Marginado:

Las flores dejaban ver su encanto por la llegada de la primavera. Y el gran evento informático, Computex, llegó a mi ciudad.

Aunque tan solo tenga diecisiete años, soy muy bueno en lo que es codificación y programación de juegos o aplicaciones.

Mis profesores en la escuela, fascinados por mi capacidad en la materia, me dijeron de participar en este evento.

Accedí solamente para conocer gente, ya que me gusta hacer amigos.

Algo me empuja y me hace caer la piso, era una chica muy linda.

— Perdóneme, me tropecé— dijo con una voz tenue.

Uno de los organizadores me interrumpe para llamar a alguien.

—Se encuentra presente Jazmín Primumver-

La chica se levantó y fue corriendo hacia el organizador. Tomó su gafete y entró corriendo al evento.

"Que chica más rara, pero debo admitir que es linda, talvez la vuelva a ver"

—Se encuentra presente Joel Martínez—

—Sí, aquí estoy—

Tomé mi gafete y entre al evento. En el gafete tenía un número grabado el cual era el de la mesa en la que estaba.

Soy del grupo 1.2, estoy ansioso de conocer a mis compañeros. Pero debido a esa ansiedad y emoción me terminé perdiendo y no encontraba mi mesa.

"Hasta yo me sorprendo de lo idiota que puedo ser"

Camine un rato hasta que llegue al comedor del lugar. Fui a una de las máquinas expendedoras y compré algo de tomar.

Antes de que pudiera sacar la botella algo me empujó y tiró al suelo, era la chica de antes.

—p-perdóname, e-espera eres el chico de e-esta mañana. Cuanto lo siento, te tiré al suelo dos veces por mi torpeza— dijo con su vos temblorosa mientras apoyaba sus manos en su pecho.

—no te preocupes, los accidentes ocurren—

Me levanté del suelo mientras sacudía mis pantalones, limpiando el polvo que tenían por las caídas.

Cuando levante la vista, vi que miraba fijamente mi gafete. Cuando vi el suyo me di cuenta de que estábamos en el mismo grupo.

—Estamos en el mismo grupo, mucho gusto en conocerte soy Joel, espero que nos llevemos muy bien—

Tomé su mano, la estreche y la sacudí de arriba a abajo con una sonrisa en mi cara.

Ella rápidamente quitó su mano, algo sonrojada y dijo.

—¿q-qué haces a-aquí?, estábamos e-esperándote-

Está muy nerviosa, tal vez me excedí al estrechar su mano.

—perdón por lo de antes, me emocioné. Y la verdad es que me perdí, me podrías llevar a la mesa donde están los demás—

Ella asintió y empezó a caminar, yo la empecé a seguir. Intente entablar alguna conversación, pero ella no me respondía, parecía incómoda.

"Creo que lo arruine"

Caminamos un rato hasta que llegamos a la mesa, pero para mi sorpresa hay tres chicas idénticas a Jazmín en la mesa.

Cada una tenía un vestido con una flor diferente estampada en él. Jazmin tiene jazmines en su vestido, la primera que vi, tiene violetas en su vestido, la segunda tiene rosas y la última tiene margaritas.

Las tres me miraron fulminantemente y me dijeron que me sentara. Jazmín se sentó y me dijo que son sus hermanas y que son cuatrillizas.

Mi cerebro está usando sus únicas dos neuronas para asimilar la información, mientras eso sucedía jazmín me las presentó.

—Ella es Violet, la que nació primero, la mayor—

—llegas tarde, espero que nos seas de utilidad. Y esa remera de anime es muy genérica y fea—

Me di cuenta de que Violet no tiene pelos en la lengua, y que es alguien que enfrentaría a cualquiera en un duelo, por su familia.

—Ella es Rose, la segunda en nacer—

—Tardaron mucho, ¿le hiciste algo a Jazmin bastardo?—

La miré y sacudí mi cabeza y manos para negar todo. Ella parece ser bastante leal y protectora con sus hermanas, algo digno de admirar.

—Ella es Margaret, la tercera—

—Es cierto lo que dice Rose. ¿Acaso estaban jugando o comiendo? ¿Y esa es la razón por la que tardaron?—

Es muy inocente y su mirada es la misma que la de un niño curioso.

—Y yo soy Jazmín, la cuarta. Mucho gusto.... Ehh—

—Joel. Soy Joel Martínez, mucho gusto a todas y lamento mi demora—

Las cuatro me miraron y empezaron a hablar sobre que hacer para el proyecto. Intente hablar y acotar ideas, pero ellas simplemente me ignoraban.

El tiempo pasó y me empecé a aburrir, comencé a escribir ideas en un cuaderno que tengo. Estoy divirtiéndome siendo excluido y marginado por cuatro bellezas.

En ese momento se acercó uno de los organizadores para preguntar cómo nos estaba yendo. Cuando él hablo las cuatrillizas se congelaron y no pudieron decir ni a.

—¿Sucede algo jovencitos?—

—Nada, es que estábamos pensando que hacer, ya que no nos decidíamos. Vuelva en un rato y le mostramos el progreso—

El organizador levantó su pulgar y se fue. Las cuatrillizas me miraron fijamente.

—Nos salvaste. No eres tan idiota como aparentas— Dijo Violet.

—Ese comentario estuvo de más. Pero más importante ¿qué fue eso? Es como si se hubieran congelado—

—Somos tímidas y nos cuesta hablar con desconocidos— dijo Margaret.

—Pero están hablando de lo más normal conmigo—

—Con desconocidos, no con idiotas— respondió Rose.

Suspiré para no decir nada y aclaré mi garganta para hablar.

—¿Qué tal si me dejan participar?. Si lo hacen no tendrán que hablar con la gente, ya que lo haría yo. ¿Qué dicen?—

Las cuatro me miraron y unos segundos después empezaron a murmurarse entre sí. Jazmin me miró y dijo.

—Este es el trato. Notamos que eres muy sociable, así que queremos que nos enseñes a hablar con la gente. A cambio te dejaremos participar en el proyecto—

Me rasqué un poco la cabeza y accedí a su trato. Desde ese momento me volví su maestro de cierto modo.

"¿Qué es lo que podría pasar?"

Es mi pensamiento sin saber que mi vida está por volverse complicada.