¿Su defecto? ¿En serio nos dirá algo tan importante cuando apenas nos conocemos? ¿Qué tan perjudicial tiene que ser para que nos afecte a todos? Quizás tenga que ver con el hecho de olvidarlo. Eso explicaría por qué nunca lo recordé estando en la academia, o aquí, después de la pelea que tuvimos, nos habíamos olvidado de él.
Miré a Isac, tratando de pensar en todo lo que sabía de él, dándome cuenta de lo poco que conocía al muchacho frente a mí. Luego de esto, lo miré nuevamente para que continuara.
"Mi defecto hace que las personas o cualquier ser con conciencia olviden que existo. Esto solo dura hasta que me muestro a ellos o ellos me ven de nuevo; cuando lo hacen, se dan cuenta de que se habían olvidado y recuerdan todo." Su voz con un poco de tristeza, quizás por el hecho de que nadie recuerde su existencia si él mismo no se los recuerda. Qué defecto tan desalentador para un niño de su edad.
La revelación del verdadero problema de su defecto ya la esperaba, pero aun así es un defecto muy problemático. No por el mero hecho de olvidarnos de él, sino por las posibles situaciones en donde podría ocurrir este fenómeno del olvido. Por ejemplo, ¿qué pasaría si nos afecta su defecto en medio del combate? Él bien podría ser atacado por nosotros, sin darnos cuenta de que era nuestro compañero, al menos no hasta que sea muy tarde.
Miré a Sasha y también a Ludwin. Ambos tenían expresiones de confusión, cautela y sospecha, pero también algo que parecía ser preocupación. Quizás ellos también se dieron cuenta de las implicaciones de tal defecto en una pelea.
Entonces, mientras miraba las caras de ambos, apenas unos segundos luego de su revelación, Ludwin habló. Su voz con desdén y algo de burla hacia Isac.
"Enano, ¿acabas de revelar tu mayor secreto porque piensas que te atacaremos en medio de una batalla? Discúlpame por decirlo así, pero nadie aquí es tan idiota como para no reconocer a una persona y atacarla así porque sí." Lo dijo mirando a Isac, sus ojos mostraban algo de molestia por ser despreciado de tal manera, tal vez por pensar que atacaría a quien sea que aparezca de la nada, como hace Isac con sus habilidades.
"Así es, y no me llames enano. Soy muy alto para ser de los barrios bajos." Isac le respondió mientras miraba irritado a Ludwin. El tema de su altura parecía afectarlo más de lo que debería.
Miré a los tres, quienes estaban tensos ante la posibilidad de atacarse unos a otros por el hecho de olvidarse de uno de ellos. "No se preocupen, creo que todos aquí tienen suficiente habilidad para no atacar a Isac aún después de olvidarlo y que se aparezca sin advertencia." Dije, tratando de calmar a mis compañeros y mi amiga que estaba preocupada por nuestra supervivencia.
"No estés tan seguro de eso, Jony. Puede que con su habilidad que lo oculta en medio de la batalla, aparezca de la nada y lo podamos confundir con un enemigo," dijo Sasha, mirando en mi dirección. Su voz sonaba preocupada, al igual que su expresión con el mismo sentimiento.
Miré a Isac, tratando de encontrar una solución en el corto plazo que tenemos. Pero nada se me venía a la mente en este lugar, al menos nada que pueda ayudar con su defecto.
"Ah, es problemático, sí, pero es tu defecto; no hay mucho que podamos hacer. ¿Al menos sabes cada cuánto tiempo ocurre eso o es al azar?". Si fuera con un tiempo exacto podríamos prepararnos, pero si fuera al azar, me temo que sería algo sin más problemático.
Miré a Isac, quien parecía estar concentrado en sus pensamientos. Esperé unos segundos antes de que él respondiera.
"Más o menos, puedo intuir cuándo ocurrirá, pero no estoy seguro. Las veces que ocurrió fueron pocas, pero sentí algo, no sé qué, pero creo que podría saber cuándo ocurre."
Lo miré unos segundos, pensando en una solución rápida para su defecto en este infierno en donde estamos.
"Bueno, cuando sientas eso o creas que podríamos olvidarte y estemos en medio de una batalla, quiero que te alejes o te abstengas de aparecer de la nada. Al menos no mientras no sea urgente." Dije, con la voz un poco más firme de lo habitual, mostrando cuán serio era este problema y cuánta importancia le dábamos.
"Tienes razón, pero al menos quería decirles sobre esto, porque puede causar malentendidos." Dijo Isac, con una sonrisa pequeña en su rostro aún más pequeño, una expresión de impotencia ante su defecto tan devastador. Nadie sabía lo que estaba ocultando en su cabeza.
Ludwin habló de repente.
"¿Malentendidos como cuál?" Su voz sonaba con un toque de cautela y sospecha, quizás ante la idea de ser traicionado por alguien que conocía pero que repentinamente olvidó.
"Ninguno en específico, solo decía."
Isac agachó los hombros mientras decía eso con un poco de indiferencia y algo de sarcasmo, mirando a Ludwin como si se burlara de sus pensamientos. Como si hace un momento no hubiese tenido una expresión totalmente diferente, como si la quisiera ocultar.
Miré al cielo, tratando de calcular cuánto tiempo más nos queda de luz. No era mucho. Decidiendo que era suficiente del tema, decidí hablar para cambiarlo.
"Está por caer la noche, quiero que alguno haga guardia con mi carroñero. Quizás sea fuerte, pero sé que no confían aún como para dormir bajo su cuidado." Mi voz sonaba calmada, tratando de hacer las paces entre los dos, para que ambos descansen antes del largo viaje que tendremos.
***
En mi décimo día en el laberinto de coral, estábamos corriendo por el laberinto hacia otro lugar elevado para seguir el camino hacia el oeste.
Logré sentir a un grupo grande de carroñeros al límite de mi sentido de almas, que en la actualidad era de 190 metros.
Tendré que guiarlos para evitarlos, son 12 carroñeros, será una pelea difícil si los encontramos.
"Cuidado, daremos unas vueltas más."
Les avisé. Me miraron confundidos, pero no dijeron nada, Sasha solo me siguió.
Después de pasar a esos carroñeros, aún podía sentir varios grupos más en los alrededores, pero como no los encontraríamos, tomé nota de sus ubicaciones y seguí adelante.
No tomó mucho tiempo hasta encontrar un grupo de seis carroñeros, el cual enfrentamos y matamos, me llevé a dos más.
Aún con todo y lo relativamente fácil de las peleas, Sasha aún pedía descansar unos segundos o un minuto entero antes de continuar.
¿Quizás sea su defecto? No preguntaré.
...
Ya habían pasado unas horas de haber entrado al laberinto y dejar el coral alto atrás, aún no habíamos encontrado otro lugar alto en el cual quedarnos, lo cual me preocupó un poco, ya que faltaban solo unas pocas horas para la noche.
Habíamos matado ya a varios grupos de carroñeros más, de los cuales me llevé otras cinco muertes. Y también, en los cuales descansamos un poco por petición de Sasha.
Ahora podía sentir a las almas en un radio de 253 metros de mí.
Antes de seguir preocupándome, sentí dos almas, o más bien, dos núcleos de alma. Era un monstruo despertado, y lo sentí muy por encima de nosotros, al límite de mis sentidos.
"Creo que sé dónde se encuentra un lugar elevado, pero tiene a un monstruo despierto en su cima, prepárense para una pelea dura."
Los tres me miraron confundidos mientras me seguían y noté un atisbo de vacilación en sus caras.
Aun así, seguí el camino hacia la zona alta donde residía ese monstruo.
...
No pasó mucho hasta que la vimos, era una roca muy ancha y elevada, como suponía por la altura del monstruo, la roca se alzaba al menos hasta los 200 metros de alto.
"Bien, recuerden que apenas subamos, ese monstruo nos atacará. Prepárense."
Todos asintieron y empezamos a escalar, fue difícil ya que era muy elevado, pero llegamos a la cima en unos minutos.
Mientras subía, controlaba que el monstruo no se diera cuenta de nosotros. Él permaneció en su lugar, cerca del centro de la roca.
Cuando estuvimos a un metro de subir, sentí un movimiento del alma. Se estaba acercando a nuestra posición.
"Apresuren la subida, esa cosa ya sabe que estamos aquí."
Grité para que me escucharan, y de inmediato aceleraron su ascenso.
Llegamos unos momentos antes de que el centurión llegara a nuestra posición.
"Sasha, Ludwin, al frente, detengan al centurión todo lo que puedan. Isac, ocúltate, espera el momento adecuado y trata de hacerle un gran daño o matarlo si puedes."
Todos se pusieron en marcha en un segundo y yo convoqué al carroñero.
***
{POV de Isac}
Me volví invisible y vi cómo Jony creaba una espada con su armadura y se la daba a Sasha. Ella la tomó y corrió para detener al centurión.
Claro, continúo con la corrección del capítulo:
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Ludwin y Sasha se adelantaron y chocaron contra el centurión, deteniendo su embestida. No fue tan fácil, ambos retrocedieron por la fuerza, pero lograron pararlo.
Jony convocó de la nada a su carroñero y avanzó unos momentos después, dos dagas en sus manos y su carroñero a su lado.
Por mi parte, convoqué mi espada [Gracia de la Noche Oscura] y corrí detrás de ellos tres, esperando por una oportunidad de ayudar.
Vi cómo Sasha era empujada a un lado y Ludwin casi perdía la cabeza por una de las guadañas del centurión.
Jonathan esquivó los ataques del centurión con agilidad y cortó una parte de sus patas, pero apenas fue una herida superficial.
Maldiciendo, corrió a un lado para evitar las patas del monstruo y su guadaña que caía del cielo.
Sasha apareció para bloquear el ataque antes de que golpeara a Jony. Su escudo sonó y una grieta apareció en su superficie.
Sasha cedió ante el poder del centurión y cayó de rodillas, aún aguantando el golpe.
Ludwin apareció para cortar una zona abierta de su caparazón, haciendo que el monstruo dejara de atacar a Sasha y se concentrara en él.
Jonathan ya estaba moviéndose mientras su carroñero contenía la otra guadaña y era herido por esta en todos lados de su gran cuerpo.
Sasha se recompuso y corrió para bloquear la guadaña que se acercaba a Ludwin.
Jony ya estaba cerca del tórax del centurión cuando golpeó fuerte en su pecho, haciéndole una gran herida al centurión.
Vi la oportunidad, corrí detrás del monstruo y llegué a su punto abierto.
Di un salto fuerte y llegué a su espalda.
El monstruo notó mi presencia cuando toqué su caparazón y trató de llevar su guadaña a su espalda para cortarme.
En ese momento, apareció Sasha y agarró su brazo, deteniendo su guadaña.
Ludwin salió disparado y retuvo la guadaña con Sasha, evitando que esta pudiera moverse.
Jony cortó una pata delantera, haciendo que el centurión no tuviera suficiente equilibrio.
Ese fue mi momento. Levanté por encima de mi cabeza la espada trascendente que portaba y la hundí en la espalda del monstruo.
Atravesó fácilmente su armadura y cortó su torso en dos.
[Has matado a un monstruo despertado, centurión de caparazón]
[Tu alma se hace más ilusoria]
Esperé unos segundos y el hechizo no parecía querer darme una nueva memoria. Decepcionante.
Miré a mis compañeros y todos parecían agotados. Quizás la pelea no duró mucho, pero la carga mental por la tensión y el esfuerzo explosivo pasaron factura a sus mentes y cuerpos.
Nos reunimos todos y se recostaron en el centro de la plataforma de roca.
"Yo vigilaré, pueden descansar."
Apareció de nuevo el carroñero de Jony y ambos vigilamos mientras los otros tres dormían. Después de un tiempo, también me recosté junto a ellos y me dormí.