PERDON

[Porque termino así…]

Sentada sobre mis rodillas en el duro suelo de la inmensa habitación, no pude evitar preguntarme en voz alta.

[… Incluso si preguntas…]

No soy solo yo, Alex, Misha, mis padres, los nobles del territorio que decidieron quedarse y los comerciantes que convocaron.

Todos estamos sentados sobre nuestras rodillas en el duro suelo…

Luego de ser guiados por la… ¿Sirvienta? …

Lo que sea.

Al llegar, lo que asalto nuestra vista fue esta enorme sala dividida en dos grandes secciones.

El lado izquierdo era una habitación de reuniones típica que esperarías encontrar en el hogar de un archiduque.

Elegantes muebles bien ordenados y dispuestos para acomodar sin problemas a los miembros de la nobleza, que presidirán la discusión.

Pero el lado derecho… Solo había dos figuras familiares.

Sentados en el duro piso con enormes rocas sobre sus rodillas, el archiduque dinus illusius y la archiduquesa Frii Illusius, miraban al suelo con caras sombrías.

[Acomódense donde y de la forma que les plazca]

Luego de decir eso, sin mostrar la más mínima señal de respeto. Anabel, camino con elegante calma hasta la cima de la elevación, donde se encontraban dos majestuosos asientos.

En circunstancias normales, tales asientos sobre la elevación en medio de la habitación, estarían reservados para los archiduques.

Pero las personas en cuestión estaban sudando frio frente a tal escenario, como presos esperando su ejecución.

Cuando no podía procesar lo que estaba pasando, mis padres toman mi mano y la de mis hermanos.

Luego nos arrastran con un aura pesada al lado derecho de la habitación…

No solo ellos, pude ver a toda la nobleza hacer lo mismo.

Exceptuando a aquellos que decidieron abandonar la reunión antes, toda la nobleza del territorio se sentó sobre sus rodillas para acompañar a los archiduques, sin decir palabra alguna.

La expresión de los jefes de las casas y sus esposas, es como la de alguien que está a punto de conocer a su creador.

El resto de nosotros, somos una combinación de miedo y duda, al ver a nuestros padres reducidos a tal estado.

En algún momento Misha y Alex, me acompañaron en esta absurda situación y tal vez, siguiendo su ejemplo.

El resto de aquellos sin títulos nobiliarios, también adoptaron la misma posición de arrepentimiento…

Varios minutos ya han pasado y el incómodo silencio se vuelve más pesado cada segundo.

Los únicos de pie son los sirvientes elfos, que nos miran desde lejos con pena, exceptuando a Anabel, ella nos mira como si fuésemos basura en la calle.

No importa cuánto tratemos de preguntar a nuestros padres, no habrá respuestas.

[Mis piernas se están durmiendo…]

[Las mías se durmieron hace mucho]

Fue cuando Alex y Misha, ya no podían aguantar más.

[[[…]]]

El rítmico resonar de un bastón chocando contra el suelo, se escuchó desde el oscuro pasillo a un costado de la habitación.

Cada golpe se escuchaba con mayor claridad, indicando que el dueño se acercaba sin prisa.

El sudor de los archiduques se intensificaba visiblemente con el toque cada vez más cercano, como si de los pasos de su verdugo se tratasen.

Por supuesto, tal reacción se extendió como la pólvora entre los presentes, que rápidamente comenzaron a temblar como niños regañados.

La única excepción al miedo que se extiende uniformemente es Anabel.

Su majestuosa he intimidante atmosfera, se ha desvanecido como si fuese una mentira y sus afilados ojos, que nos despreciaban como basura, muestran un brillo apasionado mientras observa fijamente el oscuro pasillo.

Por primera vez, pude observar su aura con mis ojos y lo que vi fue… Deseo… El más puro, posesivo, enfermizo y retorcido deseo, que jamás allá visto antes.

Un rojo tan intenso que hacía ver a la sangre opaca cuando lo comparabas, se desbordaba como un torrente incontrolable cubriendo toda la habitación.

Entonces se volvió obvio, la persona que se acerca por el oscuro pasillo, es sin duda su maestro, en mente y… En cuerpo…

¿Quién? ¿Qué existencia es capaz de someter esta sirvienta? ¿Quién es capaz de reducir a los archiduques a un manojo de desesperación? ¿La realeza vino mientras ocultaba su identidad? ¿Hoy conoceré al rey de este imperio?

[[Loki…]]

El murmullo de mis amigos, acaba rápidamente con mis expectativas y solo un segundo después, el impacto visual me saco de la realidad.

De la oscuridad más profunda una solitaria fura emergió con inquietante calma.

"Orco" Con miedo a ser cruel, "orco" es la primera palabra que se te viene a la mente cuando lo ves.

Un cuerpo tan regordete que rosa en lo deforme, algo que debería ser imposible para un mago que consume grandes cantidades de energía por solo activar su magia.

Pero cualquier asomo de burla o desagrado, que pueda pasar por la mente de quien lo ve, es rápidamente borrado sin posibilidades de ser liberados a través de algún gesto, palabra o acción.

Su rostro congelado en altiva prepotencia te avisa que nunca estarás a la altura de recibir su consideración y sus ojos desprovistos de alguna empatía o compasión, que parecen contener el vacío de la noche misma, te advierten de las consecuencias por provocarle.

[[[[….]]]]

No se molestan en hablarnos o tan siquiera dirigirnos la mirada.

Como si nadie fuese digno de su atención, camino indiferente hacia Anabel, mientras se apoyaba del bastón que parecía consumir la luz.

Con cada rosar del bastón contra el suelo, un escalofrió se trasmite por mi columna vertebral.

Finalmente, después de lo que pareció una eternidad, Loki llega junto a Anabel y se sienta en el trono que originalmente debería estar reservado para el archiduque.

La atmosfera de Anabel ha cambiado una vez más, ya no es ni una diosa ni una mujer enamorada.

Como si todo lo de antes fuese una mentira, la mujer cuya existencia congelaba mi alma, ahora es solo una sirvienta parada junto a su amo.

El color de su aura ha vuelto a desaparecer de mi vista.

En su rostro no hay emoción y su porte no permite aperturas, la sirvienta que mira con desprecio incluso a los mismos archiduques, ahora sirven con gracia una sola taza de té.

No esta fingiendo ignorarnos, ella honestamente no reconoce nuestra existencia. En sus calmados ojos llenos de una compostura helada, solo su maestro es reflejado.

Si le pide que mate, matara, si le pide que muera, morirá. Una devoción que rosa la locura.

[Alex, Misha ¿Por qué están sentados así?]

Como para salvarme del circulo vicioso en el que se había transformado mi mente, loki finalmente pronuncia una palabra, devolviéndome a la realidad.

Su voz era tranquila y familiar, su expresión era suave y maternal.

Aunque su atmosfera aún era impropia de su edad, al menos no había hostilidad.

La mirada cálida en su regordete rostro dudoso, me obliga a preguntarme, si todo lo anterior era producto de mi imaginación desbocada.

[Bueno…]

[Incluso si preguntas… ¿Solo seguíamos la corriente?]

[¿La corriente?]

[Sí, bueno… También, Anabel daba un poco de miedo y tu hace un segundo… Igual…]

Loki les habla a mis amigos de manera familiar y ellos le responden algo rígidos.

[¿Grosera?]

[No es mi culpa ¿Qué pasa con esta reunión?]

[Quejas, quejas con la tablita]

[YA VERAS, GYAAAAAAAAAAAA]

Misha que pierde rápidamente toda prudencia, por el niño que le habla tan familiar como si fuese su propia hermana.

Ahora está en el suelo llorando de agonía, mientras soba sus piernas.

Mencionó que se le habían dormido antes…

[Pfffffffffffffff]

Contrario al enojo que podrías esperar de Loki, por la falta de respeto, solo una burla casual es devuelta a mi querida amiga de la infancia.

[Ya veraaaasssss]

[Misha, cálmate]

[Me niegoooo]

Misha comienza a arrastrarse para alcanzar a loki, mientras Alex trata de detenerla.

Yo no puedo procesar los eventos y solo los miro.

[Por ahora, todos los que no tiene títulos nobiliarios, así como los hijos menores de 16 años, por favor, tomen asiento del otro lado de la habitación]

[¿Para qué sufro este dolor entonces?]

[Incluso si me lo preguntas ¿Quién te dijo que te sentaras allí?]

[kuu…]

Loki siguió molestando a Misha sin reservas, su atmosfera era cálida y tranquila, su actitud era relajada y modesta.

Aun así, nadie se movió de su lugar, pero no por miedo, creo que todos son iguales a mí y simplemente no son capaces de adaptarse a la situación.

[Mi maestro les dijo que tomaran asiento.]

Tal vez, probando el antiguo dicho de "el amor cura, pero el miedo mueve".

Todo ser vivo menor a 16 años o sin título nobiliario, camino o se arrastró hasta los asientos, tan rápido como sus manos y piernas entumecidas, se los permitió.

Con una sola oración, quedo tan claro como el día, cuál era la escama inversa de la aterradora mujer.

[Lo siento si Anabel es un poco apasionada… Pero les aseguro que nada malo les pasara, no es ese tipo de reunión donde saldrán personas ejecutadas.

De hecho, espero que todos puedan apoyarme a partir de hoy]

Loki calma nuestras inquietudes y solicita nuestra ayuda.

No puedo explicarlo, pero sus palabras quitaron un enorme peso de mis hombros, incluso en esta caótica situación, aun así…

[¿De verdad?]

Mientras me hundía en mis pensamientos, fue Misha, la que hablo con Loki, nuevamente.

[Por supuesto tablita]

[¿De verdad? ¿De verdad?]

[De veritas…]

[¿El que conocimos antes es el verdadero tú?]

[… No sé a qué te refieres con el verdadero tú… pero… ¿Sí?]

[El que intento recogerme]

[AH, ese, sí, soy yo]

[Veo]

Misha interrogar a loki, y a medida que obtiene las respuestas buscadas, el aura a su alrededor se oscurece, conozco esa aura, ella…

[Entonces… A QUIEN LLAMAS TABLITAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA]

[KUAAAAAAAAAA]

A una velocidad vertiginosa, misha se abalanza hacia loki y conecta su gacho derecho contra su regordete estómago.

[MISHA]

Alex corre para retenerla mientras loki retuerce su cuerpo de dolor, Anabel no mueve un músculo y solo mira con desdén al trío.

[Las tablitas agresivas no son populares…]

[¿QUÉ DIJISTE?]

[Por favor, no lo empeores…]

Mientras los inexplicables eventos se desarrollaban frente a nosotros, de alguna manera, la atmosfera de todos se vuelve suave.

Yo misma, al ver la interacción de esos tres, me siento estúpida por estar tan preocupada.

La tensión de la habitación se desvanece para aquellos que estamos sentados, algunos no pueden evitar reír de la parodia frente a ellos, todos menos… El padre de misha…

Una vez vi a ese hombre, traer el cadáver de un oso que había cazado en el bosque cercano, como si fuese un saco de papas.

Ese poderos hombre ahora está sentado completamente recto en su asiento, sus ojos están en blanco, se desmayó sentado… Misha, mataste a tu padre…

[Por cierto, tablita ¿Tu padre parece haber muerto?]

[¿Eh? ¿PADRE? PADREEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE]

Tal vez queriendo escapar o solo por su deseo de molestarla, fue loki el que advirtió a misha.

Y luego de reírse un poco por la escena de Misha agitando a su padre.

[Entonces, aunque es descortés, debo pedirles que esperen un momento para iniciar la reunión, porque debo resolver algo primero]

Loki avanzan la conversación como si nada hubiese pasado.

Con una expresión tranquila se disculpa con nosotros, antes de desviar su atención a aquellos, a los que no se les permitió levantarse del suelo.

[Hay sillas del otro lado ¿Hay alguna razón por la que prefieran ese suelo? ¿Una espina en sus corazones tal vez?]

Con palabras aparentemente simples, pero cargadas de una sofocante presión, la tensión en la habitación se volvió tan densa, que parecía posible cortarla con un cuchillo.

¿Cuántas veces hemos pasado de calmados a aterrados en solo unos minutos?

Aunque la hostilidad no se dirige a nosotros, todavía se siente una presión abrumadora que te eriza la piel.

Solo en ese momento lo entendí, al ver a ese niño regordete mirar con desprecio a los nobles del territorio, mi corazón me mostró la verdad.

No es que la imponente existencia de Anabel sé allá desvanecido, en su lugar, había sido opacada.

Ahora todo estaba claro, frente a la existencia del niño regordete que ingreso a la habitación sin prisa, incluso una diosa es solo una sirvienta.

Ese día aprendí dos cosas.

Que una masacre puede ser llevada a cabo sin derramar una sola gota de sangre.

Y

Que los nobles de este territorio son un montón de idiotas….

Loki… Perdón…