Segundo día (1)

Me he despertado temprano.

Ayer por la noche cuando llegó corriendo Kiva y contó lo que estaba pasando, Hilda, Todd y Bernard salieron corriendo.

Nos costó mucho tranquilizarla.

Nosotros solo podíamos imaginar cuando nos contó que Everett había recibido cuchillos por ella y que el resto se quedaron atrás para proteger su huida.

Creo que todos en ese momento sentimos impotencia e ira.

Al final cuando vi a Kyomi y a Mireia consciente todos fuimos a ver como estaban, los profesores nos tuvieron que separar y dejarlas en paz.

En la habitación estamos los tres que quedamos.

"Ah, mierda."

"¿Despierto, Joyce?"

"No he podido descansar bien con lo de anoche..."

Respiro hondo para relajarme mientras Zaide se sienta en la cama.

"Según Bernard lo tenían controlado, y que nos concentremos en el día de hoy, pero... es imposible no preocuparse."

"¿Hoy todavía no has hecho tu entrenamiento matutino?"

Giré la cabeza para ver por la ventana. Estaba empezando a salir el Sol.

"¿Te unes?"

"Si haces una versión ligera sí."

"Pues venga prepárate."

"¿Puedo unirme yo también?"

Me sorprendió la voz de Morfeo.

"Estás despierto, ¿y te quieres unir?"

"No puedo dormir bien."

"Venga vístete y vente."

Al rato estamos los tres corriendo por la mañana temprano.

No estábamos hablando mucho, corríamos un poco por la capital. Los dos me seguían de cerca. Si no fuera por lo de ayer, disfrutar de esta mañana sería un lujo.

De repente llegamos a una calle donde había rastros de piedra al rededor, charcos de agua, y algún que otro lugar con sangre.

Un par de caballeros estaban vigilando para que la gente tuviese cuidado hasta que vinieran a arreglarlo. Nosotros decidimos acercarnos.

"Ese muro de enfrente está cortado por la mitad como si fuera papel."

"Creo que los muros los hizo Everett."

Zaide y yo comentábamos mientras veíamos los restos de lo de ayer.

"Oh, pensé que dijimos a los alumnos que no salieran de la residencia."

La voz de Muna nos sorprendió por detrás.

"No nos enteramos bien, perdón, ya volvemos."

Los tres empezamos a andar fuera de ahí.

"¿Ya volvéis? ¿No queréis saber lo que pasó?"

Los tres nos detuvimos a escuchar a Muna.

"Como dijo Zaide, los muros de piedra son obra de Everett, parece que las chicas no usaron magia. El corte del muro de enfrente es una 'Cuchilla de agua', menos mal que no les dio."

"¿Eso lo hizo una cuchilla de agua?"

Zaide era el más impresionado de todos. Supongo que como él es el que mejor uso hace de la magia de agua se quedaría impresionado.

"Es una técnica igual que la cuchilla de viento. Aunque no creo que ayer, quien fuese, pelease en serio, si no ninguno de los tres estaría vivo."

Mi corazón iba a mil por hora.

"¿Por qué alguien así nos atacaría?"

"Al parecer es de 'Alas de Destrucción', dice que solo quería 'divertirse'."

"Esto lo hizo ¿por diversión?"

Mi ira no paraba de intensificarse.

"Creo que entre los 3 tendríais un 10 o tal vez 15 por ciento de posibilidades de ganarle, así que no penséis en cosas raras."

"¿Solo un 10%?"

Morfeo parecía en impactado por lo que acababa de escuchar.

"No lo penséis mucho y volver a la residencia mientras yo me encargo de limpiar este desastre. Tenéis cosas importantes que hacer hoy y no podéis dejar mal a la escuela."

"Pero--"

"Joyce, sé lo que vas a decir, pero deja que los profesores nos encarguemos de esto."

En ese momento una sensación de miedo y pánico me invadía, un malestar proveniente de Muna.

"Alguien se ha dedicado a jugar con mis alumnos, va a sufrir 100 veces lo que hizo."

En ese momento, al ver la cara de mi profesora de magia, entendí que si el culpable era encontrado por los profesores no iban a quedar ni los huesos.

El camino de vuelta fue en silencio. Nos lavamos con magia de agua y bajamos a desayunar temprano.

Entre los alumnos que estábamos abajo se podía ver algunos con ojeras o con nerviosismo.

"Parece que no está siendo fácil para nadie."

"Ya hemos visto a Muna, como encuentre al culpable va a desear no haber nacido."

Contesto a Zaide, quien asiente con una sonrisa.

"Ahora que me siento más tranquilo me ha entrado el sueño. Despertarme cuando tengamos que salir."

Con eso Morfeo apoyó la cabeza en la mesa y empezó a dormir.

"Supongo que no fue fácil para él siendo Kyomi y Kiva quienes fueron atacadas."

"Esos tres son amigos desde el primer día, creo que más o menos entiendo como se siente."

"¿Por Mireia?"

Paré de desayunar y miré a Zaide.

"Por un momento pasó por mi cabeza que iba a morir y fue como ver a Uma..."

"Sí..."

Silencio absoluto mientras seguíamos desayunando.

"Que raro que en esta mesa haya un silencio tan pesado. ¿Tan preocupados estáis?"

"Solo concentrándonos en lo que viene hoy."

Zaide respondió rápidamente a Bernard, quien se sentó a nuestro lado.

"Él parece más relajado que vosotros."

"Jajaja, ver a Morfeo es una buena dosis de calma."

Bernard y yo nos reímos con el comentario de Zaide.

"Solo quería asegurarme de que estuvierais bien. Se que ayer pudo haber sido duro pero quería aseguraros de que ahora mismo Todd está investigándolo. Puede que estéis nerviosos, pero darlo todo, no va a ser fácil ganar en el acto entre escuelas y tenéis que estar concentrados."

Zaide y yo asentimos.

"Bien. Espero grande cosas de vosotros 3. Demostrar todo de lo que sois capaces de hacer. Os estaré animando."

Con eso Bernard, tal como vino, se fue

"De repente siento presión por lo que viene ahora."

"¿Cuándo toca el concurso de magia de agua?"

"Ese es mañana, hoy tengo el concurso de magia de viento, es el primero. Después es la magia de tierra donde participa este de aquí."

Dijo señalando a Morfeo.

"Menos mal que no participa Everett, y que participa mañana. Espero que se recupere para participar."

Realmente estaba preocupado. Everett es un poco más tímido, pero como a Alex y a Axel, también le gusta pelear.

"Atención todos."

El director Björn nos llamó a todos los que estábamos en el comedor. Podía ver a todos los que tienen que participar hoy sentados alrededor del comedor.

"Normalmente os entregaría ahora una medalla con la que se os identificaría como alumnos de esta escuela y se os permitiría acceso libre para ver el torneo desde las gradas, pero este año no vamos a hacer eso. Tras lo que ocurrió ayer hemos decidido que solo podrán ir a ver los actos aquellos que vayan desde el principio con los profesores y alumnos que vayan a competir."

Se escuchaba algún que otro murmuro por el comedor.

"Acompañando a los que participarán en los concursos de magia estarán Muna y Bernard. Todd estará fuera investigando lo que pasó ayer. En el piso 3 estaré yo y en el cuarto Hilda. Los que participan mañana nos gustaría que vinieran con nosotros, pero haced lo que queráis."

Silencio.

"Con eso dicho, buena suerte a los que participáis hoy, espero grandes cosas de vosotros."

Con eso el director se fue de la sala. En una mesa del comedor se podía ver a Bernard hablando con Muna y riéndose sin llamar la atención.

"¿Qué harás Joyce?"

"Vamos a despertar a este tipo y terminemos de prepararnos para irnos."

Morfeo a nuestro lado bosteza a la vez que habla.

"Oh uedo ecucha"

"Tan vago jajajaja vamos pa'rriba."

"Aprende a hablar tú también Joyce."

"¡Señor, sí señor!"

Poniendo mi postura de caballero hice mi imitación y acto seguido los tres estábamos riéndonos.

"¿Qué es tan gracioso?"

"Oh, Chloe, y también Elsa ¿Dónde habéis dejado a Saidi?"

"Se fue esta mañana temprano. Hoy tiene que hacer de noble antes de participar en el concurso de la mañana."

Chloe respondió la duda de Zaide.

"Que complicada la vida de los nobles."

Zaide se quejaba por los dos.

"Nosotros tenemos que subir a la habitación a terminar de cambiarnos, ¿venís?" Propuse a las chicas.

"¿A un habitación de solo chicos? No estarás pensando en..."

Chloe se agarró su cuerpo y se escondió detrás de Elsa.

En el momento en el que lo entendí me puse rojo.

"Nono, esa no era mi intención perdona, ya nos vamos."

Me iba a yendo. ¿Cómo puede pensar eso?

"Oh, sea sonrojado." "Ni ha insistido."

Elsa y Chloe murmuraban mientras me seguían Zaide y Morfeo riéndose.

Cuando llegamos a la habitación nos paramos y preguntamos a Morfeo.

"¿Morfeo hay algo que necesites de la habitación?"

"¿Aparte de dormir? Nada. Vamos a la habitación de las chicas."

Parecía que Morfeo había leído nuestra mente. Realmente íbamos a hacer una visita a la habitación de los heridos.

Cuando llegamos la puerta y al abrirla nos encontramos a las chicas hablando y a Everett tumbado pero despierto.

Estuvimos hablando un rato sobre los que nos había dicho Bernard. el director y que no tenían que preocuparse que no pasaban peligro.

Por el rabillo del ojo me parecía ver a Morfeo sonreír cuando hablaba con Kiva y Kyomi, pero sobre todo con la hermana pequeña.

Nos dijeron que los cuchillos que recibieron Mireia y Kyomi no supondría ningún problema y que mañana estarán bien.

El problema era Everett, tenía sus heridas en los hombros que eran las más graves y no creen que pueda participar. Aunque el admitía que no tenía ganas, más bien se le veía desmotivado.

Al irnos me sentí un poco mal por dejarles atrás, pero Zaide y Morfeo participan por la mañana así que teníamos que irnos.

Nos paramos en frente de donde se hacían los torneos del encuentro entre escuelas. Era un edificio circular, como el gremio de aventureros, pero en vez de un par de plantas diría que son 8.

Además de que está rodeado por bancos de piedras. Era la primera vez que veía los bancos, pero no pudimos probarlos porque llegábamos tarde.

Al entrar fuimos por unos pasillos y subimos unas escaleras hasta que llegamos a una habitación enorme. Dentro había sofás y sillas de alta calidad.

"Este es el lugar reservado para nosotros. Nadie excepto nosotros puede entrar. Ahora los que participan en el concurso de magia de viento que vengan conmigo. El resto os quedaréis aquí con Bernard."

Siguiendo a Muna salieron Celso, el arrogante, Saidi, la noble, y, el mejor, Zaide.

Al salir Zaide me miró y yo le miré de vuelta lleno de confianza.

"Bueno, los que quedáis podéis acomodaros. La arena está al otro lado de ese cristal."

Me acerqué al cristal que señalo Bernard, se veía un círculo de arena enorme, deberíamos estar como en el tercer piso. Pero lo que más me impresiono eran las gradas.

"Estás lleno de gente..."

"El año pasado estaba aún menos lleno, pero con el cambio en la competición las pruebas de magia parecen haber perdido importancia."

"Oh, Liam, buenas."

Le saludé con su nombre aún cuando no nos habían presentado formalmente.

Soltó una pequeña risa.

"Supongo que no nos han presentado pero nos conocemos, Joyce."

Me tendió la mano y yo la acepté, no tengo motivo para negarme.

Noté como tenía la mano llena de callos, debe haber practicado la espada como loco.

"¿Cómo eran las pruebas mágicas el año pasado?"

"Bueno, en verdad se hacían tres torneos que duraban dos días cada día y se permitían uso de magia y físico a la vez. Podías ver el uso de la magia contra atacantes, o la combinación entre uso ataques y magia..."

"¿Cómo tú?"

"Sí. Recibí muchas ofertas de aventureros, pero quiero unirme a los caballeros, y hay un par de cosas que aprenderás en la siguiente etapa."

"Oh, ¿el qué?"

"No quiero quitarte la sorpresa, pero escuchaste a Todd decir lo de 'Mundo sin magia' el primer día para venir aquí ¿no?"

Asentí.

"Eso es lo que aprenderéis."

Me debí quedar con una cara un poco rara porque soltó una carcajada.

"Me refiero a que esas frases no son producto de la imaginación. Son contratos que hace la persona con el mundo. Pero en este concurso no están permitidos."

"¿Perdona?"

"Jajaja, ya verás, ahora disfruta, esto está por empezar."

Al girar la cabeza había una chico en medio de la arena.

"¡Bienvenidos al acto entre escuelas! ¡¿Quién quiere que esto empiece yaa?!"

Las personas en las gradas empezaron a gritar emocionadas.

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Punto de vista Zaide

Estábamos Saidi, Celso y yo sentados en una sala de audiencias con el resto de alumnos que van a participar: otros dos de la escuela del norte y 4 de la escuela de la capital.

Se nota quién es de cada lugar por la ropa. Los de la capital suelen ser hijos de la nobleza principalmente y se disfrazan como tal.

De repente se empieza a escuchar un gran griterío viniendo desde arriba.

"Parece que ya ha empezado."

Muna susurra cuando una persona aparece delante nuestra.

"Bien, saldréis, saludáis y vais al pasillo de vuestra escuela. Después os iremos llamando uno a uno."

Eso es rápido, no nos han explicado ni que vamos a hacer.

"Muna, ¿tú sabes de que va a ser la prueba?"

"No. Han sido muy delicados con la información de las pruebas. Pero en principio no habrá peleas de por medio."

En silencio salimos, a la arena. Se podía ver en el medio a un chico elegante señalando al lugar por el que entramos.

"Estos chicos son los que van a participar en la primera prueba de magia. ¡Magia de viento!"

Un aplauso que se escuchaba desde todos lados llenaba mis oídos.

Vi que algunos empezaban a saludar a las gente que nos dedicaba los aplausos y yo no era menos. Pero sentía que esto era demasiado grande para mí.

Totalmente fuera de lugar.

"Con esto, queridos participantes, iros a vuestros puestos."

Fuimos a un pasillo que tenía el símbolo de la escuela de supervivencia con el nombre de Ferrepa debajo. Ahí nos esperaba Muna.

"Escuchemos a ver que dicen."

"Son cuatro pruebas y tenemos que ver por lo menos una vez a cada uno de los concursantes. Es decir, de la escuela de la capital saldrá uno en cada prueba, de Ferrepa tendrá que repetir uno, y de la ciudad del norte, Royas, entre los dos se podrán dividir como quieran. ¡Ahora que estamos todos presentados, empecemos!"

El presentador se agachó en medio de la arena e hizo tres bloques de piedra bastantes grandes y gruesos.

"Lo primero que queremos ver es la capacidad de la magia para cortar la piedra. ¡El ganador de esta prueba será el que haga el corte más profundo! Que suban los primeros concursantes."

"Va Celso." Declaró Muna.

"Bien, por fin algo bueno."

"No dejes en mal lugar a la escuela."

Se me escapó...

"Verás de lo que soy capaz."

Y con eso salió hacia la arena.

"Supongo que eso lo mantendrá motivado."

"Ni si quiera tenía intención de abrir la boca por él."

Muna sonrió.

"Puede que no lo sepas, pero la vida de un noble es más difícil de la que crees. La presión de ser siempre vigilado y criticado no sabes lo que es."

"La presión de que te etiqueten como basura sin que si quiera te den una oportunidad y te traten como un objeto sin valía, él tampoco sabe lo que es... Y mi pregunto si alguien que no lo ha vivido alguna vez lo sabrá."

En cuanto me callé me tensé. Normalmente hablaría así a Saidi cuando me daba una respuesta de alguien que no sabe de que habla, pero lo acababa de hacer con Muna. Si no me echan de la escuela me castigarán.

"Esa ha sido una buena respuesta. Ahora veamos lo que viene."

Miré incrédulo a Muna. ¿Ya está? ¿Sin castigo? ¿Nada de nada?

"No me mires así. Me has hablado con respeto y me has dicho lo que pensabas sin miedo. Eso es lo más importante en esta vida. Ahora mira lo que van a hacer, tal vez aprendas algo."

Tragué saliva y volví mi mirada al centro de la arena.

En la arena cada uno de los alumnos que habían aparecido se habían puesto enfrente de uno de los bloques. Por parte de la capital apareció la única chica que participaba de su grupo que llevaba una ropa roja y amarilla que pegaba con su media melena rubia. Por parte de la escuela del norte creo que era un especie de gato por sus orejas y cola, o tal vez un lobo.

"Habrá un total de 3 intentos. El primero es en 3... 2... 1... ¡Ya!"

El chico lobo hizo un giro en el aire y de sus colmillos salió una cuchilla de aire. Acto seguido el aire que estaba acumulando Celso fue enviado en dirección al pilar en forma de cuchilla de viento. Ambos lograron hacer mucho daño a las columnas, pero la más sorprendente fue la maga de viento de la capital. Moviendo su brazo en diagonal descendente fue como que ordenara al viento moverse.

*Swosh*

Parecía el sonido de una espada. Acto seguido la parte de arriba de la columna se deslizó hacia el suelo.

A mi lado Muna se empezó a reír.

"Esto se ha puesto interesante."