Aunque aplastaran a Sirius, que era la fuente de la malicia, ese acto por sí solo infligiría heridas permanentes a las personas que la rodearan. No podrían saber si todo aquel involucrado en la lucha terminaría ileso si lograban matarla.
_Priscilla: ――Interesante.
Ante esta información desesperanzadora, todos se callaron sin proponer contramedidas. En semejante situación, sólo Priscilla torcía su mejilla en una sonrisa burlona alegremente.
_Priscilla: Muy bien. Me encargaré del cuello de esa tonta de Ira. Eres libre de regocijarte.
_Subaru: E― ¡espera espera espera! Aunque no sé por qué estás tan ansiosa, ¡no es algo que puedas tomar tan a la ligera! ¡¿Has escuchado lo que he dicho?!
_Priscilla: Aclaremos que sí lo he escuchado. Y habiendo oído eso, he declarado que iré. Es una oponente desagradable con métodos cobardes, así que es apropiado que la elimine.
Sin siquiera escuchar los intentos de Subaru para contenerla, Priscilla hizo un sonido plegando su abanico y miró a todo el mundo.
Con esa mirada aguda y entusiasta, ella abrumó incluso a los luchadores más fuertes presentes.
_Priscilla: Si has dicho todo acerca de la Autoridad, entonces ese artilugio me recuerda a un verso. Me resulta muy impertinente que los plebeyos que me acompañan me menosprecien. Los plebeyos existen enteramente por mi bien. Si algún gusano insolente me ofrece su mano, inmediatamente lo echo de mi jardín.
_Aldebaran: Pri-princesa-san… ¿No te estás pasando un poco?
_Priscilla: ¿Qué clase de tontería estás diciendo, Al? Conociendo tu cobardía, ¿qué es lo que temes del insolente oponente que exacerba mi ánimo? Con la cantante a mi lado no hay nada que temer.
_Aldebaran: No lo digo como si hubiera algo que teme― ¿Cantante?
Cuando Al trató de detener el comportamiento irracional de su líder, se detuvo al escuchar una palabra inesperada. Mientras asentía generosamente a la sorpresa de su seguidor, Priscilla señaló con su abanico plegado a Liliana, que estaba sentada en una esquina al lado de la mesa redonda.
Convirtiéndose repentinamente en el tema de discusión, Liliana abrió completamente los ojos ante el abanico que apuntaba hacia ella.
_Liliana: ¡¿T-te refieres a mí?! ¡¿Por qué haces eso de nuevo tan repentinamente y sin ninguna consideración?!
_Priscilla: ¿Acaso estás olvidando tus viajes? Por cuánto tiempo tus canciones han sacudido los corazones de la gente. Deberías hacer lo mismo con esto. Es decir, que deberías luchar por las emociones de los plebeyos y tal.
_Liliana: ¿Parece que te puse ansiosa sólo porque levanté un poco la voz? Aunque digas que no me estás sobreestimando demasiado, presionar a una joven débil como yo…
_Priscilla: Oh. Entonces, si esa es tu decisión, ¿permitirás que la canción que heredaste de tus ancestros sea derrotada?
Cuando Priscilla sonrió como mofándose de ella, la cara de Liliana cambió ante esas palabras que sonaron como si la despreciara de todo corazón.
Mostrando una sonrisa forzada, Liliana puso una expresión encantadora a la vez que seria, mientras trataba vagamente de evitarla.
_Liliana: ¿A qué… te refieres?
_Priscilla: Aunque no lo creas, así es. ¿No son tus canciones, heredadas con tanto recelo, cantadas cuando los corazones de las personas que piden ayuda exponen su desagradable cobardía? Ese tipo de lloriqueo que hace un perdedor, ¿no es todo eso un montón de inutilidad incompetente? Incluso el ladrido de un perro sigue siendo mejor que insistir en ser egoísta. Ahí tienes, ¿qué tal lo estás asimilando? Es como alabar a un perdedor.
_Liliana: ¡Aah aah! ¡¿Llegas al extremo de decirlo?! ¡¿No vas a callarte nada?! ¡Vale! ¡Iré! ¡Lo he entendido, ¿vale?! ¡Atrapando a la trovadora Liliana así! ¡Usando tal lenguaje! ¡Esta mujer callada se volverá inútil! ¡Incluso el difunto Kiritaka-san se removería en su tumba con un arrepentimiento como éste!
Debido a la feroz provocación de Priscilla, Liliana se exaltó explotando intensamente hacia ella. Con su cara enrojeciéndose intensamente, rasgó violentamente las cuerdas del instrumento musical colocado sobre su regazo.
_Liliana: ¡Si pensabas que sólo me dedicaría a cantar un réquiem para consolar la pobre alma de Kiritaka-san, que lamentablemente descansa en las aguas de esta ciudad, mejor detente! ¿Es que acaso soy un revoltijo de emociones? ¡Venga! Yo, la persona que ha heredado el canto, y mis canciones, que han embelesado a la gente alrededor del mundo, ¿perderemos ante un poder desconocido como éste? ¡No conocen el poder de las canciones después de todo! ¡Grrr!
Schult y Otto rápidamente se llevaron a la emocionada Liliana que tocaba una canción tendida sobre la mesa redonda. Mirando hacia el rincón de la habitación en el que Liliana estaba siendo sujetada, Subaru dirigió su atención a Priscilla.
_Subaru: Dejando de lado lo fácilmente manipulable que es, pareces segura de su éxito. Aunque tengas razón, meterla en una situación sin probabilidad de éxito…
_Priscilla: No estoy planeando perder ni algo parecido. Todo en este mundo está diseñado para funcionar a mi conveniencia. Además, he llegado hasta este Ayuntamiento gracias a que estuve con esa cantante. Después de haberla llevado conmigo precisamente porque reconocí la utilidad de esa cantante, he decidido de nuevo llevarla conmigo.
_Subaru: ¿Estás diciendo que Liliana puede contrarrestar a Sirius?
_Priscilla: Hubiese sido derrotada si no fuera por esa cantante. Y algo como mi derrota es imposible en este mundo. Por lo tanto, es gracias a esa cantante. ¿Necesito explicar algo más?
Debido a que ninguna de esas pobres explicaciones era razonable, se volvió progresivamente insoportable para Subaru. Sin embargo, fue Schult quien levantó la mano en su lugar, tratando de continuar con las observaciones de Priscilla.
Los adorables ojos del mayordomo temblaban mientras elegía sus palabras con sumo cuidado.
_Schult: Mmm, eh bueno… Creo que es cierto que la canción de Liliana tiene un poder especial, señor. Es verdad que las personas fueron liberadas de la ansiedad y la irritación cuando escucharon la canción de Liliana-sama… Esto es lo que aprendimos al pasar por varios refugios antes de venir aquí, señor.
_Subaru: ¿Dejaron que Liliana cantara en los refugios que estuvieron visitando?
_Priscilla: Creo que lo dije.
€Subaru: ¡No lo dijiste!
Incluso la pobreza de su explicación había sido excesiva.
Mientras estaba preocupado por la actitud de Priscilla, Subaru giró la cabeza hacia Reinhard.
_Subaru: Oye, Reinhard, si miras a alguien, ¿puedes ver el poder que tienen o...? Ah, claro: las Protecciones Divinas. ¿Es posible ver las Protecciones Divinas?
_Reinhard: Me parece que existe una Protección Divina que analiza las Protecciones Divinas de la gente. He oído que el propietario de la Protección Divina del Juicio puede verlas. No está en Lugnica, sino en Vollachia, ¿no? Entiendo, ¿así podríamos comprobar qué tipo de Protección Divina tiene Liliana-sama? Ciertamente, sería fundamental.
Cuando entendió el propósito de la pregunta de Subaru, Reinhard se puso a pensar profundamente. Como sólo intentó preguntar porque no tenía nada que perder, incluso él sabía que le había pedido algo irrazonable a Reinhard. Ante el pensativo joven pelirrojo, Subaru sacudió la cabeza diciendo "No importa".
_Subaru: Con todas las cosas increíbles que he escuchado que puedes hacer, por alguna razón extraña pensaba que podrías hacer algo, pero no es como si fueras tan conveniente después de todo. Está bien. Por ahora, podremos cancelar la autoridad de Ira de alguna manera con la canción de Liliana después de probarla un poco…
_Reinhard: No tienes que preocuparte por eso, Subaru. ――La acabo de recibir.
_Subaru: ¿Qué?
Palmeando el hombro de Subaru, quien intentaba proponer un experimento con la canción de Liliana, Reinhard sonrió.Después de eso, estrechó sus ojos azules y miró a Liliana, quien estaba cantando en un rincón de la habitación.
Y entonces,
_Reinhard: Estoy sorprendido. Liliana posee la Protección Divina de la Telepatía.
_Subaru: A mí me sorprendió la Protección Divina que mencionaste justo ahora. ¿Eh? ¿Qué acabas de decir? ¿Has dicho que la has recibido? ¿Qué recibiste, la bendición de tener un niño?
_Reinhard: Subaru, no es el momento de hacer bromas. He sido capaz de confirmar la Protección Divina de Liliana-sama. La Protección Divina de la Telepatía es, por así decirlo, una Protección Divina que transmite el pensamiento del propietario a otras personas. Es una Protección Divina que transmite principalmente sólo pensamientos triviales a los compañeros con los que el propietario comparte un estrecho vínculo, pero… una canción, ¿eh? Ni siquiera había pensado en algo así.
Mientras Reinhard admiraba sinceramente a Liliana, Subaru se quedó viendo muy boquiabierto el perfil de Reinhard. Sabía desde hace mucho tiempo que, de por sí, el poder de Reinhard era trampa―más allá de lo sobrehumano; pero algo como esto era ser demasiado amado por los dioses. La Protección Divina que necesitaba, esa Protección Divina en la que pensaba, aparecía en su posesión o algo así si lo deseaba.
_Subaru: ¿――――?
Apenas logrando hilar sus pensamientos, Subaru se dio cuenta de lo que había pasado. Él podía adquirir la Protección Divina que se le ocurriese si así lo deseaba. Por lo menos, eso podía entenderse con lo demostrado ahora por Reinhard. Y eso, en sí mismo, era un poder extremadamente envidiable y tranquilizador a la vez.
Como parecía probable que se equivocara en algo, Subaru no terminó su comentario.
Y así, se decidió el grupo que se encargaría de capturar a Ira: Priscilla, Al y Liliana.