El comienzo

Todo empezó cuando recibí miles de llamadas de mis padres, y un montón de notificaciones sobre ataques de personas infectadas con un virus desconocido.

Las personas atacaron a otras personas y luego se comieron su carne, al parecer abandonaron el cuerpo después de que el virus hizo cierto efecto en la persona mordida, la cual terminó convirtiéndose en lo mismo que esas otras personas.

Decidí mirar afuera, pero al hacerlo pude ver a cientos de personas corriendo por las calles por nada más que sus vidas. La escena que vio mis ojos era realmente desagradable. ¡No podía creer que hubiera personas comiendo a otras personas! Las ganas de vomitar llegaron pronto.

Esto parecía más una película o uno de esos juegos de zombies con perros mutantes y caras cortadas en cuatro.

No pude dormir durante una semana completa después de ese día.

Lo único que me mantenía mentalmente bien, era la llamada de mis padres, la cual deje de recibir después de que todas las líneas cayeran y no pudiera comunicarme con nadie de ningún modo.

Pronto se supo que las personas comenzaron a obtener habilidades misteriosas. ¿Cómo lo sé? Las personas con habilidades llegaron a robar la comida de otros apenas y las obtuvieron.

¡Todo una mierda!

Las personas sin habilidad alguna, pronto comenzaron a ser tratados como basura y esclavizados por los que tenían habilidades, ellos eran sin duda el nuevo poder del mundo, nisiquiera tienen que pedir permiso para ir por una mujer y violarla frente a una multitud de personas.

¡Eran todos unos hijos de puta!

Violando y robando, sin piedad alguna a los indefensos. Eso realmente me enojaba y hacia querer rebanar sus cuellos, pero eso era una muerte demasiado facil para ellos, asi que si tenia que hacer lo mismo que ellos hicieron, lo hara sin piedad, y luego los torturaria hasta la muerte.

***

"¡Ring! ¡Ring!"

El despertador sono fuertemente en el pequeño cuarto, rodeado por cuatro paredes que amenazaban con caerse en cualquier momento, si no se daba un mantenimiento que ya no tenía reparado alguno.

"Mm... Maldita sea... porque que tienes que cagar mi dulce sueño, con la hermosa señorita en el río"

Con hilo de baba saliendo de la comisura de sus labios y ojos dorados entre cerrados, con pelo puntiagudo y desordenado rojo carmesí y un joven rostro atractivo, un cuerpo delgado, pero con músculos algo envidiables. Se paro de la cama molesta por el sonido de la alarma mañanera.

Lanzó el despertador contra la pared, rompiéndose por completo en el impacto. Realmente no era su mejor presentación.

Miro hacia afuera, y dijo. "Este mundo se va a la mierda día con día".

La escena que pudo ver por la ventana, fue a una pareja teniendo sexo mientras sus amigos los veían y reían. No le extrañaría que la estuvieran compartiendo.

Esto era más el trabajo de una prostituta que el de una novia.

Tomo una caja de cigarrillos de un cajón, abriéndola y tomando uno de los cigarrillos, saco el encendedor de su bolsillo y lo prendió. Se aserco nuevamente a la ventana, ignorando a los idiotas que follaban a un lado.

La brisa tocó su rostro, refrescandolo por un momento.

Luego de disfrutar por algunos minutos, el sonido de su celular comenzó a sonar, tubo que posponer su momento de tranquilidad por un momento.

*Ting*

"Responde rápido. No tengo todo el puto tiempo del mundo. ¿Quién mierda eres y qué quieres?" Pregunto molesto mientras daba un toque a su cigarro, y continuó. "Sabes que has arruinado mi maldito momento de felicidad".

Al otro lado del teléfono, se pudo escuchar la risa de una joven mujer, que al parecer parecía estar feliz de escuchar al hombre.

Si se preguntan, ¿Cómo hay un puto celular? Solo ellos lo saben, tal vez repararon algunas cosas con el tiempo, pero la señal no era accesible para otros refugios.

"Oh, vamos, ya has olvidado a tu chica favorita, Darek"

"Aja. ¿Qué es lo que quieres, Gina?"

El no parecía muy contento por esta llamada.

"Tengo que desaparecer a alguien ¿O me has llamado solo para molestar?"

Su cara se puso oscura, no perdonaría ser molestado en uno de los pocos momentos felices que podía tener. El despertador ya había interrumpido uno, y no le fue muy bien que digamos.

"Hum, eres tan malo, Darek. ¡Yo solo quiero invitarte a un pequeño trabajo!"

"¿Qué tipo de trabajo?"

La mujer sonrió, sabía que esto era un sí inmediato, ya que él siempre colgaba, si no estaba interesado. Esta mujer era parte de una organización de asesinos a sueldo, podría decirse que era la nueva mafia. No se conocían hace mucho, ella solo fue una contratista mientras buscaba un trabajo para ganarse la vida, la acepto y trabajo para ella, luego siguió por su cuenta y se convirtió en asesino.

Ahora acepta pequeñas o grandes misiones, solo el dinero habla, ahora. Mientras las misiones y la paga sean buenas, aceptaría, sin problemas.

Pero, ¿Cómo es que ha estado sobreviviendo, sin una habilidad? Era demasiado fácil.

En uno de sus tantos trabajos, pudo obtener un sistema, que le salvo la vida.

[El sistema a sido obtenido]

[Por favor, cuide del sistema]

[Habilidad Cazador de Muertos ha sido obtenida]

La habilidad [Cazador de Muertos] había sido un regalo del sistema, ahora podía obtener puntos por matar a los zombies, y comprar cosas en el sistema, como comida y armas, pero a él solo le importaba vivir y encontrar a sus padres.

No había vuelto a desbloquear o comprar en gran cantidad, después de sobrevivir en esa misión, solo compraba algo de comida y comercializaba algo de esto, con algunas personas escasas de dinero. No pedía mucho, así que podrían pagarla, sin problemas, lo malo era que tenían que ocultarlo de la gente poderosa.

La moneda del refugio, eran cosas de valor, como armas y trabajo gratuito, lo peor era dar la virginidad de una mujer o simplemente una mujer.

Claramente nunca acepto una mujer en sus intercambios de comida.

"¡Mmh! Realmente, quieres saber del trabajo... Eso es todo una sorpresa, sabes".

"Solo habla".

"Eres aburrido, pero eso me gusta de ti".

Ella comenzó a hablar de la misión mientras que el escuchaba cada detalle, de lo que habría que hacer en esta misión.

El refugio T había sido invadido por algunos mercenarios que planeaban secuestrar a las mujeres y venderlas como esclavas. Entonces, se había mandado una solicitud de eliminación contra estos mercenarios. No importa si están vivos, muertos o vendidos, los solicitantes, quieren que sean cazados.

"Iré a completar el trabajo, y luego te avisaré cuando este terminado".

Termino la llamada y se preparo para salir, sus ojos lo decían todo, era un día de sangre.

Al salir, pudo ver nuevamente a los chicos que follaban con la prostituta, los golpeó, sin que estos se dieran cuenta, de que o que los había golpeado y habían caído desmayados. Miro a la mujer a los ojos y dijo. "Toma... con esto no tendrás que hacerlo por un tiempo".

La alta suma de comida sorprendió a la mujer, con esto era más que suficiente para vivir por un tiempo, lo más sorprendente para ella, fueron las semillas. El lugar donde se encontraban, era un lugar donde pasaba el río, así que no sería complicado cultivar, si tenia cuidado, podría vivir toda su vida sin problemas y, sin la prostitución.

Lo último, fue una pistola con barias municiones, que seguramente le servirían para defenderse en el futuro. No sé, tal vez incluso la usaría en ella misma, pero eso ya no era su problema.

Ella calló en llanto de rodillas mientras agradecía y veía al hombre irse.

Refugio T.

"Jeje. Las chicas que han traído está vez, están super buenas. Recuerden, si siguen así, tal vez tengan una oportunidad con una de ellas cuando regresemos".

Un hombre gordo con granos en su cara, dijo mientras veía su nueva mercancía, y lamia sus labios con perversidad.

"¡Vava el jefe! ¡El jefe es grande y eterno!"

Sus subordinados lo alabaron mientras veían a las mujeres.

Las mujeres lloraron y veían con horror su cruel destino. No habían tenido suerte, ciertamente.