Capítulo 90: El Susurro del Corazón - El Beso del Amanecer
El sol de la mañana se filtraba por la ventana, bañando la habitación con un cálido color dorado. Ryeowook, acostada en la cama, observaba con curiosidad las manchas de luz que se movían sobre la pared.
Era un día nuevo, un nuevo comienzo.
Se levantó de la cama y se dirigió al espejo. Su reflejo la miró con ojos cansados pero determinados.
"Ya no soy la misma," se dijo a sí misma, su voz era un susurro de reconocimiento. "He cambiado."
Los recuerdos aún no habían vuelto completamente, pero ya no la atormentaban. Había aprendido a vivir con el silencio de la memoria, a aceptar que el pasado era parte de ella, pero no la definía.
"Soy fuerte," se dijo a sí misma, su voz era un susurro de determinación. "Soy valiente. Soy capaz de superar cualquier cosa."
Ryeowook se dirigió a la sala de estar, donde los estudiantes se reunían para desayunar.
"Buenos días," dijo Ryeowook, su voz era un susurro de alegría.
"Buenos días," respondieron los estudiantes, sus rostros llenos de sonrisas.
Jungkook, con una sonrisa cálida, se acercó a Ryeowook. "Buenos días," dijo Jungkook, su voz era un susurro de amor. "Te ves hermosa."
Ryeowook sonrojó ligeramente. "Gracias," dijo Ryeowook, su voz era un susurro de timidez.
Jungkook la miró a los ojos, sus ojos llenos de amor. "Dame un beso," dijo Jungkook, su voz era un susurro de deseo.
Ryeowook se acercó a él y lo besó suavemente. Un beso lleno de amor y de esperanza.
"Te amo," dijo Jungkook, su voz era un susurro de amor.
"Yo también te amo," dijo Ryeowook, su voz era un susurro de amor.
Los estudiantes sonrieron, sus corazones llenos de felicidad.
El sol de la mañana se elevaba en el cielo, un símbolo de la esperanza que renació en sus corazones.