webnovel

Enamorada de mi acosador.

Liamna moretti es una chica de preparatoria con una vida completamente normal,tiene dos mejores amigos llamado Joel y Elisa...una hermana como cualquier otra que a pesar de las discusiones poco comunes la apoya en todo...pero eso cambia cuando un chico de Universidad llamado Quellán Nicolás Rinaldi empieza a acosarla y se convierte en el chico de la capucha negra.

yileidi_pinales82 · Thành thị
Không đủ số lượng người đọc
18 Chs

capítulo 17:¿Y como lo reportaras? ¿Por maltrato animal?

—Kevin no voy a llorar.

—o créeme que lo harás.—saca una botella de whisky.

—No voy a beber ,soy menor de edad genio.

—Solo será un trago, hace frío créeme ,calentará tu garganta.

—Kevin no voy a beber.—dije seria, Entonces asintió y bebió.

—Te lo pierdes.—vi como acercó la botella a sus labios y bebió, sus labios podría verlos con claridad y realmente tienen un tono rosado muy lindo...muevo mi cabeza evitando pensar tonterías ,le quitó la botella y doy un trago ahogándome, sentía que la garganta me quemaba y tenía un sabor fuerte.

—¡Que asco!—exclamé limpiando mis labios.

—Se nota que es la primera vez que bebes.—dijo bebiendo de la botella, entonces nos quedamos callados ,es realmente un silencio acogedor.

Después de un rato sentados Kevin articuló palabra.

—¿sabes algo?

—¿Qué cosa?

-¿recuerdas la broma que te hice con la que casi mueres de un infarto debido al polen?

—ammm, gracias Kevin por recordarme que quiero vengarme.

—no lo hagas solo, cuando fui a la casa inmediatamente el idiota de Quellan me vino a reclamar, se enojo tanto que golpeo muy fuerte la puerta al punto de lastimarse la muñeca.

—entonces por eso su muñeca estaba bastante mal. —Dije algo sumida en mis pensamientos

—si ¿y sabes? Quellan es tan hdp que jamás protegería a una chica así que odio decirlo pero el te ama y odio decirlo por que en serio, ¿tu?

—Gracias Kevin por hacerme sentir mal conmigo misma.

—De nada .—lo veo mal y me guiña el ojo, así que negué con la cabeza.

—¿Desde cuando Quellan es de esa manera?

—No lo se, tal vez desde los 12-13 años, desde que papá decidió por fin hacerse cargo de nosotros.

—Pero...¿por qué el querría ocultar la mitad de su rostro, es como si quisiera negar o borrar algo de si mismo?

—Y así es, Quellan se ha sentido obligado a borrar esa horrible marca de su rostro.

—Pero ¿Qué es?

—Una marca que quiere condenar su destino, con esa marca no podría conseguir trabajo en un buen tiempo, apenas puede estudiar en una universidad pero no podemos interferir sino nosotros sufriremos las consecuencias...

—¿cuales? —Pregunté curiosa.

—La curiosidad mato al gato Liamna, y tu eres muy curiosa pequeña abejita.—dijo alborotando mi cabello.

—solo quiero saber.

—no deberías.—dijo este mirando hacia al frente, perdido en el oscuro lago. —todo a su tiempo.—me miró y me sonrió.—deberíamos volver, es tarde.

—dijiste que no me iría de aquí hasta que no derrame una lágrima.

—¿Dije eso? Creí haber dicho que no deberías soltar lágrimas.

—siempre te contradices, eras así desde pequeño.

—ni que fueses mayor que yo.

—ni que fueses anciano, solo nos llevamos un año.—dije sacándole la lengua.

—tarada.

—viejo verde.

—¿no que no era mayor de edad?

—shhhh —dije parándome del columpio pero inmediatamente me paré resbalé hacia el idiota de Kevin haciendo que caigamos los dos en el lodo ensuciándonos todo.

—si que eres tonta jajajaj.—dijo entre risas lo cual provocó que riera.—al menos tenemos una gran razón para bañarnos en un lago de cocodrilos.

—¡¿Qué?!—me levanté rápidamente y caí de nuevo en el lodo encima de mi trasero, Kevin por su parte rio fuertemente.

—era una broma Reyna de agua puerca.—le pegué.—auch jjsjsj ¿Acaso estudiaste karate en vacaciones?

—No.

—entonces no lo hagas ,no querrás matarme .

—Quiero hacerlo.—dije mirándolo mal.

—Cuando quieras.—me guiñó el ojo y le volví a pegar, algunas veces Kevin podría ser un chico agradable pero otras veces podría ser un completo idiota degenerado y pervertido ,lo cual en ocasiones lograba sacarme una sonrisa pero lo golpeaba para no reírme, lo cual es el caso.

—te denunciaré por pegarme.

—¿Y como lo reportaras? ¿Por maltrato animal?—reí ante mi ocurrencia y este por su parte puso una mano en su pecho mostrando una cara de falsa ofensa.

—Eres muy cruel.—dijo para luego levantarse y cogerme en brazos llevándome así hacia el lago.

—espera ¿Qué haces?¿Estás loco? Kevin suéltame.—este hizo caso omiso a mis órdenes empezando a entrar en el lago.—Kevin suéltame te estoy diciendo, te juro que como no me sueltes te voy a-.—no pude terminar pues este me besó y mientras lo hacía podía sentir como el agua helada empezaba a empaparme, no era un beso apasionado ni urgido , más bien era dulce y suave lo cual hizo que me sumiera en el besó correspondiéndole completamente, por alguna razón me recordó a mi primer beso con Quellan inmediatamente borré esa imagen de mi mente y me separé. —¿Por qué lo hiciste?

—Quise hacerlo.—me soltó e inmediatamente intenté pararme en el fondo pero cuando lo intenté caí en cuenta de que mis piernas flaquearon y que me estaba casi ahogando.

—Kevin ... ayúdame idiota...no puedo...nadar.—este al darse cuenta de que me estaba hundiendo me cargó rápidamente.—

—pensaba que sabías nadar.—Entonces me sonrojé de vergüenza.

—Las piernas me fallaron.—baje la cabeza.

—entonces ¿Cómo te quitarás la mugre?

—no lo sé Kevin.— el susodicho cerró sus ojos y con una mano empezó a quitarme la remera.—¿Qué demonios estás...?

—Deja de hablar, no eres la única que le da vergüenza que te estoy quitando la remera.—dice éste.—Solo...intenta quitarte el sucio y lavar la remera.—lo miré y tenía un leve rubor en las mejillas y apuesto que es por la vergüenza.—al terminar me coloqué la remera.

—ya.—dije casi en un susurro inaudible y no puedo negarlo estoy muy muy nerviosa, tanto que realmente mis manos empezaban a temblar.

—haz lo mismo con el pantalón.—empecé a quitarme el short aún más nerviosa, podría jurar que ahora mismo estaba más que sonrojada.

No pasó mucho tiempo cuando terminé y le dije a Kevin que terminé.

—vámonos.—dijo este empezando a caminar hacia la orilla, realmente pude notar que sus manos temblaban y su respiración era desigual.

—esto es lo más vergonzoso que he pasado.—dije suspirando.

—ni lo menciones tortuguita ninja.—rodé los ojos.

—¿Otro apodo?

—Si, quién lo diría, la mosca con cintura de avispa y buenas piernas.—abrí mis ojos con sorpresa.

—¡Me viste!—exclamé en un sonrojo extremo.

—no seas tonta, Quellan tiene una foto tuya en su pared ,estabas saliendo de la piscina ,junta con otras ¿20?¿30? Fotos.— entonces abrí mis ojos como platos . —aún me sorprende el cómo tiene tantas fotos tuyas.

—No lo puedo creer.

—ni yo.—sin darnos cuenta llegamos a casa, al llegar me di cuenta de lo tarde que era y miré a Kevin.

—mmm...¿P-podrías q-quedarte? Es muy tarde y...ya sabes, quizás en tu casa estén durmiendo.—toque mis dedos índices en señal de timidez.👉👈

—Solo por qué te vez adorable.

—¿Quieres sentir mis adorables puños?

—¡No!—reí y abrí la puerta, pero al abrirla vi un ceño fruncido que sabía que muy pronto se convertiría en dolor.