Porque a diferencia de Li, Feng Yang, de hecho si tenía muchas habilidades y técnicas desde el comienzo... solo que no podía usarlas por el momento, pero no quitaba el hecho de que las poseía.
Por otro lado la vida de Li había sido bastante trágica del comienzo hasta el final...
Fue abandonado por todos sus familiares poco después de tan solo haber nacido... vivió quince años, casi toda su vida, como un mendigo en un pobre pueblo... mas tarde su suerte mejoró y se encontró con el cadáver de un débil cultivador en el Cuarto Orden del Reino Refinamiento de Qi en el cual encontró una técnica de cultivo y métodos ordinarios de cultivación.
Poco después de que su suerte "mejorará", comenzó a cultivarse y se aventuro en el Continente Inferior... muchas veces al borde de la muerte por la falta de alimentación, hidratacion o incluso por ser perseguido por bestias salvajes y monstruosas.
Su vida realmente fue desafortunada y cuando estuvo a punto de morir a la edad de casi dieciséis años, el Reino Secreto del Señor del Cielo se abrió y mientras escapaba de una bestia fue absorvido por uno de los corredores vacíos del Reino Secreto.
Lo que lo trajo a este mundo y tan pronto como llegó, causo una ola de asesinatos de jóvenes maestros absorviendo sus perlas y llegando rápidamente del Primer Orden al Octavo Orden del Reino Refinamiento de Qi.
Desafortunadamente poco después, su fortuna se agotó y fue rodeado y asesinado dejando atrás solo su perla de cultivo que fue condensada con todo lo que quedaba de él...
Esta perla de cultivo tomo sensibilidad unos años después y heredó la personalidad y obsesión que tenía en vida...
Pero al ser consciente de que aunque como una perla de cultivo tenía una esperanza de vida inagotable, era incapaz de seguir avanzando en su cultivacion, sintió que el morir era simplemente mucho más agradable que volver a vivir como alguien atado a un solo lugar y reino...
Paso mucho tiempo buscando a un oponente interesante que lo pudiera matar... pero solo se encontró con muchos jóvenes maestros.
Los que eran más débiles que él, fueron brutalmente masacrados y los que eran más fuertes que él, ni siquiera tuvieron la oportunidad de verlo.
Lo que llevo a que por muchos años, Li, siguiera buscando un oponente digno para que tomara su miserable vida... él no quería que uno de esos jóvenes maestros afortunados lo matará... ellos no eran dignos, él ansiaba que alguien similar a él lo asesinara...
Esa era la obsesión con la que había nacido la perla de cultivo tras el verdadero Li ser asesinado por un grupo de jóvenes maestros con muchas habilidades y técnicas así como con varías cartas de triunfo, sin verdadero talento.
"¿Tu nombre... puedes decirme tu nombre...?" Pregunto de repente Li dispersando rápidamente loa desagradables recuerdos de su vida como ser vivo.
Al escuchar esto, Feng Yang lo miró en silencio por un rato y luego de pensarlo, respondió; "Puedes llamarme Shi Tianshi si así lo deseas..."
"Pero ese no es tu verdadero nombre, ¿verdad?" Pregunto Li con una expresión algo decepcionada al darse cuenta que ese seguramente no era el verdadero nombre de Feng Yang.
Al escuchar esto Feng Yang se quedó en silencio, dándole una significativa y silenciosa respuesta de forma indirecta a Li.
"¿Qué hay de ti?" Pregunto de repente Feng Yang con algo de curiosidad, al principio sintió que Li tenía un gran origen para poder poseer tal fuerza. Pero en el transcurso de la batalla, se dio cuenta de que al igual que él, Li no estaba utilizando técnicas o habilidades, es más, ni siquiera había practicado una técnica secreta.
Solo que Feng Yang al principio había pensado erróneamente que las tenía al ver sus movimientos y exquisita esgrima, pero luego se dio cuenta que solo eran eso... movimientos y una esgrima exquisita, sin la mas minima técnica o verdadera habilidad oculta.
Esto realmente lo conmocióno, un poder de batalla tan aterrador... teniendo como arma, únicamente, su ordinario cuerpo y una espada que no podía ser mas ordinaria entre las armas.
"Mi nombre... no tiene caso que lo sepas... después de todo, mi nombre fue dado por mí mismo y no tuve el privilegio de ser nombrado... por lo que soy alguien que no tiene un verdadero nombre como tal... en todo caso, el nombre de alguien muerto... no es de mucha importancia..." Respondió indiferentemente Li.
Pero en su mirada llena de indiferencia, Feng Yang pudo ver un abrasador dolor y amargura así como tristeza y remordimiento...
Feng Yang solo tenía una palabra en su corazón para describirlo... ¡Lamentable!
Fue lo único que Feng Yang pudo ver en esa lamentable indiferencia... esa indiferencia no le pertenecía a alguien frío, egoísta, orgulloso o arrogante, esa era la indiferencia de alguien lamentable que no tenía absolutamente nada...
Alguien que lo había perdido todo...
Era la indiferencia de alguien que había perdido incluso el sentimiento de anhelo o deseo... simplemente no había diferencia entre él, y algo que no existía...
"Suspiro, ¿por qué mejor no seguimos luchando...?" Suspiro y sugirió Li mientras avanzaba y apuñalaba ferozmente hacia el pecho de Feng Yang.
"¡Eso seria lo mejor!" Asintió Feng Yang mientras avanzaba para chocar contra Li.
¡Bam!
¡Bam!
¡Bam!
En un instante la batalla avanzó a una escala completamente diferente a la anterior, ambos jóvenes comenzaron a atacar con mucha más potencia y velocidad, incluso la sangre comenzó a salpicar para todas partes como si se tratara de chispas.
Con cada colision, ambas partes resultaban heridas y rápidamente retrocedian para luego avanzabar locamente a luchar de nuevo.
¡El suelo comenzó a agrietarse y el viento comenzó a soplar furiosamente haciendo que el largo cabello y túnicas de ambos jóvenes ondeara ferozmente con el viento mientras estaban entrelazados en una feroz batalla...!
Crac...
Crac...
Boom *
El suelo comenzó a agrietarse a una velocidad visible a simple vista y comenzó a hacerse añicos por donde sea que pasarán los dos jóvenes entrelazados en una batalla que parecía no tener fin.
En un momento de la batalla que uno no podía adivinar, tanto Feng Yang como Huang Yun comenzaron a sonreír mientras sus ojos recorrían a su oponente buscando esa tan ansiada abertura que decidiría el final de la batalla...
Porque aunque Li estaba cubierto de sangre y heridas así como con su brazo derecho colgando mientras uno de sus huesos sobresalía, Feng Yang tampoco estaba mucho mejor. Durante su batalla con Li, había sido cubierto de cortes e incluso en una ocasión Li le había apuñalado su hombro izquierdo, causando que se le dificultará el mover su brazo izquierdo.
"Esto... esto... ¿Todavía se puede considerar una batalla entre cultivadores en el Reino Refinamiento de Qi?" Se preguntó Ming Yue con miedo y ansiedad mientras miraba la batalla entre Feng Yang y Li.
Ella antes de que se sellara su cultivacion, tenía la fuerza de alguien en el Reino Noveno Orden del Refinamiento de Qi y aunque nunca había luchado verdaderamente en una batalla a muerte, podía decir que incluso si lo hiciera y su oponente fuera uno de los dos jóvenes entrelazados, podía asegurar que no podría terminar más muerta en esa batalla.
...
Rápidamente pasaron aproximadamente cinco horas y la batalla entre los dos jóvenes entrelazados aún seguía siendo feroz... en un radio de cuarenta metros, casi todo había sido cortado o destruido por la batalla entre ambos jóvenes... incluso varios árboles habían caído.
¡Plaf!
De repente paso algo extremadamente extraño...
Ambos jóvenes se desplomaron, cayendo ambos al suelo con una expresión extremadamente grave y solemne.
¡Sus cuerpos habían llegado a su límite!
De hecho hace más de dos horas ambos habían llegado a su límite... aunque todavía tenían una gran reserva de Qi en su Dantian, sus cuerpos estaban extremadamente cansados... en el caso de Li, no solo su cuerpo había llegado a su límite sino que su vitalidad que era como la gasolina u aceite que ayudaba a seguir funcionando a su motor de vida y con la que forzaba su potencial, había comenzado a dispersarse completamente...
Pero aunque habían llegado a sus límites, Feng Yang y Li se negaban a caer ante su oponente... Feng Yang no era orgulloso, mucho menos le importaba su reputación y estaba completamente seguro que nunca tendría cargos en su conciencia si en algún momento llegara a cometer un acto inmoral para lograr escapar de una batalla.
Él estaba bien con el escapar cobardemente de una batalla para conservar su vida... solo que en esta batalla estaban extremadamente concentrados en ganar y Feng Yang no quería perder la oportunidad de afilarse a sí mismo contra un oponente tan raro... no sabía cuando podría volver a encontrar a alguien de su mismo nivel de cultivo, alguien con quien estar completamente en desventaja pero a la vez tan igualados.
Porque en su batalla con Li, Feng Yang no obtuvo la ventaja en ningún momento, pero tampoco estuvo completamente en desventaja. Aunque estuvo en desventaja en casi toda la batalla, llegó a intercambiar herida por herida con Li durante toda la batalla lo que llevo al extraño resultado de un "empate".
"¡Mátalo!" Le ordenó Feng Yang a Ming Yue mientras miraba a Li.
Antes de que siquiera Ming Yue pudiera reaccionar, Li preguntó con cierta amargura; "¿No puedes matarme tú...? No quisiera morir en manos de alguien como ella..."
Al escuchar su extraña petición, Feng Yang se sentía en un sueño.
Nunca nadie le había pedido tan sinceramente que lo matará... realmente fue algo nuevo para él.
"No puedo moverme..." Respondió Feng Yang inexpresivamente.
"Qué tal esto... me acercare a ti y tú acabaras con mi vida... ¿Qué piensas?" Pregunto Li con una expresión algo despreocupada y sincera así como cansada.
"..." Feng Yang se sintió realmente incómodo...
Por las palabras de Li podía asegurar que él todavía parecía ser capaz de moverse...
"¿Aún puedes moverte...?"
"Apenas..." Asintió Li con una expresión agotada mientras caminaba con dificultad hacia Feng Yang, en sus oscuros ojos café no había la más mínima luz o brillantes, estos estaban horrorozamente apagados y borrosos.
Mientras miraba sentado, Feng Yang vio como Li llegaba frente a él, sentándose con las piernas cruzadas.
Luego Li le acerco su espada a Feng Yang y la coloco junto a su mano.
Al ver como se desarrollaba esta extraña escena, Feng Yang preguntó con curiosidad; "¿Por qué? ¿Porqué deseas tanto la muerte...?"
Esa fue la única pregunta que apareció en el corazón de Feng Yang que todavía no era consciente de que Li era solo una perla de cultivo que había obtenido sensibilidad.
"Simplemente no hay nada porque vivir... no, de hecho ya hace mucho tiempo que he muerto... por lo que mi situación no podría describirse como el 'vivir'. Sinceramente, solo deseo acabar con esta miserable experiencia y ser libre..." Respondió apagadamente Li mientras miraba a Feng Yang con sinceridad.
"En este extraño mundo creado por una entidad del mundo exterior; además de que las perlas de cultivo no pueden aumentar su cultivacion porque son la simple condensación de una obsesión, no hay diferencia entre una perla de cultivo o persona de los Tres Continentes... ambos sangran, ambos sienten dolor, ambos tienen conciencia y sensibilidad así como sus propios pensamientos independientes..."
"Sin embargo..."
"Al morir, ambos se vuelven simples perlas de cultivo... la única diferencia es que los cultivadores de los Tres Continentes mueren por primera vez... mientras que las perlas de cultivo con sensibilidad solo vuelven a su estado base original..."
"Después de todo, una perla de cultivo solo obtiene sensibilidad tras pasar muchos años sin ser refinada por un cultivador... Por ejemplo, yo; Li, en el momento que me volví una perla de cultivo, nadie me refino... por despreció a mi bajo estatus en la sociedad tal vez."
"Lo que llevó a que luego de muchos años... atraves de mi mayor obsesión... obtuviera sensibilidad, consciencia y la capacidad de hablar y escuchar así como de pensar..." Explicó Li mientras ayudaba con sus manos a que la mano izquierda de Feng Yang empuñara su espada.
Ayudándolo a atravesar la posición de su corazón, dejando lentamente de hablar...
Instantáneamente después, su cuerpo se dispersó con el viento como sí fuera un montón de arena roja que se dispersaba, dejando solo una pequeña perla de color rojo sangre en el suelo...
Al ver la perla de cultivo y recordar su extraña experiencia anterior, Feng Yang sintió algo de simpatía por Li. Sintió que Li era realmente demasiado miserable como para caer tan bajo y ansiar morir...
"Tianshi..." Susurro Ming Yue mientras llegaba junto a Feng Yang, sus ojos estaban bastante acuosos y tristes al ver a Feng Yang tan lastimado.
"Está bien, está bien, no es nada..." Dijo Feng Yang con una expresión pensativa, realmente no le importaban los pensamientos de Ming Yue en este momento.
Había cosas mucho más importantes en su cabeza que lo invitaban a reflexionar seriamente.