Capítulo 13.

Había pasado un mes de aquel suceso que fue llevado a la luz, habían muchas cosas que quedaron guardadas o sin poder investigar pero habían encontrado el centro de todos los secuestros y prostíbulos que se hacía en ese, y otros lugares. La familia de Jael como muchas otras salieron impunes de estos casos porque no habían pruebas de que realmente estuvieran involucrados, después de todo esos lugares se disfrazaban de casinos por lo que muchos podrían ir sin saberlo pero no se podía probar eso.

Liam descansaba en su habitación, sus padres ahora lo protegían aún más y sus hermanos no dejaban que saliera a jugar ni siquiera, quería salir pero le fue prohibido, no podía ver a Alek tampoco porque luego del beso tanto su padre como hermanos lo detestaban con toda su alma.

— Hijo mío.

— Mamá.

Ryan le sonrió a su pequeño bebé. — Cariño, hay alguien que ha venido a verte.

Liam solo pensó en Alek así que salió corriendo bajando las escaleras algo emocionado, quería hablarle de como fue que lo encontró tan rápido. Al bajar encontró a alguien más que llamó su atención rápidamente.

— Liam, saluda.

— Buenas tardes, soy Liam Kaiser. — Se presentó haciendo un pequeño asentimiento de cabeza.

El hombre Omega al parecer sonrió con alegría y se acercó a él con lágrimas en sus ojos. — Hola Liam, soy Louis Thomson. — Le abrazó de la nada tomándolo por sorpresa mientras su madre sonreía. — Se que es inesperado pero muchas gracias.

— ¿Eh?

— Has salvado a mi hijo, de verdad no se que hubiera hecho si... — Las lágrimas salieron de sus ojos rojos y Ryan le consoló, como Omega y madre entendía ese sentimiento. — Muchas gracias, siempre te estaré agradecido. Este es mi hijo, cariño saluda.

Liam miro al pequeño chico que apareció en su campo de visión.

— Hola, soy Noah Miller. Un gusto conocerte Liam.

Claro, sabía que de alguna manera debía conocerlo y estaba más que feliz de hacerlo más cuando se enteró de que lo salvó. Noah, otro protagonista masculino y un Omega dominante quien muere por una enfermedad causada por su anterior pareja alfa. Sin duda era un Omega precioso, de hermosos cabellos castaños claros y ojos verdosos, Noah llamaba la atención sobre todo porque a pesar de su corta edad era alto como si se tratara de un alpha, aunque era obvio, los padres del menor eran enormes tanto alpha como Omega.

— Gracias por haberme salvado.

Liam sonrió. — Debo ser quien agradezca, me salvaste de ser asesinado por ese tipo.

— Aun así me sacaste de ahí, me tuviste en tus brazos y me protegiste. — Noah tomó las manos del otro omega. — Eres mi salvador.

El rubio no dijo nada más porque de todas maneras era beneficio para él y su familia tener a Noah de su parte. Los Miller eran una familia muy prestigiosa y ahora Sabía que como agradecimiento el padre de Noah y su padre habían hecho una alianza para evitar este tipo de situaciones a los niños en un futuro.

— ¡Por favor se mi amigo Liam!

— Esta bien.

Los omegas miraban a sus hermosos hijos y decidieron ir a tomarse un té con una sonrisa, todo parecía ir bien y Liam estaba agusto con esto.

Noah por otro lado miraba a su salvador con emoción y cariño, este Omega era divino y le encantaba la forma como sonreía, las mejillas sonrojadas que parecían dos melocotones y sus fascinantes ojos azules como el mar que brillaban con mucha intensidad. ¡No podía creer que había un Omega tan hermoso!

Siempre le habían dicho que él era una belleza pero esa gente desconocía totalmente como era Liam. ¡Este niño definitivamente era mucho más hermoso!

— Liam. ¿Puedo estar contigo de ahora en adelante? Quiero estar siempre a tu lado. — Dijo de forma tímida haciendo al rubio reír un poco.

— Está bien. Cuídame por favor. — Acarició los cabellos castaños del otro Omega quien se sonrojó hasta las puntas de sus orejas.

Liam suspiró feliz de que todo hubiese salido bien y se dedicó a jugar con su nuevo amigo Omega.

...

Liam debía empezar la escuela primaria, de hecho hace rato de había hacerlo pero sus padres aún tenían algo de temor por lo sucedido, después de todo solo han pasado dos meses. Dos meses en dónde Noah ha ido mucho a su casa y Alek tampoco fue la excepción, también estaba Jael quien fue a verlo muchas veces pidiendo perdón por su comportamiento y hasta llevándole muchos regalos.

¡No entendía lo que pasaba!

Estás protagonista parecían piojos siempre a su lado molestándole, solo quería estar solo un rato pero los tres encontraban la forma de encontrarlo.

Ahora estaba en la misma escuela de los tres chicos pero solo estaba en el mismo grado que Noah, a pesar de ser más joven que el otro Omega había logrado hacer perfecto examen de ingreso ocupando el primer lugar y subiendo de curso quedando entre los mejores de la escuela, y convirtiendose en el Omega mas popular.

.... Liam estaba estupefacto.

No había hecho mucho, aunque había estudiado un poco en su vida anterior no era tan bueno así que dudo de sus capacidades en esta vida pero al ver cómo su habilidades débiles en su mundo eran sorprendentes en este mundo decidió estudiar aún más para ver su límite.

Y no tenía uno.

Aunque intento fallar algunas preguntas del examen había logrado ocupar el primer lugar de todos los niños e incluso lo subieron de curso.

— No te preocupes Liam, yo te ayudaré en lo que necesites. — Noah le sonrió con ternura mientras tenía al Omega a su lado, era tan afortunado de tener al chico justo en su mismo curso y como compañero de asiento.

— Gracias Noah, estaré a tu cuidado.

Las clases fueron muy fáciles a su parecer, temas que él había visto hace mucho tiempo en la escuela que el orfanato lo mandaba así que no fue difícil para Liam adaptarse. Noah en cambio parecía perdido y no entendía muchas cosas aunque algunas veces lo hacía a propósito para tener a Liam más cerca, después de todo le encantaba el aroma suave que tenía y lo había sentir seguro.

Se supone que ambos eran omegas dominantes pero aún así se le hacía imposible pensar en estar con un alpha cuando su mente siempre estaba pensando en Liam.

¿Que era eso?

El rubio, ajeno a todo, simplemente se divertía en las clases y empezó a interactuar con más chicos olvidando que habían otros tres detrás de él intentando encontrar la manera de estar a su lado.

En el descanso, Liam salió al baño e inesperadamente se encontró con quién menos quería ver. Jael DuPont, había prometido estar alejado de él porque como protagonista no debía interferir en su vida y no lo haría, no quería problemas pero Jael no pensaba lo mismo.

— ¿Podemos hablar?

Liam suspiró. — ¿Que sucede?

— Se que no pareces quererme cerca pero yo venía a decirte que me disculpo.

El castaño tomo una de sus manos y la apretó con algo de fuerza mientras seguía mirando fijamente a Liam.

— Realmente quiero que seamos amigos Liam, no quiero que hayan malentendidos ni nada de eso. — Murmuró acariciando los nudillos del Omega quien no entendía nada de sus acciones.

— ¿Sabes que es algo complicado creerte?

Jael asintió. — Lo sé pero he cambiado mucho, no quiero ser igual que mis padres. En ese momento estaba asustado por lo que dije eso pero no era cierto y lo sabes.

Jael estaba siendo muy sincero, de verdad quería estar con Liam y no separarse de él jamás, no es por sus padres ni nada de eso, simplemente quería estar a su lado y si en un futuro se daba la oportunidad entonces tenerlo como su pareja aunque aún era muy pronto para pensar en eso. Debía crecer más, tener más conocimientos de la empresa y destruir a sus padres quienes son los más amenazadores para Liam, podían hacerle daño así que se fijó la meta de ser mejor que ellos, será un hombre alpha perfecto para Liam.

Aunque claramente no diría eso, prefería tragarse su orgullo a perderlo.

Liam por otro lado estaba algo confuso por todo esto, se supone que no debía tenerlo a su lado, se supone que estás palabras debían ser solo para el Omega protagonista pero entonces... ¿Por qué sentía que algo estaba mal?¿Es por qué cambió el rumbo de la historia con sus acciones?¿Hizo algo que no debía?

Aún así no se arrepentía, lo hizo por su familia y para salvarse a él mismo, no iba a permitir que nada malo les pasara pero estaba incómodo porque el protagonista no aparecía aún y ya estaban ocurriendo estos cambios, de verdad no quería hacer más cosas y esperaba no encontrarse con otros protagonistas alpha's secundarios que estuvieron detrás del protagonista Omega.

Pero teniendo en cuenta todos estos cambios.... ¿El Omega principal aparecería?

Si lo hacía. ¿Cómo debía actuar?

...

— Hijo mío, sabes que quiero lo mejor para ti ¿No?

— Padre, no tienes que repetirlo, lo sé. — Sonrió el niño mientras le sonreía "Tiernamente". — Por algo nos parecemos.

El hombre sonrió y acarició los cabellos negros de su hijo. — Vete, debes prepararte.

— Si padre.

El niño salió de la oficina y cambió su expresión sonriente por una molesta, era odioso tener que fingir frente a ese hombre y no decirle todas las cosas que deseaba decir. Su paciencia estaba llegando al límite y todo pareció cambiar, Liam estaba arruinando sus planes y él debía aparecer rápido para destruir todo lo que había hecho, después de todo así no debían ser las cosas en primer lugar.

Su mirada se fijó en la foto de otro niño mayor que él, James Evans. Debía encontrarlo y tenerlo de su lado, después de todo nadie se podría resistir a él aunque quisieran.

Porque él era el verdadero protagonista de esta historia.

.....