28.2: Regreso a casa

Nota del autor:

He creado una página de patr eon. Si quieres apoyar mi trabajo, por favor visítala. Ahí se pueden encontrar 6 capítulos adelantados para los mecenas, pero solo en español, ya que aunque tengo un montón de capítulos acumulados aún no los he traducido todos.

https://www.patr eon.com/finlegost

Pueden encontrar los conceptos artísticos de los personajes:

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Llegamos a la capital y ya está bien entrada la noche cuando dejamos a Sabrina en la puerta de su casa, ya que es la única que vive en el círculo exterior de la capital.

Antes de despedirnos, acordamos reunirnos a la tarde del otro día en el gremio para repartir las recompensas del viaje.

Tras pasar la segunda muralla nos dividimos, partiendo cada uno hacia nuestros respectivos hogares.

Decido no despertar a Ragnar y Julia, ya q es muy tarde, por lo que entro en silencio a la casa y, haciendo el menor ruido posible, subo a mi habitación.

Despierto al mediodía y, tras estirarme un poco en la cama, bajo con Azur en mis hombros a saludar a Julia y Mia, mientras pienso, divertido, en la expresión que pondrán cuando me vean.

Al llegar al primer piso, veo a Mia dibujando aburrida en el comedor.

"hola" digo y la veo levantar la cabeza confundida. Pega un grito y se lanza con los brazos extendidos hacia mi como si quisiera abrazarme. No creí que me hubiera extrañado tanto, pienso. Siento a Azur saltar de mi hombro y volar hasta Mia, quien lo abraza y, pegando media vuelta con Azur en brazos, sale corriendo escaleras arriba, ignorándome.

Parece que no me extraño a mí en específico, pienso mientras la miro subir las escaleras estupefacto. Escucho la voz de Julia procedente del almacén.

"¿qué paso hija? ¿Porque el grito?" y, como no tiene respuestas la veo asomarse por la puerta. Al verme corre hacia mí y me abraza diciendo "bienvenido a casa"

"hola, veo que al menos uno de los habitantes de esta casa si me echó de menos" digo y le explico lo sucedido con Mia.

"no te lo tomes a pecho. Seguramente pensó que yo querría hablar contigo, y por eso grito antes de irse" dice, con una sonrisa en el rostro.

"seguramente" digo y le devuelvo la sonrisa "¿quieres que te hable del viaje?"

"seguro" dice, ensanchando su sonrisa, mientras señala las sillas junto a la mesa para que nos sentemos.

Le explico la historia del viaje y me da una regañina cuando le cuento lo de los ghouls. Cuando por fin deja de sermonearme, continuo con la historia y, al llegar a la parte del hombre/goblin, la veo apretar sus manos hasta tener los nudillos blancos.

Al terminar el relato le digo "por eso quisiera la opinión de Ragnar. No sabemos qué hacer con el cadáver, pero nos pareció que no podíamos dejarlo en el bosque"

"Ragnar no está... Se fue unos días después que tu partieras. Le llego la carta de un amigo pidiéndole ayuda con algo. Como ya viste en la aldea a la que fuiste, la capital está teniendo algunos problemas para encargarse de los encargos de las aldeas que, antiguamente, eran protegidas por los soldados del Pueblo Encrucijada. Joaquín se queja de eso cada vez que viene. Y no es por falta de soldados, es más que nada una cuestión de logística... Pero no es algo de lo que tu tengas que preocuparte... Creo que deberían llevar el cadáver al gremio, así como los cuerpos de los monstruos y animales que hayan recolectado. El gremio se encargará de chequear si el tipo tenía precio por su cabeza y sino..." dice y, tras dudar un momento, continúa "no tendrán ningún problema, ustedes simplemente actuaron en defensa propia y los del gremio no son tontos. Saben que nadie llevaría el cuerpo de alguien inocente para intentar cobrar una recompensa"

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Seguí hablando con Julia por un rato y, cuando la hora que había acordado con mis compañeros se está acercando, llamo a Azur a través del vínculo.

Viene volando enseguida, seguido de Mia, a la que no me hace ninguna gracia el que me quiera llevar a su compañero de juegos tan pronto. Hace un berrinche y, al final, decido dejarlo con ella.

Azur tiene un límite de distancia al que puede estar de mí, ese límite es de 6 km ya que ha aumentado con la subida de nivel de la habilidad, por lo que no debería haber un problema, aunque no me simpatiza la idea de alejarme tanto de mi compañero.

Al llegar veo que Joseph y Agustín ya me están esperando. Los saludo y al rato llega Sabrina. Les comento lo que hable con Julia y, siguiendo su consejo, decidimos presentar el cadáver al gremio.

Parece ser que el sujeto si tenía una recompensa por su cabeza. Era un monstruo, y no solo de apariencia...

Había sido un soldado del Pueblo Encrucijada que, al sobrevivir en una lucha contra bandidos, obtuvo la habilidad de adquirir las capacidades de las criaturas que comía. Después de adquirir la habilidad, el hombre se volvió más y más violento. Hasta que asesino a un compañero y huyo.

Desde entonces le perdieron el rastro y, aunque de vez en cuando aparecía en alguna aldea y protagonizaba una matanza, nunca encontraron su guarida.

La recompensa fue de 500 monedas de oro. Eso sumado a lo que obtuvimos por los ghouls, goblins y lobos, el pago del anciano jefe de la aldea y el pago del transporte que traen Agustín y Joseph; nos deja con 405 de oro para cada uno.

No puedo creer la cantidad de dinero que logramos hacer con un viaje de unos cuantos días, pero supongo que tuvimos bastante suerte. Podríamos haber terminado malheridos o muertos en alguno de los percances que tuvimos.

"esto hay que celebrarlo" dice Joseph pegando saltitos mientras camina, cuando salimos del gremio "¿alguna idea?"

"¿qué tal si vamos a la playa?" pregunta Sabrina, mirándonos alternativamente.

"A mí me parece bien" digo, me da un poco igual donde vayamos.

"a mí también" dice Joaquín "podría aprovechar para llevar varios diseños de dagas para que elijas el que más te convence, ya que cuanto antes lo acordemos antes podre ponerme a trabajar en ella"

"¡entonces está decidido! ¿Salimos mañana a las 9 de la mañana por la puerta sur de la muralla exterior?" pregunta Joseph.

"¿estás loco? Piensa en la hora a la que tendríamos que despertar ustedes dos y yo para llegar a tiempo" digo consternado "¡¡yo quiero dormir algo antes de celebrar!!"

"tranquilo dormilón que no pensaba amenazar tu sueño" dice Joseph riendo, dándome una palmada en la espalda "Tienes que pensar que ahora tenemos mucho dinero ¡podemos alquilar un carruaje para que nos lleve a la playa! Tardaríamos como mucho una hora en llegar a la puerta sur y desde ahí, tras recoger a Sabri, un poco más hasta la playa"

"hmm, ok" digo escuetamente. No había pensado en la posibilidad de alquilar un carruaje, pero supongo que tiene sentido si queremos ir y venir durante el día.

"tráete varias pociones de mana" dice Sabrina, mirándome " mañana te voy a enseñar a realizar la bomba de mana"

"¡genial!" digo entusiasmado.

"yo me encargo de la comida y las otras cosas que podamos necesitar" dice Agustín "pero si alguien quiere traer algo siéntanse libres de hacerlo"

Tras hablar un poco más, nos despedimos y vuelvo a casa con una sonrisa en el rostro por más de una razón.

Tengo bastante dinero en el inventario, mañana voy a aprender un nuevo hechizo y mis amigos son increíbles ¿Qué más puedo pedir?