Nalrond observó cómo su mana se movía desde algún lugar cerca de su plexo solar y luego a través de su cuerpo hasta llegar a la mano que empuñaba la varita de Forja. Se concentró en el flujo, siguiéndolo hasta su punto de origen.
—¡Lo hice! Encontré mis núcleos. Ahora solo tengo que estimularlos como hago con mi mana y mi vida como monstruo habrá terminado. ¡Cualquier cosa es mejor que estar atrapado entre dos mundos sin pertenecer a ninguno! —Pensó mientras trataba de Despertar.
Nalrond agitó cuidadosamente los dos núcleos al mismo tiempo y con la misma intensidad, comenzando con latidos rítmicos pequeños no más fuertes que el corazón de un recién nacido. Su flujo de mana aumentó drásticamente a medida que el color de sus núcleos se volvía más brillante.
Hỗ trợ các tác giả và dịch giả yêu thích của bạn trong webnovel.com