Capitulo 16 - Entregándose por completo

Pero que caraj... si no lo viera no creería que algo así era posible, durante mi estancia en el pueblo de Liza no opte por mirar su nivel, pero recuerdo que era buena cazando a los animales de la zona, sin embargo, no creo que este nivel de fuerza se pueda obtener matando simples Jabalís o algunos Lobos.

Era extraño sin duda, pero podría explicar porque los habitantes del lugar mostraban respeto a pesar de que Liza era una mujer joven, su fuerza fue el mejor disuasor...

Me perdí en mis pensamientos cuando un agradable olor asalto mis fosas nasales, levantando la vista encontré a Liza quien en algún momento obtuvo una bandeja de comida, sentí como se me hacía agua la boca cuando presento la comida frente a mí.

"Huele delicioso." - exprese lamiendo mis labios, mi estomago concordó conmigo cuando envió un fuerte gruñido, sentí un poco de vergüenza al ver la sonrisa en el rostro de Liza ante mi cómica situación.

Al final termine siendo cuidada por Liza durante lo que resto de la tarde, cuando el sol comenzaba a ocultarse desde la ventana sentí que la fuerza regresaba a mi cuerpo y aunque aún siento dolor al moverme, por lo menos no era un problema caminar o moverme.

"Deberías descansar más, tu cuerpo aun esta herido." - comento Liza cuando me vio tambalearme.

"No te preocupes, solo necesito acostumbrarme a la incomodidad, si sigo descansado podría terminar inmóvil y dependiendo de ti toda la vida." - me burle con un poco de alegría cuando vi su mirada preocupada, después de todo el dolor no se comparaba a lo que sentí antes, pero era feliz de saber que se preocupaba tanto por mí.

"Eres mi mujer, es natural que dependas de mí, ¿acaso piensas alejarte y dejarme?" - sus palabras me dejaron en shock por un momento, pero me recupere rápidamente cuando vi su expresión triste, como si en realidad la abandonara.

"N-no, no es a lo que me refiero, en realidad..." - traté de encontrar las palabras adecuadas, pero descubrí que ni siquiera pensé en una respuesta a esto.

Yo soy un hombre... yo era un hombre... ¿Qué se supone que debo decir? ¿Cómo podría explicarlo?... los pensamientos inundaron mi mente sin poder encontrar una solución, fue entonces que un pequeño gemido llego a mis oídos, levante la vista para ver lo que para mí ha sido la vista más impactante desde que llegue a este mundo.

"Sob... Sob..." - cubriendo su rostro manchado de lágrimas vi a Liza quien desesperadamente trataba de ocultarse, creo que haberme puesto a pensar sin decir nada la confundió...

"S-sé que fue mi culpa, pro-probablemente me odies por no poder protegerte... pero yo..." - sus palabras me confundieron y no logre entender la situación, pero al verla en un estado tan débil y vulnerable me despertó.

La abracé con toda la fuerza que pude reunir cuando la niebla en mi mente se aclaró... Si alguien estuviera dispuesta a cruzar miles de kilómetros arriesgando su vida solo para salvarte, sería una mentira decir que no estaba conmovida...

"Liza... escúchame..." - Su respiración se calmó en mis brazos, así que comencé a hablar con ella ya que mis sentimientos parecían querer estallar si no los expresaba. - "Yo no estoy molesta contigo, en cambio no tienes idea de lo feliz que estoy de verte... en realidad es difícil expresarme y no puedo explicar lo que siento... pero si se una cosa con claridad..."

Su cuerpo tembló ligeramente al escuchar mis palabras, entonces volví a confirmarlo, esta guerrera con la capacidad de enfrentar monstruos temibles... tenía miedo de mi respuesta, estaba encogida en mis brazos como si fuera una pequeña niña con miedo de ser abandonada, yo no quería herirla y por el contrario tuve el impulso de protegerla durante todo el tiempo que pudiera.

"Liza... yo..." - en el momento que estaba por confesar mis sentimientos, un golpeteo llamo la puerta...

Toc... Toc...

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

PV: Trish

Después de terminar la reunión con los líderes fui elegida como la portavoz para informar a la chica dragón sobre los próximos sucesos, para mí era una buena oportunidad para verificar el estado de Samantha, por lo tanto, no rechace la idea y sin olvidar obtener algunos documentos de Duncan sobre los cadáveres de los monstruos, me dirigí a la residencia de la chica.

Con sorpresa descubrí que Samantha logro despertarse y no parecía tener muchas secuelas de la batalla anterior, pero me desconcertó la actitud de la chica dragón, su mirada estaba llena de resentimiento y un poco de odio, como si fuera su enemigo jurado, en cambio Samantha me evito, como si intentara ocultar algo.

¿Qué habia pasado?

"L-lamento interrumpir, pero me pidieron que le entregara una carta personalmente." - De mi bolso saque una carta sellada con la marca del consejo de la ciudad. - "También vine con la intención de confirmar la condición de Samantha... parece que estas a salvo."

Las últimas palabras fueron dirigidas a Samantha y no pude evitar revelar una pequeña sonrisa, probablemente apenas despertó ya que parecía estar esforzándose por mantenerse de pie.

"Estoy bien Trish, aunque aún necesito un poco de tiempo para estar al 100." - dijo enérgicamente para evitar que me preocupara, aunque su rostro se habia sonrojado a simple vista, no pude evitar echar un segundo vistazo.

"Entiendo, ¿hay algo más que necesites? Samantha necesita descansar." - La chica se veía molesta por mi presencia, fue entonces cuando tuve una pequeña revelación... ¿soy la tercera rueda?

"S-sí, no tardare, en realidad quería mostrarte esto..." - Saque los documentos que indicaban la propiedad de la Quimera, esto no se puede posponer o el maldito Duncan podría robar partes del cadáver. - "Indican que eres propietaria del cadáver de la Quimera."

"Ya veo, sin embargo, solo di el golpe final, quien corto dos de sus tres cabezas fue Samantha." - Explico la chica sin cambiar su expresión mientras transfería la propiedad del monstruo a Samantha.

"¿Eh? ¿Es mío?" - Por otro lado, la chica mostro confusión en su rostro como si no pudiera seguir la conversación, temo que no sabía que ese monstruo era una Quimera. - "¡Ah! Yo no tengo uso para el... ¿crees que podrías usarlo Trish?"

Después de pensarlo entendió la conversación y me pregunto alegremente, quizás esperaba que pudiera usarlo como material al igual que en el pasado, el problema era que el enojo en la mirada de la pelirroja aumentaba rápidamente.

"Muy bien, puedes dejarme el desmantelamiento, pero todavía tenemos que acordar lo que quieres del cadáver." - Me apresure a finalizar la conversación para evitar el peligro contra mi vida. - "Cuando te recuperes ven a vernos al templo principal de la ciudad."

Al terminar mis palabras me despedí apresuradamente de Samantha, e hice una reverencia hacia la pelirroja antes de abandonar el lugar...

no fue hasta que me alejé del edificio que sentí como el frio desapareció de mi espalda, parecía que habia evitado un enorme peligro.

"Creo que olvide hablarle de Claire." - Pensando en la chica que esperaba preocupada en casa sentí un pequeño dolor de cabeza, si le contaba y ella llegaba corriendo... no creo que salga nada bueno de enfrentar o hacer enojar a esa pelirroja, entonces tome una de las decisiones más grandes de toda mi vida.

"No le diré nada." - Exclame alegremente antes de caminar hacia el gremio de comerciantes, al final tendré bastante trabajo con esos dos cadáveres.

Serian días ocupados sin duda.

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

PV: Sam

Después de que Trish se retiró del lugar la atmosfera se volvió incomoda, Liza se mostró satisfecha cuando quedamos solas y dirigió una intensa mirada en mi dirección... Se que ella espera que le diga lo que siento, pero en este momento era más fácil enfrentar otro Ciclope por mi cuenta que confesarme.

"L-Liza deberíamos hablar en otro momento." - expresé desviando la mirada, sentía como si mi cabeza estuviera hirviendo al recordar lo que estuve a punto de hacer.

El silencio gobernó la habitación por un momento, pero cuando giré para ver a Liza quien se habia quedado callada, me di cuenta que no mostraba expresiones en su rostro, ella solo me miro antes de asentir y caminar al otro lado de la habitación, ahí se sentó en el borde de la cama tomo su lanza y comenzó a limpiarla.

Esto no era lo que esperaba, por tanto, me acerque a Liza con intención de hablar con ella para disipar cualquier malentendido, pero no funciono... se habia cerrado a mis palabras y aparte de algún asentimiento no dio más reacción.

Afuera el cielo era naranja e iluminaba la silueta de Liza a través de la ventana, su figura cubierta por luz del atardecer me dio un fuerte sentimiento de tristeza, no fue hasta este punto que decidí dejar de lado lo último de mi orgullo... al menos para Liza.

"Liza..." - aparte su lanza cuando me senté en sus rodillas, ella uso una mano para sostener mi hombro y evitar que cayera, la otra coloco su arma cerca de la cabecera de la cama antes de sujetarme.

Su mirada estaba llena de confusión, pero pude notar que habia un toque de expectativas en sus ojos.

"Jamás te dejaría..." - La bese para ocultar la vergüenza dentro de mí, y de esa forma darme un poco de valor para lo que diría a continuación.

Sin embargo, calcule mal, ya que cuando intente separarme las manos de liza se envolvieron en mi cintura y mi espalda, el beso se intensifico cuando sentí su lengua invadir mi boca...

Mi mente se puso en blanco cuando nuestras lenguas se enredaron, era como si mi instinto me indicara el camino a seguir, pues antes de notarlo mis manos envolvían su cuello y chupaba su lengua con fuerza como si tratara de hacerla una conmigo.

"¡Ngh!" - solté un pequeño gemido cuando la mano de Liza subió hasta mi pecho, el calor pronto cubrió todo mi cuerpo y la parte baja de mi abdomen empezó a arder con fuerza.

Pronto sentí como un bulto ardiente se presionaba contra mi muslo, por instinto baje la mano para sujetar el bulto y al sentir la forma en mis manos me congele, Liza detuvo su beso antes de mirarme fijamente, como si esperara mi reacción.

Su miembro palpitaba en mi mano y sentía su calor mientras se endurecía aún más, sentí pánico antes de soltarlo por inercia, pero pronto noté la mirada de Liza que parecía contener un poco de decepción.

"¡Ahh!" - Sin esperar más volví a tomar su miembro con la suficiente fuerza para no lastimarla, esto me gano un pequeño grito de sorpresa de Liza quien no esperaba mis acciones, así que con impulso volví a cubrir sus labios con los míos mientras mi mano subía y bajaba lentamente.

"Ngh... Sam sigue así." - Liza soltaba pequeños gemidos mientras se hundía en el placer diferente que experimentaba por primera vez, por mi parte comence a mover mis caderas ligeramente sobre el muslo de Liza.

Cuando su miembro comenzó a palpitar con fuerza, aumente la velocidad de mi mano entendiendo que se acercaba a su clímax, tratando de aumentar el placer use mi otra mano para tomar uno de sus senos y así jugar con su pezón.

"¡¡Agh!! ¡¡¡Viene!!!" - grito empujando sus caderas hacia arriba, pronto un chorro blanco cubrió mi mano e incluso llego un poco a su pecho.

Liza perdió la fuerza en su cuerpo y se acostó sobre la cama, yo por otro lado contemple su cuerpo agitado prestando especial atención en el arma que no se habia ablandado por completo, por el contrario, parecía que recuperaba su vigor rápidamente.

Tome los pantaloncillos de Liza antes de sacarlos de su cuerpo, por otro lado, retire la blusa que cubría mi cuerpo, así como la falda larga que me habia dado Liza, quedando solo con la ropa que Trish habia hecho para mí.

Para mi sorpresa esta última barrera se habia hecho semitransparente, y en el muslo de Liza se podían ver mis propios jugos cubriendo su pierna.

Sentí como la vergüenza me volvía a invadir cuando Liza jalo mis manos, pronto me encontraba sobre su cuerpo y podía sentir que entre mis muslos se erguía un arma aterradora, pero antes de que pudiera decir algo Liza volvió a besarme sellando mis palabras.

"Todavía no hemos acabado..." - Me dijo al oído antes de sentir como la presión aumentaba en mi entrepierna, pero a diferencia de la primera vez no entro, en cambio uso una de sus manos para amasar mi trasero mientras llovía besos sobre mi cuello.

"L-Liza esto es... Ngh.... Yo..." - Trate de hablar para ganar un poco de tiempo, aunque sabía que no serviría, mi mente estaba en blanco y era incapaz de pedirle que parara, como si cada parte de mi cuerpo deseara estar con Liza.

"Está bien, si tú quieres podemos parar." - Me dijo suavemente cuando detuvo sus movimientos, pero pude sentir que con solo presionar un poco habría entrado dentro de mí.

Sus ojos estaban llenos de amor y preocupación, como estuviera hecha de cristal y termitera que cualquier daño cayera sobre mí, así que no pensé en ello cuando recosté mi cuerpo sobre ella y la bese suavemente, entonces acerque mi cabeza a su oído antes de reunir todo el coraje que tenía y pronunciar.

"Liza... Te amo..." - Con esas palabras como detonante empuje mis caderas hacia abajo permitiendo que Liza me penetrara nuevamente.

"¡¡Ahhhhh!!" - aunque estaba preparada no pude evitar soltar un grito por la extraña sensación combinada con un poco de dolor, tenerla dentro de mí me trajo un nuevo sentimiento de satisfacción, como si esto fuera lo más natural del mundo.

"Ngh... Sam tu..." - Liza quedo estupefacta ante mi confesión, pero pude ver que sus ojos destellaron por felicidad durante un momento, sin embargo, al sentirme apretándola pronto cambio su enfoque y amaso mi trasero para estimularme.

Nos besamos suavemente mientras Liza jugaba con mi cuerpo, todo con el objetivo de permitirme relajarme.

"E-estoy bien Liza, puedes moverte." - coloque mis manos en la cama y levante ligeramente mi torso, todo esto para permitir que mi cuerpo se moviera con un poco más de facilidad sin presionar a Liza.

Liza parecía un poco preocupada así que no se movió, en cambio coloco sus manos en mi cintura para ayudarme a estabilizarme.

Mi cuerpo estaba caliente y su miembro dentro de mi palpitaba como si tratara de evitar que lo olvidara, así que sin otra opción seguí mi instinto y levante ligeramente mi cintura, quizás no fueron ni 5 cm, pero no necesitaba más por lo tanto la baje permitiendo que nuestros cuerpos se unieran totalmente de nuevo.

"Ahh..." - solté un pequeño grito antes de volver a levantar la cintura y repetir mis acciones....

Pak... Pak... Pak... Pak... el sonido de nuestros cuerpos chocando lleno la habitación, Liza con sus manos en mi cintura me apoyo para facilitar la situación, y pronto los gemidos comenzaron a salir libremente.

"Ngh.... Liza... tan profundo..." - No pude contener mi voz a diferencia de Liza quien soltaba pequeños gemidos ahogados, pero esto no duro mucho tiempo, ya que mi resistencia se agotó.

"Liza... ven... beso..." - me derrumbe sobre su cuerpo y la bese ferozmente, mi mente era un caos y lo único en ella era unirme más a Liza.

Al ver que habia perdido la fuerza Liza sujeto mi trasero y comenzó a empujar por su cuenta, moviendo mi cuerpo adelante y atrás sobre su cuerpo, penetrándome lentamente...

"¿C-como se siente Sam?" - Con una sonrisa en su rostro me pregunto Liza sin detener su movimiento... "¿Quieres que continúe?"

"¡¡¡¡Si!!! ¡Se siente bien!" - Grite cuando Liza aumento la fuerza en sus empujes, esto no solo estimulo mi vagina, sino que mis pezones rosándose contra Liza aumentaban el placer haciéndome perder la poca cordura que me quedaba.

"¡Ya casi llego Sam!" - expreso Liza mientras aceleraba el movimiento de su cadera... Pak... Pak... Pak...

De pronto con un fuerte golpe llego a lo más profundo de mi cuerpo, en ese momento sentí como se hinchaba su miembro...

"¡¡¡AHHHH!!!" - Mi espalda se curvo con el golpe de liza, pero ella no se detuvo cuando siguió atacando el mismo punto con fuerza una y otra vez.

"¡¡Pafa!! ¡Me vuelfo exsfaña!" - con palabras incoherentes supliqué a Liza que se detuviera, pero esto pareció estimularla ya que dio un último fuerte golpe, cuando sentí como aumentaba su temperatura.

"¡¡Ahhhhh!! ¡¡Tómalo todo Sam!!" - Apretó su cuerpo contra el mío para bombear dentro de mí su carga....

Mi mente se nublo completamente, su semilla dentro de mi cuerpo era cálida y me lleno de satisfacción... pronto sentí que la somnolencia me golpeaba y felizmente le di la bienvenida mientras me enterraba en el cuerpo de Liza...

Así caí dormida con una sonrisa descuidada en mi rostro.