadachín del dios del norte. Me costó reconocerlo, pero lo identifiqué: era ese niño al que enfrenté en la mandíbula inferior del Wyrm Rojo, Rudeus Greyrat.

Ha pasado mucho tiempo, dios dragón Orsted.

Supe que te habías casado. ¿Cómo es que tienes el anillo de Nanahoshi?

Debemos hablar. Nanahoshi me dijo que es imposible derrotarte, y le creo. No planeo morir enfrentándome contigo, menos ahora que tengo una hija y otra en camino.

¿Y por qué esta armadura?

Para engañar al Hombre Dios, debí engañar a todos, incluso a mi familia y Nanahoshi. Él me ordenó matarte a cambio de perdonar la vida de mi hija que aún no nace. Él dice que mis hijos se van a aliar contigo y matarlo. Él ya trató de matar a mi esposa.

Ya veo, ¿y por qué no me atacas?

Nanahoshi me dijo que hablara contigo y te explicara mi situación, dice que tu eres una buena persona.

Lo mejor es matar a los apóstoles de ese ser.

Espera, espera, espera, hablo en serio. No quiero combatir. Ese tipo se me apareció en sueños y su único objetivo era separarme de mi esposa. Nunca le hice caso, y me dijo que no fuera a Lapam. Allí rescaté a mi esposa de morir, y cuando quedó embarazada hace 2 meses, trató de matarla con el síndrome de petrificación. Por favor, te digo la verdad. Yo quiero matar al hombre dios, por favor, créeme.

No trato de engañarte, necesito de tu protección, Nanahoshi confía en ti, y me dijo que debia explicarte mi situación. Por favor, no quiero perder a mis esposas y mis hijas. Tú eres el único que puede ayudarme con esto. Él hombre dios me dijo que mis hijos te ayudarían a matarlo en el futuro.

Eso suena plausible, pero aún así no confío en ti y no se puede confiar en un apóstol.

Ya no soy un apóstol.

Eso no importa, los apóstoles deben morir.

Vi cómo trataría de matarme haciendome dona nuevamente y lo empujé con magia de gravedad a unos 200 metros de mí.

¡Maldito idiota! Nana confiaba en ti eres una basura como pensaba

Mierda, estoy cagado. Ese tipo me quiere matar. No sirvió de nada tratar de parlamentar con él. Rápidamente entré a la Mark I y la preparé para la batalla. Por favor, Dios verdadero, si es que hay uno, sácame de esta esta con vida. Quiero ver a mi familia nuevamente. Maldita sea Nana, este tipo no es como decías.

Mientras, unas horas antes, dos reinas de la espada habían llegado a Sharia después de un largo viaje, donde se enfrentaron con bandidos y pelearon en un pueblo. Esto fue culpa de la pelirroja que estaba tan apurada por volver a ver a Rudeus que intentó tomar un atajo que solo les trajo problemas que resolvieron con violencia.

Una vez que llegaron a Sharia, Eris estaba maravillada con cada pequeña cosa que veía, como cuando era niña, y se imaginaba a Rudeus paseando por esta ciudad.

"Bueno, ¿y ahora qué, Eris?"

"Preguntemos en el gremio o en la universidad."

Pero muchos al verlas se apartaban del camino de ellas, ambas exudaban peligro finalmente unos aventureros le dieron información.

Claro, Rudeus Greyrat, lo he visto. Su padre es caballero en esta ciudad. Siempre los veo haciendo ejercicio juntos.

Después le preguntaron a un comerciante.

Rudeus Greyrat, claro que lo conozco, siempre lo veo con sus esposas: una elfa de pelo blanco y una chica que parece que tenía unos 16 años pero es una demonio. Él es muy cariñoso con ellas, una vez lo vi tocándole el culo a la elfa, ella lo regañó, eso fue gracioso.

Mmmmm pffffff resopló Eris con esta última anecdota.

Luego preguntaron a un estudiante de la universidad.

Sí, Rudeus Greyrat, es el mago más poderoso de la universidad., es muy famoso en Sharia. Es un mago real de agua, también es un santo del Norte. Yo lo vi derrotando a la hija del dios del filo en menos de 5 segundos y derrotó a Badigadi de un solo golpe.

Espera, ¿cómo que la hija del rey del filo? Dijo Eris algo molesta.

Sí, esa chica vino hace años a desafiarlo y Rudeus la derrotó solo con varas.

Esa maldita idiota, nunca me dijo eso, jaja, Rudeus le pateó el culo a esa engreída. ¡Oye niño ¿Rudeus esta en la Universidad ahora?!

No , creo que solo sus esposas y su hermana Norm, él y Aisha son alumnos privilegiados y solo toman ciertas clases, así que deben estar en su casa.

¡Bien, gracias!

Oye, Eris, ¿no preguntaste dónde vive?

Maldición, lo olvidé.

Luego encontraron a otro estudiante y volvieron a preguntar por él.

¿Dónde vive Rudeus Greyrat?

Pues a unos 15 minutos de aquí por esta calle, es la gran casa con techo color verde esmeralda. Afuera hay un pequeño trend y una bestia que trajo de Begarit, donde su esposa viene montada a la universidad.

Ya veo, gracias.

Oye, espera, ¿cómo se llaman sus esposas?

Claro, una es la guardaespaldas de la princesa Ariel, es una elfa de pelo blanco, todos la conocen como Silent Fitz, pero creo que su verdadero nombre es Silphiette Greyrat . Aunque he visto a Rudeus llamarla Silphy. Y la otra es la profesora Roxy Greyrat, una maga real de agua. Es fácil identificarla, tiene el pelo azul y parece de 17 años, aunque tiene como 50 o algo así.

Entiendo, muchas gracias -dijo Eris-. Con esta información tenía una cara algo complicada.

¿Qué te pasa, Eris?

Conozco a Roxy, es su maestra. Cuando la vi en Windport, ellos estaban muy unidos. La otra se llama Silphy, igual que su amiga, pero tiene el pelo blanco.

Tal vez se lo pintó, hay mucha discriminación contra ese color de pelo.

Ya veo, bueno, será mejor ir a verlo.

A medida que se acercaban, el corazón de Eris palpitaba cada vez más rápido, recordando la última vez que lo vio dormido en esa tienda en Roa, mientras ella le besaba la mejilla. ¿Cómo estará ahora? Ya es un adulto. De pronto, vio a un hombre que iba adelante de ella, con el mismo color de pelo y el cabello atado en un mechón, tal como lo describieron, y se dirigía al mismo lugar. ¿Será él? pensó Eris.

Sin pensarlo, corrió hacia él para saltar encima y abrazarlo, pero de pronto el hombre se dio vuelta y sacó su espada. Era parecido a Rudeus, pero era más viejo.

- ¿Qué demonios te pasa, loca? ¿Quieres atacar a un caballero de la ciudad en su ronda? - dijo el hombre.

- ¿A quién llamas loca, idiota? - dijo Eris sacando su espada.

- Espera, ¿Eris?

¿Y tú cómo me conoces?

¿Ghislaine, eres tú?

Vaya, qué viejo te has puesto, Paul.

Y tú sigues tan hermosa como siempre.

Pfff, pudrete, galán de tercera.

¿Espera, señor Paul?

Así es, ha pasado mucho tiempo, Eris.

Siento llamarle idiota, pensé que era Rudeus.

Jajajaja no te preocupes, solo me asustaste. Rudeus debe estar en su casa . Sigan por esta calle, al final del camino está su hogar. Iria con ustedes ahora, estoy en mi ronda.

Ya veo, gracias, señor.

Hasta pronto, las veré en la tarde.

Oye, Ghislaine, ¿podrías pasar por mi casa un día? Zenith se alegrará de verte.

Lo haré, dijo la gata mientras seguía a Eris.

Cuando finalmente llegaron, era una casa enorme, tan grande como una posada de lujo. No era ni una fracción del palacio de Eris en Roa, pero esto a ella nunca le importó, con tal de estar con Rudeus ella viviría en una caverna y sería feliz. Y ahí se quedó mirando sin entrar por casi una hora.