Capítulo 139: La sangre en mis manos (2)

Hubo una situación similar en el pasado. Itachi hizo la misma pregunta. (Toru, ¿cuántos años tienes ahora?) El hacia esa pregunta, aunque ya sabia la respuesta. Era extraño, por así decirlo. Toru no lo entendía, como no entendía a los demás.

El estaba encerrado en su propia burbuja, donde solo importaba lo que el quería. Era un niño bastante egoísta, ciertamente. Incluso a los ojos de Itachi, era un niño que aún no conocía el mundo como realmente es.

Normalmente, cuando Toru respondía la pregunta diciendo su edad, Itachi sonreía y decía: "Ya veo" con una sonrisa nostálgica, pero esta vez, el solo se quedó en silencio, mirando la lluvia con una cara sin emociones.

"El tiempo… ha pasado bastante lento" Itachi hizo una pausa y cerró los ojos.

Al escuchar esto, Toru se detuvo a pensar un rato. Ciertamente el tiempo ha pasado bastante lento, como una lenta y dolorosa muerte, que posiblemente termine siendo eterna. "Opino lo mismo que tú…" Se cruzo de brazos y se sentó en el techo.

Después de eso, un largo y extrañamente cómodo silencio se apoderó de la escena. Ninguno dijo nada, simplemente se limitaron a escuchar y a sentir la lluvia que caía del cielo, como si alguien allá arriba estuviera llorando.

Allí mismo, pequeños recuerdos fugaces inundaron la mente de Toru. El pasado que una y otra vez se repetía en su mente, en forma de pesadillas, como sombras que lo persiguen todo el tiempo.

¿Cuántos años han pasado desde que recuperó la memoria de su vida pasada?

"Ha~" Toru negó con la cabeza. Itachi se dio cuenta de eso, pero cuando quiso hablar, Toru se adelantó. "Itachi, ve al grano. ¿Qué es lo que quieres?"

La mirada de Toru se veía apagada como siempre. Itachi pudo darse cuenta de eso fácilmente. "Lo que quiero…" Abrió los ojos y pensó detenidamente. Luego de eso, se sentó junto a Toru y sacó un kunai de la manga de su túnica.

El kunai no tenía filo, además, se veía bastante viejo y mal cuidado. Parecía más un viejo juguete que un arma de guerra. En el metal, tenía grabado un nombre.

[Uchiha Sasuke]

Cuando Toru lo vio, recordó el día que conoció a Sasuke. El llevaba esa daga vieja y la usaba para practicar lanzamiento rápido. Toru no sabía como fue que Itachi consiguió eso, pero no podía importarle menos. Pues al final de todo, esto no respondía su pregunta.

"Ustedes entrenaban juntos muy seguido…"

El ambiente se torno un poco pesado para Toru. De repente, algunas plumas negras comenzaron a flotar alrededor de Itachi, siendo esto físicamente imposible en medio de la lluvia de Amegakure. Esto era…

'Genjutsu…' Toru vio el Sharingan de Itachi, estaba activado, pero no percibía intenciones hostiles. Además, los músculos de Itachi se "escuchaban" bastante relajados, por lo que no parecía que atacaría en cualquier momento.

Con esto en mente, Toru solo, por si acaso, sostuvo la daga rota en su mano derecha, pero no activo el Kodō Shigan. El quería saber lo que Itachi estaba planeando hacer.

"¿Solíamos entrenar? Supongo que lo recuerdo, pues en esa época tu aún no habías asesinado a mi familia"

Itachi no respondió. En el fondo, se sintió herido por las palabras de Toru, así como los recuerdos de aquella noche carmesí.

"Bueno… Sasuke era la única persona de mi edad que que sabia taijutsu a un nivel superior. Solo me aproveche de eso para volverme más fuerte"

Desde que Toru era un niño, su inteligencia superaba con creces la de todos los niños de su edad, pero aunque estudiará ninjutsu, nunca logro hacerlo bien, porque en su sangre estaba el defecto del clan Asahi. De hecho, Itachi pensaba que Toru era tan inteligente, que a veces daba miedo, ya que no parecía un niño por su forma de hablar o por la forma en que miraba el mundo. Aun así, el seguía siendo un niño, por lo que, como todo niño, tienen sentimientos que pueden ser fácilmente corrompidos.

Lo único que Toru podía hacer era entrenar taijutsu y por eso aprovecho que Sasuke asistía a la Academia Shinobi.

"Aun así…" Toru se quito el sombrero. "No se por qué hablas sobre eso tan de repente. No tiene sentido"

Nuevamente, Itachi no respondió. Solo se quedó viendo la lluvia con esa luz carmesí en sus ojos. Las plumas flotaban de forma extraña y, al mismo tiempo, en los techos de los edificios, podía verse misteriosos cuervos que miraban a Toru con ojos oscuros y fríos.

Por alguna razón la lluvia desapareció gradualmente, al mismo tiempo que el cielo se tornaba más oscuro.

Toru ya estaba pensando seriamente en esta situación y si debía activar el Kodō Shigan. Pero aún no sentía hostilidad por parte de Itachi. Era como un extraño sentimiento frío y solitario, un sentimiento que Toru conocía demasiado bien.

"Asahi, Toru…" Itachi extendió la mano y un cuervo se posó en su palma. El cuervo miró a Toru mostrando un Sharingan en uno de sus ojos. El Sharingan giro una vez dentro del ojo del cuervo y entonces todo se volvió oscuro. Ya no había nada ni nadie, simplemente oscuridad y… sangre en el suelo.

'Ha~ debí haberlo previsto' Toru miró a su mano para usar el Shimikomaseru en la daga, pero la daga ya no estaba.

Esto hizo que mirase a todos lados buscando a Itachi, pero todo estaba vacío.

El suelo estaba completamente lleno de sangre. Este lugar era bastante familiar para Toru, pues tuvo cierto recuerdo de cientos de cuerpos de sangre intentando arrastrarlo al fondo de este líquido carmesí.

"Hm…" Toru negó con la cabeza y luego miró hacia delante. "Itachi, si detienes esto ahora, no te considerare mi enemigo. Si no lo haces, entonces tendré que responder a tu hostilidad disfrazada de misterio" Apretó los puños y entrecerró los ojos esperando una respuesta, pero no obtuvo nada a cambio. "Entonces así será, eh…"

En ese momento, una X orgánica comenzó a aparecer en el centro de los ojos de Toru, al mismo tiempo que las plumas negras comenzaban a rodearlo, formando un gran tornado, sin embargo…

"¡Toru-chan! ¡Toru-chan! Dios mío, ¿a dónde se fue este niño?"

La voz de una mujer se escuchó. Esa voz hizo que el Shigan de Toru se desactivara al instante mientras sus ojos se abrieron en estado de shock.

Las plumas a su alrededor dejaron de rodearlo y cayeron al suelo, donde un segundo después desaparecieron.

Ahora Toru ya no estaba en el gran océano de sangre, sino en un lugar muy diferente… un lugar… que no debería verse de esta forma.

El sol era brillante en el cielo, un cielo azul tan puro que parecía un sueño. El suelo era de tierra, muy normal, justo como Toru lo recordaba y frente a el… ya no estaba esa lúgubre casa a punto de caerse a pedazos por la falta de mantenimiento. Esta era… la perfecta y hermosa mansión de la familia principal del clan Asahi.

"Esto… no… no puede ser…"

Toru miró a lo lejos una mujer que parecía estar buscando algo o a alguien. Ella…

"¿Oh? ¡Toru-chan!" La mujer vio a Toru y sonrió. Casi al instante corrió hacia el a una velocidad que no parecía normal en una mujer como ella. Bueno, teniendo en cuenta quien es, era bastante posible. "Querido, ¿a dónde estás yendo? Siempre te vas sin avisar" Ella abrazo a Toru, hundiendo la cara del chico en su pecho.

El simplemente no supo como reaccionar. Su cuerpo por unos segundos dejó de funcionar y su cerebro trató de pensar en una solución a esa situación. Además, su cuerpo parecía ser más pequeño de lo normal.

Se miró la mano y está sorpresivamente era más pequeña, su cuerpo entero se había encogido. No, esa no era la respuesta.

"Toru-chan… ¿Toru-chan? ¿Qué pasa? Te ves pálido. Parece que viste un fantasma"

"Yo… yo…" Su respiración fue pesada por unos segundos. No entendía que estaba pasando. Incluso cuando ella lo abrazo, pudo sentir el calor de su cuerpo.

"Toru-chan… ¿…Qué pasa? Puedes hablar conmigo…"

Ella tomó a Toru de los hombros y lo miró a los ojos.

En respuesta a esto, Toru no supo que hacer. En esta situación, incluso su visión mejoro. Su vista ya no estaba borrosa ni oscura, pero aún así sintió un leve dolor de cabeza.

…

…

"¿…Okaa…-sama?" Su voz tembló, sus manos perdieron fuerza y solo pudo ver a la mujer confundida frente a el.

Todo se veía extremadamente real, como si de verdad hubiera regresado al pasado.

"Es mejor que regresemos a casa. Vamos, Toru-chan…" Kyoko tomo la mano de Toru e intento guiarlo de regreso a la mansión, pero el no se movía del lugar. "¿No vendrás? Entonces te cargaré como cuando eras un bebé" Sonrió mientras abrazaba a su pequeño hijo, quien aun seguía tan helado como un iceberg.

***

La escena cambia a Toru, ahora en su antigua habitación.

El miraba todo esto estando bastante confundido. El no entendía lo que estaba pasando. De hecho, nunca le había dolido la cabeza al pensar tanto, pero ahora, sentía constantes olas de dolor en su cerebro, como si intentará regresar a la realidad sin activar el Shigan.

'Esto es falso… sé que lo es. Ese Sharingan es bastante molesto, pero no creo que un simple genjutsu pueda hacer algo como esto' Miró toda la habitación mientras pensaba.

Después de que Toru entró a la habitación, Kyoko se fue con la excusa de que iba a preparar algo de comer, siendo que ella no sabe cocinar.

"¡¿?!" Los ojos de Toru se abrieron en estado de shock. Este suceso, el de Kyoko diciendo que iba a cocinar… pasó el mismo día que todo el clan Asahi fue masacrado. 'No… yo no soy así' Toru respiró suavemente y relajó su cuerpo.

Es hora de ponerle fin al juego de Itachi. Así que, sin pensarlo dos veces, Toru estuvo a punto de activar el Kodō Shigan. Sin embargo, alguien apareció de repente en la habitación delante de él, interrumpiendo nuevamente.

Esa persona le toco el hombro y dijo con ese tono de voz frio que Toru recuerda bastante bien. "Espera, Toru"

"Itachi, ¿qué estás planeado?" Toru lo miró con el ceño fruncido. "Se me está acabando la paciencia. Así que, responde. ¿Qué es lo que quieres? ¿Por qué me muestras todo esto? ¿Cómo es posible que puedas usar un genjutsu como este?" Por un momento, las preguntas de Toru fueron como una rápida lluvia nerviosa.

"Eso es lo que estoy tratando de decirte. Supongo que ya recuerdas este día"

"…claro que lo recuerdo. Yo… yo tuve pesadillas durante años por culpa de este día…" Se cubrió el ojo derecho con dolor.

Al mismo tiempo, Itachi, quien aun vestía la túnica de Akatsuki, dio algunos pasos hasta llegar a la puerta. "En ese caso, sígueme. Responderé a tus preguntas desde ahora"

Pero Toru no podía entenderlo. El pensaba que al fin había logrado olvidar todo lo que pasó esa noche, que ya no habría más pesadillas como cuando solo tenia 8 años. El pensaba que al fin había logrado enterrar el pasado como lo hizo con su vida pasada, pero ahora…

Itachi solo espero en la puerta mientras miraba a Toru. En sus ojos, se podía ver el color carmesí característico del Sharingan, además del cuervo que se posaba en su hombro izquierdo, el cual tenía un Mangekyo Sharingan extraño en uno de sus ojos.

"No voy a atacarte ni nada de eso, si es eso lo que piensas"

"No vas a atacarme, eh…" Una sonrisa nerviosa se formo en la boca de Toru. Dejó caer sus brazos sobre sus hombros y luego miro a Itachi a los ojos. "¿Cómo puedo confiar en alguien que asesino a toda mi familia y me dejo sin nada?" Esta situación de alguna forma hizo que Toru sintiera ganas de reír. "Que gracioso. No sabía que eras comediante" Negó con la cabeza mientras hacía un gesto de negación con las manos. "Ya es hora de terminar con tu estúpido juego, Itachi"

"Escucha…" Itachi dio un paso fuera de la habitación, miro hacia delante dándole la espalda a Toru y dijo: "Por favor…"

Esa simple palabra y gesto hizo que la expresión de Toru se tornara apagada y confundida. Aun así, no tenía nada que perder. Si el podía ver hasta donde llegaba esto, podría llegar a una rápida conclusión.

Así que, sin darle importancia a las palabras de Itachi, que de algún modo sonaban algo tristes, Toru salió de la habitación siguiéndolo.

***

Solo avanzaron unos pocos pasos, pero el lugar entero comenzó a cambiar. Como si el tiempo se adelantara, el sol se movió en el cielo rápido hasta el ocaso. Las luces de las casas en toda la ascienda del clan Asahi comenzaron a encenderse y entonces Itachi y Toru se encontraron fuera de Konoha.

"La razón de por que te traje a este lugar…"

Toru frunció el ceño al ver que, frente a ellos, estaba otro Itachi. Solo que este Itachi se veía bastante joven, tan solo un adolescente, el cual caminaba solo, mirando los alrededores como si estuviera buscando a alguien.

El joven Itachi miró frente a el y entonces un hombre enmascarado apareció. Casi al instante, Toru apretó los puños sin poder creer lo que estaba viendo.

No, el creía lo que veía, solo no podía admitirlo. Después de todo, aquel hombre enmascarado es…

"La razón por la que hice todo esto…"

La verdad…

Continuará…