Capítulo 7: ¡Bienvenidos a la academia ninja!

Ha pasado un año desde la masacre del clan Asahi. Konohagakure aún sufría por la falta de fuerza militar, es por eso que este año la academia ninja aceptó más admisiones de las que solía aceptar anualmente.

Entre los estudiantes que se dirigían a sus salones de clase se encontraba un niño, su cabello era negro como la noche y sus ojos grises, tenía una bufanda roja, un suéter negro, unos pantalones grises y las sandalias azules propias de un ninja.

(¿Será aquí?)

El niño contempló la puerta del salón de clases por unos segundos, no estaba del todo seguro si ese salón es al que fue asignado.

"Oye, ¿Puedes hacerte a un lado? Estas obstruyendo la entrada"

Toru miró a sus espaldas y se encontró con un niño, tenía una expresión de pereza y cansancio. Sus ojos eran de color marrón, su cabello era largo y negro, su cabello estaba atado en forma de cola de caballo.

"Si..."

Con un tono de voz cansado, Toru respondió y se apartó de la puerta.

"Esto es un fastidio, me hubiera quedado en casa" Dijo el niño de ojos marrones.

Mientras la puerta era abierta por el niño, Toru pudo ver a algunos de los estudiantes que estaban dentro, sus ojos se abrieron impresionados al ver a dos personas que conocía.

(Entonces... estamos en la misma clase)

La mirada de Toru se volvió neutral, y sin pensarlo mucho entró al salón de clase. Los ojos de las niñas se dirigieron al niño que acababa de entrar. Toru sintió esas miradas, así que agachó la cabeza y se dirigió al asiento más alejado de todos.

"¿Quién es el?"

"Es muy lindo"

"¿Tendrá novia?"

Mientras Toru miraba al frente con una expresión neutral en la cara, las niñas que estaban en el salón confesaron a murmurar entre ellas.

"Si, es lindo, pero no tanto como Sasuke"

Una niña de cabello dorado irrumpió en la conversación. Sus ojos eran verdes y tenía vendas en algunas partes de su cuerpo.

"¿Sasuke? No lo conozco."

Una de las niñas habló, tenía el cabello castaño y ojos negros, vestía una blusa de color rojo y una falda de color negro con vendas que cubrían sus piernas.

"¿Qué? ¿Cómo es que no lo conoces?"

"Um, bueno... yo"

"¿Cuál es tu nombre?"

La niña de cabello dorado preguntó, a lo que la niña de cabello castaño no tuvo más opción que responder.

"Me llamo Hakuto, Hoki Hakuto"

Hakuto miró a la niña de cabello dorado con un poco de miedo, bueno, cualquiera tendría miedo si alguien se acerca a ti y comienza a hablar de personas que no conoces.

"Mucho gusto, soy Ino, Yamanaka Ino"

Con una sonrisa en la boca, Ino habló. A simple vista parecía ser una niña muy sociable.

"Mucho gusto..."

Hakuto parecía estar un poco nerviosa, sentía una gran presión en las palabras de Ino, algo como 'Si intentas algo con Sasuke, me encargaré yo misma de borrarte del mapa'

(Ayúdenme, no quiero estar cerca de ella) Hakuto dijo mentalmente, de alguna forma desarrolló un extraño miedo hacia Ino.

"¿Quién es él?"

Salvando a la temerosa Hakuto, una de las niñas en el salón de clase habló mientras miraba a un niño de cabello negro, este había acabado de llegar.

"Él es muy genial"

"Creo que me enamoré"

"Es tan guapo"

Todas las niñas comenzaron a adular al niño que había entrado al salón. Su cabello era negro al igual que sus ojos, vestía unos pantalones blancos y una camisa azul con el emblema del clan Uchiha en su espalda.

(Hacen mucho escándalo)

Con las manos en los bolsillos, Sasuke se dirigió a uno de los asientos situados en el centro del salón de clase. Al llegar ahí pudo percatarse de quien estaba sentado en el lugar más alejado de todos.

(Toru también está aquí, no sé si eso es bueno o malo)

Sasuke cerró los ojos por un momento antes de ver al hombre que entraba por la puerta.

"Tranquilos todos, vayan a sus asientos"

El hombre tenía una gran cicatriz horizontal en el rostro el cual cubría parte de su nariz, además de eso portaba el chaleco táctico que los chunin y jounin siempre llevan puesto. También llevaba puesto el protector de frente con el símbolo de Konohagakure.

Después de escuchar las palabras del hombre todos los niños fueron a sus asientos y se mantuvieron en silencio.

"Bien, eh... Oh, sí. Debo presentarme" Dijo el hombre en voz baja antes de volver a hablar.

"Hola, soy Umino Iruka, y seré su sensei hasta el día en que se gradúen. Eso quiere decir que no podrán deshacerse de mí fácilmente"

Al mismo tiempo en que hablaba, Iruka se tomó el tiempo para ver los rostros de todos los niños que se encontraban ahí. Solo pasaron unos segundos hasta que su mirada se detuvo en alguien.

(El niño demonio...)

La mirada de Iruka se quedó fija en un niño de cabello alborotado. Solo verlo le trajo malos recuerdos.

"Sensei, ¿pasa algo?"

Viendo que Iruka se había quedado mirando a la nada por mucho tiempo, uno de los estudiantes presentes decidió traerlo de vuelta a la realidad.

Quien había hablado hace algunos segundos era una niña de cabello castaño corto, sus ojos eran azules como el zafiro.

"Oh, no pasa nada. Es solo que estoy un poco nervioso" Con una risa incómoda, Iruka respondió.

"Bien, ahora que yo me he presentado es el turno de ustedes. ¿Hay alguien que quiera presentarse?"

Al escuchar eso, Toru pudo sentir una ligera presión sobre él, después de todo la presentación es algo que decidirá su lugar en ese salón de clase.

"Yo, yo, yo. Sensei, yo quiero presentarme"

Levantando la mano el niño de cabello alborotado habló, tenía bigotes en la cara y su cabello era rubio.

(Naruto... de seguro su presentación será desastrosa)

Toru miró a Naruto, tenía el presentimiento de que su presentación se volvería incómoda para todos.

"Adelante" Iruka accedió, aunque su mirada era un poco hostil hacia el niño.

Con una sonrisa en la cara Naruto de puso de pie, también puso el pie en la mesa.

"¡Soy Uzumaki Naruto y seré el próximo Hokage!" Apuntando a Iruka con el dedo, Naruto se presentó.

(Lo sabía, todos lo verán como la burla de la clase)

Un suspiro salió de la boca de Toru, aunque esperaba que la presentación de Naruto fuera ridícula, lo que acabó de pasar superó esas expectativas con creces. Después de eso todos mantuvieron silencio, un silencio muy incómodo.

"¿Y cómo vas a hacer eso, perdedor?"

Toru puso su mirada en el niño que acababa de hablar, tenía el cabello marrón, ojos negros y sus mejillas tenían pintadas dos marcas rojas en forma de triángulo.

Después de escuchar lo que el niño con las marcas en las mejillas dijo, aunque Toru se mantuvo en silencio, todos comenzaron a reírse de Naruto.

(Era de esperarse, el payaso de la clase ya fue decidido)

"Tranquilos, niños. Gracias por tu presentación, Naruto. Ahora toma asiento"

Naruto se resignó y volvió a sentarse, ahora él había sido marcado como la burla del salón de clase.

"Bien, ¿hay alguien más que quiera presentarse?"

(Esta debería ser mi oportunidad, si me presento de forma amigable terminaré en una buena posición, y podré hacer amigos... es lo que mi madre siempre quiso)

Toru cerró los ojos y trató de pensar una forma adecuada para presentarse. Y mientras Toru pensaba, Iruka miró a sus estudiantes, uno de ellos estaba levantando la mano. Era Hakuto, sus manos temblaban un poco y su mirada era insegura, pero Iruka no tomó eso en cuenta y asintió con la cabeza dándole un poco de seguridad a Hakuto.

"Yo... Me llamo Hoki Hakuto, es un placer conocerlos a todos"

Hakuto hizo una leve reverencia con la cabeza y volvió a sentarse. Su rostro estaba un poco rojo, ella no acostumbraba a estar rodeada de personas, después de todo solo conocía a una persona de las que estaban presentes.

(Ella podría convertirse fácilmente en una de las más populares, es linda pero demasiado tímida. Aunque no soy quién para criticar a los demás, es mejor concentrarme en mi propia presentación)

"Gracias por tu presentación, Hakuto"

Un suspiro salió de la boca de Iruka, estaba un poco nervioso ya que era su primera vez como profesor.

"Ahora, no tenemos todo el día para las presentaciones, así que escogeremos estudiantes al azar, así podemos avanzar más rápido y comenzar con las clases"

Todos los niños presentes se sintieron agobiados, el primer día de clases era emocionante, pero ellos sabían que recibir clases es aburrido, por lo que acortar el tiempo de las presentaciones no era algo muy agradable.

(Ahora que las presentaciones serán al azar es posible que yo tenga que presentarme pronto)

Toru miró por la ventana mientras pensaba.

(¿Debería hacer una broma? No, podría molestar a todos. Tal vez podría hablar sobre mis pasatiempos)

Mientras estaba metido en sus pensamientos, Iruka se fijó en Toru.

"Tú, el de atrás"

"¿Yo?"

Iruka respondió con una sonrisa y un ligero movimiento de cabeza.

(No hay remedio. Tendré que dar todas mis energías en esta presentación, mi vida escolar depende de ello)

Toru se levantó de su asiento y miró a Iruka, todos, en especial las niñas, mantuvieron silencio para poder escuchar la presentación de Toru.

"Um... este... soy Asahi Toru. Um... mucho gusto. Um... eh... no soy bueno en nada en especial. Eh... um... espero que podamos llevarnos bien..."

Después su presentación, Toru volvió a sentarse, por alguna razón todos comenzaron a aplaudir.

(Ha~ lo arruine)

"Mucho gusto, Toru"

La sonrisa incomoda de Iruka hizo que Toru se sintiera patético, incluso Sasuke soltó una pequeña carcajada al escuchar la presentación de Toru.

"Jeje... bien, sigamos con las presentaciones"

Después de eso las presentaciones continuaron hasta llegar al último estudiante.

En el transcurso de las presentaciones, Naruto fue marcado como el payaso del salón, Sasuke como el chico perfecto y genial, Hakuto como la chica tímida y Toru como el niño raro y callado.

-Hora del almuerzo-

En este momento Toru se encontraba comiendo solo, sobre la rama de un árbol, tenía un libro en la mano y un pan relleno de fruta en la otra mano.

"El cuerpo humano es el mejor conductor de electricidad. Si hubiera terminado mi guante de choques eléctricos, hubiera podido usarlo para el día en que me convierta en ninja"

Dándole una mordida al pan relleno, Toru leyó el libro, en la portada decía: Todo lo que debes saber sobre la electricidad. Y como lo decía en la portada, el libro contenía muchos datos interesantes sobre la electricidad, y jutsus que usan el elemento del rayo.

"La mayoría ya consiguieron amigos, eh"

Quitando la mirada del libro, Toru pudo ver a sus compañeros de clase hablando entre sí. Era triste, pero desafortunadamente el fue ignorado por todos.

Incluso llegó a invitar a una niña a comer, pero esta lo rechazó por completo, el nombre de esa niña era Enko Onikuma, del clan Onikuma. Por alguna razón Toru sintió que podía invitarla a comer, pero ya se saben el resultado.

(El está...)

Los ojos de Toru se quedaron quietos mirando a Naruto, él estaba completamente solo, sentado en un columpio. Miraba a los niños jugar y hablar entre sí con una expresión triste en su rostro.

(Debería ir y hablar con él, pero terminé ignorándolo durante mucho tiempo, sería muy hipócrita ir y hablar con él así de la nada)

Los ojos de Toru se cerraron por un momento.

"Yo también estoy solo, todos me ignoran y me ven como un rarito, pero... ¿Por qué no me importa en lo más mínimo?"

Toru abrió los ojos nuevamente, miró a todos jugar y charlar entre sí, pero eso no le provocó ningún sentimiento de soledad, no se sentía excluido, era como si ya estuviera acostumbrado.

(Incluso yo no logro entenderme a mí mismo)

Terminando de comer aquel pan relleno, Toru cerró el libro y bajo del árbol. Caminando lentamente se dirigió al salón de clase, incluso si estaba rodeado de mucha gente se sentía complemente solo, pero esa soledad, de alguna forma, era placentera.

-Ultima hora de clases-

Iruka tuvo que irse por unos minutos a dar su informe sobre los estudiantes que fueron asignados a su clase, por lo que todos eran libres de hacer lo que quisieran hasta que el sensei regrese.

*Raspar, raspar*

El sonido del lápiz acariciando la hoja de papel hizo que todos vieran a Toru por un segundo, antes de ignorarlo por completo, pero había alguien que no lo ignoraba, es más, ella mantuvo sus ojos en él todo el día.

Ella era Hyuga Hinata, desde aquel fatídico día en que el funeral de dos clanes se llevó a cabo, Toru dejó de hablarle, no, no solo eso, Toru dejó de hablarle a todos.

(Parece que aún sigue dibujando, después de tanto tiempo...)

Hinata miraba a Toru fijamente, miraba los movimientos de sus manos, su cabello, sus ojos. Había pasado tanto tiempo desde que comenzó a mirarlo, cada vez que ella miraba Toru sentia algo extraño en su corazón.

(¿Por qué... eres tan diferente? ¿Por qué haces que me sienta así?)

Mientras miraba a Toru, una leve sonrisa se formó en sus labios y un rubor apareció en sus mejillas. En ese entonces ella no tenía la forma de descifrar lo que sentía, pero tal vez en el futuro...