Capítulo 4: Mi inspiración

Cuando termino el combate, todos los estudiantes se dirigieron al centro de la arena en donde estaban Ryuji y los demás, que se encontraban aun recuperando el aliento. El ambiente en el área a pocas leguas eran animados, nadie sabía cómo tomar este resultado.

Algunos parecían querer acercarse a Ryuji, otros estaban verificando el estado de los que aún se estaban levantando.

Jimy Marz había recuperado la conciencia y de inmediato entendió la situación al solo ver a Ryuji de pie. Él frunció el ceño brevemente, pero al instante se calmó y solo se levantó del suelo.

Aunque Ryuji estaba cansado, todavía tenía una visión clara de la situación. Había ganado, consiguió dar un nuevo paso para conseguir ser un Ripper. Pero este momento, ¿Por qué se sentía tan deprimente? Todos murmuraban y lanzaban miradas despectivas hacia él. Sin embargo, Ryuji lo entendió luego de pensarlo un momento.

Si lo que nunca llegaste a esperar ocurriera, tampoco sabrás lo que harás cuando pase.

Ese pensamiento cruzó por su mente y solamente una sonrisa incómoda se reveló en la esquina de su boca.

-Muy bien. Con este resultado ya podremos continuar con las actividades normales, incluso si estamos a mitades de un torneo, nosotros debemos de seguir trabajando por nuestra cuenta.

Dijo Alan Koznet, mientras se acercaba a los estudiantes.

-Narukami, ahora que vas a hacer unos de los participantes, tienes que tener la responsabilidad de tu propia condición. Las fechas de los combates se mostrarán en unos días y tendrás tiempo para prepararte; aún podrás venir a las actividades del Club como siempre. Pero eso dependerá de ti, ¿entendiste?

-Sí, entrenador. Y… ¿También puedo decir algo?

-¿Qué cosa?

Por cómo se estaban dirigiendo las cosas, la conversación pudo haber terminado en ese momento. Había una pisca de nervios en la voz de Ryuji. Estaba tan nervioso de lo que iba hacer, que no estaba totalmente seguro del cómo iban a reaccionar. Pero no podía dejar pasar esto por alto.

Ryuji dio un paso y se paró frente a los estudiantes tensos. La atmosfera que había alrededor parecía cósmica. Manteniéndose con la misma actitud, Ryuji bajo ligeramente la cabeza.

-¡Muchas gracias a todos!

-... Eh…

Una respuesta monótona se escuchaba en medio del silencio. Nadie sabía cómo reaccionar a esas palabras que decía Ryuji. Sin ninguna explicación, uno de los estudiantes pregunto.

-¿De qué estás hablando?

-Hablo de que gracias a ustedes pude llegar hasta donde estoy, y ahora puedo seguir confiando con lo que aprendí de todos ustedes.

-...

Nadie tenía palabras.

Reuniendo toda su concentración en hallarle un sentido a lo que decía Ryuji era una cosa casi imposible. Pero algo se sentía extraño, había algo que no podía dejarse de lado, y que hasta este momento no se hacía presente.

-Yo no sabía muchas cosas acerca de combates con armas reales, y eso me llego a afectar en muchas maneras. Por esa razón les doy gracias a ustedes por haberme enseñado en este poco tiempo.

-… ¿A qué viene eso ahora? Nosotros… yo, ni siquiera te tomaba en cuenta y hasta no me importaba lo que hacías.

-Eso lo sé. No digo esto para que se compadezcan de mí. Solo es algo que tenía que decir, y es todo.

Con eso dicho, las palabras de los chicos se contrajeron colocando miradas vacilantes. Ya era un hecho de que Ryuji no era aceptado ni respetado hasta que mostró sus verdaderas habilidades. Al mencionarlo y ver que también se había dado cuenta de eso, no parecía tener ningún rencor o resentimiento hacia ellos.

Era difícil responder ahora que llegaron a esta situación, con sentimientos vagos de culpa y remordimiento atacándolos. Ni siquiera sabían ahora cómo proceder a mirarlo o hablarle desde ahora.

-¡Oye, tú!

-¡…!

Jimy se acercó gritando hacia Ryuji, llamando la atención de todos.

Aún parecía estar agotado, pero de todas maneras se plantó frente a Ryuji que parecía estar atento. Ambos se miraron unos segundos y Jimy fue el primero en hablar.

-¿Lo que dijiste antes era verdad?

-¿Antes…?

-Dijiste que querías ser un Ripper para después ser el <King of Heaven>, esa locura salió de tu boca antes, ¿Eso es verdad?

El tono de sus palabras eran serios, no había ningún rastro de malicia en ellas. Era una pregunta simple y sincera. Sin desviar su vista de Jimy, Ryuji respondió con la misma seguridad.

-Por supuesto. Jamás mentiría con algo así.

A pesar de seguir teniendo el ceño ligeramente fruncido. La mirada de Jimy parecía estar satisfecha por la respuesta de Ryuji.

-Aunque seas un Singular, no hay dudas de que lo que hiciste hoy fue barrer el piso con todos. Respetaré eso, incluso si no creo totalmente en que puedas lograrlo.

-Estas dándome un cumplido, ¿no…?

-No lo pienses demasiado, me vengaré de ti el próximo año. Sin embargo, ahora que ganaste esta vez, debes saber que ahora nos representas a todos los de 1ero, por lo que si haces el ridículo nos harás ver mal, ¡y te patearé el trasero si eso pasa! ¡Así que, no se te ocurra perder, Narukami!

Ryuji permaneció atónito por un momento. Jimy había reconocido su fuerza y también el cambio de su comportamiento al referirse a él. A su manera de ver las cosas, ya no podía seguir viendo a Ryuji como alguien inferior. Y el simplemente hecho de admitirlo era algo difícil, por lo que no puede evitar molestarse consigo mismo.

Sintiéndose de esa forma cambio rápidamente y se giró hacia sus compañeros.

-¡Ustedes también, este chico acaba de ganarnos, por lo que deberíamos de asegurarnos de que no lo humillen! ¡Así que desde ahora tendremos que entrenarlo sin piedad, comenzando desde ahora!

-¿Eh?

-Marz tiene algo de razón. ¡Prepárate, Narukami!

-¡¿Qué?! ¡N-No, esperen!

En un cambio repentino, los estudiantes corrieron hacia Ryuji para intentar alzarlo con la excusa de molestarlo. No había ninguna modo de prever esas acciones e intento escapar, fracasando en el proceso.

Talvez porque aún estaba herido o porque no estaba acostumbrado a ese trato con las personas. Pero en todo ese rato pareció estar incómodo, aunque solo un poco.

El entrenador se quedó observando el cómo balanceaban a Ryuji como un juguete. Entonces reviso unos papeles que tenía con él y llenaba unos espacios. Los documentos finales para que comience al torneo <Renew Entis> se debía de entregar ese mismo día.

Con lo ya sucedido solo faltaba entregar la información del último participante que faltaba.

Y de esa forma, Ryuji se convirtió en el primer Singular en entrar al torneo para aspirantes a Ripper.

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-Desde el punto de vista de Ryuji-

Cuando terminaron las actividades, cada uno fue obedientemente a sus clases, aunque tengamos permiso para saltarnos un tiempo de las clases rutinarias, aún debíamos de asistir. Sin embargo, yo no fui a mi salón de clases, sino que ahora me estoy dirigiendo a la enfermería de la Academia.

Los chicos se tomaron en serio con lo de celebrar mi victoria e intentaron lanzarme por los aires como un costal, eso hizo que las heridas que había recibido se abrieran más y me empezara a desangrar.

¿A quién se le ocurre agitar a alguien con heridas en el cuerpo? Por suerte se detuvieron antes de que se volviera algo mucho peor.

El entrenador me ordeno que fuera a que me atendieran y también explícitamente que descansara. Ya no podía seguir forzando mi cuerpo más de lo que ya estaba. Ahora que oficialmente soy uno de los participantes del torneo, podría relajarme un poco al menos.

Eso mismo es lo que haré, he pasado las últimas semanas pasando de entrenamientos y más entrenamientos, que si sigo así estoy seguro que enloqueceré. El entrenador dijo que en los próximos días solo serán para hacer las preparaciones y saber el orden que serán los futuros encuentros. En este tiempo lo usaré para estudiar un poco más para hacer feliz a la profesora Davis, tener la excusa de estar ocupado en el Club, ya no funcionará con ella ahora que se sabrá que estoy en el torneo. Intentaré mantenerlo en secreto lo más que pueda, pero no me hago muchas esperanzas por lo rápido que se esparcen las noticias aquí.

De momento eso es lo que haré, aprovecharé este tiempo libre otra vez, para en verdad pasar un tiempo libre.

Con eso en mente me puse en marcha.

Había llegado por fin a la enfermería, era una habitación muy amplia para ser claros. Lo suficiente para que pudieran caber 8 camas alineadas una tras otras. A esta hora la mayoría se encontraba en sus clases, por lo que no había nadie.

Aunque solo se usa este lugar cuando haya alguien enfermo o se lastime, por lo que sería un lugar muy especial y especifico. Es bueno que no haya nadie, eso significa que no hay nadie en peligro y que se encuentran todos sanos, ¿no?

En fin, en el momento que entre, la persona encargada de este lugar se dio cuenta de mi presencia con una expresión algo nublada y cansada.

-Oh… ¿Alguien llego? ¿Quién es a esta hooo-? ¡Aaah, ¿y a ti que te paso?!

-¿Me creerías si te dijera que me caí de unas escaleras?

Nada más al verme su expresión fue de terror y preocupación. Fue algo sorprendente al ver como se cayó de la silla al intentar levantarse.

-Cielos, Narukami ¿Qué voy a hacer contigo? Haces que mi trabajo sea más estresante, ¿sabes?, ¿Ya cuantas veces has venido aquí en el último mes?

-Creo que unas cinco, pero eso hace que su trabajo valga la pena, ¿no?, doctora Valerie.

Esta persona es Miss Valerie, y es la encargada del área de enfermería de la Academia. Una mujer que aún está en sus 20, estaba usando una camisa de botones de color rosado, aunque en la parte del pecho está desabotonado, exponiendo ligeramente su gran pecho; también usaba su respectiva bata blanca y una falda negra que acentuaba sus curvilíneas caderas. Su piel era de un blanco lechoso, y de cabello cortado hasta los hombros de color castaño claro con un tono grisáceo.

En los últimos tiempos no tan lejanos, he llegado a tener varios percances para no decir otra cosa; en las actividades del Club había sido recurrente recibir heridas muy feas, por lo que debía de ser atendido. Este es el lugar al que venía, ya que estaba más cerca y no quería molestar a Rena con esto. En ese entonces conocí a esta mujer, al principio nuestras interacciones se encontraban en lo básico de ser, doctora y paciente, eso era lo normal y las cosas se mantuvieron así en los primeros días. Ya después de venir más de 4 veces a la semana, era algo inevitable que llegáramos a hablar entre nosotros con más naturalidad.

Aunque ella no dejaba de verme preocupada en cada momento, ya que no es normal que un estudiante se lastime con mucha frecuencia, por lo que a veces llega a pensar que algo malo pasa conmigo. De hecho, aún lo sigue haciendo, pero no tengo excusas que darles. Aunque esta vez sí tengo una, y una muy buena.

Mientras le explicaba lo que había pasado, ella comenzó a limpiar y desinfectar las heridas sangrantes para después vendarme. Tuve que quitarme la camisa que se encontraba rota y manchada, por lo que ahora estoy solo con el torso desnudo. La habitación se siente fría y el aroma del lugar huele a alcohol y desinfectante.

Valerie había terminado en vendar mis brazos, pero cuando tocaba a atender la herida que tenía en el pecho, se mantuvo en silencio observándolo. Era la herida que me había hecho la alabarda de Marz, cuando me ataco con ese movimiento sorpresa que lo esquive por los pelos.

Me había dejado una cortada vertical como de unos 11 cm, una línea roja brillante era totalmente vista.

Cuando me preocupaba por la gran observación hacia mi cuerpo, me preparaba para preguntar. Pero eso fue interrumpido por ella.

-Una herida como esta se debe de usar otros métodos o si no te quedara una cicatriz. Ya tienes demasiadas, ¿y no quisieras otra verdad?

-Realmente no me importan las cicatrices en realidad.

Si lo hiciera no haría algo tan peligroso como esto.

-Talvez a ti no, pero a algunas mujeres sí. Unas pocas cicatrices te harían ver un poco más varonil, ¡pero ya tienes demasiadas! Solo vas a dar una mala impresión de ti mismo.

-Oh, así que hablabas de eso. ¿Entonces que se hace en estos casos?

-Voy a emplear Retrieve. Así que no te muevas.

Valerie dijo eso y coloco una expresión seria de repente. Puso sus dos manos cerca de la herida en mi pecho, pero sin llegar a tocarme, y en unos segundos, de sus manos comenzó a salir brillo blanco semitransparente.

-Eso es Aura, ¿verdad?

Esas fueron mis palabras después de ser testigos de tal momento. Valerie asintió levemente y me explico acerca de esta habilidad.

Sin ninguna duda, esta habilidad ligada al Aura llamada Retrieve; es una especializada en el área de curación más que todo, aquellos que tengan un nivel de Aura aproximados a la 3ª etapa pueden usarlas. Sin embargo, se debe de poseer un gran control y entendimientos básicos en medicinas para poder llevarla a cabo. El funcionamiento de este es usar tu propia Aura para acelerar el proceso regenerativo natural de la persona. No es como si se pudiera restaurar una extremidad cortada o algo parecido, lo único que hace es sanarte más rápido. Aunque tengo una duda.

-Creí que el Fortress era lo primero que se debía de aprender para usar el Aura.

-Eso es porque mi especialidad no está en esa área. Tampoco es que no pudiera hacerlo, solo estoy enviando mi Aura hacia mis manos y pasarlo en un punto en concreto de tu cuerpo. Sin embargo, en esta habilidad no es importante la cantidad de Aura que poseas, potenciarlo no hará que te cures más rápido. Si no que cuantos más conocimientos tengas en medicina, el resultado será más rápido y eficiente.

Entiendo, entonces si un doctor o un especialista utilizan Retrieve podría hacer trabajos más complejos y eficientes. El conocimiento también es un punto importante a la hora de hacer cualquier cosa. El Aura también puede usarse de esta manera y no solo para el combate, aprendí algo nuevo hoy. Oh, ya termino.

-¡Listo! Ves, ni siquiera hay una cicatriz.

-Increíble…

La gran línea roja que enmarcaba mi pecho se fue, como si nunca me hubieran herido. De inmediato le doy las gracias a Valerie, a la cual parece satisfecha, aunque otra vez me dio una advertencia.

-Si vuelves a tener heridas así, será mejor que vengas para sanarte. Si pasa mucho tiempo la herida se mantendrá, y aunque usara Retrieve, la cicatriz será permanente, ¿entendido?

-Entiendo, gracias.

Parece que hay consecuencias que ni el Aura puede curar. Entonces ya no se pueden curar las cicatrices que han pasado mucho tiempo…

Por reflejo puse mi mano en mi muslo derecho al escuchar lo que dijo, solamente pude echarme a reír y vestirme para salir.

Debo de tener cuidado más adelante, ya sea por ser herido con armas o hasta si llegara a quemarme, también parece que no se puede hacer nada por la sangre que perdí, así que me siento algo anémico.

Luego de ser atendido me despedí de Valerie, me dirige a mi siguiente parada que sería mi salón de clase.

Creo volverán a verme con ojos extraños de nuevo.

Pero no importa, ¡Hoy soy un ganador!