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Conocer / planes

Ves, Ajuka es un bastardo, mejor volvamos por donde venimos y comamos ese pastel tan delicioso que hiciste—. Su propuesta era mayormente ameritaba al hambre que tenía, sin embargo, la cámara volvió para prestarle única atención al muchacho de cabello castaño—.

Veo que tienes un pastel he de suponer que es para mí dime, ¿Qué tiene?—. De la propia cámara la voz de quién buscaban, sonaba intrigado como interesado por el postre que veía gracias a la cámara—.

Una pequeña torre de ponque, con glaseado casero como pegamento y forma de cubrir, fresas frescas y más frutas en su interior, a y unas galletas igualmente caseras que tengo en mis bolsillos—. El comentar, terminó cuando vio las puertas del bastión ser habiertas—. Gracias.

Cuando a ambos se les abrió paso por el bastión de ajuka, no le hicieron esperar y siguerion un camino en línea recta, ambos sentían tensión uno más que otros por motivos opuestos entre si. Deteniéndo su andar, vieron al que buscaban salir de una puerta frente suyas, a dos metros de distancia los cuales el hombre recorrió, de cabello verde, bata de laboratorio blanca y lentes. Azazel preparó su mejor sonrisa como su mano extendida, pero únicamente fue ignorado.

Mmmm se ve delicioso, digo perdona mis modales el cabeza de plátano podrido no me habrá presentado bien, mucho gusto ajuka Belcebú—. Su forma de presentarse ante el muchacho fue elegante, sin contar el insulto proporcionado al líder de los caídos—. Pasa.

Dijo antes de devolverse entre sus pasos para entras de nuevo al cuarto de donde salió, Issei entro y Azazel comenzó a insultar al peliverde, con rabia por como le habrían dicho. Al estar dentro de la sala Issei quedó más que maravillado por todo lo que veían sus ojos, trillares de máquinas en un aparente funcionamiento perpetuo, criaturas encerradas en cápsulas y miles de pantallas.

Veo que mi laboratorio te es increíble, pero ven ya tengo un cuchillo para cortar a esa deliciosidad—. Hablando con orgullo he impaciencia, vio al joven dejar el pastel en la mesa donde él esperaba—. Muchísimas gracias.

Sin esperar más el hombre corto un pedazo que agarro con su mano y llevo a su boca sin hacerse esperar más sus pupilas gustativas, Issei al verle supuso que habría hecho un buen trabajo, ajuka se complacía con cada pequeño pedazo que comía del pastel, Azazel babea un poco por lo que comía el peliver, pero el castaño tosió y hablo.

Disculpe la interrupción señor ajuka, pero le importaría hablarnos sobre una raza, los Darkin y me preguntaba, ¿Tiene más datos sobre ellos o algo que no haya nombrado en sus anotaciones para el público?—. Cuando se pregunta finalizó, noto la seriedad puesta para él, por parte de ajuka—.

Y puedo preguntar, ¿Por qué tanto interés?—. Resalto seriedad, cuando trono los huesos de su mano libre del pastel—.

Propio y Mere interés personal—. Comento con de la misma manera que ajuka, sin la necesidad de tronar sus huesos—.

Tras unos segundos de un profundo silencio, el chasquear de los dedos de ajuka, provocó una serie de sonidos de maquinaria que terminó en cuento del techo bajo un brazo robótico con un folio que sostenían sus dedos metálicos.

No puede recolectar mucha información, esta es la única por así decirlo clara que tengo, pero déjame decirte, que caerás en un agujero de conejo—. Su decir termino con otro mordisco de pastel—.

Gracias, vámonos Azazel a casi se me olvida—. Sacando de sus bolsillos las galletas que meciono, hace rato las dejo en el escritorio—.

Sin nada más que hacer ahí, ambos se fueron del bastión, al llegar de nuevo al castillo de mármol negro del caído, Issei le preparo una gran bandeja de galletas para dejarle entretenido, tomando un abrigo y el folio salió de nuevo del castillo, como en la mañana el mismo ángel caído le dijo que tuviera cuidado con el frío, Issei le hizo calmar y acredito que no se demoraría.

Devolviéndose entre sus pasos, paso sobre la fría y blanca nieve en dirección a la habertura entre el mármol del castillo, cuando lo hizo, vio las llamas de la hoguera aún ardiendo, como de su protegida por así decirlo aún durmiendo, al entrar por completo, se sentó cerca de ella y su cama improvisada, al hacerlo sintió un tirón en en el hombro y recordó el mordisco que ella misma le dio. Abriendo el folio cayó tan rápido en un abismo.

"Armas vivientes, influencia en guerras, años de antigüedad y gran poder."

Su sentido común, comenzaba a castigarle por haber atacado y ganarse de enemigo aatrox. Calmandose un poco sabía que el pensar así no le ayudaría mucho, enfriando su cabeza, cerró sus ojos para meditar un poco, pero los abrió y se sorprendió de no verse en la grita si no que estaba en un páramo muerto, con rasgos de haber pasado por una devastadora guerra.

Cuerpos podridos y consumidos por la naturaleza yacían por todo el suelo que logrará ver, apenas y firme sobre tanto calcio giro y al hacerlo se petrifico, quien se encontraba frente de su mirada era nada más ni nadie menos que su propia madre, con una apariencia demacrada, carne podrida en su propio cuerpo, pero su cara siendo lo único intacto de es putrefacción que la afectaba.

No pudiendo hablar, sus emociones estallaron y sus ojos se humedecieron de inmediato, pudiendo por fin moverse, se acercó a su madre, saltando la abrazo no importando le su estado putrefacto, llorando en aquel abrazo, su madre replicó la acción suya y lo apego, para únicamente consolarle como si se tratara de un niño pequeño, mientras palmeaba su espalda su voz pro fin se generó.

Ya ya, deja de llorar gran bebé—. Su decir fue cariñoso mientras seguía consolando a su hijo—.

M-mamá p-perdoname s-si hubiera tenido más fuerza a-abria m-matado aatrox p-pero n-no la t-tuve p-por s-ser d-debil—. Su hablar era cortado por su llanto aún presente—.

O no, mi pequeño, no eres débil, eres más fuerte que yo, que tus hermanos y lo eres por tu voluntad y bondad, escalaste el monte targon y fuiste escogido por un aspecto, tu eres mi orgullo Issei nunca olvides eso—. Hablo con sumo cariño, para dejar el abrazo y comenzar acariciar la cara de su hijo—.

Issei volvió al abrazo para seguir llorando, con sus ojos cerrados y ríos de lágrimas que bajaban por estos, y que caían de su mentón, abriendo los ojos de vuelta ya no estaba en ese campo de muerte con su madre, ahora estaba en el interior de la grita, llorando a mares, con una de sus manos levantas y otra siendo agarrada por alguien.

Enfocándose en su otra mano giro confuso, la mujer quien aún dormía era quien la sostenía, sus mejillas se coloraron un poco por esto, debido al hecho de su casi nulo contacto femenino, de forma delicada soltó su mano y se retiró en silencio. Devuelta en en el castillo fue en dirección a su cuarto, al entrar se tiró a su cama, quitándose los zapatos decidió dormir, aunque, aún no estuviera la noche presente estaba muy agotado por una razón que desconocía, pero habría otra la cual si conocía bien.

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Al despertarse con los primero rayos del sol supuso que tendría mucho que hacer el día de hoy, no solo por sentir claramente un conjunto de ropa en sus pies si no que también ver la silla que estaba cerca de su cama con una mochila sobre esta.

Dándose un baño rápido y vistiéndose, pero antes de esto se impresionó de ver el uniforme de la escuela de sus hermanos, pero supuso que Azazel tenía algo entre manos y el debería de actuar, al estar vestido fue rápido con su paciente, habría despertado, esquivo las lanzas de luz que le lanzó apenas y entro, preparándole sopa se la dio y le dijo que no se fuera, y que vendria en la noche. Devuelta en el castillo tomo su mochila no sin antes desayunar he ir con Azazel quien le saludo cuando entró a su oficina.

Oh Issei ¿Cómo dormites? Espero que bien—. Hablo entusiasta, acercándose al muchacho—.

Mejor, ve al grano para que quieres que vaya a la escuela de mis hermanos—. Pregunto de forma seria buscando respuestas en el hombre quien sonrió—.

Nuestros planes deben de pasar bajo la mesa de las demás facciones, es para bien de todos imagínate, uno de aquellos aspectos o darkin cae en las manos de los demonios, kaijus, leviatanes o cualquier otra raza, por eso te haré pasar por un interno si le podemos decir así—. Comento su plan de forma sería dejando al castaño un poco impresionado—.

Je si nos descubren, ¿Conoces las consecuencias que habrán?—. Pregunto el punto más importante para si mismo de el plan que planeaba el rubio—.

Claro tengo contactos, como un sustituto perfecto que tomara manos en la legión pero dime, ¿Dónde estaríamos más cómodos, tomando agua en Egipto o bronciandonos en las tierras de los kaijus?—. Su decir causo una pequeña risa al castaño—.

Cualquier lugar es bueno, pero que comience esto, mándame para haya—. Comento preparado, y tras unos segundos después de lo dicho fue teletransportado sin siquiera darse cuenta a un callejón—.

De forma simple salió de ahí y dando algunos pasos vio la escuela no muy lejos de su punto de apareción, con su mochila en la espalda y un suspiro comenzó a caminar, sin embargo, sintió algo en el bolsillo de su pantalón, al ver que era, se percató que era un papel que tenía escrito 1 b, suponiendo que era el número de su salón continuó su camino y cuando entró, para pasar por un pasillo muchos no le quitaban la mirada, unos por su aspecto y otros por motivos triviales.

Al llegar al salón que le accionaron se sentó en una esquina y tras uno largos minutos el profesor llegó y todos se sentaron, el profesor le pido levantarse y presentarse para todos, muchos se impresionaron de ver a otro hyodou y más siendo el de el medio, pero mientras esto sucedía dos personas se percataron de la presencia del castaño, una sonrió mientras baja unos papeles a su escritorio y la otra ponía una mueca de desagrado.

«¿Qué estarás planeando issei-san? El tiempo lo diré.»

Tsubaki, ¿Podrías ir por el nuevo estudiante de la clase 1 b? Tráelo durante el descanso del almuerzo—. Le pidió a una de sus ciervas quien asintió tras terminar su oración—.

Perdoné mi interrupción Kaichou, pero ¿Por qué tanto interés en el nuevo estudiante?—. Pregunto, el hermano mayor de los hyoudou entro a la sala de forma educada—.

Pronto lo sabrás Takeshi—. Comento sin decir mucho al detalle—.

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Enojada dimismualaba esté tomando un poco de té, sin embargo, alguien noto esto.

Ara Ara que ven mis ojos, la presidenta está enojada—. Comento con cierto carisma, viendo a la pelirroja desde donde estaba—.

Hanako hazme un gran favor, ve por tu hermano ahora mismo, está en el salón 1 b, ¡PERO YA!—. Grito con rabia de no ver a su peón moviéndose—.

Hanako asustada asintió y se fue corriendo de ahí los más rápidos posible, pero mientras iba al salón una voz en su cabeza resonó.

«Tu hermano, ha hecho enojar demasiado a la gremory por lo que puedo sentir, me agrada eso bastante y bien por que estás tan pensativa.»

Draig creo que mi hermano me está ocultando algo.