CAPÍTULO 87- Drei, el torneo y una nueva vida.
Drin acostó a Kei en el suelo y le acarició la cabeza.
Las chicas encontraron una cueva para refugiarse y esperar a que Kei se recupere. Kei necesita descansar varias horas... Tal vez días. Su cuerpo sufrió demasiado daño.
—Eso fue muy arriesgado… Usar su propio cuerpo como contenedor de nuestra magia y expulsarla, provocó que su cuerpo sufriera demasiado... No despertará en mucho tiempo.- Dijo Mio.
—Estaba desesperado... Frima era demasiado poderosa... Si Frima no hubiera atacado a Kei con esa esfera de fuego, ella hubiera ganado... Se desesperó… Kei la enfureció… Supongo que eso tenía planeado… Es un milagro que funcionara.- Dijo Terkiana.
—Si Luna se entera de esto, pensará que somos los malos, nya.- Dijo Eris.
—Sí, es cierto… Debemos mantenerlo en secreto.- Dijo Drin.
—Creo que necesitaremos más ayuda.- Dijo Terkiana.
—¿Más ayuda?- Dijo Nerka.
—Con más ayuda, ¿te refieres a más novias para Kei? Definitivamente todas ustedes están locas.- Dijo Nirkat.
—N-no creo que Kei quiera tener más novias.- Dijo Terniak.
—Será complicado conseguir ayuda de otra manera. La manera más rápida es conseguirle a Kei más novias.- Dijo Terkiana.
Kei sintió un escalofrío y se despertó.
—¡¿Qué?!
Se levantó del suelo y observó todo a su alrededor.
—¡¿En dónde está Frima?! ¡¿Estoy muerto?!
—Creo que perdió la memoria por el daño que recibió. Sus puntos mágicos sufrieron demasiado daño por absorber demasiada magia.- Dijo Drin.
Kei se sentó en el suelo y se acarició la frente.
—M-me duele la cabeza… Me duele todo el cuerpo… ¿Ganamos…? Sí… No... ¿Qué pasó? ¡¿Y por qué estaban hablando sobre conseguir más novias?! No es necesario… Creo que ya somos suficientes.
Nirfei se acercó a Kei.
—Frima sobrevivió al ataque y escapó. Pensé que sobreviviría, pero murió... Creo que no me expliqué bien… Frima sobrevivió al ataque y se alejó volando. Unos minutos después recibimos puntos, eso significa que Frima murió.
—No encontré el cuerpo. Seguí su rastro, pero simplemente desapareció. No pude encontrar su cadáver.- Dijo Drin.
—Vaya, vaya... Mostrar estatus.
El estatus de Kei apareció.
Kei Molfer.
Poder mágico: 789972/789972
Fuerza: 3444
Edad: 13 años.
Inteligencia: 548
Agilidad: 1639
Puntos de vida (hp): 120987/120987
Poder divino: Ninguno
Trabajo: Estudiante
—¡G-genial! ¡Mis puntos de vida aumentaron un 23%… ¿Hice la cuenta bien? No importa... Mi poder mágico mejoró un poco... Mi fuerza mejoró demasiado… ¿Ustedes también mejoraron?
—Mi estatus mejoró el doble. Superé a Drin.- Dijo Terkiana.
—Terkiana le provocó más daño que yo. Mi estatus no mejoró demasiado, pero sí mejoró.- Dijo Drin.
—Fue buena idea apuntar a los hombros, Terkiana. La debilidad de los cuerpos mágicos son los hombros… Esa batalla que tuvimos con los reyes Orcos fue realmente útil. ¿Verdad, Drin?
—Sí. Las personas se concentran demasiado en proteger su pecho y espalda, que descuidan sus hombros.
Kei se acostó en el suelo y suspiró.
—Si Luna se entera que matamos a Frima, nos odiará… Fravi usará esto para perjudicarme… Lo mantendremos en secreto… Drin, ¿en dónde está Nisei actualmente?
—La última vez que hablé con ella dijo que estaría en este país.
—Entonces está en Turger… ¿Sigue obsesionada con la reina?
—Sí… No importa lo que le diga, no quiere unirse a nosotros. Quiere seguir investigando por su cuenta.
—No podemos obligarla a unirse... Solo espero que esté bien… Bueno, recuperé mis puntos de vida, pero mi cuerpo me duele demasiado. Me desmayaré. Buenas noches.
Kei cerró los ojos y se quedó dormido inmediatamente.
—Buen trabajo hoy, Kei. Lo hiciste bien.- Dijo Terkiana sonriendo.
•
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—¡No quiero!
—¡Por favor, hijo!
Drei estaba corriendo por un parque, mientras que su padre lo estaba persiguiendo.
—¡No quiero participar en un estúpido torneo! ¡No tengo magia!
—¡Hijo, me enteré que eres popular con las chicas! ¡Escuché rumores sobre tu fuerza! ¡Estoy orgulloso de ti! ¡Y quiero presumir a mi hijo! ¡Por favor, participa! ¡Ya tienes 17 años, puedes participar!
—¡No quiero!
—¡Hola, Drei!
Drei escuchó la voz de Cristhela y se detuvo.
Volteó a su izquierda y vio a Cristhela sentada debajo de un árbol.
Tenía un libro en sus manos, lo que significaba que estaba leyendo.
Pero el libro era muy grueso y enorme... Era algo raro de ver.
—¡Hola, Cristhela…!
El padre de Drei lo abrazó por la espalda.
—¡Te atrapé!
—P-padre, realmente no quiero participar.
—El hijo del comandante "Ismei" participará. Escuché que peleaste con él y lo derrotaste. Estoy seguro de que podrás ganar el torneo.
—La escuela prohíbe el uso de magia en peleas. En el torneo podrá usar su magia… No sé si pueda...
—Hijo, no te rindas sin intentarlo. Siempre he creído en ti y en tu fuerza. Estoy seguro de que ganarás.
—… Gracias, padre… ¡Pero no participaré! ¡Tengo una cita con Cristhela ese día!
—¡¿Prefieres salir con una chica?! ¡¿No quieres que tu padre se sienta más orgulloso de ti?!
Cristhela se acercó a Drei.
—Lo siento, Drei. Mi madre me obligó a participar en el torneo. Tendré que cancelar nuestra cita.
—¿Vas a participar?
—Sí.
—¡Entonces también participaré!- Dijo sonriendo.
Su padre le acarició la cabeza.
—¡Perfecto! ¡Iré a entregar los documentos para registrarte!
El padre de Drei se alejó corriendo rápidamente.
—Mi padre siempre tiene demasiada energía… ¿Qué estabas leyendo? Ese libro es enorme.
—Lo compré hoy. Parecía muy interesante.
—Ya veo... ¿Quieres adelantar nuestra cita? El torneo es en dos semanas, tenemos mucho tiempo para entrenar. Tomemos un día libre hoy.
Drei le extendió la mano y Cristhela sonrió.
—¡Claro!
Lo tomó de la mano y comenzaron a caminar juntos.
Un poco lejos de ahí, Saria los estaba observando.
Parecía triste... Estaba llorando… Se arrepintió de amar a Iskei.
Se dio cuenta que Drei era mucho mejor.
Pero ya era demasiado tarde. Drei ya no estaba interesado en ella.
Drei ya tenía a alguien especial en su vida.
—Drei…
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Zei, Lana y Kiasan, estaban reunidos en la habitación de Zei, jugando videojuegos.
Mientras jugaban, hablaban sobre un asunto muy importante, el torneo.
—¿Un torneo? ¿Te obligaron a participar?- Dijo Kiasan.
—Los hijos de los héroes participarán. Supongo que me obligarán a participar… Aunque seré humillado como siempre... ¡No!
—¡Gané!- Dijo Lana.
—Fuiste el último lugar, Zei. Te toca ir por las bebidas.
—Sí, sí, ya voy.
Zei salió de la habitación y bostezó.
—Tengo mucho sueño.
Pasó caminando frente a la habitación de sus padres.
—¡El rey no aceptó nuestra solicitud!
Escuchó la voz de su padre y se detuvo.
—¡Pero Zei es un inútil con la magia, no contribuirá nada al torneo!
Zei escuchó a sus padres hablando en su habitación... Y se quedó parado frente a la puerta, escuchando la conversación.
—Inútil...
—¡Lo sé, pero es necesario! Ese idiota solo quiere presumir la fuerza de su nieta.
—¿Qué haremos?
—Le diremos a Zei que se rinda cuando comience la pelea.
—Sí. Será lo mejor... Pero debemos intentarlo por última vez.
—¿A qué te refieres?
Zei se acarició el brazo.
—No tengo esperanza... Ya lo sabía... No quiero escucharlos.
Zei se alejó caminando y bajó la mirada. Escuchar eso le dolió demasiado… Ya sabía que pensaban eso de él, pero escucharlos era peor.
—Un inútil...
•
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Entró a la cocina y abrió el refrigerador.
—Bebidas… Bebidas…
—Zei, ven con nosotros.
Los padres de Zei entraron a la cocina.
—¿Eh? ¿A dónde?
—Una última oportunidad... Vendrás con nosotros a la Mazmorra "Infierno".
—¡¿Eh?! ¡Esa Mazmorra es muy peligrosa!
—Quiero que nos veas pelear e intentes imitar nuestros movimientos. Esta será tu última oportunidad… Tengo la esperanza de que despiertes tu potencial oculto.
—P-pero… P-padre, yo no quiero ser un guerrero… N-no quiero ser como ustedes. No tengo talento.
—¡No pongas excusas! ¡Vámonos!
—S-sí… Está bien.
•
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Zei y sus padres se pararon frente a una puerta negra... O mejor dicho, frente a un portal negro.
Solo hay un portal negro... No hay una enorme torre ni nada... Solo un portal negro.
La entrada a la Mazmorra Infierno se encuentra en medio de un bosque.
Todos los días, los aventureros entran a la Mazmorra y recolectan objetos mágicos que la misma Mazmorra genera.
Hay un gremio en este lugar. Los aventureros pueden vender los objetos que recolectaron en el gremio.
—¡Oh, son los héroes!
—¡Puedo sentir un gran poder mágico con solo verlos!
Zei observó a los aventureros a su alrededor. Todos parecían muy fuertes y geniales.
—Ser un aventurero parece divertido.
Su padre lo tomó del brazo.
—Entremos.
Entraron por el portal negro. Al cruzar el portal, aparecieron en un sombrío y oscuro bosque.
Ese portal negro sirve como un objeto de teletransportación.
—Es el primer piso. Será fácil.- Dijo el padre de Zei.
—Esta Mazmorra tiene 900 pisos. Nosotros solo hemos llegado al piso 107.- Dijo la madre de Zei.
—Esta Mazmorra es imposible de despejar… Siempre he querido conocer el último piso… Bueno, comencemos.
Comenzaron a caminar.
De repente, esqueletos comenzaron a salir del suelo.
—Los No-Muertos son fáciles de derrotar, hijo.
—Mira.
Los padres de Zei comenzaron a derrotar a los No-Muertos con sus puños. Sus cráneos explotaban fácilmente. Los padres de Zei son demasiado fuertes... Y Zei ni siquiera es capaz de derrotar a un No-Muerto.
Uno de los No-Muertos intentó atacar a Zei.
Zei se alejó asustado y su madre lo salvó.
—¿E-en serio creen que yo puedo hacer eso?
—El olor del amo... ¡El amo está aquí!
Una misteriosa voz de mujer se escuchó.
Una chica salió del suelo... Esa chica era linda. No parecía un monstruo.
Tenía el cabello negro y corto, ojos rojos, y tenía cola y orejas de gato.
—¡El amo está aquí!
Una chica Cíclope salió del suelo.
Tenía el cabello rojo y largo, y enormes pechos.
—¡El amo!
Una chica muy adorable salió del suelo.
Tenía cola de ardilla, y tenía el cabello corto y blanco.
—¡¡Por fin regresó!!
Una chica monstruo salió del suelo.
De la cintura para abajo tenía el cuerpo de un caballo. Una típica y cliché chica monstruo. Y como es una chica monstruo cliché, también tenía enormes pechos.
—¡Regresó! ¡Por fin regresó!
Zei estaba demasiado confundido. ¿Quiénes son ellas realmente?
—¿Q-qué está pasando?!
—¡Tienen magia demoníaca! ¡Cariño, vamos!
—¡Sí!
Los padres de Zei intentaron atacarlas.
—Nadie arruinará nuestro emotivo encuentro.
La chica con cola de ardilla se dirigió a ellos.
Los padres de Zei intentaron golpearla.
La chica ardilla recibió sin problemas el ataque. Estaba ilesa. Ese ataque no le hizo nada.
—¿Es todo? Decepcionante.
—¡¿Q-qué?!
La chica ardilla los golpeó a ambos en la cara.
Salieron volando e impactaron contra un árbol.
—¡¡Madre, padre!!
La chica ardilla tomó a Zei de los brazos.
—¡Por fin regresaste con nosotras, amo!
—¡¿Q-qué?! ¡Déjame! ¡¡Madre, padre, necesito ayuda...! ¿Q-qué?
Los padres de Zei intentaban escapar sin él.
—¿Madre? ¿Padre?
—¡Lo sentimos, Zei! ¡Son demasiado poderosas!
—¡Superan al rey demonio! ¡No podemos hacer nada!
—¡Regresaremos con ayuda!
—¿M-me están usando como sacrificio para que ustedes puedan escapar? ¿M-me están abandonando?
—¡Lo sentimos!
Sus padres escaparon de la Mazmorra.
—Cobardes. Abandonaron a su propio hijo.
—Qué asco.
—No estaban llorando... S-sabían que su hijo moriría, pero no les importó… No les importo... Nunca quisieron tener a un hijo inútil como yo... Un inútil…
Las lágrimas de Zei caen al suelo.
—Un inútil… Me abandonaron... No lo pensaron demasiado… Decidieron escapar inmediatamente… No pensaron en una manera de salvarme... Siempre los odié, pero pensaba que me querían un poco al menos… Malditos... ¡¡Malditos!!
—Ya, ya, no llores.
La chica ardilla le acarició la cabeza.
—Todo estará bien ahora, amo.
—¡Aléjate de mí!
Zei se alejó corriendo e intentó escapar.
—¡No moriré de esta manera!
Una barrera de tierra apareció frente a él.
—¿Q-qué?
—No escaparás de nuevo, amo.
Las chicas se acercaron a él.
—Sé que estás confundido. Te explicaremos todo.
—¡No se acerquen a mí!
—No te haremos nada.
—¡¡Les dije que se alejen de mí!! ¡¡Quiero estar lejos de ustedes!!
El suelo debajo de Zei se abrió y comenzó a caer.
—¡¿Eh?!
El agujero se cerró rápidamente.
—... Esa frase… El amo la usaba para viajar al último piso.
—No, él decía: "Quiero ir al último piso".
—Él dijo: "Quiero estar lejos de ustedes"… Y la Mazmorra obedece las órdenes de nuestro amo... Creo que lo encontraremos en el último piso.
—¿Cuánto tardaremos en llegar al último piso?
—Nosotras solo podemos controlar los primeros 100 pisos de la Mazmorra… Llegaremos en un año.
—Oh… Mierda.
—¿Estará bien?
—Estás hablando de nuestro amo. Claro que estará bien.
—Pero reencarnó. No recuerda su vida pasada... Ahora es un chico humano... Un chico débil.
—Oh… Esto es malo.
—¡No perdamos tiempo! ¡Debemos salvarlo!
—¡¡Sí!!
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