Capítulo 8 — Asesinado En Secreto

La fuente de luz estaba dentro de la caja de madera, ¡lo que significaba que era del hueso desolado!

Empezó a sudar frío ante ese inesperado giro de los acontecimientos.

El hueso desolado emitió motas de luz que volaron hacia él. ¿Cómo podría Lian Chengyu no investigar ese fenómeno?

Con más y más puntos de luz yendo hacia él, se estaba volviendo demasiado obvio. ¡Estaba seguro de que lo descubrirían!

En el momento en que fuese investigado, ¡sólo podría explicarlo con su vida!

—Yun'er, ¿qué te pasa? ¿Por qué tienes la frente llena de sudor?

—Hermana Xiaorou, tú…—Yun vio muchos puntos de luz volando, pero Jiang Xiaorou no parecía darse cuenta—. Hermana Xiaorou, ¿no ves nada? —preguntó Yi Yun con conciencia culpable. Se dio cuenta de que, además de Jiang Xiaorou, la gente que lo rodeaba tampoco parecía notar los puntos de luz.

—¿Ver qué? Yun'er, ¿estás enfermo? —preguntó Jiang Xiaorou con preocupación. El cuerpo de Yi Yun estaba débil y acababa de resucitar. Sería terrible que volviese a enfermarse.

—Eh...

Yi Yun se detuvo un rato antes de dar un suspiro de alivio. Parecía que era el único que podía ver los puntos de luz.

¿Podría ser que solo el dueño del Cristal Púrpura fuese capaz de ver los extraños acontecimientos del Cristal Púrpura?

Miró furtivamente a Lian Chengyu, que aún tenía una sonrisa tranquila en su cara. Lian Chengyu de vez en cuando miraba la caja que contenía el hueso desolado con una mirada maníaca en sus ojos.

—Ese tipo no ha notado los puntos de luz...

Con eso, se relajó. Si ni siquiera Lian Chengyu podía verlo, entonces nadie aparte de él podía.

¡Él estaba aún más convencido de que el Cristal Púrpura era un tesoro maravilloso!

En ese momento, Lian Chengyu volteó su mirada hacia Yi Yun con una sonrisa significativa.

Caminó hacia delante y se puso delante de Jiang Xiaorou.

—Esa comida es una recompensa para ti. Tómala, no mueras de hambre. Si es insuficiente, ven a buscarme —dijo esas palabras en voz baja. Su voz era agradable, pero sus expresiones y tono eran de superioridad. Todo lo que daba, también podía recuperarlo.

Jiang Xiaorou se quedó callada. A Lian Chengyu no le importó, ya que la admiraba por su terquedad cuando se distribuyeron las raciones. Eso no significaba que le gustase su actitud obstinada hacia él, sino que estaba decidido a quitársela lentamente hasta que ella se volviese tan obediente como un gatito.

Lo que él quería era una sirvienta obediente, no una dama que necesitase ser persuadida.

Con un hermano a su lado, tenía algo a lo que aferrarse y por lo que mantenerse decidida. Eso no era lo que quería. Además, la madre de Yi Yun la había adoptado y no tenían parientes consanguíneos. A Lian Chengyu no le gustaba el hecho de que los hermanos no consanguíneos viviesen juntos.

Además, Yi Yun había agitado a las masas y casi causó una conmoción. Se tomó a pecho que un niño de doce años pudiese ser tan intrigante. Definitivamente sería una amenaza cuando creciese.

Lo que quería era que la gente fuese obediente, que fuese su peldaño, no gente conspiradora como Yi Yun, la cual era difícil de controlar.

Como el hueso desolado estaba a punto de ser refinado, era un gran problema para Lian Chengyu. Estaba dispuesto a pagar cualquier precio para que tuviese éxito.

No quería ninguna incertidumbre ya que estaba a punto de aislarse para entrenar. Además, el hueso desolado tenía un problema, ¡refinarlo terminaría en muertes!

Con la escasez de alimentos y la gente muriendo, era fácil incitar a la ira pública. Tenía miedo de que ocurriese una rebelión mientras se entrenaba en aislamiento. Podrían voltear el caldero donde se estaba refinando el hueso desolado. Si sus planes eran destruidos, matar a todos ellos no tendría sentido.

Desde el punto de vista de Lian Chengyu, Yi Yun lo odiaba y no tenía ni un rastro de miedo ni de respeto hacia él.

Yi Yun ya tenía antecedentes de incitar al caos. Si buscaba venganza mientras incitaba a la gente debido a la hambruna y a las muertes mientras estaba aislado, podría ser la chispa que significase el desastre.

Pensando en eso, volvió a sonreír y volvió a golpear suavemente el hombro de Yi Yun.

El corazón de Yi Yun dio un vuelco, pero antes de que tuviese tiempo de reaccionar, la mano de Lian Chengyu ya estaba sobre su hombro.

—¡Mierda! —deseó poder cortarle la mano. ¡Sentía que Lian Chengyu era tan siniestro como una serpiente venenosa!

Lian Chengyu dijo fríamente: —¿Por qué estás nervioso, tienes miedo de mí? Tú y tu hermana no lo tienen fácil. Cuida de tu hermana.

Dicho eso, retiró su mano y Yi Yun volvió a sentir ese entumecimiento.

Lian Chengyu le había tocado los hombros dos veces, pero no pudo hacer nada al respecto.

—Si hay algún problema, búscame a mí—dijo a Jiang Xiaorou. Siempre estaba sonriendo.

Yi Yun frunció el ceño, ya que sintió que Lian Chengyu estaba loco por su hermana.

—Debe ser eso. No es de extrañar que nos diese tanta comida, si no fuese por su codicia sobre Jiang Xiaorou, probablemente no le habría importado en absoluto. No hay otra razón para que nos repartiese la preciosa comida.

La cosa de acercarse a él si había algún problema arrojaba luz sobre sus pensamientos. Si Jiang Xiaorou fuese a ir con él, cosas indescriptibles definitivamente le pasarían.

Con un movimiento de la mano de Lian Chengyu, los guerreros del campamento de preparación de guerreros sellaron la caja que contenía el hueso desolado.

En el momento en que fue sellado, Yi Yun sintió la conexión entre el Cristal Púrpura que tenía y el hueso desolado desaparecer. Los puntos de luz también desaparecieron poco después.

—Eso…

Algo surgió en la mente de Yi Yun cuando vio a los miembros del campamento de preparación de guerreros llevarse el hueso desolado.

—Yun'er, ¿qué tienes en mente?

De camino a casa, Jiang Xiaorou sintió que Yi Yun no estaba prestando atención y ahora estaba frunciendo el ceño.

Yi Yun no podía estar despreocupado, pues una serpiente venenosa como Lian Chengyu le había dado dos palmaditas en los hombros. Se desconocía lo que había hecho. Él no se lo dijo a Jiang Xiaorou porque no quería que se preocupase. Además, ella todavía era joven y no podía ver a través del lobo con ropa de oveja que era Lian Chengyu.

Inesperadamente, Jiang Xiaorou dijo de repente: —Yun'er, ese Lian Chengyu, debes tener cuidado con él. Trata de evitarlo si es posible.

Las palabras de Jiang Xiaorou aturdieron a Yi Yun durante un tiempo. No esperaba que ella tuviese una intuición tan aguda.

De hecho, el comportamiento de Lian Chengyu no podía ser reprochado en la superficie. Era un Joven Maestro que estaba preocupado por su gente, un amable y respetado líder de clan tribal.

Yi Yun fue capaz de sentir sus motivos subyacentes al ver los actos de varios políticos en la Tierra. Gente como él podía ser encontrada en libros históricos y noticias internacionales. Él solo podía sentir hipocresía cuando escuchaba las palabras de Lian Chengyu. Esa perspicacia no era algo que los pobres que sufrían pudiesen tener.

Para él, las dos palmadas en sus hombros claramente explicaban su hostilidad.

Se quedó perplejo ante el hecho de que Jiang Xiaorou fuese capaz de sentirlo.

—De todos modos, evítalo.

Al escuchar las palabras decididas de Jiang Xiaorou, se dio cuenta de que no comprendía plenamente a su hermana.

Ya fuesen los huesos desolados, los monstruos desolados, o su intuición, incluyendo su extrema belleza en comparación con las otras chicas de la tribu, la hacían destacar en el pobre clan tribal...

Como esperaba Yi Yun, la cena consistió en verduras silvestres y gachas de avena.

En ese mundo, la gente sólo comía dos veces. Un día típico comenzaba a las 5 de la mañana antes de que desayunasen a las 9 de la mañana. Por supuesto, el desayuno era sólo la forma en que Yi Yun lo llamaba; allí lo llamaban de otra manera. Finalmente, la cena era a las 4 de la tarde.

Yi Yun entendió que, en la antigua China, la gente sólo comía dos veces, como en ese extraño mundo. En una situación de escasez de recursos, comer dos veces al día probablemente era la forma más científica y óptima de sobrevivir.

Mientras comía, Jiang Xiaorou se sintió un poco culpable por no haber podido conseguir carne para su hermano.

Yi Yun no se lo tomaba a pecho mientras estaba ocupado pensando en las dos palmaditas en su hombro. Todo era especulaciones y sospechas de su parte; no tenía ni idea de lo grave que sería.

Después de terminar un tazón de avena de grano, justo cuando estaba a punto de comer unos cuantos bocados de verduras silvestres, sintió que su brazo se adormecía y dejó caer sus palillos.

—Yun'er, tú...

Yi Yun gruñó, ya que su mano izquierda no podía moverse. ¡Le dolían los dos brazos, como si alguien se los estuviera rompiendo!

—¡Yun'er!

La cara de Jiang Xiaorou se puso pálida, ella no sabía lo que le estaba pasando a Yi Yun y rápidamente lo ayudó a acostarse en la cama.

—¡Maldita sea!

Su brazo Yun estaba lleno de dolor mientras apretaba los dientes. Sin duda, ese era el trabajo de Lian Chengyu. ¡No había adivinado mal!

No se sabía que método había usado Lian Chengyu, pero con la disparidad en el poder, incluso si había sentido la enemistad, no tenía forma de evitarla.

Esa era la ley de la selva donde los fuertes determinaban el destino de los débiles.

—Yun'er, ¿cómo estás? ¿Es un efecto secundario de tu caída mientras recogías hierbas?

—Yo…

Cuando Yi Yun abrió la boca, se dio cuenta de que su lengua se había adormecido. Experimentaba un aumento gradual de la parálisis en todo su cuerpo.

Comenzó a darse cuenta de que el momento en que perdiese todo sentimiento en su cuerpo sería el momento de su muerte.

¿Lian Chengyu quería su vida?

Estaba conmocionado y enojado. ¡Si no adivinaba mal, Lian Chengyu había transmitido alguna forma de energía como 'Qi' que estaba destruyendo sus meridianos!

Un niño normal de doce años no habría sido capaz de entenderlo. Incluso el propio Yi Yun habría pensado que era un efecto secundario de sus viejas heridas.

Después de su muerte, además de Jiang Xiaorou, nadie lloraría por él. De hecho, muchos pensarían que estaba predestinado a estarlo: ¿cómo podría una persona muerta revivir de repente?

Al matarlo misteriosamente Yun, Lian Chengyu no sólo se vengaría de la incitación de la multitud, sino que también recibiría la buena voluntad de la gente.

Jiang Xiaorou se encontraría en una situación grave y sufriría las consiguientes dificultades en la vida. Incluso podría acercarse a Lian Chengyu, que podría ganársela fácilmente utilizando tácticas de conciliación.

Matar a Yi Yun y obtener a Jiang Xiaorou, ¡qué plan tan venenoso!

Adquirió una comprensión más profunda de ese mundo. Esa no era la sociedad legal de la Tierra. Ese era un lugar brutal y primitivo donde el poder lo determinaba todo. Era como un mundo apócrifo, como en las novelas, donde matar a alguien no era nada...