Paso un día desde que Toru visitó a Tsunade en su oficina. De algún modo logro convencerla de ayudar en la operación de Lee, luego de tener un pequeño debate sobre la regeneración de células. El suceso casi termina en una pelea a puñetazos.
Aunque parece que al final, todo termina a favor de Toru.
Ahora que había logrado convencer a Tsunade, sólo faltaba llevar a cabo la operación con éxito para así poder investigar la mansión Hokage.
'Me sorprende que la Hokage haya aceptado tan fácil. Después de hablar durante dos horas sobre las probabilidades de éxito, al final obtuvimos el 68% de probabilidad de éxito. Si a eso le sumamos mi Shigan, las probabilidades se incrementan al 73%. Usando mis ojos, podre ver las líneas de muerte en el cuerpo de Lee, así podré evitar que la operación falle. Si tengo Shigan, Lee no morirá'
Todo ha salido bien hasta este momento. Ahora solo queda convencer a Lee de aceptar la operación. Aunque no sabía muy bien cómo iba a convencerlo, el no es bueno hablando con la gente, de hecho, tuvo suerte de no quedar en el hospital luego de hablar con Tsunade, ya que, anteriormente, durante su pequeño debate sobre células, ella casi termina golpeando a Toru.
'Siempre es difícil hablar con ese tipo de personas. Ahora, debo apresurarme, tengo que encontrar a Rock Lee'
***
El esfuerzo puede vencer al talento natural, eso es lo que el siempre quiso demostrar, pero al final sus esfuerzos resultaron inútiles. Siempre hay alguien que llega a superarlo.
'Toru…'
Lee apretó los puños con fuerza mientras recordaba la prueba final de los exámenes chunin. En esa prueba, Toru demostró ser uno de los ninja mas fuertes de la nueva generación. El es un prodigio, es imposible negarlo.
Taijutsu y ninjutsu, Toru tenía un control perfecto de estas dos habilidades. Era un ninja casi perfecto, un ninja talentoso.
'Nunca podré superarlos… Toru, Naruto… Sasuke…'
Cada uno de esos pensamientos le hacían sentir ganas de llorar. Saber que nunca podrá volver a ser ninja le había roto el corazón. Su voluntad se estaba quebrando, la oscuridad se apoderaba de él. Era miserable…
Pero, entonces, como pequeña brisa que anunciaba que pronto la noche descenderá sobre la tierra, una figura con capa negra apareció frente a el. Sus ojos brillaron en color azul, mostrándole las líneas doradas en toda la existencia. Su bufanda, al igual que su capa, bailaron al ritmo del viento.
Lee levanto la mirada y lo vio.
"¿…Toru…?"
Los ojos de Lee se abrieron lentamente. Tenía la sensación de que ahora mismo se veía patético.
Toru lo miro parado en aquella barra de metal. Estaba un poco más alto, así que tenía que bajar la mirada para poder ver a Rock Lee.
La luz del atardecer poco a poco iluminó toda Konoha. Toru se mantuvo callado, Lee hizo lo mismo.
'Tendiendo que mirarlo hacia arriba… me siento inferior…'
Lee sonrió levemente mientras se secaba las lagrimas que se asomaban por las comisuras de sus ojos.
"Toru, que coincidencia…"
Apoyo la espalda en la banca mientras miraba al techo.
Quería ocultar como se sentía en este momento, pero era difícil teniendo a alguien mirándolo.
"Error, no es una coincidencia"
"¿Uh?"
"Solo vine a hablar un poco. Supe donde encontrarte después de investigar un poco sobre ti"
"Si lo pienso bien… eso suena un poco espeluznante"
Parecía que este chico estaba recuperándose después de escuchar el diagnóstico de Tsunade, pero esto dejaba algunas dudas en Toru.
"Hm… desde tu punto de vista, posiblemente"
Después de estar unos segundos de pie sobre la barra de metal, Toru tomó asiento al lado de Lee.
"Jaja… esto es raro, ¿no lo crees?"
"Supongo, cada quien percibe la realidad a su gusto. Yo, por ejemplo, desde que estoy en el equipo 11, veo el mundo como si todo estuviera pintado con colores brillantes. Con la luz del sol golpeado suavemente la tierra y la brisa de la mañana acariciando las hojas de los árboles"
A Lee le pareció raro escuchar esto. Cuando conoció a Toru, el vio a un niño solitario, aún estando rodeado de personas, esa es el aura que Toru desprendía. No hablaba mucho, y si lo hacía siempre ponía incómodos a todos, las palabras que usaba siempre eran demasiado complejas, como si fuera un escritor de libros.
Pero ahora que podía hablar con él… era diferente de algún modo. Ya no había rastro de ese niño con personalidad sombría.
"¿Y tu? ¿Cómo percibes la realidad ahora que no puedes continuar trabajando como un ninja?"
Una pregunta que hizo que Lee bajara la mirada con tristeza. No sabía cómo responder a esta pregunta, pero aun así lo intentó.
"Es como si el mundo fuera blanco y negro… con tonos de grises que me recuerdan lo patético que soy…"
"Hm… esa es una respuesta algo curiosa teniendo en cuenta como solías actuar en el pasado. Alguien que era así de entusiasta en el taijutsu no debería ver el mundo de ese color… Dónde hay problemas, siempre habrá una solución, solo debes buscar bien"
"Buscar… ¿Qué es lo que debo buscar…?"
Esta pregunta casi hizo que Toru sonriera, ya que esto estaba yendo justo como lo planeo anteriormente mientras se dirigía a este lugar.
"Respuestas… es así de fácil. Solo debes buscar una respuesta a todo lo que estás sufriendo…"
Mirando sus brazos, Toru lentamente comenzó a quitarse las vendas. Lee miro esto con atención y, entonces, sus ojos se abrieron incrédulos.
'¿Cicatrices?'
Diferentes cortadas y heridas cicatrizadas estaban en los brazos de Toru. Fácilmente pudo deducir que estás cicatrices fueron causadas por años de entrenamiento y enfrentamientos a muerte con enemigos.
Toru no tenia talento, el consiguió todo esto entrenando.
Desde un principio, Toru era incapaz de usar ninjutsu. Tampoco tenía forma de saber su afinidad con los elementos, pero cuando lo descubrió, entreno tanto, que al final pudo crear su propio Kekkei Genkai. El pudo volverse fuerte entrenado demasiado, y esas cicatrices era la prueba de ello. Toru posee un ninjutsu que le provoca lesiones en los brazos y piernas, pero con el tiempo aprendió a controlarlo, hasta llegar a este momento.
Lee se equivoco al juzgar a Toru, deduciendo que el solo tenía talento.
"Tenías razón, Lee. El esfuerzo es capaz de vencer al talento natural. Tu lo sabes mejor que nadie, y yo te entiendo"
Lee miro a suelo, aún estaba tratando de procesar esta información. Alguien que también se fortaleció con esfuerzo, ese era Toru, alguien que entiende a Lee.
"Bueno, la búsqueda de la respuesta queda en tus manos. Tu decides que hacer, ahora mismo tengo que irme, ya que parece que alguien más quiere hablar contigo"
Mirando al hombre de grandes cejas, Guy, esperando en la entrada del lugar, Toru suspiro y dio un salto, llegando a techo de la casa contigua.
"Nos vemos después" Dijo Toru haciendo un gesto de despedida con la mano.
Por un segundo, Lee pareció sorprendido, pero con esto y la intervención de Guy, Toru podía estar seguro de que este chico aceptara la cirugía.
'Fue mas rápido de lo que pensé. Eso es bueno, supongo. El dilema de los colores fue una buena explicación para que Lee piense sobre lo que está pasando y, si todo sale bien, mañana él debería estar frente a Tsunade pidiendo la cirugía…'
La oportunidad de Toru de descubrir lo que paso esa noche hace cinco años estaba más cerca de lo que pensaba. Ahora mismo, sólo debía esperar pacientemente.
-Días después-
El tiempo avanzo normalmente. La cirugía de Rock Lee fue un completo éxito, ahora mismo, él se encuentra en el hospital de Konoha, recuperándose lentamente. Con el tiempo el podrá volver a trabajar como ninja, así que no había nada de que preocuparse.
Sentado sobre el techo del hospital, Toru estaba pensando seriamente en lo que hará después. Ahora que había logrado ganarse un poco de la confianza de Tsunade, tendría mejores oportunidades para conseguir la información que desea.
'Es un poco raro… Es raro pensar que le abrí la espalda a un niño con un bisturí… Ya lo había hecho en mi vida pasada con otras personas, pero ahora me siento un poco incómodo. ¿Será porque aún tengo el cerebro de un niño?"
Se cruzó de brazos mientras tomaba una bocanada de aire.
'Bueno, ahora Lee podrá continuar trabajando como ninja. También me gane un favor del Hokage. Todo esta yendo como quiero. Sin embargo, es extraño pensar que nadie me ha estado espiando en esos últimos días. Aún así…"
La luz en sus ojos se encendió, la luz de la muerte.
"Pienso encargarme del bastardo queme esta espiando dentro de poco. Ahora mismo, tengo que comenzar con mi plan…"
Levantándose de ese contenedor de agua, Toru miró el paisaje de Konoha y dio un gran salto.
Mientras estaba suspendido en el aire, estiro la mano, como si tratara de alcanzar las nubes.
Cerro los ojos y dejo que la brisa le acariciara el rostro. Entonces, después de un largo segundo, Toru estaba en caída libre.
'Hoy… sabré la verdad…'
El cuerpo de Toru destello con la luz del sol, desapareciendo sin dejar rastro alguno.
***
Cada vez que daba un salto en las tejas de las casas, estas provocaban un peculiar sonido.
'Ya tengo mi arma secreta, solo hace falta encontrar a esa mujer'
Corriendo en la pared, usando el flujo de chakra para poder adherirse a la roca, Toru escalo el monumento a los cuatro Hokage.
Rápidamente apareció frente a la Mansión Hokage. La miró con detenimiento mientras se cruzaba de brazos.
'Esto comienza ahora...'
***
Teniendo que encargarse de todo el aburrido papeleo que llegaba por montones, Tsunade se sintió un poco más tranquila sabiendo que la operación había sido un éxito. Toru es demasiado hábil con las manos, tanto que el mismo llego a realizar la mitad de la cirugía, esto la dejo completamente asombrada. Sin embargo, lo que más dudas le generó, fueron los ojos brillantes de Toru.
Durante la cirugía, cuando Tsunade iba a cortar un lugar específico con el bisturí, Toru le agarro la mano ejerciendo una fuerza que no era norma en un niño de su edad, no importa si es un ninja, esa fuerza no era normal, obviamente ella superaba esa fuerza, pero aún recuerda lo que Toru dijo en ese momento: "Si cortas esos, Lee morirá"
Tsunade entendió que Toru sabía dónde cortar gracias a dojutsu de sus ojos. De algún modo, este le ayudaba a ver los puntos débiles en el cuerpo humano, o eso es lo que ella piensa.
"¿Hm…? ¿Qué haces aquí?"
Como aquel día, Toru llegó sin previo aviso.
"Tengo un regalo para usted, Hokage-sama"
"¿Siempre molestas a la gente cuando esta ocupada?"
"No lo se, solo quería darle esto como un regalo, tómelo como un premio por completar la cirugía de Lee con éxito"
Buscando dentro de su capa, Toru caso una botella con un líquido transparente como el agua. Sin embargo, había algo diferente, Tsunade pudo recoger eso al instante. No era agua, sino sake.
"No me digas que tu-"
"No lo robe, si es que eso es que usted iba a decir. Lo compre con mi propio dinero, fue difícil de conseguir, nadie quiere venderle sake a un niño. Hasta tuve que salir de Konoha para compararlo en otro pueblo"
Tsunade miro la botella con atención. Era transparente, sin embargo, el olor era a alcohol era fuerte, tanto que incluso podía sentir el aroma a sake estando tan lejos.
"Esta bien, dámelo"
Como una persona con problemas con el alcohol, Tsunade sabía que esa botella de sake era especial y sobre todo, muy cara y difícil de conseguir. Pero, Toru no dejaría que está botella se le escapara de las manos tan fácilmente.
"Tengo una condición. Necesito algunos libros que solo puedo encontrar aquí. Si me permite leer uno que otro de esos libros, está botella será toda suya"
"Hmph, haz lo que quieras" Dijo Tsunade, arrebatando la botella de las manos de Toru
'Bien hecho, ahora esto será más fácil'
El plan de Toru, desde un principio, era investigar un poco los posibles lugares donde encontrar información clasificada, es decir, información a la que solo el Hokage tiene exceso.
Esta información podría estar en el lugar menos obvio, por lo que no estaría en la biblioteca ni en la oficina del Hokage.
Ya con esto en mente, Toru dejó a Tsunade disfrutar de su botella de sake mientras salía a explorar un poco la Mansión.
Saliendo del lugar, se encontró con un hombre que tenía el brazo y el ojo derecho vendados. Este hombre lo miró por encima del hombro por unos segundos para después continuar con s camino.
Toru también lo miro por un momento, pero decidió ignorarlo ya que ahora mismo tenía cosas que hacer.
Después de unos minutos, pudo recorrer todos los pasillos a los que pudo tener acceso. Obviamente algunos guardias lo miraron y le hicieron algunas preguntas, Toru logró evadirlas diciendo que ya se iba.
Al final, tres zonas sospechas fueron encontradas. Ahora solo quedaba regresar en la noche, donde la seguridad de la mansión disminuye drásticamente.
-Mas tarde en la noche-
Moviéndose como una sombra entre los árboles, sus pasos no provocaban ningún sonido. Su capa lo ayudaba a ocultarse en la oscuridad y, además, sus ojos lo ayudan a localizar enemigos fácilmente.
Se encontraba detrás de un árbol, observando todo en silencio. Estaba esperando a que los guaridas cambien de turno para así poder infiltrarse en la mansión.
'Aquí termina esto, eh…'
Sus ojos brillaron levemente. Los guardias comenzaron con su cambio de turno y Toru aprovechó esto es para entrar por una de las ventanas más cercanas a los lugares que había analizado con anterioridad.
Sus pies lentamente tocaron el suelo.
'Aquí vamos, esto no debería ser tan complicado. Hokage debería estar durmiendo ahora mismo. Con el sake que le di, debería despertarse mañana al medio día, eso si es que se bebió toda la botella. Me asegure de traer el remplazo de la puerta que voy a romper'
Se movió por el pasillo, mantenido el sigilo de un verdadero ninja.
En el camino se encontró con dos centinelas, pero no fue tan difícil evadirlos, solo tuvo que sostenerse en el techo hasta que esos ninja cambiaran de posición.
'Listo, esta es la primera zona. Espero que esta sea, de lo contrario perderé tiempo'
Mirando la puerta frente a el, sacó la daga que escondía en su ropa y la envolvió en Shakuton. Lentamente corto el cerrojo, ganando el acceso a este lugar.
Viendo el interior, pensó que había tenido suerte, después de todo, había decenas de armarios y estantes llenos de diferentes carpetas y documentos.
'Parece que no me equivoque, ahora viene lo más difícil, encontrar lo que busco'
Toru cerró la puerta teniendo cuidado de causar el menor ruido posible. Después de eso, rápidamente se dirigió a los estantes y comenzó su búsqueda.
***
Parecía que la búsqueda se había vuelto inútil. Ahora mismo, Toru ya había revisado casi la mitad de los documentos, pero no encontró nada con respecto al clan Uchiha o Asahi.
'¿Cuanto tiempo llevo aquí? ¿Dos horas? Si esto continúa así, no encontrare nada, es más, posiblemente me encuentren a mi antes de que yo encuentre algo'
La búsqueda era interminable, el tiempo pasaba y esto no era favorable.
"Espera… eso de allá es…"
Un pequeño cofre sellado estaba entre los estantes y armaros, estaba escondido debido al polvo de tantos años. Casi no podía verse entre la oscuridad, pero viendo el estado del cofre, tenía más o menos cuatro o cinco años, justo el tiempo en el que sucedió la masacre del clan Uchiha y Asahi.
El cofre tenía cerca de diez candados cerrados con diferentes cadenas que envolvía el cofre.
'En mi vida pasada, abrir uno de estos es demasiado fácil'
Recordando viejos trucos con agujas, Toru abrió los candados, dejando ver el contenido del cofre.
'¡Es eso!'
Las fechas en las esquinas de las hojas concordaban con el año de la masacre. Tan solo unos meses después de aquel suceso.
Toru sintió que sus manos temblaban, estaba un poco nervioso, casi parecía irreal que haya podido conseguir esa información con un poco de paciencia y esfuerzo, pero a final todo valió la pena, ahora podrá descubrir lo que paso esa noche.
Afuera del lugar, la brisa de la noche soplaba. La luz de la luna cubrió la tierra en su hermosa luz plateada, los grillos y ciertos insectos nocturnos comenzaron a emitir la sinfonía del la noche. Las luciérnagas se unieron a este espectáculo, acompañado a la oscuridad que se revelada entre los árboles con sus patrones de luces excéntricos.
Mientras tanto, regresando al interior de la mansión…
Sus ojos se abrieron incrédulos y sus manos se apretaron formando puños, arrugando la hojas de papel que sostenía.
'Maldición…'
El contenido de esos documentos… hizo que Toru mirara la suelo sin poder creer lo que había leído.