La voz del ente misterioso le heló el cuerpo entero haciendo que su miedo se intensifique. Las palabras que salieron de la boca de ese ente la asustaron aún más.
"Assassin…"
Susurró, a lo que Assassin asintió.
Para este Assassin ya no importaba si se mostraba frente a Gray, pues ella ya lo vio antes. Ella sabe de su existencia y eso ya no es un problema.
Así que simplemente le respondió como ella tanto deseaba, sin revelar el nombre que dió inicio a su leyenda, por supuesto.
Aunque esto pareció perturbar a Gray aún más.
"Tu… tu…"
Apretando la jaula aún más, reprimiendo las ganas de huir de allí, ella nuevamente le preguntó algo más.
"¿Por qué estás aquí?"
Assassin miró el vaso de vidrio en su mano y luego a Gray.
"Aquí tienen un buen licor. Me gusta"
"Licor… licor… ¿Solo eso?"
Gray esperaba algo más. Como por ejemplo, que este fantasma quisiera embrujar la casa y sacar a todos de aquí porque está es su propiedad o algo por el estilo, ¿pero lo único que este fantasma quería era licor?
Es más, ¿los fantasmas pueden beber alcohol?
"No hay nada más que yo necesite"
Dijo vagamente, lo que hizo que Gray por un momento bajará la guardia. Sin embargo, si lo único que este fantasma quiere es licor, ¿cómo se explica este sentimiento punzante en su corazón?
No, esto no es algo tan cliché como amor u odio a primera vista. Esto se trata de que Gray se siente afectada por los sentimientos de este fantasma.
"Tu… ¿No quieres nada más?"
…
…
"Dije que no hay nada más que yo necesite. No necesito nada más que esto"
Dijo Assassin mostrando el vaso con vodka.
Ahora ella pensaba que esto se trataba de un fantasma borracho que ahoga sus penas en el licor, pero había algo que ella no pensó hasta este momento.
'Assassin… una de las siete clases de Servants que participan en la Guerra por el Santo Grial'
Ella ya sabía de esto y tenía sentido.
Este tipo no es un fantasma normal. Él es un Servant. Es Assassin, la decepcionante clase de aquellos que no fueron considerados héroes en la historia.
Si esto es real, entonces el fantasma que le está hablando es…
"Espíritu Heroico"
Susurró nuevamente.
Estás palabras hicieron que Toru se detuviera por un segundo.
Antes de que Gray pudiera siquiera preguntarle quién es su Master, Assassin negó con la cabeza.
"No sé si 'heroico' es una palabra para describirme como espíritu. Pero soy un espíritu"
Él se puso de pie bajándose de la mesa con un pequeño salto.
Al ver a Assassin de pie, Gray se dió cuenta de lo alto que era este fantasma.
Pero aún así, lo que ella quería preguntarle aquella noche…
"¿Por qué…?"
Él la miró esperando la pregunta.
"¿Por qué estás tan triste…?"
Con esa pregunta, la cara inexpresiva de Assassin se suavizó. Por un segundo sintió que se iba a derrumbar porque alguien lo descubrió, pero luego de eso negó acercándose a la ventana.
La luz del exterior le iluminó el rostro.
"No sé de qué estás hablando"
"Pero… pero yo… puedo sentirlo…"
Él bebió otro poco del licor en el vaso y, con un susurró, le dijo:
"No sé de qué estás hablando…"
Miró a Gray a los ojos, haciendo que ella se sintiera incómoda y mirase a otro lado.
Y nuevamente, como si hubiera olvidado lo que dijo anteriormente, repitió:
"No sé… de qué estás hablando…"
-Por Gray-
¿Será esto un talento? ¿Será esto una maldición?
Desde hace mucho puedo deducir cómo se sienten las personas. Al escuchar sus voces, al ver sus gestos, al sentir sus respiraciones, sus miradas, puedo percatarme de cómo se sienten en ese momento.
Es como si la mayoría de las personas fueran libros abiertos para mí, mostrándome las historias que se reflejan en sus sentimientos, en lo más profundo de sus corazones.
Me pasó con mi mentor.
Me pasó con Sakura.
Aunque hay excepciones ya que no puedo saber cómo se siente Reines. Ella aún es un misterio para mí.
Si dejo eso de lado, nuevamente frente a mi, se presenta otra oportunidad para saber cómo se siente una persona.
Su voz es muy suave, pero se nota claramente que es la voz de un chico. La forma en la que me habló, en la que su voz parece ir disminuyendo su volumen como si no quisiera que lo escucharan. Sus ojos plateados opacos, apagados sin un reflejo de su propio espíritu.
Él parece cansado y aburrido, pero se que este mismo fantasma tiene demasiada tristeza, la cual oculta detrás de una máscara inexpresiva. Él tal vez sienta que en cualquier momento se romperá en pedazos, aunque realmente no lo sé con certeza. Que pueda descifrar las emociones de las personas no significa que pueda leerles la mente.
Aún así, él repitió esa misma frase tres veces como si tratara de creerse sus propias palabras.
"Assassin…"
Le dije. Él no me miró está vez. Así pude entender que a él no le importaba mi existencia, mucho menos que yo lo haya descubierto. Parece que no le importa nada más que mirar por la ventana mientras disfruta del amargo trago de vodka.
"¿Quién es tu Master?"
Eso es algo que quise saber desde que supe que él es un Servant. Un Servant debe tener un Master. Si el Master no soy yo, solo quedan dos personas más en esta casa que puedan serlo.
Él no es un intruso, pues mi mentor ya se habría dado cuenta y me habría ordenado acabar con el culpable. Aún así, solo hay dos personas más en mi mente.
Si él no provocó ninguna alarma para mi mentor o Sakura, eso quiere decir que uno de ellos es el Master.
"No tengo que responder eso"
Ya veo, es lógico. Siendo un Servant no vas a revelarle la identidad de tu Master a una desconocida. Aunque, por lo que puedo suponer, Assassin ya me conoce. Me ha estado observando.
Quiero preguntarle, pero de alguna forma me da miedo saber la respuesta.
Solo saber que este fantasma pudo haberme matado sin darme cuenta hace que el terror se encienda como una llama en el fondo de mi pecho, pero puedo ser débil en este momento. Incluso Add no ha dicho nada en un momento como este, así que debería ser seguro para mí.
"Ya me conoces, ¿verdad?"
Assassin asintió. Luego de beber otro poco del licor, volvió su mirada a la ventana.
"Gray…"
Y susurró mi nombre.
Fue algo extraño. Escuchar mi nombre de la boca de este extraño me hizo sentir como si alguien reconociera mi existencia.
Es patético, pero de alguna forma me alegra que no me llamara de otra.
Sin embargo…
"¿Soy Gray…?"
Sin darme cuenta pregunté con un susurró. Cuando me percate de lo que había dicho, intenté inútilmente negar lo que dije, pero Assassin ladeó la cabeza.
"Eso es algo que solo tú deberías saber…"
"¿Qué?"
Yo…
No entendí eso…
Al menos no ahora, pero de alguna forma, en esta noche oscura y tenebrosa, conocí a un fantasma triste. Un fantasma que bebe licor por las noches, relajado y sentado sobre el escritorio de mi mentor.
Él me dijo algo extraño, algo que no entendí, algo que tal vez nunca entienda.
Estoy segura de que solo él entiende esas palabras en este momento. Aún así, de alguna forma, el que me haya dicho eso, me hizo olvidar el miedo que en algún momento sentí al verlo.
"Ya es tarde"
Dijo él. Acercándose al escritorio con la botella de vodka en su mano, abrió uno de los cajones y metió la botella ahí.
Al hacer esto, me miró levantando su mano amigablemente y dijo:
"Nos vemos"
Así se desvaneció frente a mis ojos entre la oscuridad.
Después de eso, por unos segundos me mantuve callada, procesando la conversación que acababa de tener.
Normalmente no soy alguien que pueda hablar con personas de buenas a primeras. De hacerlo, yo no sabría que decir y me quedaría congelada frente a esa persona. Aunque en mi vida siempre ha habido excepciones.
De alguna forma siempre se me hace más fácil hablar con las personas a las que considero que se parecen a mí de alguna u otra forma, y al parecer, sin darme cuenta, consideré que Assassin estaba dentro de esas personas.
"Este tipo…"
La voz de Add me susurró antes de que está misma voz aumentará su volumen.
"Jejeje… deberías hablarle a él otra vez, mocosa"
No entendí a lo que Add se refería.
Aunque quiero hablar un poco más con ese fantasma para saber todo de él, sigo teniendo miedo de él.
Fue así que me di cuenta que Add vio algo que yo no pude, pero incluso si me di cuenta de eso, para mí la respuesta era muy confusa en mi mente.
Por el momento, para calmar mi mente, no le dije nada a Add y regresé a mi habitación.
'Pensar que él puede verme mientras duermo…'
Caminando envuelta en mi sábana, deje salir mi frustración en forma de suspiro al percatarme que esta noche será más larga que cualquier otra.
-Habitación de Sakura-
[¿Por qué estás despierta?]
Al llegar a la habitación de Sakura, Toru se percató de que está chica estaba despierta, sentada en la cama y mirando a la puerta para poder volver a sentir la presencia de su Servant.
Cuando éste atravesó la puerta, ella inmediatamente sintió su presencia.
"No sabía a dónde te fuiste así que me quedé esperándote. Tardaste mucho. ¿Qué estabas haciendo?"
[Nada importante. Mejor duerme]
"Tengo que recordarte que, si actúas imprudente, mi padre o Gray te verán"
Toru se mantuvo callado por un segundo antes de responder.
[Creo que ya es muy tarde para eso. Aunque no importa, en serio]
"¿No importa? Haa… ¿qué hiciste?"
"No mucho. Solo estaba bebiendo un poco de vodka en la oficina de tu padre y esa chica, Gray, entró a la oficina de repente. Me vio y hablamos un poco. Ella parece muy inofensiva. No creo que le importe haberme visto. Tampoco me importa a mi, así que…"
Sakura suspiró cansada.
"Pareces un niño…"
Palabras duras para Toru, quien no se atrevió a decir nada más. Él sabía que fue imprudente, pero realmente poco le importaba.
"Te he dado una orden y no la seguiste"
"... No puedo decir que lo siento porque estaría mintiendo. Sé bien qué orden me diste, pero no siempre debo seguir todo al pie de la letra. No soy un perro. No, incluso los perros tienen más libertad que un Servant"
"Si así vas a actuar, es mejor que te prepares para uno de mis Hechizos de Comando. Soy tu Master y debes obedecerme, pues así nos mantendremos seguros. Debes entenderlo"
"... ¿Eso es una amenaza?"
Materializandose delante de Sakura, Toru la miró con seriedad. Al ver qué Sakura hizo lo mismo, de alguna forma se sintió agobiado. Incluso tratar de rebelarse contra alguien era un fastidio.
Fue allí cuando Sakura le respondió.
"Es una amenaza"
Y Toru, viendo el adorable rostro de esta chica, suspiró cansado.
"Está bien. No volveré a ser tan imprudente"
Sakura sonrió ante su victoria abrumadora en contra de este testarudo Servant. Así, levantándose de la cama, le acarició el cabello a Toru como si fuera un perro diciéndole:
"Buen chico"
"... Eso no es gracioso…"
Dijo Toru con el rostro inexpresivo, acto seguido, se desmaterializó dejando a Sakura con esa sonrisa en la cara.
"Eres como una niña…"
"Lo soy…"
Ella, a diferencia de Toru, no negó esas palabras. Así se recostó en la cama y cerró los ojos sabiendo que él está a su lado y que nunca nadie se lo va a arrebatar…
-Un mes después. En un lugar lejano-
Una hermosa mujer japonesa de cabello negro y kimono de igual color sonrió al ver por la ventana la luz de la luna. Se acomodó los lentes y miró una carta en sus manos.
Ella pensó que todo lo que estaba en la carta era muy pronto para pasar, pero sin duda iba a pasar.
"El Castillo de la Separación de Adra, eh…"
Ese lugar… un lugar que el mismo Waver planeaba visitar.
La mujer se levantó de su elegante silla y salió de la habitación. Cerró la puerta con sus delicadas manos féminas y abrió un abanico entre sus dedos.
Sus labios rosados se fruncieron suavemente al pensar en todo lo que vivirá dentro de poco. Y de paso, los altos mandos de la Torre del Reloj también están involucrados.
"Esperemos a ver qué pasa"
Que el tiempo fluya como debe ser.
Continuará…