Una extraña gema en mi balcón.

Caminando por las calles no tan oscuras a las afueras de Madrid se encontraba un joven con ropa deportiva, el sudor le corría por la frente mientras se dirigía al edificio de apartamentos en el cual residía.

Saliendo del ascensor fue recibido por una señora que vivía al lado cargando con las compras para la cena.

"Buenas noches, Señora Rosie ¿cómo se encuentra?, ¿necesita que le ayude con eso?"

"Oh, hola, David, no tienes que molestarte ya igual estoy al lado de mi casa, y por favor cuida a tu mascota debe haber creado algún daño por el horrible sonido de hace unas horas"

Y después decir eso la Señora Rosie camino hacia su apartamento con sus compras.

'Se ha de haber vuelto loca la Señora Rosie, yo no tengo mascotas'

Con una fea y misteriosa sensación David se dirigió a su apartamento. Él después del trabajo se ponía ropa deportiva y salía a correr.

Entrando a su apartamento David reviso sus cámaras y sistemas de seguridad, y rápidamente se dio cuenta que la cámara del balcón tembló por un momento a las 15:57, para mayor seguridad David escribió el número de emergencias mientras se dirigía al balcón a revisar.

La pared que compartía con el balcón tenía una librería, la cual ahora se encontraba totalmente desordenada y con libros en el suelo.

Se acerco a la puerta corrediza y miro por entre los espacios de la cortina.

Acerco su mano a un interruptor y después de dudar un momento lo oprimió, las luces se encendieron mientras miraba para encontrar alguien o algo.

"No hay nadie, pero esta todo desordenado..."

Abrió la cortina y salió al balcón, una de las plantas que tenía colgadas del techo estaba en el piso y la tierra se esparció por todo el balcón.

Unas piedras se encontraban en el piso junto a la puerta, en la pared a un metro del suelo se encontraba un hoyo de unas 8 pulgadas y algunas grietas en toda la pared, un material cristalino sobresalía unos centímetros brillaba bajo las luces artificiales.

Lo toco suavemente, encontrándolo muy resbaladizo y sin asperezas.

Al tratar de sacarlo de la pared se le dificulto el agarrarlo. David entro en el apartamento y se dirigió a la lavandería, consiguió un trapo y un destornillador de pala antes de regresar rápidamente.

"¿Qué tipo de gema es esta?, ¿cómo termino en mi balcón? y sobre todo ¿es mía, cierto?, ¿cuánto me darán por ella?"

David continúo tratando de remover la gema mientras miraba las grietas por toda la pared.

"Huff... ojalá suficiente para que quede algo después de arreglar esta pared"

Cuando ya sentía que se estaba aflojando comenzó a poner un poco más de fuerza con el destornillador haciendo que este se resbalara con la piedra, sacándola y cortándose la otra mano en el proceso.

"Aay, eso dolió... pero creo que valió la pena"

Dijo David mientras sostenía la gema con la mano herida, acerco la gema y la comenzó a examinar.

La gema o eso quería creer era extrañamente suabe si no la sostenía con el trapo se le resbalaría, fascinado con la sensación de suavidad soltó el trapo y la sostuvo con ambas manos.

Extrañamente la sangre que sentía que ya empezaba a esparcirse por su mano ya no estaba, mirando su mano no había sangre en ningún lugar, pero su herida continuaba sangrando, luego extrañamente comenzó a flotar hacia la gema. Un poco en shock, David vio como su sangre volaba hacia la gema cada vez más rápido. Despertando de su shock sobresaltado arrojo la gema lejos de él, pero todavía podía ver como su sangre salía a borbotones de su herida y volaba hacia la gema que yacía ahora dentro de su apartamento.

Viendo como salía su sangre sin habla, David se desmayó.