Capítulo O15

Andrew miró al pequeño niño en sus brazos y se sintió en blanco por unos segundos.

Su familia no tenía ningún niño.

Él era un hombre soltero de treinta y cinco años, sin hijos y ninguna relación amorosa.

Su madre no tenía la intención de casarse en absoluto y era imposible ser un hermano menor.

Sin embargo Caesar tampoco tenía hijos, con suerte se acercaba al mismo sexo, mucho menos al opuesto.

¿Entonces, de donde había salido la copia en miniatura de su familia?

⎯ Pequeño, ¿cuál es tu nombre?, ¿dónde están tus padres?, ¿qué haces aquí?

Reich no respondió. Sentía un zumbido en la cabeza y sentía que esta persona era muy familiar, pero no podía recordar de dónde.

El asistente de Andrew se acercó en ese momento. Al ver a Reich, casi grito en el acto.

⎯ ¡Mariscal, eso es-!...

Andrew lo hizo guardar silenció, para no alarmar a los demás.

El asistente se veía ansioso, pero no podía romper la orden del mariscal.

Reich miró el rostro que se veía gentil, pero firme. Y sintió como si lo hubieran visto desde hace mucho tiempo, pero al mismo tiempo no lo hacía: conocerlo.

⎯ ¿Quién eres? ⎯ Reich no respondió sus preguntas. Entrecerro sus ojos como joyas y lo miró con cautela.

No importa que tan familiar sea, él sabe que está siendo buscado por gente mala. La reacción del hombre bajó al lado de esta persona le hizo acordarse de ellos y ponerse más alerta, no podía dejar que los atraparan.

Andrew miró como el pequeño rostro hacía los mismos gestos que su hermano menor y sintió una especie de nudo en el pecho, era una emoción extraña.

La palma de su mano acarició el rostro pequeño, cuando su dedo tocó la protuberancia sobre su frente reaccionó, no había visto eso antes.

No hay razas afiliadas al imperio con esta clase de rasgos.

Pensando en que la identidad del niño podría ser mucho más sospechosa de lo que creía, decidió llevárselo consigo temporalmente.

El sonrió, tan gentilmente que no parecía un hombre que ha luchado en el campo de batalla. ⎯ Mi nombre es Andrew. No veo a tu cuidador por aquí, ¿por qué no te quedas conmigo mientras lo buscamos?. Es demasiado peligroso para un niño tan pequeño como tú.

Cuando Andrew sonreía sus subordinados estaban seguros de que estaba conspirando contra alguien, está vez el objetivo era un niño tan parecido al mariscal, los niños siempre caían en sus engaños.

Sin embargo Reich no cayó como creían.

Al ver la sonrisa en su cara, su cuerpo se tensó. Debía irse devuelta con su madre, pero parecía que no sería tan sencillo como creía.

Bajo tales pensamientos, decidió cooperar temporalmente: ⎯ Mm. Está bien.

Se aferró a su traje obediente y silenciosamente.

"Incluso en ese aspecto se parecen." Andrew llevo al pequeño devuelta al campamento.

Sus hombres estacionados vieron como su Mariscal volvía de la expedición con un pequeño niño en brazos. El niño todavía vestía un pequeño traje de dinosaurio y se aferraba al mariscal, se veían muy lindos.

Uno de los soldados incluso grito en broma: ⎯ ¡Mariscal, al hijo de quién acaba de secuestrar!

Su compañero lo golpeó: ⎯ No seas tonto, ¿Qué haría un niño aquí?. ¡De seguro es el hijo ilegítimo del mariscal!

⎯ No, ¿de que hablas?. El mariscal ni siquiera tiene pareja, ¿de dónde salió el niño?

Andrew ignoró a sus subordinados y entró en su nave. Miró al niño que había cerrado sus ojos y respiraba constantemente y lo dejó en su habitación para descansar.

Al acostarlo no pudo evitar fijarse en una cicatriz abajo de su oreja, cerca del interior de su mejilla izquierda. Sólo la miró por un segundo antes de negar con la cabeza y salir de la habitación.

Al salir vio al asistente ansioso que lo esperaba.

⎯ ¡Mariscal!⎯ Grito al verlo.

Andrew le hizo una señal para que esperará: ⎯ Vamos a la oficina a hablar.

El asistente asintió desesperadamente, e incluso en el camino miró hacía atrás constantemente, como si la persona en la habitación fuera a desaparecer de repente.

⎯ Ahora sí. ¿Qué sucede?, ¿conoces la identidad de ese niño? ⎯ No lo dijo sin fundamentos. La reacción del asistente era suficiente para que Andrew se hiciera una idea.

⎯ Mariscal, mire esto por favor. ⎯ El asistente abrió su propia terminal y le mostró el informe que habían recuperado de los dos experimentos faltantes.

Unos de ellos era exactamente igual al niño de ahora.

El asistente explicó: ⎯ El niño que trajo a la nave es el experimento que escapó del laboratorio hace un par de días. Mariscal, se sospecha que tiene el ADN de los Tates en él. Es una bomba de tiempo.

Las pupilas de Andrew se dilataron al escucharlo y casi suelta la presión de su fuerza mental, el pobre asistente ya estaba sudando de los nervios.

⎯ No dejes que se filtre esta información. ⎯ Ordenó después de un suspiro.

⎯ ¡Si, Mariscal!⎯  El asistente se retiro y Andrew se quedó solo en la habitación.

⎯ Maestro, ¿Necesita que le informe a su hermano? ⎯ La pequeña inteligencia artificial en su terminal habló de repente.

Andrew dudó, pero se negó al final: ⎯ No es necesario de momento.

Recordó la cicatriz bajo la oreja, en su momento se le hizo tan familiar a la marca de nacimiento de Caesar que le llamó la atención, pero debido a que no era posible ser su hijo, no le tomó importancia.

Ahora todo tenía sentido.

Ese niño no era el hijo de su familia stev.

Era el clon artificial creado por la organización ilícita con las muestras de Caesar.

Debido a su apariencia, el experimento debió haber sido un éxito.

Un ser con el potencial de convertirse en  el segundo usuario 3S de poder mental y que posea la fuerza golosal del mayor enemigo de la humanidad: Simplemente un arma humana, una bomba que puede estallar en cualquier momento.

Si Caesar se entera de que ese niño existe, será asesinado inmediatamente.

No, ser llamado "niño" también está mal. Es todo menos un niño.

⎯ Es una abominación. ⎯ susurró.

Los experimentos que involucran la clonación de seres vivos está estrictamente prohibido, nadie quiere encontrar algún día a la copiá de si mismo por la calle.

Sin embargo en su habitación estaba esa misma clase de abominación prohibida, llevando el rostro de su hermano y la sangre de los asesinos de su padre.

'¿Debería eliminarlo con mi propias manos?' Entre los dos hermanos, Caesar era él que más odiaba a los Tates después de la muerte de su padre.

También odiaba el accidente de hace veinte años con el alma. Si se enterara, sería extremadamente violento.

Aunque Andrew no se oponía a la muerte de un clon extremadamente peligroso, pero hacerlo sólo provocaría disturbios entre sus subordinados.

Prefería hacerlo en privado.

La intención asesina se podía ver en sus ojos. Como un mariscal firme y derecho, era extremadamente decidido.

Después de decidir que hacer salió de la oficina camino hacía el dormitorio.

No podía dejarlo vivir.

Andrew se paró frente a la puerta. El arma alrededor de su cintura parecía especialmente llamativo, sin embargo Andrew tenía planeado asesinarlo utilizando su poder mental para evitar alborotos innecesarios.

Pensando así, tomó aliento y cambió su expresión para no alertar al objetivo.

Ajusto su respiración y entró discretamente en la habitación, caminó hacía el bulto sobre la cama e invoco una daga con su poder mental.

Cuando estuvo a solo medio metro del cuerpo, lanzó un ataque de poder mental al mismo tiempo que su cuchilla.

La sangre no goteo, y Andrew sospecho. Agarro la sábana y la tiró: No había nadie ahí.

Al mismo tiempo, escucho un disparó afuera de la nave.

...