La Luz Dorada del Destino

Xiu Wanxue miró la botella de elixir en su palma. Parece un elixir curativo pero ella sabía que este no era el elixir curativo. Reconocía muy bien este elixir. Era de la refinación de esa persona.

—¿Por qué Xiaxia le daría otro veneno otra vez? ¿Cuánto desea Xiaxia que ella muera?

Este elixir curativo es absolutamente otro veneno que fue hecho por esa persona. Oh, ¿esa persona ama a Xiaxia hasta el punto de darle todo sin preguntar para qué utilizará Xiaxia este veneno?

Xiu Wanxue sacudió su cabeza con amargura. No había cura para este veneno. Ni siquiera un inmortal podría salvarla. En otra hora, su corazón, sangre y huesos se congelarán por el veneno. Sus órganos internos se romperán, y su cuerpo entero lentamente se convertirá en vidrio roto, disipándose bajo esta nieve. Ni siquiera un rastro de su aliento quedará aquí.

Sus ojos se cierran lentamente. Si hubiera una vida después de la muerte, preferiría nacer siendo una mendiga, un monstruo o cualquier otra cosa, lo que estaría bien mientras no encontrara a ellos y a Xiu Wanxia.

Que la nieve escuche sus pensamientos, que el cielo la bendiga, y que la tierra tenga misericordia. Por favor, lleve su alma lejos de este lugar.

—Les ruego su misericordia para permitirme dejar este lugar por la eternidad. Estoy dispuesta a sacrificar toda la bondad que he mostrado en esta vida a cambio de mi único deseo en la vida después de la muerte. Por favor, libérenme.

Lágrimas de sangre se deslizaron de sus ojos, y su figura yacía allí, solitaria, devastada y en la desesperación—en esta fría nieve que era demasiado fría para congelar su corazón.

—¡Tos! —La sangre brotó de los pálidos labios de Xiu Wanxue. La sangre brotó tan intensamente que sus ojos se volvieron blancos debido al excesivo dolor.

Su nariz, ojos, oídos y labios estaban llenos de sangre. La sangre envolvía su cabello blanco como la nieve, haciendo que su figura pareciera extremadamente solitaria y lastimosa en este momento.

—Hmm... —Gimió. Sus cejas se tornaron escarchadas, y ya no podía ver nada más.

Descubrió que su vida estaba llegando a su fin, sin importar cuánto tratara de luchar contra la muerte.

La sangre que brotó de su cuerpo cayó sobre la vieja pulsera en su delgada muñeca. El brazalete de jade era demasiado viejo para notarlo, y parecía una joya rota.

Lentamente levantó los ojos para mirar la nieve que caía sobre ella.

Xue. Recordó que su nombre era Xue, que significa nieve. El Maestro fue quien la nombró 'nieve/Xue' porque el color de su cabello era blanco como la nieve.

Ahora, estaba muriendo en la nieve, como si la nieve tuviera piedad de ella.

—¿La nieve la consuela? Gracias. Desafortunadamente, no puede hablar a la nieve.

Se sonrió suavemente mientras su dedo tembloroso tocaba los copos de nieve delicadamente, como si sostuviera a un bebé. ¿Cuándo morirá? Es muy doloroso. Ya han pasado dos horas.

¿Podría su voz alcanzar la nieve? Si es así, ¿podría la nieve cumplir por favor su último deseo? Por favor, no dejen que ellos la encuentren. Por favor, permitan que su cuerpo sea enterrado bajo la nieve. Por favor, que el olor de la nieve borre su último rastro en este mundo.

Xiu Wanxue estaba extremadamente reacia a tener cualquier conexión con todos aquí.

Su figura se congeló lentamente antes de desmenuzarse en pedazos. Ni siquiera un rastro de sangre quedó porque su sangre ya estaba congelada.

[Espacio Extraño]

Ahora Xiu Wanxue estaba flotando en un espacio blanco. No había nada allí excepto la blancura del espacio.

—¿Es esto el cielo o el infierno? ¿No debería ir al inframundo después de morir? ¿Dónde está este lugar? —Estaba confundida.

Frente a ella, un libro dorado con luz dorada en su interior flotaba. Cuando la luz dorada salió del libro dorado e impactó en sus ojos, vio cosas increíbles.

Después de un tiempo considerable, la luz dorada en sus ojos dejó de brillar.

Su sangre se enfrió hasta los huesos cuando vio todo con sus ojos.

Resulta que Xiu Wanxia era la hija de los cielos y estaba rodeada por los cielos, retrasando la suerte y la oportunidad.

En esa luz dorada, pudo ver las aventuras de Xiu Wanxia del mundo mortal al mundo inmortal. A donde ella iba, el mundo la toleraba.

Cuando Xiu Wanxia estaba en peligro, alguien aparecía para salvarla. Aquellos que se oponían a ella perecían; aquellos que la obedecían y estaban de su lado ascendían.

En el pasado, aquellos que estaban celosos de la vida de Xiu Wanxia, que estaba rodeada por el amor y la atención de todos, estaban muertos. Principalmente, las mujeres son las que más sufrieron porque estaban envidiosas de Xiu Wanxia. Los hombres se enamoraban de Xiu Wanxia.

Incluso la hermana mayor más hermosa de la secta sufrió muchas veces bajo el aura de Xiu Wanxia. Xiu Wanxia no era la mujer más hermosa de la secta, pero de alguna manera, incluso cuando esa hermosa hermana mayor caminaba con Xiu Wanxia, los hombres solo prestaban atención a Xiu Wanxia.

Era como si esa hermosa hermana mayor fuera una persona invisible en sus ojos.

Cada vez que iban de misión, Xiu Wanxia sufría menos daños que los demás. Por el contrario, era la persona que recibía más tesoros en comparación con los demás.

Hubo un tiempo en que estaba con Xiu Wanxia. Solo estaban caminando en el bosque cuando Xiu Wanxia fue secuestrada por un cultivador malvado.

Entró en pánico y trató de salvar a Xiu Wanxia. Cuando llegó, la vio a Xiu Wanxia yaciendo suavemente en los brazos de un hombre de aspecto perfecto.

Varias veces, Xiu Wanxia fue bendecida por el peligro y obtuvo más seguidores. Estaba feliz de que Xiu Wanxia estuviera a salvo, y ella incluso se culpó a sí misma por ser tan débil y no poder ayudar a Xiu Wanxia.

Más tarde, lo intentó todo. Trató de aprender alquimia y practicar duro para alcanzar a Xiu Wanxia por una razón: ¡proteger a Xiaxia!

Extrañamente, por mucho que lo intentara, nunca podría estar al mismo nivel que Xiu Wanxia.

Ahora sabía. Resulta que Xiu Wanxia nació dotada con la raíz espiritual suprema. Aquellos que nacieron con la raíz espiritual suprema practican cuatro veces más rápido que las personas normales.

Aprendía todo rápido porque dentro del espacio que Zhang Qingsheng le dio, el tiempo adentro era diferente al de afuera. Un día afuera es una hora adentro, lo que significa que una hora fuera del espacio es igual a 24 horas afuera.

Xiu Wanxia a menudo se cerraba en su cueva y salía ocasionalmente. Entonces, Xiu Wanxia se ha estado quedando en el espacio para practicar y aprender.

Cuando Xiu Wanxia era la hija del destino, ella, Xiu Wanxue, era nadie que existía para ser nadie y terminó muriendo como nadie.

Vió muchas escenas íntimas y ambiguas cuando esos hombres abrazaban cariñosamente a Xiu Wanxia en sus brazos. De un hombre a otro hombre, todos ellos son personas que ella conocía. Esos hombres están destinados a ser las parejas de Xiu Wanxia. Sus vidas existían para Xiu Wanxia.