Ella era…

En una de las aulas de la Academia de Héroes, la Profesora Santulli con una expresión solemne, habló.

"En el mundo actual nos podemos encontrar varias iglesias de dioses de otros mundos, no todos esos dioses trabajan para la salvación de la humanidad o por su progreso, algunos tienen otros objetivos." Dijo la Profesora Santulli y mirando a los estudiantes, añadió. "Aquellas iglesias cuyos dioses buscan causar un mal a la humanidad son tratados como sectas."

Los Dioses existían y había múltiples dioses, cuya influencia llegaba a la tierra.

Algunos como la Diosa del Conocimiento ayudaban a la humanidad ofreciendo su conocimiento a los terrícolas, extendiendo su fe en este mundo.

No obstante, no todos los dioses tenían como objetivo ayudar a la humanidad y las iglesias que adoraban a esos dioses eran llamados sectas.

"En otros mundos no todos esos dioses son malvados, tal vez en otro mundo sean seres generosos y amables, pero sus intenciones con este mundo terminan convirtiéndolos en sectas prohibidas." Narró la Profesora Santulli con calma.

Esos dioses en sus respectivos mundos podían ser considerados como dioses benevolentes, pero en la tierra a causa de como actuaban o como se movían, terminaban convirtiéndose en sectas que estaban prohibidas.

Dándole permiso a un estudiante que levantó la mano, la Profesora Santulli esperó con calma a que el estudiante formulara su pregunta.

"¿Cómo los mortales descubren esas intenciones?" Preguntó un estudiante.

Los Dioses eran seres que superaban a cualquier humano y para mortales como ellos eran complicados averiguar sus intenciones.

La pregunta de este estudiante fue bastante acertada y a la vez fácil de responder.

"Analizando las acciones de sus creyentes." Respondió la Profesora Santulli y con una media sonrisa, aclaró. "Aunque a veces, algunas existencias ocultan muy bien sus intenciones y sus razones son difíciles de descubrir."

Los Dioses llevaban a cabo su mandato a través de sus designios a sus creyentes, guiándolos hacia un objetivo.

Si ese objetivo era causar un mal en la humanidad, entonces ese dios y su iglesia sería designado como una 'secta religiosa'.

Aun así, era difícil descubrir cuál era la verdadera intención de esos dioses y era posible que ellos ocultaran perfectamente sus intenciones tras la máscara de un Dios 'amable y misericordioso'.

"A diferencia de los cultos demoniacos que adoran a dioses peligrosos y malvados, las 'sectas religiosas' son más difíciles de descubrir, pero son igual de peligrosas." Señaló la Profesora Santulli.

Los Cultos Demoniacos no ocultaban lo que deseaban y cuando causaban estragos ellos eran capaces de anunciar al mundo sus logros.

Muy diferente a las Sectas Religiosas que podían estar ocultándose detrás de valores benevolentes y creyentes entusiastas por ayudar.

"O más peligrosas." Dijo Alice y cuando recibió la mirada de los estudiantes, explicó. "A veces las personas están dispuestas a todo mientras creen en algo mayor a ellos. Y terminan causando mayor daño de lo que imaginan."

La expresión de la Profesora Santulli tembló momentáneamente ante ese análisis tan realista y al final, asintió.

La 'Fe' era algo que nadie podía cuestionar y era una fuerza que llevada al extremo podía ser aterradora.

Que un Dios les hiciera creer a sus creyentes, que ellos eran los únicos que podían salvar a la humanidad, motivándolos a cometer fechorías con la idea de que eran 'sacrificios menores' para un bien menor.

Con esa idea, algunos podían sacrificar incontables vidas.

"En esta clase de 'Artes Oscuras' hablaremos sobre esas sectas religiosas y esos cultos demoniacos. Como actúan, como se organizan y como nuestros conocidos pueden pertenecer a ellos, sin que nosotros no nos demos cuenta." Anunció la Profesora Santulli y con una media sonrisa, añadió. "Aunque tales temas serán estudiados en otras clases. Ahora pueden retirarse temprano."

Tras una corta despedida la Profesora Santulli abandonó el aula, dejando a los estudiantes con sonrisas.

Aurora que estaba escuchando la clase bostezó con sueño.

Era el primer día y ella había asistido a la Clase de Historia Mágica, Teología y Artes Oscuras, estas dos últimas dadas por la Profesora Santulli.

Aunque explicaba bastante bien, estas clases no eran un tema que Aurora le gustara demasiado muy diferente a Alice, que prestaba atención con bastante entusiasmo.

Tanto la Profesora Santulli como la Profesora de Historia Mágica eran excelentes para explicar y enseñar, siendo la última quien se entusiasmó más, queriendo preparar un año lectivo más divertido

La causa era las estudiantes extranjeras.

Aurora observó a Cithrel, esperándola para que terminara de hablar con aquellos que la rodeaban.

La presencia de estudiantes extranjeros animaba el ambiente y que Cithrel, fuera una joven tan entusiasta en participar y aprender, llevó a que los profesores se sintieran contentos con enseñar.

Aunque Venali también parecía serio y solemne, en realidad fue alguien que tomaba notas con cierta disciplina, prestando atención a las clases.

Y mayor que toda la presencia de Venali, literalmente llevaba a que las estudiantes redirigieran la mirada, como si lo utilizaran para recuperar energía.

"¿Tienes tiempo?" Preguntó Nicole de repente y cuando Aurora se dejó de distraer y le prestó atención, esa jovencita dudó un momento y pidió. "Quiero entrenar un poco."

A pesar de tener estudiantes de otro mundo a su alrededor, Nicole parecía más animada para empezar a entrenar que socializar.

Tal vez si fuera antes les hubiera prestado más interés.

Era lo mismo que los demás, que a pesar de haber venido a esta clase se habían retirado a realizar sus respectivas tareas.

"Tengo trabajo ahora, pero si quieres podemos entrenar a la noche." Dijo Aurora observando de reojo que Cithrel terminaba.

Todavía no había podido conversar con Cithrel sobre los pormenores de la misión y para ella era necesario elegir qué era lo que deseaba.

"No necesitas preocuparte por mí, no es necesario que me protejas todo el tiempo." Dijo Cithrel y con una sonrisa honesta, añadió. "Tengo confianza en mis habilidades y la de Venali."

Había escuchado su respuesta, aunque había estado lejos.

No estaba siendo orgullos, sino que fue honesta con que tenía confianza en sus habilidades y Aurora que dudó, finalmente habló.

"Dudó que ocurra algo en la academia, pero si lo deseas podemos estar contigo cuando salgas de la Academia. También si deseas que puedes quedarte en nuestra mansión o nosotros podemos acompañarte en tu hotel." Dijo Aurora y con una media sonrisa, explicó. "Quedaría mal con Urfin, si no hago mi trabajo. Y ser la Princesa de un poderoso imperio puede ser problemático."

Si tenía que elegir un estilo de protección, Aurora escogería proteger a la princesa a tiempo completo.

En la Academia de Héroes era innecesario mantener un ojo y tanto Venali como Cithrel podían ir a las clases que desearan, pero fuera de la academia era otro asunto.

Si bien ellas eran guardaespaldas de reserva y otros podían estar protegiéndola en las sombras, Aurora quería tomarse su trabajo seriamente y más cuando la Princesa del Imperio Falion era para algunos lunáticos, valiosa.

Extremadamente importante.

Era probable que Cithrel en Terra nova estuviera rodeada de guardias y aunque la posibilidad de que fuera atacada en la tierra era baja, comparada a los peligros de Terra nova, Aurora no deseaba cometer un error.

Este más que un trabajo era un favor y ella no quería fallarle a Urfin, que puso su confianza en ella y en su hermana.

"Entiendo los peligros de este mundo, pero no soy tan débil como parezco." Dijo Cithrel y al darse cuenta de que ella la seguía mirando con solemnidad, suspiró y con una sonrisa, añadió. "Apreció tu buena voluntad y lealtad a Urfin. Te informaré cundo tenga asuntos que atender y que requiera que me protejas."

Estaba siendo considerada para que ella no quedara mal con Urfin y por más considerada que fuera, dejó un hecho en evidencia; no deseaba protección.

"Ahora que Aurora está disponible. ¿Puedo ver su entrenamiento?" Preguntó Cithrel dirigiendo su mirada a Nicole.

Un cambio sutil de tema, que impedía que Aurora pudiera oponer y fue tan amistoso, que Nicole no pudo evitar asentir.

A Aurora no le importó demasiado la manera de guiar la conversación y se quedó detrás de Cithrel, Nicole y Venali que estaban dirigiéndose al centro de entrenamiento.

"¿Crees que no confía en nosotros?" Preguntó Aurora a Alice, utilizando un artefacto para silenciar su conversación.

¿Cuál era la razón de que rechazara la ayuda? Urfin le había informado de que ellas se encargarían de la seguridad y lo primero que imaginó era que Cithrel no confiaba en sus habilidades.

"No lo sé. Tal vez tiene una razón particular para venir a este mundo y no desea tenernos a su alrededor o quizás tiene confianza en sus propias habilidades y no necesita a nadie." Respondió Alice con calma e indiferencia.

Muy pocos terrícolas conocían noticias actuales de Terra nova y menos aún la situación política del Imperio Falion.

Lo que significaba, que era muy complicado averiguar cuál era la razón por la cual la Princesa del Imperio Falion vino a este mundo.

Sin embargo, un hecho estaba claro.

"La heredera del imperio no vendría a la tierra para hacer turismo." Murmuró Alice mirando a la dirección en donde se había ido Cithrel, Venali y Nicole.

La presentaron como princesa, pero no todos los estudiantes conocían el hecho de que ella era literalmente la heredera del Imperio Falion y no una simple princesa.

La Realeza del Imperio Falion protegía bien la información y que ella fuera la heredera, era información clasificada.

Una princesa tan respetada y capaz, que a pesar de que se le ocurrió a viajar a la tierra, ninguno de sus súbditos o vasallos se opuso… Tales detalles fueron informados por Urfin.

En el Imperio Falion estaba en lo que se consideraba la 'Edad Dorada' y el control de la realeza era tenaz y muy fuerte, lo que significaba que Cithrel no estaba en este mundo por un asunto político del imperio.

Aurora podría pensar en decenas de conflictos que involucran el imperio Falion, pero al final era lo mismo.

"Nuestro trabajo solo es protegerla." Respondió Aurora mientras seguía al trío.

Su trabajo no era averiguar la razón por la cual Cithrel y Venali estaban en este mundo, su deber era protegerlos en caso de que lo necesitaran.

Y aunque si la rechazaba era complicado, cumpliría con las obligaciones de su deber.

******

En el centro de un área de entrenamiento de la academia, Aurora esquivó un puñetazo de Nicole, retrocediendo con rápidos movimientos de pies.

Nicole arremetió en su contra, ganando terreno con entusiasmo y una pequeña sonrisa en su rostro.

Era un rango B y por los golpes rápidos, fuertes y decisivos, estuvo claro que cada vez estaba alcanzando la parte superior de ese rango.

Aurora destacaba el modo que Nicole controlaba el ritmo para atacar sin cansarse y a la vez le impedía, que contratara, queriendo atraparla en un aluvión de golpes.

Cuando esa clase de luchadora la estaba atacando, lo único que pudo hacer Aurora fue esperar hasta que su oponente, cometiera un fallo.

Esta era una batalla de técnica y Aurora se estaba limitando, sin utilizar toda la fuerza física que era capaz de ejercer.

"¿Eh?"

Fue en el momento exacto que Nicole realizó una patada a su costilla, que Aurora respondió.

En vez de esquivarla o protegerse, ella tomó la pierna de su oponente con un rápido movimiento lo suficiente como para sorprender a Nicole.

Afirmándose en el suelo y usando la misma fuerza del golpe, Aurora reforzó su cuerpo con energía mágica y lanzó a Nicole en contra la barrera.

Los golpes de Nicole eran fuertes, pero su cuerpo era liviano y fue fácil levantarla.

"Ugh…"

Al golpear la pared, Nicole dejó salir un gemido adolorido por el impacto y se deslizó en el suelo en derrota.

"Tus oponentes pueden aprender al igual que tú." Advirtió Aurora y se acercó para levantar a Nicole, que suspiraba ante la pérdida.

La primera patada que Nicole realizó hace tiempo en un cambio de estilo fue sorprendente y ella únicamente pudo protegerse, pero esa sorpresa solo podía ser usada una vez.

Entrenar con una persona significaba aprender el estilo y ajustarse a ese estilo, aprovechándose de las debilidades y Nicole cometió errores.

"La próxima vez refuerza tu cuerpo con energía mágica. Si lo vuelves más pesado, no será fácil levántate." Aconsejó Aurora y sonrió al ver a Nicole asintiendo con seriedad.

Al igual que ella aprendió el estilo de Nicole, esa jovencita eliminaría sus propios defectos, aprendiendo de sus errores y luego se levantaría más fuerte que nunca.

"¡Buen combate!" Exclamó Cithrel acercándose desde afuera de la barrera.

Estaba aplaudiendo y aunque su comentario, no únicamente sonaba amable, sino que también era sincera.

"Aurora es mejor que yo." Murmuró Nicole dando una sonrisa tímida.

Fue honesta y no le molestaba admitir que otra persona era mejor que ella, aun así, estaba un poco avergonzada por el cumplido de Cithrel.

Y Aurora tenía que admitir que una persona como Cithrel causaba cierta timidez en otros.

"Es cierto. Sin embargo, no tienes que despreciarte. Tu entusiasmo para aprender es elogiable y una compañera excelente que se limite a tu ritmo para enseñarte, te hará crecer muy rápido." Comentó Cithrel con calma y observando a Aurora que fue tomada por sorpresa por el cumplido, dudó. "¿Quieres entrenar conmigo? Me gustaría experimenta un poco de tu enseñanza."

Elogio a Nicole y al mismo tiempo a ella, para terminar, pidiendo de la manera natural, un combate de entrenamiento.

Aurora tenía que admitir que estaba un poco sorprendida y lo primero que hizo fue mirar a Venali y a Alice que estaban afuera de la barrera de entrenamiento.

El compañero de la princesa llevaba una expresión solemne y Alice estaba comiendo su bolsa de papitas con una expresión indiferente.

Ninguno de los dos tenía intenciones de intervenir.

"Será un corto entrenamiento. Puro entrenamiento" Pidió Cithrel con una sonrisa entusiasta y motivada.

El tono honesto y tan entusiasta de invitarla mostraba que de verdad deseaba tener un corto enfrentamiento casual.

Si no fuera porque Aurora percibió el motivo ulterior, era probable que creyera en esa sinceridad.

—¿Quiere probarte o demostrarte lo fuerte que es?

La pregunta de su sistema, era la misma pregunta que Aurora tenía en su mente.

Al probarla a ella verificaría que tipo de fuerza tenía la persona que supuestamente la protegería y en caso de que fuera débil, podía rechazarla.

Y si era más fuerte, entonces no tenía necesidad de protección y menos de alguien que ni siquiera podía ganarle.

Sin darle tiempo para dudar si rechazar el duelo, Nicole sin darse cuenta corrió emocionada afuera y la barrera de entrenamiento volvió a fortalecerse.

"¿Empezamos?" Preguntó Cithrel con una sonrisa única mirándola.

Era una sonrisa amable como si dijera que era un entrenamiento casual, pero el aura de rango S que emanaba es princesa no era una broma.

—Al parecer es la segunda.

La energía mágica era perceptible con facilidad para cualquier usuario de habilidad y el aura que emanaba, dejaba en evidencia que era fuerte.

Lo suficiente fuerte como para no necesitar protección.

Y Aurora no se sintió intimidada, sino que se dirigió a su lado del área de entrenamiento y reforzó su cuerpo con energía mágica.

Era débil como un luchador… Solo como luchador.

Agudizando sus sentidos y reforzando su cuerpo para lo que fuera que estuviera por venir, Aurora mantuvo su atención en Cithrel y notó que esa princesa levantaba su mano con sutilidad.

Un gesto indiferente, ligero y simple, que cualquiera podía confundir con un movimiento casual si no fuera por los dos cortes de aire que aparecieron de la nada.

"…"

Al esquivarlos, Aurora vio como cortaban el suelo con una profundidad que no era una broma.

Un corte limpió que sería similar a cualquier corte de espada que podía herir de gravedad a un rango S.

—Fueron ataques de advertencia.

Al mismo momento en el que su sistema mencionó lo evidente, Cithrel comenzó el verdadero combate.

Esa princesa agitó su mano otra vez y la diferencia de antes, fue que esta vez cerca de diez cortes fueron disparados.

Aurora no retrocedió, sino que avanzó hacia adelante y cuando los cortes estuvieran al frente de ella, pisó el suelo y saltó en el aire.

La princesa no era un oponente fácil y en medio del aire, lanzó otro corte que fue más rápido y decisivo.

"¡Oh!"

Aurora escuchó la exclamación de la princesa mientras ella retorcía su cuerpo en el aire para esquivar el corte y aterrizaba a cinco metros del Archimago de rango S.

Sin embargo, esa exclamación no fue lo único que logró, ya que Cithrel con una sonrisa golpeó el suelo con su pie.

Un único movimiento fue suficiente para generar una barrera de viento que la protegió y a la vez, diez serpientes de agua que rodearon la barrera.

Como un nativo de Terra nova, Cithrel tenía un potencial único para la magia y gracias a su linaje de realeza, ella era un Archimago de Rango S a una edad muy joven.

Específicamente…

—Es un Archimago elemental. Puede atacar con fuego, agua, tierra o aire y es probable que sepa otras magias.

Su sistema le advirtió y Aurora se preparó al ver que Cithrel enviaba sus serpientes hacia ella.

Las serpientes eran ataques de rango A al menos en fuerza y lo que destacaba fue la velocidad que superaba a cualquiera de ese rango.

Estaba mostrando su potencial a la hora de lanzar hechizos con tanta velocidad y rapidez, demostrando que ella era fuerte incluso entre los de su mismo rango.

Trataba de dejar en evidencia que no era simple y Aurora tampoco lo era.

"…"

Reforzando su cuerpo en un instante, Aurora golpeó las serpientes con sus puños, utilizando la onda expansiva para desestabilizar los ataques y que no la golpearan de manera directa.

Evitando de esa manera el daño y saliendo completamente indemne en contra de esos hechizos, logrando volver a sorprender a Cithrel.

*BOOM*

Y Aurora sin importarle la sorpresa de su oponente, arremetió en contra de la barrera esta vez con la suficiente fuerza como para generar un sonido explosivo cuando su puño chocó con la barrera.

La barrera tembló trasmitiendo el impacto al exterior y eso fue todo lo que consiguió un puñetazo de un rango A.

"Eres buena." Admitió Cithrel sonriendo con honestidad al otro lado de la barrera.

A pesar de que una fina barrera de viento capaz de solidificarse la cubría, esa princesa no se notaba nerviosa y estaba sonriendo con calma.

En la academia les enseñaban a los estudiantes que un mago perdía cuando un enemigo se acercaba y Cithrel demostró que tales palabras eran una broma.

Aurora retrocedió de inmediato, siguiendo sus instintos que le advirtieron del peligro y su rápida reacción, permitió esquivar los cortes de aire que fueron lanzados de la misma barrera.

Tratando de tomar la distancia más segura realizando piruetas hacia atrás, esquivando los cortes que partían el suelo, Aurora al notar una esfera de aire, se detuvo.

Reforzando su cuerpo en un instante, realizó un puñetazo con todas sus fuerzas usando su aura de combate en contra de la esfera de aire.

Estaba tratando de emplear un aura de combate para hacer estallar el hechizo antes de que se acercara demasiado.

*BOOM*

La esfera de aire no era una broma y la onda de impacto que liberó cuando fue bastante fuerte.

Ella había utilizado su fuerza física pura y para su sorpresa, la esfera de Cithrel no era solo aire comprimido.

"¡!"

Aurora inclinó su cabeza instintivamente al percibir el peligro y aunque fue rápida, pudo sentir el corte ardiente en su mejilla.

Un hechizo dentro de otro hechizo.

Esa esfera de aire tenía una enorme fuerza y podría ser comparada a un golpe de un luchador de Rango A si la golpeaba.

Sin embargo, en el interior de la esfera se encontraba un corte de aire que continuaba una vez que la barrera se rompía.

Tocando la mejilla, Aurora dio una media sonrisa admitiendo que Cithrel era un mago de rango S aterrador.

"Si quieres…"

Cuando estaba por decirle que siguieran el combate, queriendo probarse en contra un mago aterrador, Aurora observó como Cithrel miraba la herida aturdida.

"¡Lo siento!" Exclamó Cithrel al darse cuenta de que se había quedado perdida y acercándose con rapidez, dio una expresión de disculpa y murmuró. "Me excedí un poco. No te preocupes, conozco magia de curación, te ayudaré."

Aurora parpadeó sorprendida al darse cuenta de que Cithrel le daba una mirada de disculpa, estando frente de ella.

Los ojos de esa princesa brillaban de una manera única y la mirada estaba pegada en su herida y la sangre que estaba deslizándose por su mejilla, como si creyera que el corte le estaba doliendo.

"Es solo un pequeño corte. Se curará en unos segundos." Respondió Aurora con honestidad sin saber cómo reaccionar ante la preocupación y seriedad de Cithrel.

Le sorprendió la manera única que Cithrel utilizó su magia, pero eso fue todo.

Un pequeño y diminuto corte que era imposible considerar como una herida y menos cuando este tipo de combates de entrenamiento, era probable que saliera aún más herida.

Lo único que la tranquilizaba era que tanto Nicole como Alice que observaban desde lejos, tampoco comprendía lo que sucedía.

"No digas eso. Me encargaré." Respondió Cithrel acercándose y poniendo la mano en su mejilla.

Estaba cerca y los ojos azules de esa princesa, resultaron ser tanto fascinante como un poco extraños por la preocupación con la cual la miraba.

Aurora no supo cómo reaccionar y dejó que la curara, sintiendo una cálida energía que calentó su mejilla y ese insignificante ardor del corte, desapareció.

Al igual que probablemente la marca del corte.

"Gracias." Murmuró Aurora con honestidad.

No podía comprender el cambio repentino de Cithrel y lo sintió como un extraño choque cultural.

¿Quizás el entrenamiento de Cithrel era fácil y nadie salía herido? No era tan raro imaginar a una princesa siendo protegida de los peligros del mundo, teniendo un entrenamiento lo más blando posible.

El problema era que…

—Un Terranovense para alcanzar el Rango S debió haber asesinado a muchas criaturas y seres vivos. Es posible que ella hubiera pasado por un entrenamiento duro desde joven.

Su sistema dejó ver el problema en esa duda que tenía y Aurora parpadeó de vuelta, observando a Cithrel con aún más dudas.

Los rangos de la tierra eran similares a los de Terra nova y la única diferencia era que los terranovense para volverse fuerte subían de nivel y, por ende, asesinaban seres vivos para obtener experiencia.

Muy diferente a la tierra en donde los terrícolas podían convertirse en un rango S con entendimiento y fuerza de voluntad.

Un rango S de Terra nova para alcanzar ese rango, necesariamente debía haber pasado por múltiples combates y Cithrel no parecía ser la excepción y menos cuando demostró tan fuertes capacidades.

¿Cuántas criaturas, monstruos y hasta personas debió haber asesinado para convertirse en un rango S?

La mirada de Aurora se hizo más rara entre más dudas tenía en su mente y…

"No me mires de esa forma." Murmuró Cithrel con una sonrisa tímida.

Estaba muy cerca y Aurora podía ver cierto rubor en el rostro blanquecino de Cithrel y a la vez era capaz de sentir la respiración suave de la otra parte y el extraordinario perfume que utilizaba.

Por un momento Aurora se sintió como un galante y seductor caballero, solo que…

"Tienes un hermoso rostro que no merece ser herido." Añadió Cithrel con una suave y encantadora sonrisa.

Era una sonrisa atractiva y coqueta, que concordaba con los brillantes ojos azules que parecían hechizantes.

El galante caballero no era ella… Ella era la damisela.

******

En la mansión de Zerzura, Cithrel que estaba siguiendo a Aurora, recibió la mirada de esa joven mujer.

"¿Estás segura de que deseas vivir con nosotras?" Preguntó Aurora con una expresión extraña.

"Por supuesto. Tu mansión es bastante agradable." Respondió Cithrel y mirando los alrededores, comentó. "Si soy sincera, cualquier edificio de este mundo me parece extraño. Especialmente sus objetos."

Ella no era ignorante sobre los objetos de este mundo, ya que los jugadores al viajar a Terra nova introdujeron muchos conceptos y los terranovense lo convirtieron en artefactos mágicos.

La mayor diferencia era que los artefactos de su mundo funcionaban con energía mágica y los de la tierra con electricidad.

Para Cithrel no era diferente estar en un hotel o vivir en esta mansión.

"Parece una mansión de vacaciones. Es un buen estilo como para alejarse del mundo." Dijo Cithrel de forma indiferente y al ver que Aurora estaba un poco distraída, preguntó. "¿Te molesta que viva aquí?"

Era evidente que la joven estaba distraída y tenía ciertas dudas.

"No, solo me sorprendió un poco tu cambio de decisión." Respondió Aurora sinceramente.

Antes del enfrentamiento ella había querido ir a un hotel e informarle cuando requiriera ser protegida, dejando en evidencia que no deseaba protección.

Sin embargo, tras el enfrentamiento cambió de parecer y pidió el paquete de protección completa.

"Antes pensé que eran débiles. Me disculpo." Confesó Cithrel con una sonrisa apenada y mirando fijamente a Aurora con ojos brillantes, añadió. "Pero ahora, sé que eres más de lo que pareces… Y creo que no está mal vivir con ustedes."

Aurora dio una media sonrisa sin saber cómo reaccionar y quien tuvo una reacción más evidente fue Alice, que, a pesar de estar comiendo papitas, le dio una mirada seria.

Deseaba averiguar cuál era la razón del cambio de opinión y la respuesta fue…

"¿Puedes guiarnos a nuestras habitaciones? Me gustaría cambiarme." Preguntó Cithrel con una sonrisa, ignorando a esa perspicaz joven.

"Oh, sí claro. Me disculpo." Respondió Aurora y le dio una señal para que la siguieran.

Dirigiéndose al segundo piso, las invitó a ver la habitación de invitados, ya preparadas.

Una decoración agradable y simple, que daba la impresión de ser una mansión de vacaciones y era la calidad de los muebles, lo que dejaba ver que no era tan barata.

"La preparamos en caso de que ustedes vinieran. Tal vez no tengan las comodidades de un gran hotel, pero espero que les agrade." Dijo Aurora mostrando la habitación.

La mansión era rústica y el diseño de los muebles concordaba con ese ambiente, pero era agradable y hogareño.

El lujo se ocultaba detrás de los muebles caros, los cuadros únicos y la decoración de valor, que era visible para los ojos perspicaces.

"Es muy lindo." Respondió Cithrel con honestidad y observando a Aurora, añadió. "Gracias."

No tenía necesidad de mentir.

Había vivido en palacios enormes y majestuosos, cuyas habitaciones eran tan grande como una mansión entera y a la vez estuvo en diferentes lugares, que era más pequeño que esta mansión.

Para Cithrel la simpleza de este lugar, tenía un encanto único y agradable.

Aurora que asintió ante creyendo que sus palabras eran cumplidos de cortesía, se retiró dejándolas solas.

"Su Alteza…"

Antes de que Venali, pudiera terminar su oración Cithrel levantó una fuerte barrera de insonorización impidiendo que nadie escuchara su conversación.

Luego con magia espacial verificó toda la habitación buscando objetos o artefactos de escucha.

Cuando llegó a este mundo, lo primero que le enseñaron fue sobre la tecnología y el peligro que esta podía significar tanto para su vida como privacidad, enseñándole maneras de evitarla.

En este mundo no solo había que tener cuidado con la magia, sino que con la tecnología y con los temas psiónicos, que diferían de ambos.

Por tal razón fue que Cithrel impidió que cualquiera escuchara o grabara su conversación usando magia.

"Ahora puedes hablar…" Dijo Cithrel con desinterés.

No era como si desconfiara de Aurora o Alice, sino que para ella mantener su privacidad era rutinario.

"¿Por qué cambio de planes y decidió quedarse aquí?" Preguntó Venali con sincera curiosidad.

Urfin era leal al Imperio Falion, pero al igual que todos aquellos demasiados leales eran extremadamente sobre protectores con ella.

La única heredará del Imperio Falion y aquella que tenía un talento para la magia similar a la antigua Emperatriz que llevó al Imperio a donde se encontraba ahora, durante la caótica época en donde los 'jugadores' fueron a su mundo.

En ese momento donde los dioses descendían, ascendían y morían, esa Emperatriz convirtió un imperio mágico en el imperio más poderoso de todo un mundo.

Lamentablemente, la antigua Emperatriz había desaparecido junto al 'enemigo de la humanidad' que era su maestro, dejando a su padre como emperador.

Ahora algunos decían que Cithrel heredó el talento para la magia de la antigua Emperatriz y esa era una de las razones por la cual, tenía tantos subordinados leales.

Urfin había arreglado bastantes medidas para que ella fuera protegida a pesar de que la misma Cithrel quería estar sola.

Si hubiera elegido el hotel, tal vez fuera más fácil para ella para realizar su objetivo, pero…

"Aurora huele muy bien." Respondió Cithrel con una encantadora sonrisa y mirando a Venali, agregó. "Un olor exquisito."