Capitulo 5: El primer Kamehameha

"¡AAAHHH!" el niño gritó lanzando un rayo de energía amarillo que dejó completamente sorprendido a Goku, esto sí fue inesperado.

Aquel ataque de Ki dio en el cuerpo del Goku original pero se cubrió cruzando sus brazos. Y entonces, una capa de humo cubrió la zona.

Gohan vio aquello con gran satisfacción en su rostro. Acababa de lanzar su primer ataque, un prototipo del Masenkō. Pero lanzarlo le agotó.

'Debo aprender a regular mi consumo de Ki, de lo contrario me cansaré con facilidad y eso sería malo en una batalla' indagó Gohan jadeando.

El humo que cubría el lugar se desvaneció y la figura de Goku no tardó en mostrarse. El mayor todavía seguía perplejo por lo que había visto.

"Gohan... ¿cómo hiciste eso? ¡Fue increíble!" exclamó Goku contento pero con la curiosidad por saber cómo su hijo había podido hacerlo.

El menor se rascó la nuca, se dejó llevar por la emoción y lanzó el ataque. Pero de igual manera no había nada malo en que su padre lo supiera.

"Sentí una energía extraña en mi interior y traté de concentrarla en mis manos" respondió Gohan tergiversando la verdad, "Y pues salió eso jeje"

Tampoco había mentido tanto, lo que hizo fue eso realmente. Concentrar cierta cantidad de Ki en sus manos y lanzarlo en forma de disparo.

Goku escuchó muy asombrado aquello, aunque realizó su primera técnica de Ki siendo un niño le llevó un tiempo saber lo que era dicha energía.

'Es increíble... Gohan está haciendo progresos enormes en poco tiempo' discurrió Goku atónito pero a la vez feliz por la capacidad de su hijo.

"Pensaba en llevarte al palacio de Kami-sama para que aprendieras a usar esa energía, pero no será necesario de momento" profirió el mayor.

Gohan se asombró por eso, entrenar con Kami supondría avances notables en su poder. Quería saber por qué razón su padre cambió de idea.

"Tu talento es increíble y estoy seguro de que no tardarías en dominar el Ki, pero por ahora lo mejor sería priorizar tu entrenamiento en artes marciales. El poder bruto no lo es todo" habló.

Gohan asintió, y realmente era lo que pensaba también. Su dominio del Ki era bueno pero debía mejorar en combate, ahí si estaba de acuerdo.

"¿Te parece bien?" le preguntó Goku a su hijo, "No peleas mal pero te falta tener un estilo de pelea, por eso quería entrenar eso contigo..."

"¡Me parece genial papá! Yo también creo que debo mejorar como peleador y contigo eso será posible" contestó el pequeño con una sonrisa.

"Está bien, pero en algún punto te llevaré al palacio de Kami. Con él, te harás mucho más fuerte" declaró Goku y el Son menor asintió.

Después de todo sabía que el palacio de Kami era el elíseo de cualquier guerrero. Si entrenaba ahí, su nivel de poder se incrementaría mucho.

Pero ahora que su padre ya sabía que él podía utilizar el Ki, le comentaría algo que quería hacer desde hacía mucho tiempo. Sí, aquello era...

"Oye papá... ¡¿me podrías enseñar a hacer el Kamehameha?!" preguntó Gohan emocionado, ese era el sueño de todo fan de la franquicia.

Goku le atisbó durante un tiempo, y sonrió acariciándole el cabello. Le entusiasmaba las ganas que ponía su hijo por aprender todo.

"Está bien Gohan, da dos pasos hacia atrás" le indicó Goku y el niño obedeció con emoción, "Lo primero antes de todo es adoptar esta postura"

Flexionó sus rodillas y condujo sus manos a la altura del costado izquierdo, "Luego colocas una mano sobre la otra dejando espacio entre ellas"

Gohan asintió anotando todo en su mente. Aunque claro, se sabía todo el proceso pero verlo así en persona era más emocionante.

"Y ahora tienes que concentrar tu energía en el espacio entre las dos manos, pero intenta darle una forma esférica..." manifestó el Son mayor.

Una esfera azulada de Ki se creó en las manos de Goku y los ojos de Gohan brillaron con ilusión, estaba tan eufórico como en pocas ocasiones.

'Quizá la forma esférica permita concentrar una mayor cantidad de energía, eso explicaría porqué los ataques más poderosos son esferas' pensó Gohan.

"Y una vez que consigues condensar la energía suficiente, lanzas el ataque... ¡AAHH!" gritó Goku disparando su técnica hacia una roca cercana.

¡BOOOOM!

La roca quedó devastada en segundos y Goku sacudió el polvo de sus manos. Se giró hacia su hijo y notó que estaba absolutamente perplejo.

"¿Qué te pareció Gohan?" le preguntó Goku con una sonrisa, pero incluso él debería ser capaz de saber la respuesta a juzgar por la cara del niño.

"¡Estuvo increíble papá! Deja que yo también la intente a ver si me sale" contestó Gohan con una sonrisa, realmente no sería difícil de ejecutar.

Goku asintió felizmente y se alejó unos pasos para dejar que su hijo hiciera conforme deseaba. Estaba ansioso por ver cómo le iría a Gohan...

'Bien, siempre soñé con hacer esto. Seguiré los pasos que me indicó papá' Gohan cerró sus ojos para recordar con claridad las explicaciones.

Y después de eso, el pequeño se colocó en la posición idónea para realizar el ataque insignia de la escuela de la tortuga del maestro Roshi.

"Kame..." en las manos de Gohan se empezó a formar una esfera de Ki, "Hamee..." la esfera fue haciéndose más grande hasta que, "¡HAAAA!"

Gohan disparó su ataque hacia otra roca cercana y quedó destruida en cuestión de segundos por el poderoso ataque de Ki.

Goku vio esto perplejo y girándose hacia su hijo se percató de que el cuerpo de este hacía ademán de caerse al suelo inevitablemente.

'Mi primer Kamehameha, genial' indagó Gohan desplomándose en el suelo con una sonrisa, por fin pudo realizar su técnica favorita del manga.

"Lo hiciste muy bien Gohan, pero ahora debes descansar un rato" aconsejó Goku sentándose a su lado y el pequeño asintió con una sonrisa.

'Tengo que regular mi consumo de energía... el Masenkō de antes me agotó y el ataque de ahora bastante más, pero voy bien' meditó contento.

Ya tenía dos técnicas en su arsenal, y un estilo de combate todavía por pulir. Sentía que estaba explotando al máximo su enorme potencial

Sólo quedaban menos de seis meses para que comenzaran los sucesos del manga. Pero sentía que con su poder actual nada podría salir mal.

O eso creía.

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De nuevo seis meses pasaron y llegó el cuarto cumpleaños de Gohan, pero en este momento el pequeño Son estaba entrenando con su padre.

Tal y como lo habían acordado, emplearon este tiempo al combate cuerpo a cuerpo para perfeccionar el estilo de pelea del pequeño.

El menor continuó realizando sus rutinas de entrenamiento: correr alrededor de la montaña, nadar por lagos y demás, aparte de combatir.

De vez en cuando practicaban ataques de Ki, pero prevalecían las peleas. Como la que estaban teniendo justo en este momento.

¡PAM!

Chocaron sus puños al igual que sus piernas pero ninguno consiguió derribar al otro. Gohan retrocedió con una gran sonrisa en su rostro.

'A lo largo de este año he avanzado mucho en todos los sentidos, se lo debo a papá' pensó el niño mientras retomaba su postura de pelea.

'Tengo dos técnicas, el arte de la escuela de la tortuga y mis conocimientos acerca de la serie, es perfecto' indagó el niño apretando sus nudillos.

Pero sin embargo, Goku no salió a atacar. Se quedó a unos metros de él y poniéndose en esa famosa posición preparó un ataque contra él.

"¡No eres el único que sabe hacer eso papá!" exclamó Gohan imitándole y reuniendo buena cantidad de energía en su ataque, "¡HAAAA!"

El menor se anticipó al movimiento de Goku y lanzó primero su ataque. El azabache no se quedó atrás y atacó con su Kamehameha.

¡BOOM!

Esos dos ataques se colisionaron entre ellos produciendo una pequeña onda que sacudió los arboles de alrededor aunque no llegó a más.

Las dos energías se anularon produciendo un estallido que creó una ráfaga de viento. Padre e hijo manifestaron una sonrisa y se acercaron.

"Te has vuelto bastante fuerte Gohan, estoy muy orgulloso de ti" profirió Goku con una sonrisa y le acarició el cabello al pequeño Son, quien sonrió.

"Gracias papá, sin ti no hubiera sido posible" Gohan abrazó a su padre con una sonrisa feliz en su rostro, "¿Seguimos entrenando o qué?

"No, hoy descansaremos" contestó el azabache sonriendo, "Recuerda que aparte de entrenar hay que jugar y hay que descansar... eso te enseñé"

"Claro, esas son las tres bases del estilo de la tortuga..." añadió Gohan asintiendo, "Pues bien, ¡volvamos a casa que tengo mucha hambre!"

"¿Te apetece una carrera para ver quién llega antes a casa?" le propuso Goku a su hijo, quien de inmediato esbozó una sonrisa desafiante.

Los dos corrieron hacia la casa velozmente. No usaron poderes, fue una carrera limpia que terminó ganando Goku con leve diferencia.

"Casi te gano papá jejeje..." declaró el niño apoyándose sobre sus rodillas por la falta de aire, pero en cuestión de segundos volvió.

"Ni lo sueñes" Goku sonrió antes de abrir la puerta de su casa y vio pues que todo estaba apagado. Claro, hasta que de de repente...

"¡SORPRESA!"

Las luces se encendieron y frente a ellos apareció Chi-Chi sosteniendo un pastel con cuatro velas en honor a la edad cumplida.

Gohan abrió sus ojos mirando lo que estaba pasando. Buscó una explicación en los ojos de Goku pero sólo pudo ver felicidad en ellos.

"¡Felicidades hijo! Estoy muy orgullosa de ti" Chi-Chi habló con una sonrisa y el pequeño no pudo aguantar y salió a abrazar a su madre.

No gozó de la oportunidad de celebrar muchos cumpleaños en su vida anterior. Y al escuchar lo que dijo Chi-Chi, recordó a su madre adoptiva.

"Muchas gracias mamá..." respondió Gohan cerrando sus ojos, 'Ella ha evolucionado desde que yo nací y desde que decidí que entrenaría'

En el manga ella se volvió cada más estricta conforme pasaban los años. Pero aquí se veía más serena, todo por decirle que entrenaría.

"¿Qué tal la sesión de hoy?" le preguntó Chi-Chi como hacía habitualmente cuando Gohan volvía a casa, "Tu padre no se excedió contigo, ¿no?"

"Claro que no mamá, fue una sesión serena pero decidimos descansar por el resto del día" contestó el menor sonriendo pacíficamente.

"De acuerdo. Anda hijo, ve y disfruta de tu cumpleaños" Chi-Chi le besó la cabeza y tras revolverle el cabello se fue hacia la cocina.

"Feliz cumpleaños mi pequeño nieto... ¡te he traído varios juguetes y libros para que puedas disfrutar!" exclamó el imponente Ox-Satan.

"¡Gracias por tantos regalos abuelo!" el menor sonrió tomando los regalos de su abuelo. No era un niño mentalmente, pero jugar sí que podía.

"Felicidades jeje... pero ahora que lo pienso te felicité esta mañana" habló Goku rascándose la nuca y todos los presentes se rieron a mares.

Se sentaron en la mesa a comer el delicioso pastel que había preparado Chi-Chi. Pero tanto Goku como Gohan no se llenaron con eso.

Al terminar con la cena, padre e hijo salieron a descansar en el verde pasto bañado por la luz de la luna desde el firmamento y se sentaron ahí.

El silencio duró unos cuantos minutos hasta que Goku se giró hacia su hijo y le dedicó una sonrisa. Gohan le atisbó con suma atención.

"Me gustaría llevarte a Kame House, ahí están mis amigos y estaría bien que los conozcas jeje" expresó el mayor mirando los ojos de su hijo.

"¡Eso es genial! Yo también tengo ganas de conocerlos" habló Gohan ocultando su emoción, aunque por otra parte algo terrible pasaría.

'Mañana es cuando llega Raditz al planeta, estoy preparado para enfrentarle si es necesario' pensó Gohan apretando sus puños con gran fuerza.

Deseaba que todo saliera bien.