REGRESANDO A CASA

[… Esta es una vista aérea de la escena del accidente…]

Mientras comía un refrigerio, Harumi Kido miraba en la televisión una noticia que había ocurrido recientemente.

[… A las 16:44 horas de hoy 3 de mayo, el descarrilamiento masivo de un tren bala ocurrió en el campo cerca del lago Buwa en la prefectura de Shiga, ahora estamos viendo imágenes en vivo desde el cielo…]

En la pantalla del televisor se podía ver cómo es que los vagones de in moderno tren se habían salido de las vías férreas, desperdigados por todos lagos. Algunos de los vagones estaban conectados unos con otros, algunos de ellos estaban sueltos, pero casi todos ellos estaban destrozados, incluso algunos de ellos aun seguían incendiándose.

En la escena también se podían ver decenas de unidades de bomberos, ambulancias y patrullas de la policía, tratando de controlar los incendios y de evacuar a todos los heridos.

[… Este es el primer descarrilamiento accidental de un tren bala desde el terremoto de Chuetsu…la causa de este terrible accidente aún está en investigaciones… los servicios de emergencia están realizando operaciones de rescate… la magnitud de daños aún no ha sido calculada… se espera una gran cantidad de heridos y fallecidos…]

"Kami, esto es algo terrible… espero que nadie que conozco haya estado ahí" – Harumi murmuró mientras comía su helado.

"Estoy de regreso…" – de pronto, nuestro protagonista habló mientras ingresaba al departamento.

"¡Yuuma!"

Harumi se quedó sorprendida por un segundo, pero luego saltó desde el mueble en donde estaba sentada hacia nuestro protagonista, prendiéndose como un Koala de su cuerpo.

*Beso*Beso*Beso*

La mujer no se guardó nada y comenzó a besar a nuestro protagonista tan vivazmente, sin siquiera dejarlo respirar.

Esto hizo que nuestro protagonista sonriera y aceptara gustosamente el saludo de Harumi, pues él también la había extrañado durante todos estos días.

"Mmm~… Ahh… en verdad te extrañe"

Harumi comenzó a gemir entre cada beso mientras su entrepierna se movían frenéticamente contra el gran bulto que crecía en los pantalones de nuestro protagonista.

Para ella fueron casi cinco tortuosos días en los que extraño a nuestro protagonista, cinco días de no ser follada hasta el cansancio, por lo que su cuerpo instintivamente lo había buscado sin descanso.

Incluso cuando ella había pensado en masturbarse para aliviar su estrés, sabía que no serviría de nada, pues solo la gran cosa de Yuuma podría quitarle esta comezón que sentía.

Y como si fuera una respuesta a sus oraciones, inesperadamente Yuuma llegó mientras ella veía descuidadamente las noticas vespertinas. Es por ello que reaccionó tan expresivamente, lanzándose contra él y abrazándolo fuertemente.

Yuuma caminó con Harumi en sus brazos y se sentó en el sillón mientras ella se sentaba en su regazo y se acurrucaba contra su amplio pecho, logrando sentir el calor que había estado anhelando todos estos días.

"Parece que alguien me extrañó mucho" – Yuuma susurró cerca de su oído.

"No, nadie te extrañó para nada" – Harumi sonrió y se acurrucó más entre los brazos de nuestro protagonista.

"¿Con que no eh? Veamos si con esto te vuelves un poco más honesta"

"No, espera, espera ¡No! jaja, jajaja espera"

Yuuma comenzó a hacerle cosquillas, haciendo que Harumi se retorciera en su abrazos mientras soltaba algunas carcajadas.

Este era un excelente momento de felicidad para la mujer.

Por su edad, ella siempre había intentado actuar con un poco más de madurez cuando interactuaba con Yuuma, siendo siempre directa y sincera con sus sentimientos.

No obstante, en estos momentos ella solo quería actuar como una colegiala y recibir mimos por parte de la persona que amaba.

"Basta, jajaja, basta, lo admito, si te extrañe ¿contento? Te extrañé mucho"

Luego de un momento de risas, Harumi cerró los ojos y disfrutó sentir los fuertes brazos de su hombre rodearla tan protectoramente.

"Mas bien, dime ¿Cómo te fue en tu viaje?"

"Pues, no me quejaré, obtuve buenos resultados. Eliminé a muchos chicos malos, salvé a algunas personas de destinos terribles y ayudé a un par de mocosos a superar distintas adversidades"

Yuuma comenzó a relatar sus viaje mientras hacía unas pequeñas representaciones graficas con su poder en la palma de su mano como si fueran unos pequeñas figuritas móviles, lo que atrajo toda la atención de Harumi.

El escuchar sus aventuras hizo que la mujer de anteojos se sorprendiera mucho, pues si bien Yuuma trató de obviar uno que otro detalle sobre asesinar personas, el saber que todos esos tipos que fueron castigados hicieron cosas horribles fue suficiente para que Harumi no les tuviera pena y deseara que su hombre les haya quitado la vida.

No es que ella no tuviera respeto por la vida ajena, es solo que escuchar las atrocidades que esos tipos cometieron era algo que la hacía sentir asqueada.

"Mmm, ya veo, parece que obtuviste grandes ganancias" – Harumi sonrió sarcásticamente – "Y dime ¿Cuántas mujeres quedaron encantadas de conocerte? Quiero saber si habrá alguna mujer de otro mundo que venga buscándote"

Harumi no era tonta, pues desde que estuvo prendida del cuello de Yuuma pudo percibir una aroma que no era de él, sino más bien, era un perfume femenino muy exquisito.

Al parecer, su amante había logrado conquistar algunos corazones en ese otro mundo.

Esto no era algo que la molestara, para nada.

Mas bien, el comenzar a imaginar a Yuuma follando con otras mujeres hicieron que Harumi comenzara a calentarse.

Nuestro protagonista, quien se dio cuenta de los pensamientos de la mujer en su regazo, solo sonrió.

*Paf* 

"¡Ahh~!"

"Eres una mujer muy lujuriosa Harumi, parece que tu mente es muy imaginativa" – Yuuma exclamó luego de darle una ligera palmada en su regordete trasero – "Pero si, muy pronto las conocerás, las traeré a este mundo"

"Fufufu, parece que eres muy posesivo, incluso las raptaras de su propio mundo" – Harumi sonrió – "Pero, como tu mujer, lo entendería, pues si me lo propusieras, yo también te seguiría hacia donde tu vayas~"

"Por eso digo que eres una gran mujer"

Yuuma sonrió y besó nuevamente a la pelinegra, haciéndola retorcerse sobre su regazo.

Luego, una imagen en la pantalla llamó su atención.

"¿Humh? Un accidente de tren?"

"Ah, si… es algo lamentable, hace unas horas se descarriló un tren bala en la prefectura de Shiga. Dicen que hay muchos muertos y heridos" – Harumi respondió.

En la pantalla se mostraba una escena caótica, con cientos de socorristas y policías tratando de sacar a las personas de los vagones volcados, así como a varios bomberos luchando contras las llamas de los incendios para evitar que se extendieran.

No obstante, esto no fue lo que llamó la atención de nuestro protagonista.

En unas de las tomas de la cámara, en tan solo unos segundos que enfocaron una vista panorámica, se vio una especie de esfera de gran tamaño flotando en el arie, la cual parecía contener algo extraño en su interior.

No obstante, esa esfera no parecía ser vista por las personas del lugar, ni por los periodistas que estaban informando en estos momentos.

Incluso Harumi, quien podía ver algunos fantasmas y había estado viendo las noticias por más tiempo que nuestro protagonista pareció notar esta anomalía.

¿Qué diablos era esa cosa?

Yuuma se quedó mirando la pantalla por un momento más, para luego ya no presarte atención.

Luego lo investigaría. Ahora volvió a mirar a la mujer en sus brazos con una sonrisa traviesa.

"Bueno, basta de charlas, es hora de atenderte como es debido" – Yuuma se puso de pie mientras cargaba a Harumi con un estilo de princesa – "Desde que entré puedo oler tu desesperación por que te folle, así que prepárate, hoy no dormirás"

"¡Kyaa!"