Al recuperarse de su tropiezo, una mirada feroz apareció en los ojos de Mason y la
punta de su vara mágica se activó, la gema que había en ella emitía fluctuaciones
de maná feroces.
—Inténtalo. —Lin Yun había llegado en medio de la discusión. Aunque estaba
sonriendo, las fluctuaciones de maná a su alrededor les hicieron saber a todos
que, si Mason se atrevía a moverse, el joven Maestro no sería amable.
—Merlin, viniste justo a tiempo. —Al ver que Lin Yun aparecía, Mason no se
atrevió a atacar al mayordomo, pero igual continuó con su actitud arrogante—.
Vine con buenas intenciones y traje amigos a la reapertura de la Rosa Dorada
para darte clientela. ¡Pero no esperaba que vendieras artículos falsos! Mi amigo
acaba de beber tu poción y tiene algunos problemas. ¡Deberías compensarlo!
—Sé que la gema de ojo de dragón es preciosa, pero no necesitas levantarla tanto
para que la vea. — Al acercarse, Lin Yun primero hizo a un lado la vara mágica de
Mason y preguntó casualmente—: ¿Qué poción bebió tu amigo para que le
ocasionara un problema?
—¡Era la poción sanadora! —respondió Mason titubeando. Había preguntado
antes y las pociones sanadoras eran de primer nivel. No había muchos alquimistas
en la Ciudad de Mil Velas que fueran capaces de crear pociones sanadoras
efectivas y los que sí, eran de muy alto estatus. No había gente que la Rosa
Dorada pudiera contratar.
Además, la poción era de color rojo oscuro.
Solo las pociones sanadoras falladas eran de ese color.
—Mira, ya se ha bebido más de la mitad de la poción y su herida no ha mejorado
para nada. Lo que es peor, la herida que ya se estaba cerrando ha empezado a
sangrar de nuevo —Mason hizo que sus subordinados trajeran una camilla
mientras lo explicaba.
Un joven veinteañero yacía en ella. Su brazo derecho estaba herido y al abrir el
vendaje, un corte largo y profundo fue revelado. A juzgar por las manchas de
sangre y el residuo, era evidente que en verdad había estado sanando antes de
abrirse.
—Sé que no tienes dinero ahora y ni siquiera puedes permitirte pagar la deuda de
tu tío, pero seguramente no sería decente usarlo como excusa. Por el bien de
nuestra amistad, le preguntaré a mi padre si puede ayudarte. ¿Pero qué hay de
las pociones falsas? —Mason tenía una expresión penosa, pero por dentro, estaba
regodeándose—. Te atreviste a humillarme en la Torre de Sabiduría y ahora
destruiré tu tienda y te avergonzaré en público. De hecho, este amigo es alguien
que contraté por unos cientos de unidades. Accedió a que le reabriera la herida en
su brazo. En cuanto a esa poción sanadora, hice que tirara la mitad. El resto
debería ser suficiente como prueba. Con el testimonio de ese tipo y la poción, tú
serás el que sufra.
Mason pensó que el destino de Mafa estaba sellado. —¿Qué harás? ¿Planeas
decir que esta poción sanadora es auténtica? Menuda broma. Pensabas que
podías engañar a otras personas, pero estas soñando si crees que puedes
engañarme a mí. La cámara Lunas Gemelas tiene un Gran Alquimista, me juró y
garantizó que una poción sanadora color rojo oscuro definitivamente era un
producto fallido.
—¿Qué te crees? Estoy desesperado, mi amigo sufrió una gran pérdida. ¿Qué
piensa tu Rosa Dorada sobre eso? Tengo una sugerencia muy simple. Primero,
compensa a mi amigo. Creo que 10 000 unidades de oro bastarán. Si no puedes
obtenerlas, entonces te falta sinceridad. En cualquier caso, debes admitir que la
Rosa Dorada le vendió una poción falsa que lo dañó y debes garantizar que no
vuelva a ocurrir una cosa así.
Mason mismo pensaba que esas dos condiciones eran duras. La Ciudad de Mil
Velas entera sabía que la cámara de comercio Oro Destellante estaba en
bancarrota y que el hijo de Locke Merlin era incapaz de pagar la deuda que le
debía a su tío. ¿Cómo iba a poder juntar 10 000 unidades para compensarlo?
Además, antes de que el asunto de la compensación se resolviese, tenía que
disculparse públicamente y admitir que vendió una poción falsa. Eso sería una
gran humillación. Después de eso, mostrar su cara en la ciudad sería un sueño
para Mafa.
Por supuesto, al ofrecer estas dos condiciones, Mason ya estaba preparado para
el regateo sobre el monto de la compensación. Cuando el momento llegara,
estaría dispuesto a conformarse con la disculpa. En cuanto al dinero, no le
importaba mucho ya que no le hacía falta. El objetivo era pisotear sin piedad el
orgullo de ese muchacho.
—Eso suena razonable. Nuestra Rosa Dorada está abierta a los negocios, así
que, si en verdad hubiera un problema con esa poción sanadora, sería lógico
ofrecer una compensación y disculparse.
¿Quién creería que Lin Yun sería tan directo y no discutiría el asunto para nada?
—¿Cómo? —Incluso Mason, que había estado pensando en cómo avergonzar a
este tipo como venganza, no puedo evitar congelarse. Vino preparado con muchos
más argumentos. ¿Cómo podía acceder tan rápidamente? Bueno, no importaba.
Ahorrarle el esfuerzo también era bueno.
—Dado que ese es el caso, apresúrate y resuélvelo. Debes compensar y
disculparte. Tengo otras cosas que hacer, no tengo tiempo de hablar contigo.
—¡Eh, Mason! ¿me oíste? Dije «si en verdad hubiera un problema con la poción
sanadora...». Deberías entender qué significa esto. ¿O necesitas que te lo
explique?
—¿Qué quieres decir? —Mason tenía una expresión desagradable.
—Parece que en realidad no lo entiendes —dijo Lin Yun mientras sacudía su
cabeza, maldiciendo para sus adentros los estándares de la educación obligatoria
de Noscent antes de explicarle a Mason—. Lo que quiero decir es que, si hubiera
un problema con la poción, sin duda compensaría y me disculparía. Pero no hay
ningún problema con esa poción. Me pregunto: ¿qué desea hacer el mago
Mason?
—¿Ningún problema? —Mason bajó su cabeza para mirar la botella medio vacía
de poción y cuando vio su color, reforzó su resolución—. Si no hay ningún
problema con esta poción, me comeré su botella.
—Bien —Lin Yun asintió y llamó a un empleado en el rincón—. Tú, por favor, ven.
—¿Eh...? —Ese empleado tenía unos 20 años, una débil fluctuación de maná
podía verse en su cuerpo, debía ser alguien que acababa de convertirse en
aprendiz de mago. No podía hacer nada al respecto, ya que estudiar magia era
muy caro. Una persona normal, sin una familia como la de Mafa Merlin o Mason,
simplemente no podía manejar tal gasto y, por ende, la mayoría de los aprendices
buscaban trabajo para aliviar la carga.
—¿Cuál es tu nombre?
—Jefe, mi nombre es Remy.
—Muy bien Remy, ¿quieres que sume 100 unidades de oro a tu salario
empezando el mes entrante? Si estás dispuesto, arremángate.
—¿Eh...? —Aunque el joven aprendiz se arremangó, su mente estaba en caos.
Su salario actual era solo 100 unidades, ¿cómo podía redoblarlo solo por
arremangarse? Era irracional.
Mientras todavía lo estaba pensando, sintió un dolor agudo en su brazo derecho.
—¡Ay! —Remy sintió un escalofrío cuando miró hacia abajo y vio que su jefe le
había hecho un profundo corte.
«Demonios, sabía que la oferta de duplicar mi salario no podía ser buena».
—Bien, hazme el favor de probar el sabor de esta poción —dijo Lin Yun mientras
le alcanzaba la mitad restante de la poción—. No te quedes mirándola, bébela
rápido, aún tengo asuntos que atender..