El ladrón y el casino. Los rubíes, ojos del ídolo relucientes. Un desastre la operación. -

El ladrón y el casino. Los rubíes, ojos del ídolo relucientes. Un desastre la operación. -

 Este lugar es una maravilla, lo que pasa en Grand Park, Se queda en Grand Park.-

Un enorme palacio subdividido en muchas plantas llegando a una altura colosal desde una parte simple de subsuelo. Era toda una ciudad de diversión desde que se ingresaba. En ella encontraba todo tipo de seres de cada parte del universo, jugando y realizando sus deseos mundanos. Las fachadas poseen pilares extensos con figuras de dioses de todo tipo. Estatuas del tamaño de una nave gigante adornaban cada sector. Luego un gran laberinto en el cual perderse como parte de las actividades lúdicas. Los chelines (dinero) que corrían por aquel mundo era de una magnitud que podría alimentar a toda una galaxia. Ingresamos por el sector principal en la cual nos encontramos una puerta enorme de aceró con detalles de rostros sonrientes. Al abrirse dos guardias gigantes. Semi humanos. Mitad tor (toros) mitad ser humano terrícola. Poseían hachas enormes y sus miradas pétreas significaban que una vez dentro si se infringían las reglas no saldríamos. Ese era el precio en el Grand Park. Muchos famosos, magnates, mercenarios, políticos y demás calumnias del mundo, submundo, y bajo mundo, venían a beber de la gran teta de la madre del Pan y Circo como he escuchado en mi incursión en el planeta tierra. Entonces pasábamos del otro lado. Un ser semi pulpo nos recibía.

- Tenemos recebas –

- ¿Señor y señora Frent, su hija y su criado?

- Así es estimado- Expresé con cierto agrado

- ¡Gracias!

- ¡¡OHH!! – Muchos hombres, y seres masculinos se iban acercando ante Caciope. Debía admitir que su belleza era descomunal.

- ¿Señorita, quisiera acompañarme en un trago?

- ¡Disculpe! No será posible.

- Es una terrible pena

- ¡Ejeem! ¡gppp! – Produje un gesto de Tos llevando mi mucho a la boca –Discúlpenos

- ¿Y Usted?

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- Buenas tardes, mi nombre es Lord Frent, y ella es la señora Frent.

- ¡Ahh!..¡Es casada!. – Expresa un tanto cabizbajo. ¡De todas maneras!

- No…. – Dijo Mikonos con sus ojos ensañados en aquel ser repulsivo – Ahora, si nos disculpa.

Y nos retiramos

- ¡Ey Mikonos, ten cuidado, o te la van a robar! ¡Ja! ¡Ja! – Se ríe Louis

- Deja de decir tonterías – Se coloca en una posición de pura seriedad.

- ¡Cállense ustedes dos! – Se pone celosa Lerna.

- Tú ve a tomar tu tazón de leche. Niña

- ¡¿A quién le dices niña?! – Saca su daga de su bolsillo Lerna

–

- ¡¡Shh!! – ¡Guarda eso!!! – Pide calma Caciope. – ¿Y ustedes quieren dejar de bromear?

A Caciope se le seguían acercando hombres, y otros seres. El a sonreía

- ¡¡Ey Caciope!!..¡Olvida eso de coquetear!!

- No estoy coqueteando tonto. Es una forma de hacer negocios. Hay muchas personas adineradas. Y no es culpa mí ser una dama bel a ¿O acaso?..¿Estás celoso? – Expresa con animosidad. -

- ¡Claro que no mujer! Éste lugar es enorme –

Estábamos en una sala de tantas. En ella había un decorado de plata y oro en las paredes. Con muebles de muchas partes de otros planetas y sus culturas antigua. Un moz de etiqueta (mozo) llevaba una bandeja sirviendo aperitivos de alcohol con lima (limón)

- Por favor les dejo aquí sus bebidas estimados y estimadas.

¿La menor toma también?

- Claro que si – Expresó Lerna, y recibió uno por su cuenta, sin pedir permiso. -

- Eso lo decidiremos con tu madre – Dije aplacando un poco la situación. Louis se había metido a observar un poco el arte para realizar un estudio del perímetro visual.

- Hija, no seas así –Se disculpó Caciope fingiendo. El mozo se retiró

- ¿Por qué tengo que pasar por una niña?

- Porque eres la más pequeña de estatura, y aparentas esa edad. – Expresa en voz baja. -

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- ¡¡Dios!!..¡Detesto todo esto!

- Hagamos rápidamente el trabajo.

La noche anterior habíamos estudiado los planos del sitio según las fuentes de Louis. Era la torre principal que guardaba los rubíes. Una cámara custodiada con alarmas infrarrojas que se activaban desde la persección de cien metros. Salvo para quienes tuvieran un censor especial. Para llegar al í había un ascensor que solo podía tomar el personal encargado. Las cámaras eran robots milimétricos que pululaban como microbios. Eso hacía mucho más difícil escapar y pasar por allí con el monitoreo constante. Debajo había otra habitación, o sala muy amplia. Allí estaban los guardias que iban y venían. Nos faltaba un punto especial. Aquellos rubíes guardados en caja fuerte, tenían trampas por doquier. Que al activarse producía que se cerrase todo el sector terrestre. Los guardias saurios, y semi todos-humanos estaban en otra cámara directa a ella, dispuestos a atacar. No sabemos a ciencia cierta quién ideo todo este sistema tan intrincado.

El líder, jefe es un empresario muy poderoso. Aunque nadie lo ha visto jamás. Se dice que no es uno, sino varios. Ideamos una manera interesante. Y es entrar por la cúpula. A una distancia de altura del edificio, utilizaré un sistema de alpinismo. La altura es bastante peligrosa por el oxigeno, pero mi capacidad de semi humano me permite aguantar el mismo, ya que los propulsores de oxigeno portátiles explotarían ante la fuerza de gravedad. Deberé subir rápidamente. Los demás generaran la distracción. Caciope también quería venir conmigo, pero es imposible para ella poder aguantar el tiempo estimado de ascenso y entrada a la cúpula. Sería un riesgo total e innecesario.

Luego para escapar. Les daré la señal y deberán salir antes. Yo saldré volando con un propulsor hasta hacer en una planicie descampada, fuera del radio de transmisión. El os me vendrán a buscar y fin de la historia. El plan es perfecto, el problema es que el tiempo debe utilizarse de forma exacta. Segundos que se vayan pueden ser fatales.-

Entramos en la sala de maquinas de monedas, y claramente Lerna se sentó en una de ellas. Sus ojos y entusiasmo al ver aquellas computadoras destellantes deslumbraron su capacidad cognitiva. Era un ente zombificado por el dios del juego y la diversión. -

- ¡¡¡Voy a probar suerte!!!

- ¿Qué haces? - Pregunta Louis frunciendo el ceño. –

¡¡¡Regresa aquí!!!

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- ¡¡Solo una ficha, y los dejamos!! – Y con solo un movimiento al sentarse en el asiento, sacó el primer previo al girar la palanca. -

- ¡¡Ganeee!!

- ¡Shh! ..No llames la atención – Dijo Mikonos – ¿Por qué no puede ser como Caciope? – Por cierto ..¿Dónde está ella? –

Pregunta volteando la mirada hacia todos lados en varias posiciones despitado. -

Señala Louis la otra sala.

- Colorado veinte - La casa se queda todo –

- ¡¡RAYOSSS!! ¡Otra vez perdí!¡¡Gr!! ¡Gr! - Golpea la mesa -

¡¡Puff!! -

- ¿¿¿¿Qué hacesss???? – Dije asombrado con enfado -

- Estoy jugando. ¿A ver? La ficha en el dos, y …Mmmm….el cinco, y está aquí –

- ¡Vámonos!

- ¡¡Lárgate!!…..¡¡Estupidizas mi estilo!! Noir…

- Treinta la casa se queda todo

- ¡¡Ohoo noo!! Te dije que te fueras…

- ¿No serás mala jugando? y no me digas Noir.. soy..

- Soy una gran mujer.. y tu vete de aquí…Estoy planeando….

- ¡¡Uhh!! –¡¡Qué remedio!!… ¡¡Solo no causes problemas..!!

¡Tengo suficiente!

- Tranquilo bello esposo

- ¿Señorita quiere que le invite un trago?

- ¡¡Oh gracias!!..¡Qué amable!

- ¡¡Bahh!! Y me fui refunfuñando - Louis, ¡¡¡Camarada!! Él, si es responsable– ¿Eh? – Louis se encontraba hablando con dos señoras mayores de sus hazañas, mientras tomaba varios martinis consecutivos

- ¡Louis! No bebas mucho ya sabes que ocurre

- ¡Hip! ¡Miki todo está de maravilla!..¿Saben? Éste tipo es mi amigo..y es el mejor ¡Hip! ¡De los mejores!

- ¿Que ya te emborrachaste?

- ¡¡Te quiero Miki, nunca cambies Hip!!

- ¡¡¡Oh dios!!! ¡¡Éste grupo es un desastre!! Estaré en la barra pensado.

- Brindo por eso – Y levantó la copa al cielo Louis Al llegar a la barra, pedí una bebida ligera Pel (Bebida con un poco de alcohol y jugo). A mi lado una mujer muy hermosa se aproximaba.

Y se sentó

- ¡Vaya! ¿Que tenemos aquí? Que sean dos pel

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- ¿Y usted? – Dije y me sorprendió – ¿Qué haces aquí?

- No seas terrible vine por los rubíes – Dijo ella. Sistina. –

- ¿Y cómo llegarás a ellos?

- No es bueno que te lo mencione, de todas maneras me preguntaba lo mismo de ti

- Es un secretó – Bebí un sorbo

- Brindemos

- ¿Eh?

- Por quien lo obtendrá primero, querido looter

- Es claro quién será

- Soy la mejor para éste trabajo

- Viniste con los monstruos de negro – Dije y al observar están allí. El saurio me guiña el ojo – ¡Que desagradable!

¡Auhh!

- Ya sabrás que el Mister, no le interesas no

- Claro no que.. solo quiere el ídolo, luego nos aniquilará.

Incluso a ti

- ¡Lo sep! – Sorbió un poco de la bebida – Sin embargo estoy preparada para ello

- Todos los estamos.

- Nunca supe tu origen o nacionalidad gato peludo.

- Soy un anark (anarquista) borracho.

- Eso te hace ciudadano del universo..me imagino..Von Kramer piensa que eres un buen objeto. Y el mister te quiere muerto, pero primero que cumplas el contrato

- Pueden dispensarme.. Lo mío es ser saqueador y tal vez un café o una copa de vino.

- Por eso debemos brindar – Dijo ella y lo hicimos - ¡Que gane el mejor!

Asentí. Y el a se levantó de la barra y se fue con un ser de amplia riqueza

- Bueno que gane el mejor. ¡¡¡Un momentooo!!! No pagó la bebida..¡¡Maldita miserable!! - Al instante otra dama muy bel a pasaba por mi lado con rostro siniestro - ¿Esmira? – ¿Y estamos todos? – Y ese de traje es Reich Seven -

En ese momento levanta la copa hacia mí

- Bueno, ya me vio. Sera muy interesante. -

Por el móvil de Mikonos. Un mensaje del Mister.

- Querido looter, espero te estés divirtiendo, pero nuestro acuerdo se está dilatando demasiado. Tengo otra ficha más suculenta que puede lograr llegar al ídolo.

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- ¡¡Ah!!..¡¡Gracias!! Haberlo dicho antes – Se dijo – No comprendo el mensaje. Si desde un principio que cerramos trato, intentó matarme. Y tiene a la saqueadora Sistina y toda la información necesaria…..¿Pero aún así no se decide en eliminarme?..Creo saber la respuesta – El trabajo se cumplirá al pie de la letra Westerland….el looter es de palabra. –

Corte el mensaje. Y pude verificar que uno de los hombres de negro se acercaba a mí. Era el saurio que cruzó una mirada penetrante.

Sabía que tramaría, pero hasta que no lleguemos al ídolo el Car no nos matará, salvo un accidente, de uno de sus hombres.

Sistina que se lucia con su atuendo formal, relucía sus ojos

- Deja solo que consiga los rubíes, no le hagas daño por el momento – intensificó su mensaje el Car

- ¿Así que no quiere que lo destruya? Bueno.. ¡Todo puede suceder!

Mikonos veía a Caciope compenetrada en el entretenimiento. El placer del juego se convirtió en una droga. -

- Ya se debe haber olvidado que es la señora Frent. De todas maneras nadie nos conoce. Asi que cada uno puede separarse aquí, para un mejor panorama.

Todos continuaban jugando en plena juerga. El precio de un lugar como éste es la banca rota para quienes no son expertos en el arte del azar, Mikonos no dedicó mucho tiempo, más que a unas copas que bebía. Sistina, y Esmira estaban allí preparadas para dar uno de los golpes importantes, pero antes sabían que debía primero esperar los avances de Noir. Más inteligente fue Seven que se acercó a Caciope, para vigilar sus movimientos.

- Creo que es una gran jugada - Expresó con suma elocuencia y un porte de rico y agradable hombre de negocios que emanaba tranquilidad en su perfume varonil. -

- !Oh! ….Gracias - La belleza de Caciope, ya había cautivado a un número significante de hombres que intentaban cortejarla sin dudas.

Ella es bastante inteligente para el trato con los hombres. Sabia seleccionarlos conforme su mirada, y porte. Seven ya estaba dentro de sus dominios.

Mikonos fue de sala en sala. Verificando la situación. Los hombres de negro no faltaban. Algunos, y jugaban sin cesar. El maquiavélico sitio los engullía de tal forma que jamás saldrían de sus trampas

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tenebrosas. Tenían el signo del chelin (dinero) en sus cabezas. Cada salón estaba decorado con una arquitectura estilo clásica antigua como en el planeta tierra. Pilares con estatuas de dioses de todo el universo. Y entre el os una figura de un rostro robusto, similar al dibujo que Noir puedo memorizar del ídolo. Las paredes de color crema en la sala I, sala II, color rojo, sala III, naranja, sala IV, color amarillo, sala V, color morado. En todas diferentes juegos. Luces de cuantiosas tonalidades que iluminaban con esplendor. Y solo era la planta baja. La planta intermedia, era un sitio sombrío. Unos pisos en adelante. Allí era un vip de seres con mayor cantidad de dinero. En ella se trataban asuntos complejos entre camaradas de de clanes, y políticos, empresarios, y grandes banqueros. Luego la sala mayor. Aquí no se podía acceder. Se daba rienda a los deseos carnales de la sexualidad, y apuestas de peleas clandestinas, compra y venta en un mercado negro. En ella es solo un rumor pues nadie accede a la mayor. Es un sitio repleto de basura de todo tipo. Y luego una sala más en la cual se la llama oscuridad. Allí dan rienda suelta a la brujería y ritos clandestinos. Sacrificios en nombre del dios del juego.

Un lugar tétrico y sombrío. Con unas paredes pintadas con símbolos y runas extrañas y desconocidas de aquel o druis(druidas hechiceros) que se encargan de ello.

Entre copas y jolgorio de grandes y copiosos jerarcas del dinero, Mikonos iba misturándose con unos y luego otros. Platica por aquí, platica por allá. No habían establecido un plan adecuado, pues las circunstancias enseñaban que entre saqueadores se conocen desde siempre. Y lo que fraguase uno lo haría el otro. Existe la clásica frase…haría esto..Lo sé, pues yo también lo haría.

Regresó a la barra, por otra copa…Debía pensar bien, otra forma de ingresar, teniendo tantos enemigos a la vista en abundancia. Se preocupó un poco por sus compañeros que disfrutaban el momento hasta dar con las señales de inicio.

Ese viejo looter, regresó entonces a morir en la barra por una copa de vid (vino tinto). Al solicitarla, el barman la colocó allí para él.

Aquel saqueador movió aquella como haciendo danzar las aguas, mientras meditaba y luego bebió una modesta cantidad.

Caciope luego de conversar con un vejestorio ricachón se alejó a la barra. Produjo en su intensificada ansiedad, una pausa lúdica. Su bello vestido se rosaba con el taburete de la silla.

- ¿Se encuentra ocupado éste asiento?

- ¡Para nada! – Expresó – Es todo suyo. -

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- Veo que te entretienes con alguna bebida. Quisiera lo mismo que mi esposo – ordena el a haciendo que Mikonos se sonroje con cierta vergüenza.

- ¡Te hará mal! – Explica Mikonos, confrontando su se bebida con sus ojos felinos delante moviendo los bigotes. -

- Siempre tan abrupta tu manera de actuar. ¡Relájate!

- Perdona por ser así de sincero… ¿Supongo que nunca me dirás por qué haces esto?

- Siempre preguntas, y preguntas.. – El a bebió de golpe la copa, lo que sorprendió a Noir. Sus mejillas estaban coloradas del nivel de alcohol en la sangre ingresando por los poros como manzanas. -

- ¡¡Ah!!..Admiro tu determinación para poder beber con tanta naturalidad. Supongo que eres así de osada.

- ¿Y tú no lo eres?

Mikonos genera un ademan negativo.

- La precaución es mi columna vertebral. -

- ¡Vaya! ¿Así que el looter es cuidadoso? ¿Una desilusión?

Pero eso me gusta supongo.

- Bueno al menos te gusta algo de mí. Es un detalle interesante. -

- No soy tan fría y calculadora – Expresó y observaba la botella de alcohol. El barman se reía por la discusión que decaía en inmadura. -

- Aunque si tienes algo querido lord…si es que tu esposa puede llamarte de esa manera.

- ¿Eh? – Mikonos lo pensó. – ¿Caciope? – Le hizo una pregunta. -

El a lo miró a los ojos

- ¿Si Noir?

- ¿Puedo pedirte algo? – Se manifestó con una gran sinceridad

- ¡Claro! - Ella lo miró fijamente. Su rostro busca en él algo importante que nacería de las palabras.

- Estemmm..y fue acercando su rostro a el a, como queriendo darle un beso. El a comenzó a ponerse nerviosa

- ¿¿Sii….?? – Estaba atenta a él. A esa declaración –

¡Ehh!..Esperaaa.. – Su rostro no aguanta de color morado, Caciope se asemejaba a un volcán – ¡Estas muy cerca! Y

desistió cerrando sus ojos y preparando los labios. -

- Te quiero…

El a se sonrojó y sus ojos brillaban al abrirlos y cerrarlos

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- Te quiero… - Se sinceró con un respiro. El a no aguantaba más esa frase completa – Te quiero pedir que abandones esta misión, ¡ah! Y tiene una pelusa en tu cabello – Y se la quita. -

- ¿¿¿Eh?? ¿¿QUEEEEEEE??

- Shhh!!! ¡¡No gritess!!

El a no comprendía

- Lo que dije. Esta misión es muy peligrosa. Incluso para Lerna y Louis. No quiero que algo les suceda.

- Pero.. No entiendo..¿Acaso no me crees competente?

- Lo eres..Pero hay fuerzas que desconozco

- ¿Y tu podrás con el as?

- Al menos no tendré que proteger a nadie

- Que quisiste decir looter? – y soltó unas lágrimas y luego lo agarró con su mano derecha sosteniendo sus camina.

Apretando fuerte junto su cuel o y su atuendo – ¿Sabes Mikonos? ¡!Gr! – Y se secó las lagrimas que caían con su antebrazo – ¡¡Eres un grandísimo estúpido!! – y se bebió otra copa de golpe

- Lo siento!! – Agacha la cabeza Noir –

- ¡Seguiré adelante quieras a no! – Y se fue repentinamente

- ¡!Espera!!

Ella da media vuelta su cuello para clavar como un puñal sus ojos ante un frenético y angustiado Noir que se asemejaba a Rick de Casablanca.

- Realiza todo lord Frent – Dijo y se fue. -

- Bien..bien looter…deberías cerrar la boca. Pero no, esos maleantes la usan y ella debe saberlo. – Expresó mirando la copa y bebiendo el último sorbo – Bueno vamos a darle un poco pimienta a este lugar. Vaya…esta niña llorona que una vez conocí.. De todos los lugares del universo, tenía que venir a parar junto a mí…

Caciope regresa a jugar, Mikonos concluye su copa..

- ¿Quién se piensa que es? No ha cambiado nada.

- Una dama en apuros – Dijo un hombre en otro sitio

- ¡¡Bueno!! Es hora de comenzar

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Mikonos analizaba cada espacio, intentando encontrar varios huecos a los cuales ir mimetizándose de a poco. Ciertamente era observado por todos sus enemigos. Con Louis y Lerna manejaban discretamente un lenguaje de señas en el cual camuflar situaciones y proveerse de información segura, sin filtrarse en envíos que puedan ser recepcionados por Sistina y su grupo, o Esmira, y Seven.

Con Caciope pensaron otro tipo de manera, debido a que Esmira y Sistina podrían descubrirlos de inmediato. Todo estaba listo para que Noir en algún momento desapareciera del telón, en cuanto los demás actuasen

- Estaré saliendo – Produce un movimiento de dedos –

Caciope observa bien, aquel mientras ríe con Seven que le invita una copa –

- Suele ser muy perspicaz, según veo señorita –

- No, claro que no.

- Veo que le encanta el juego

- Me fascina, por así decirlo - Ella eligió un número. Y esta vez la suerte la acompaño al instante

- ¡¡Wow!!......¡¡¡Sensacional!!! –

Seven no conocía personalmente a Caciope, aunque si escuchó sobre sus aventuras

- Si me disculpa, tengo una llamada

- ¡Por favor! - Expresó el a que titubeo unos segundos, ante las señas de Mikonos que salía de la habitación directo a un hall en el cual se ubicaba una ventana.

Otro hombre se acercó a Caciope. Sin duda era la atracción de todos.

El a sabía con ciertas artimañas como enamorar.

- Se ha ido – Expresó ella – ya debe estar en la ubicación destinada Louis, con su bebida en la mano iba riendo con tanta mujer que se le presentaba, aunque producía desagrado. Eso hizo que se acercaran algunas autoridades de seguridad de la sala I.

Lerna continuaba compenetrada en las maquinas. Tenía dos premios, y una señora de alta edad se acercó a fin de que ella le explicara

- Hija, perdona, es que no conozco muy bien estos métodos

- Claro..¿Quiere que le enseñe?

- Si no es molestia. – Expresó con una voz carraspeada de edad avanzada y nicotina. – Empecemos. Solo introduzca la moneda por aquí y listo. Luego presionar la palanca. Si completa tres

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figuras gana un premio de monedas, conforme las figuras que sea seleccionadas

La señora observaba lo que comentaba Lerna. E introduce una moneda, y con el primer giro saca un premio. Eso hace que gane.

- ¡Wow! Muy bien para ser la primera vez – Expresó ella

- ¡Gracias! ¡Je! ¡Je! – Comentó con modestia. Luego realizó la misma operatoria, para ganar nuevamente.

- ¡¡Sensacional!! - Se maravilla. -

Y una y otra vez, ganando. -

- ¡Eh! Bien – Se dijo extrañada. Pronto las cámaras de seguridad de la zona administrativa, señalaron a ambas.

- Vayan de inmediato. Me parece que tenemos un caso de fraude.

- Enterados.

Solo pasaron cinco minutos para que sucediera que ambas debían ir a dar explicaciones. -

- ¡Señora!, ¡Señorita! – ¡Disculpen! ¿Pueden acompañarnos?

- ¿Qué ocurre? – Preguntan ambas. -

- ¡Solo vengan con nosotros por favor!.

Cinco seres del planeta Kit. Con forma de cocodrilo y plumas, las llevaron a una oficina, para hacerles un informe. Louis estaba semi ebrio, aunque notó la situación, desafortunadamente comenzó a tener mucho sueño y sentirse mal.

- ¡¡Oh Dios!! ¿Qué me pasa? – Su cabeza daba vueltas por todas partes. Un hombre se acercó a él

- ¿Se siente bien? ¿No quiere otra copa? ¡Je!

- No..Es que no me siento..!Hip! – Louis se desmallaba. -

Algunos de los otros seres que interactuaban en el alcohol que iban consumiendo se iban desvaneciendo

Mikonos ya había pasado unas indicaciones, aunque sabía del estado Louis, pero aquel debía esperar en un gran balcón.

- Caciope intercambiaba números de móvil con un magnate millonario, no perdía el tiempo entre el juego y la posibilidad de hacer negocios. El millonario la invitó a un sector reservado, al cual ella accedió sin problemas.

Noir, llegó al sector, que estaba ampliamente vacio. Una habitación que se encuentra apartada de la sala I. quien debía custodiarla, se alejó. Mikonos caminaba por el corredor muy compenetrado observando todas las cámaras que pudieran estar vigilando el sitio.

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- Luego de revisar aquí será mejor volver. -

Al dar la vuelta, camina por un sector y observa como Caciope se va de la mano de un ser de su raza humana. Él, la cruza.

- ¡Perdona! – Expresa Mikonos con un cumplido – No quise tropezar con tan bella dama

- ¡No hay problema! – Dijo extrañada. -

- ¡Disculpe! – Dijo el millonario, que no le cayó nada bien la aparición de Noir – debería tener más cuidado - ¿Estás bien? – Le preguntó a Caciope. -

- ¡Fue un descuido!

- Un descuido de un semi humano. ¿Me preguntó porque dejan entrar a seres así?

- ¡Je! Je! – No se preocupe solo pasaba por aquí - Se ríe Mikonos

- ¡Mejor vámonos! – Le expresó Caciope al millonario, cuyo nombre es Steve – Podría irse – Le dijo a Mikonos Asintió éste. Al verlos no pudo dejar de sentir algo de celos por aquel hombre irrespetuoso

- Señorita los de esa fama suelen ser muy endebles

- ¿A qué se refiere?

- ¡Discúlpate!, de inmediato

Al decir esas palabras, había ofendido en su lunfardo la virilidad de aquel con solo la palabra endeble.

- ¡¡Vamos!!, ¡¡¡Discúlpate, ahora!!!

- ¿No veo el por qué? El a es…la señora de Fren… - Observó con cierta rabia al millonario excéntrico

Caciope lo observa a Mikonos con cierto enfado, dándole a entender que se largue

- ¿La señora de…? – Pregunta intrigado el millonario.

- ¿Señor, sea quien sea, puede retirarse?

- Si, si..me retiro – Expresó

- Querido, no te preocupes, solo es un semi humano mal educado.

- Si, un tonto.

Noir salió de allí al centro de la fiesta, sin poder ver a Louis, ni lerna

- ¿?..¿En dónde se habrán metido? Bueno no puedo esperar. Ya saben el os que debemos hacer.

- ¿Dígame señorita o usted señor? ¿Cómo es posible que sacaran tantos premios juntos?

- Es una casualidad – Confesó Lerna

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- Yo no sé manejar la maquina, la señorita – Señala a Lerna me estaba enseñando

- Solo eso - Dijo con molestia

- No me importa. ¿Así que tu jovencita estas detrás de todo esto?

- Es la hija de lord Frent

- Ahh… no los tengo registrado como. Debe ser la primera vez que ingresa.

- Ante la duda podemos comunicar a los Frents

- Es factible, pero mientras tanto llevala la celda de detención.

- La dejaré con el otro NN, que se desmayó.

- ¿Saben quién es?

- La señorita debe saberlo – Inquiere con cierta gracia. -

- ¿No sé de qué me habla? ¡Y quíteme sus sucias manos de mi ropa!

- ¡Tú sabes!

- Oficial, me da muy mala espina esta señorita

- No se preocupe señora. La llevaremos

- ¡¡Oigan!!

- ¡Encarcélenla! - Le expresa a uno de sus robots oficiales. -

Llevaron a Lerna por un pasillo que trasladaba a un subsuelo. Se abrió una compuerta electrónica con una combinación en la cual se apoya el pulgar produciendo un sonido. Al abrirse estaba Louis dormido en una cama roncando.

-¡¡YUFF!!..¡¡iUyyhh!! – Producía unos ruidos fatales. -

- ¿Louis? ¿Qué haces aquí? - Pregunta ella y la arrojan al interior cerrándose la compuerta - ¡¡Déjennos salir!! ¡¡¡¡No hicimos nadaaa!!!! - ¡Diablos! ¡Louis! ¡Despierta! ¡Debe haberle dado un somnífero en la bebida!

Al acercarse verificó su estado, al tomarlo de la cabeza para despertarlos

- ¡¡Dejameee dormir Hip!! ¡¡Seria tan feliz!!

- ¡UFF! ¡¡Qué hedor!! – Al final se dio por enterada de su borrachera y lo dejó allí - ¿Y ahora qué?

- ¡¡Ahora hipp – YUFGG!!

- ¡¡Borrachoo!! ¡¡Cállate!! ¿No se qué le vamos a decir a Mikonos?

- ¡¡Ahh!!...¡¡Uhh!!...Ese Mikonos sabe bien lo que hace. No te preocupes.

- Ese Semi humano fue bastante irritante – Dijo Steve aquel millonario, mientras iba de la mano de Caciope. -

- No le prestes atención.

- ¡Vayamos por una copa!

Mikonos regresaba al ver que no encontraba ni Louis, y Lerna.

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- Algo no está bien. Y Caciope está con sus negocios. Supongo que todos están alertas. Caciope ya sabe qué hacer, como Louis, y Lerna. Al retornar al mismo sitio de la habitación con la gran ventana. Pudo percatarse de que estaba un tanto abierta. Un aroma hizo de las suyas. Así que te me adelantaste.

Puso manos a la obra a sabiendas de que un piso arriba ya había alguien iniciando la búsqueda, por lo que su plan fue copiado. O de hecho no habría otra manera de llegar a la pieza faltante del ídolo.

Los rubís

- Bien, bien. Arranquemos.

El looter, realizó una muda de atuendo. Colocó un aparato detrás de su espalda, y luego tomó una cuerda metálica con un pequeño aparato que deslizaba hasta el cielo. Lo colocó en un revolver y con un solo disparo hacia arriba. El cordel con un gancho se direccionó hasta el punto marcado según su estrategia. Una efigie de un concreto resistente con rostro de gárgola.

- Steve, es muy amable – Expresa Caciope que tenía a su lado al millonario queriendo entrelazar un beso, en cuanto ella lo sostenía

–No quiero suspender éste momento, pero debo ir al baño

- Claro, puedo esperarte

Ella le dejó una leve sonrisa, y se retiro. Al entrar en la siguiente puerta en la cual estaban, tenía todo planeado. De sus manos llevo la izquierda al escote, y de allí sacó una gran billetera con múltiples tarjetas.

- Parece que es un gran magnate -Se dijo – Bueno, no está de mal regresar a las viejas épocas de carterista. Hora de ir por los rubís.

Mikonos debe haberse adelantado – Veamos esta es la credencial indicada.

Le tomó una foto en su móvil, y luego arrojó la billetera cerca de donde estaban con todos sus elementos. Parecerá una distracción de perdida por parte de su dueño expresó y fue hacia una salida eficaz, pero otro admirador se acercó a hablarle, pronto podría aparecer el millonario ante la tardanza.

Ella con una modestia sutil le pidió si podía traerle un trago. El hombre fue directamente.

- Debo darme prisa. Puedo salir por la otra ventana escalando de la misma que lo hará Mikonos. Al llegar a otra de las habitaciones verificó que estaban ocupadas por personal del Grand Park –

Piensa Caciope…y fue hacia el os de forma cautivante – Buenos noches oficiales. Saben estoy un tanto perdida y alguien me está

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siguiendo, ¿Me podría indicar dónde está la sala central de la sala I?

Ambos se miraron no comprendiendo bien.

- Es que hay alguien sospechoso, que me ha estado siguiendo

- ¿Sospechoso?

- Es.. – Y por milagro avista a uno de los hombres de negro – Es ese que está allí

- ¡Veamos! Tu quédate aquí – Le dice a uno de sus compañeros Ambos se quedan solos, e inmediatamente suena una alarma.

- Seguridad de la sala I, corredor b. Se ha extraviado la billetera del millonario Steve Jkok, por favor verificar la misma

- ¡Rayos! ¡Es mi sector!.. y salió corriendo de inmediato

- Excelente..valió la pena, lanzarla lejos. -

Caciope ingresó por la habitación, y abrió la ventana. Al presentarse, pudo notar que había unos agujeros en la estatua a las alturas. Era la misma que Mikonos encontró posicionado a la derecha Este, mientas que Noir estaba escalando izquierda Oeste. Con un método totalmente diferente pero con el mismo cordel, lanzó la soga para que se aferre con una suerte de gancho en la estatua. Sobre su vestido se colocó unos jeans, y una chaqueta, y salió a las alturas a escalar en lo alto.

- Bien comencemos el juego - Ella empezó a dar paso por paso. El viento corría con un estrepitoso y fugaz golpeteo que tambaleaba su ligero cuerpo que se deslizaba de una punta a otra con un visor lo pudo llegar avistar. Mikonos iba subiendo con pasos rápidos. Su capacidad de movimiento era totalmente diferente a la de Caciope, debido a sus genes de bestia que le proveían una alta resistencia y potencia a la hora de ciertos ejercicios como el alpinismo, algo que tenía muy bien concebido Mikonos desde su niñez por ser un gato montés. - 

Tenían un trecho muy extenso, por lo que precisarían tiempo suficiente.

En la cárcel, Louis despertaba de su letargo y Lerna lo golpeaba.

- ¿Para qué te emborrachaste?

- Calma todo está muy bien pensado – Se levantó y bostezó estirando los brazos – ¡Bien!. De su bolsillo tomó un diminuto alambre.

- ¡Oh!, ¿No me digas que?

- Así es. Ordenes del looter.

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- A mí no me ha dicho nada

- A ti no, si la mujer de la suerte.

- ¿Te refieres a la vieja esa?

- Es hombre disfrazado. Lo llamados C-3, no me preguntes el por qué. Así que ahora ayúdame y sostén la masilla. - 

- ¡Explosivo!

- Siempre es bueno llevar uno por si acaso.

- ¡Louis eres muy extraño!

- Gracias, me lo han mencionado. -

Louis con un metal estilo alambre intentaba cortar los cables electrónicos del tablero para abrir la puerta. Aún restaba mucho trabajo.

- Bien si mis planes no fallan, deberé llegar en unos treinta minutos.

Un disparo pasó cerca de él. Que sean cuarenta se dijo. Desde arriba Sistina hasta apuntando

- ¡Querido looter que predecible eres!

- Holaaa – Saluda Mikonos, y comienza a correr para llegar a ella que continua disparando

- ¡¡Rayos es muy veloz!!

- Parece que éste tonto me necesita – Caciope realiza una maniobra, pero se ve entretenida por Esmira y dos de sus hombres que estaban en su línea.

- ¿A dónde crees que vas?

- ¿Es que todos quieren los rubíes al final? – Caciope tomó su laser y comenzó a dispararles moviéndose con la cuerda de un lado hacia el otro. Al Deslizarse parecía danzar, pero eran demasiados los disparos.

En línea recta Mikonos venía a prisa, pero desde las ventanas comenzaron la balacera los hombres de negro.

- ¡Oigan! Me caía mejor cuando estaban de mi lado. Se supone que el Mister nos necesita

- Es verdad, pero no sabrá que te hemos aniquilado. De todas maneras el también lo hará – Grita Sistina

- Si, pero prefería el después que un antes – Y con un movimiendo de cuerda, salta en traspiés lanzadonse hacia otra pared y luego otra.

Sin darse cuenta venía hacia él Caciope.

- ¡¡Diablos!! ¿Qué haceeeeeesss? – Le grita con una pregunta impulsiva.

- ¡¡Lo mismo te digo tontoo!!

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- Tú, sal de aquí. Se suponía que debías quedarte dentro con los demás.

- Pues decidí salir.

- Te hubieras quedaaaaddooo con el magnate.

- No me interesa – Dijo ella un gritando con un poco de vergüenza

- ¡¡Vamooooss!! – Expresó Mikonos.

- ¿Por quién me tomas? Prefiero estar aquí contigo.

- ¿¿¿Ehhh??? – Gritó sorprendido Mikonos.

- No me mal entieeeendaaaass – Expresa sonrojada – Quierooo los rubíes

- Lameeentttoooo interrupirlos – Dijo Sistina – Pero aquí es donde se bajan y al apuntar recibe su arma otro disparo

- ¡¡AHH!!… más personas se unen a la fiesta – Manifiesta Esmira. 

- Oigaaann dejen de disparar – Grita nuevamente Mikonos – Se veían mejor con sus vestidos

- ¿¿¿Qué dijiste??? – Se enfada Caciope.

Ambos se movían con las cuerdas de un sector hasta el otro hasta que quedaron entrelazados. Pegados el uno al otro

- Eres un tonto Noir, ahora si estamos en aprietos. – Le dice Caciope sonrojada al tenerlo pegado encima. Los dos se miraron.

Y una leve risa de Mikonos al verlo

- ¡Te vez bella!

- ¿Quee?

- No, solo decía algo

- Estamos en aprietos – Expresa. Y los laser de todos los disparos pasaban cerca de ellos.

- Para nada. Tengo todo pensado desde un principio.

- ¿A qué te refieres?

- ¡¡Agárrate fuerte!!... ¡¡¡Que subiremos!!!

Caciope lo abrazó con las cuerdas y Mikonos sacó de su bolsillo una especie de aparato con un botón.

- Esos son cohetes

- Los tengo en mi espalda

- ¿Pero pueden estallar?

- ¿Has oído la frase, sino se arriesga no se gana?

Ladea la cabeza Caciope, como aduciendo que nuestro Noir no tiene remedio.

- A la cuenta de tres

- Uno

- Dos

- Y…tres….. – Aprieta el botón Mikonos, y ambos cierran los ojos.

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Los propulsores se activan y los dos comienzan a subir a una gran velocidad traspasando todo a sus alrededores.

- ¡¡¡¡AHHHHHHHH!!!!

- ¡¡No puede ser!!

- Cuidado, vienen hacia aquí.

Con un gran potencia sobrepasaron todas las salas, y en una picada descendieron a toda prisa hacia la cúpula en un abertura

- Mikonoooossssssss – No vaaaamooos a matarrrr

- Trraann….trann…quil aaaaaaa Caaa..ci i..oooppeeee – Mikonos como pudo cortó las cuerdas

Y con cierta fuerza ingresaron en el agujero de la cúpula cayendo en un descenso incalculado.

- ¡¡¡Ahoraaa!!! -Y Mikonos dispara la otra cuerda generando un afecto deslizante para que ambos desciendan si golpearse.

Los caen abrazados en el suelo entre el polvillo y el impacto. Caciope queda encima de Mikonos. Un tanto aturdidos los dos se observan.

Así se mantienen unos minutos. La respiraron de Caciope por toda la emoción del suceso se acelera. Mikonos puede sentir su corazón latir.

Ella respira, y respira

- ¡¡¡Estemm!!!.. ¿Estás bien? – Pregunta ella. -

- ¡¡Est..estemm!!.. ¡Eh!..¡Sip!

- ¡¡Ay!! ¡¡Perdonn!! – Ella se coloca a un costado para no entorpecer el ascenso. -

Los tumbados en el suelo mirando el cielo por aquel orificio. Y luego se devolvieron las miradas. Se fueron acercando poco a poco, y un sonido de la chaqueta de Caciope produjo aviso

- ¡Ups! Disculpa. Mi alarma contra peligro.

- ¿Contra peligro?

- Esmira y Sistina están cerca.

- Debemos movernos rápido – Dijo el looter.

- Si..claro… - El a comentó con cierta vergüenza – Vayamos lo más pronto posible – ¿Oye? ¿Mikonos?

- Si..

- ¿Te pusiste celoso?

- ¿Celoso? ¿Y por qué?

- Por el millonario Steve…. – Tu rostro no era el que suelo conocer.

- ¡¡Claro que noo!! ..¡No estoy apegado a nada!

- ¡A mí no me engañas! ¡Je! ¡Je! – Manifiesta con una mirada irónica. -

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- ¡Pues siento decepcionarte mujer!

- ¡Mmm! – Sintió un poco de desilusión ella.

- Ya deja de decir tonterías. Debemos ir al cuarto principal.

- Si…lo sé – Dijo un tanto desilusionada, mientras Noir se adelantaba. –En definitiva es Mikonos – Se decía así misma. -

Louis estaba haciendo el tiempo suficiente, para calcular que deberían esperar a Mikonos. Caciope fue directamente con él, a pesar de que debía aguardar en otro punto determinado. No tenían el libro, ni la corona que le faltaba una pieza que el propio Mikonos se encargó de cambiar cuando Hefestos lo traicionó. Debía tener los rubíes al menos.

El sistema de seguridad de la cúpula estaba cubierto de sensores con el grupo selectivo de guardias que se encargarían de custodiarlo. En las afueras se estaba librando una batalla entre mafias, y ello ayudó a Caciope y Mikonos a poder dirigirse al sector comunicativo por el techo.

- ¿Y por aquí?

- Accederemos al sector principal sin que los guardias lo sepan.

- Pero…

- No te preocupes. En realidad no es la habitación en la cual guardan los rubíes, sino que la verdadera se halla escondida en una caja fuerte, continuando por el corredor, en otra cámara.

- Haberlo dicho antes.

- Eres una saqueadora, creí que los sabias.

- No todos somos el famoso looter. ¿Siquiera desde donde obtienes la información?

- De tu cuaderno, que Von Kramer te quitó. ¿No lo estudiaste?

- Ya te he dicho, tengo problemas de memoria..¡¡Gr!! ¡Gr!! – Se enfada. -

- Si conseguimos los rubíes, ya podemos ir directamente al próximo destino

- Es cierto que nos estarán esperando. ¿Y si no los conseguimos?

- ¡Debemos ir de todas maneras! El ídolo, puede caer en manos del mister, Von Kramer, el grupo de mercenarios de la capitana Esmira, o los Abbadon de Seven. ¿Y quién sabe que otros personajes estén implicados? Sea cual sea el que logre poseerlo, estaremos en problemas.

- No sabrán manipularlo. -

- ¡En efecto! hay algo que esconde el ídolo que tal vez el os no sepan, y el cuaderno no lo menciona.

- Si..

- Lo sabes, entonces. Ese es el mayor problema. Pólux, el alquimista discernía muy bien en lo que se inmiscuía, aunque no

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pudo controlarlo, y quizás corrió la misma suerte que la tierra Six y otros planetas. No poder concebir lo incomprensible puede ser realmente un riesgo-

- Conozco la historia, el conjunto de cinco planetas que desapareció de la nada, sin rastro. Entre ellos la civilización de MU, se dice, pero luego lograron trasladarse a otro planeta, al que llaman tierra. Y qué extraño que justo el looter, un sujeto conserve ese factor de consistencia. No sabía que eras precavido. -

- El ídolo luego de aquel suceso fue desmembrado por los seguidores de Pólux, que aparentemente desapareció con los planetas. Y es obvio que soy cuidadoso, no estaría aquí de no ser así. -

- A decir verdad la leyenda se fue modificando, una suerte de tergiversación de contenido, luego de tantos años. Miles de años

- Y con la llegada de una de las piezas, renació ese afán de poder de encontrar el ídolo, para hacerse de todo lo que fuere, y será.

- ¡¡Ejem!! Muy cierto. -

- Al final no tenías tan mala memoria como dices.

- Es solo con la libreta. ¿No sé por qué?, pero no puedo recordar bien las indicaciones

- Ya estamos cerca del cuarto. Prepárate.

Asiente Caciope

- Listo se abrieron las puertas – Louis – debemos esperar en la torre siguiente.

- Yo pilotearé la nave

- ¡Perfecto!

Caciope estaba detrás del looter. Dos Guardias quiméricos de forma de toro, y lagarto, se colocaron uno en cada lado de la puerta. Eran gigantes de tres metros con armas. Cada uno tenía un hacha.

- Voy a crear la distracción - Expresa el looter. -

- ¡Bien! - Asiente Caciope

- Tú entra. Ya sabes cómo burlar los sensores

- No me recibí de saqueadora, por nada – Comenta con sarcasmo ella.

- ¡¡Buenas!!,¡¡Buenas!!

Lo observan con malos ojos aquellos seres

- ¿Saben? El jefe me ha dicho que deben abandonar la guardia. Hay disturbios a las afueras. Ustedes comprenden. Unos malandrines intentando saquear. Disturbios, complots inusitados - Comienza actuar Mikonos. Las bestias comienzan acercarse a él con malas

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intensiones. Y a medida que van llegando, este se va alejando y con la mano detrás en su espalda, produce un ademan positivo para que Caciope, éste alerta al acercarse Los hombres decididos fueron directo al looter a querer cercenarlos.

Ambos tenían órdenes de matar a quien fuere. Comenzaron a correr.

Noir se adelantó con una cierta velocidad, pero las bestias le pisaban los talones sin tregua.

Uno de el os lanzó un golpe, que por casualidad no acertó sobre Mikonos que se agacha para esquivarlo. Él otro secuaz, intentó arrojarse encima de Mikonos, pero éste dio la vuelta girando en trescientos sesenta grados, y luego continuó

- ¡Demonios!, eso estuvo cerca … ¡¡Vengan por mí bobos!! -Y

comenzó a correr en una dirección del corredor contraria a la de Caciope que se cercaba a la puerta cuidadosamente. De su bolsillo, tomó una serie de hebillas de puntiagudas formas que se conectaban con el circuito electrónico.

- ¡¡Bien!!, Si colocamos el código de esta manera, podremos.. ¡bien!

Y así, y de la otra manera. Ella iba apretando rápidamente con sus dedos las teclas milimetrando el código informático KK—KK. Así se llamaba, a fin de poder lograr que la puerta se abra de inmediato.

¡Noo! Fallé. Debe ser así,

Mikonos continuaba moviéndose hasta que con un gran saltó arribó a un pasillo, sin salida. Ambos le cerraron el paso.

- Bueno es hora de jugar al héroe – Mikonos fue por su arma, pero antes de sacarla. Recibió un porrazo que lo lanzó de espalda contra la pared de metal. – ¿Qué remedio? Eso dolió bastante –

Ahora verán – y se incorporó e intentó dar un salto para pasar del otro lado. Uno de el os movió el brazo para golpearlo y Noir lo esquivó dándole a su compañero, que se levantó enfurecido contra el looter.

- Ahora sí que estaré en problemas. ¿Una ventana? – El looter descubrió una posibilidad a su derecha. Desde lejos se veía una luz que se dirigía de inmediato – Eso puede ser de gran ayuda –

¡Oigan! -Y levantó las manos. Recibió un golpe, pero lo esquivó agachándose, aunque en una distracción, recibió un puñetazo fatal en su rostro arrojándolo contra el suelo. – ¡¡AUHH!! ¡Eso dolió! –

Se dijo lastimado. -

El otro lo pisoteo bruscamente, haciendo que Mikonos escupiera la bilis de sangre de su boca. Algunas gotas caían en cantidad. Otro topetazo casi lo noqueó, pero el looter sabía que debía aguantar el tiempo suficiente para que Caciope entrase en la sala.

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- ¡Ah! – Se resiente del dolor – Creo que rompió una de mis costillas – Se palpa con la mano derecha parte de la caja torácica

– ¡¡Auhh!! Ese golpe fue duro

Recibió otro puñetazo en el rostro dejando morado su ojo.

- Si les digo que soy un bu.. buen. Buen tip..tipo – uno de los guardias lo recogió con las dos manos, tomándolo desde el cuello.

Los pies del looter se movían y con las dos manos sobre las de la bestia intentaba soltarse, pero era inútil, y el otro estaba dispuesto a clavarle el hacha sobre su cabeza para destrozarla. La luz penetrante se dirigía a la ventana.

- ¡¡Vamos ábrete!! Una, dos, tres – la puerta logra abrirse sonando la alarma – ¡¡Siii!! – El a ingresa de inmediato, sin embargo dentro estaba sentado en su sil a de terciopelo un hombre conocido. –

¿Steve?

- ¡El mismo!

- Pero tú..

- Si..soy uno de los fundadores de Gran Park..y dueño de los rubíes.

Que por cierto sino fueras una estafadora te los podría haber dado, pero ya sabes. – Aquel tenía las gemas en su mano. A su lado apareció Seven, del grupo Abaddon. -

- ¡Tenemos un buen acuerdo!

La luz ingresó como un potente destello a toda velocidad. Mikonos con sus últimas fuerzas dio una media vuelta sobre quien lo tenía maniatado, hacia arriba girando por sobre la cabeza de éste, y esquivando el golpe de hacha que corta los brazos de uno de los guardias. Noir al caer al suelo, recibe el impacto de un explosivo misil que destruye todo a su alrededor produciendo un gran buraco, varios drones y un vehículo volador en forma de pino se avecinaba. Mikonos para su fortuna se escondió detrás del guardia al que le faltaban sus manos. O lo que quedaba de éste que solo era carne desintegrada.

- ¡Ayyy Dios! ¡¡Duele todo!! ¡¡Eso estuvo cerca!! – Se fue incorporando como podía. Golpes por doquier, dos costillas, y una pierna herida, eran parte de la lista de lesiones del looter. Aunque se las había visto feas en mucho tiempo, era la primera vez que tantas lesiones se producían.

Por la ventana ingresó Sistina y los hombres de negro desde aquel cilindro volador. Habían esperado la escalada, y decidieron que fuera el looter quien se encargase de todo.

- ¡Ahh! ¡¡Dame las gracias!! – Ahora no eres parte de mi cacería. Ya tendré tiempo de eliminarte

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- ¡Ah! Graa..gracias –Y ustedes también. Envíenle saludos al mister, díganle que lo detesto – Y Mikonos recibió una conmoción del saurio en su cabeza – ¡Auu!¡¡Ya basta de sorpresas!!

- Si mi jefe no te hubiera contratado, ya te habría eliminado - Dijo y lo llevaron con el os al cuarto de los rubíes.

- ¡Bueno como decirlo! – Expresa Steve – Quiero unirme a la fiesta

– Y saca su arma apuntando a Caciope -

Con la llegada de Sistina, la capitana Esmira se hace presente.

Un sinfín de armas se presenta y todos se apuntan a ver quien dispara primero

- ¡¡Mikonos!! – Grita Caciope.

Noir estaba siendo llevado en hombros por el saurio.

En el cuarto se había producido una suerte calma

- Vamos podemos compartir el premio comentó Esmira - que caminaba silenciosamente

- ¡Están tardando demasiado! – Comenta Louis – Lerna

- Si, ¡Vamos!

- ¡Ahh!..Está pasando el tiempo – Expresó apenas Noir. -

- ¡Cállate, mal nacido!

Era como una galería de tiro, los sensores sonaban. Y los guardias de las salas bajas estaban subiendo. Muy pronto se podría producir una matanza abismal.

En pocos pasos se abrió otra compuerta.

- ¡Queridos! Estoy aquí para la diversión - Era el Car que se hacía presente

- ¿Westerland? – Expresó Seven. - 

- El mismo..Steve, viejo amigo

- ¡Ahh!, El mejor mafioso

- ¿Qué sucede aquí?

- Sucede que no puedo confiar en nadie.. el querido looter..qué bueno verte en esas condiciones ¡Arrójalo al suelo ya!

- Si señor….

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- Oh.. la verdad ver sus rostros me produce nauseas.. Sería fantástico que se largaran – Comentó valientemente con un ojo morado, y el otro semi cerrado. -

El looter es lanzado al piso y pateado por varios de los hombres de negro

- Bueno es suficiente - Expresa Caciope

- Veo que te diviertes – Expresa Esmira – A Kramer no le gustará todo esto

- El está un paso atrás de mí – Y le muestra una pantal a en la cual Hefestos esta con sus hombres

- ¿Así que era un traidor?

- Tengo el libro, y quien lo pueda descifrar. Que es una dama muy especial

- ¿A qué te refieres?

- ¿Qué no te lo dijo looter?

- Caciope, has hecho muy mal. No solo en no decirle, sino en esconderme el libro

- Así que..

- Fue toda una farsa, para lograr llegar a las piezas.

- Claro.. looter - Expresa Sistina. Ella nos pasaba la información de manera inmediata. ¿Cómo piensas que podriamos llegar tan pronto?

- Me encanta esta ensalada de traficantes - Comenta Seven Esmira apunta a uno, y luego a otro.

- ¿Es que nadie es de fiar?

- Claro..pero resulta que ella perdió ese preciado libro, que ahora está en mis manos

- ¿Estás seguro? - y aparece de la nada una figura de Von Kramer

- ¡Oh! Parece que tenemos otro miembro para la fiesta

- ¿Mister, pensaste que no podría comprarlo?

- No lo pensé, lo hice

- ¡Eres muy inteligente! Aunque no sirve de nada..Faltan los rubíes, y la nariz del ídolo

- ¿Señoras, y señores. Si me disculpan quisiera retirarme si?

- Ahh..no Mikonos.. tu eres necesario para nosotros – Comenta Von Kramer. - 

- El muchacho trabaja para mí – Dice el Mister remordiéndose los dientes

- Luego de que quisieras matarlo.

- Bueno ya sabes.. Los semi humanos tienen una vida útil. - 

- Eso es cierto, pero necesito esa pieza que le falta al disco. - 

- Ah te refieres a la gema redonda – El mister señala a Caciope. -

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- ¡Wow! Esta gente me encanta.

- Admítelo Kramer tengo todo en mis manos. -

- ¿Quién dispare primero se queda con los rubíes – Expresa Steve Se produjo un silencio notorio. Cada bando apuntándose medidamente. Una de las compuertas se abre con los demás guardias que vienen en una cantidad grande, dispuestos a eliminar a todos.

- Bien haremos un truco – Comenta Caciope y saca de su manga unos naipes y lo arroja sobre el aire. Sin que nadie la detenga. –

- Ese ..tr..truco es viejo – Comenta el looter

- ¡Vaya, vaya! El viejo truco de las cartas explosivos - ¡¡¡AL

SUELOOO!!!

- ¡¡CUIDADOO!! – Grita Esmira y todo el gran cuarto comienzo a producir mini explosiones con un gas letal

- Un gran estruendo se produce, e ingresan los soldados del Grand Park. - 

En medio de una neblina, todos comienzan a toser

- ¡Cuak! ¡¡Cuak!!

- ¡¡Cuak!! – Muy ingeniosa expresa el mister – los rubíes -Expresa Sistina corre contra el millonario pero recibe un impacto en el hombro de Seven.

Steve corre hacia la puerta

- Soy del grupo del Grand Park - ¡¡A ellos!! ¡¡No los dejen ir!!

Mikonos se incorporó, y fue tras él como podía, mientras los hombres de negro cubrían al mister entre balaceras y ráfagas de laser con explosiones. Lo que hizo temblar a toda la cúpula del Grand Park.

La nave manipulada por Lerna iba a toda prisa arribando al centro de encuentro, y Caciope también va tras Steve que se esconde entre los guardias intentando escapar. Mikonos lo sorprende a tiempo tomándolo por el chaleco y abrazando su cuerpo

- Ya suéltame maldita bestia - Y lo patea. Luego saca su arma y se dispone apuntar en el rostro a Mikonos que yace en el suelo casi inconsciente. Al girar el gatillo, antes que salga el impacto recibe un disparo de Caciope que le corta la oreja

- ¡Caciope! – Grita Sistina

- Cacaa….caccipee

- ¡Vete looter! – Le expresa con vergüenza – ¡Vete de aquí! ¡¡Es peligroso!!

- ¡Espera! – Expresa con todas sus fuerzas. -

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- ¡¡Yo trabajo para el mister!!–¿Entendido? Tu solo eras un señuelo…

Esmira dispara acribillando a unos de los guardias y se lanza contra Caciope que se cubre de las descargas. Otros guardias llegan combatiendo con la facción de Von Kramer que se iba retirando.

Aparece el teniente primero de Esmira, Pirce que detona varias bombas estallando las demás bestias quiméricas.

- ¿Ya saben a quién debemos buscar? ¡Larguémonos de aquí!! -

Expresa

- Salgan todos, parte de la cúpula se va derrumbar –

Muchos de los secuaces de los bandos se iban escapando, mientras que otros continuaban batallando.

Otra explosión se siente a los lejos abriendo la pared de metal con un gran agujero que dejaba ver todo el amanecer de la ciudad de Gran Park. Caciope se retira repentinamente

- ¡¡Vete looter!!

- ¡¡Caciope!!... ¡¡Mikonos!! – Grita Louis desde el vehículo volador. -

- ¡¡¡¡Vengan aquí!!!! ¡¡Urgente!! – Se alborota Lerna con un bramido. -

Un estallido próximo a ellos se oye, desestabilizando todo La nave se iba alejando, debido a ello. -

Caciope terminó de golpear al millonario para dejarlo inconsciente y luego se agachó cerca de él. Entre sus pertenecías sabía que había que tenía los ojos del ídolo.

- ¡Je! ¡Je! No llegaras lejos – Dijo Steve que se desmaya -

Sistina se acercó a Caciope que revisaba la ropa de Steve. Y tomó de una pequeña caja los rubíes.

- ¡¡Huyamos!!. Vienen más guardias. Ambas salieron corriendo en una dirección concreta fintando a los secuaces de ortos bandos. -

Caciope se dio la vuelta, pero el looter, había desaparecido. Supuso que estaba a salvo.

- ¿La tienes?

- ¡Es la caja!

- ¡¡Perfecto!!

Sistina y Caciope escapan por otra plataforma que no estaba destrozada. Algunas partes de metal y roca iban cayendo por los aires como si hubiera una gran bomba que hiciera estal ar todo, y

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poco a poco la implosión aniquilaba la cúpula y las demás salas anteriores. Todo estaba bien planificado.

Louis se abalanzó con la nave para poder alcanzar al looter que lograba avistarlo haciendo equilibrio tomándose el brazo derecho.

- ¿Lerna por al á? - Grita Louis. -

Ella hizo un movimiento. ¿Allí esta? – Y direccionó la nave-vehículo

- Voy por él, pero no está Caciope -Dijo ella

- ¡¡Rayos!! Esto ha salido de mal en peor.

Las flotas de los guardias se acercaron a ellos lanzando proyectiles

- ¡¡No puedo manipularla!! – Expresa Lerna con desesperación ante un roce de impacto cercano. Otros cohetes se aproximan a la nave.

Lerna genera un giro, haciendo volar los edificios aledaños.

La nave del mister junto a Caciope y Sistina se alejaba. El Mister ya se había retirado. Ella puede ver desde lejos sorprendida la figura de Mikonos que camina herido por una viga que sostenía

- ¿Mikonos?..¡¡noooo que hacess!!¡¡Debías irte..tontooo!!

- ¡¡Mikonos aguanta!! ¡¡Iremos por ti!! – Grita Louis, abriendo la ventana para realizar un rescate suicida.

Un disparo golpea la viga en la cual se estaba moviendo el looter. La cúpula se estaba desmoronando, y solo se veían escombros y vigas salientes, y en una de el as como una tabla hacia el mar estaba Mikonos. Detrás de él loas guardias que comenzaron a lanzarle infinidad de laser que por fortuna pasaban cerca de éste que estaba aturdido por la situación.

La flota de Seven se retiraba, y la de Esmira combatía con los guardias de reserva de las naves que llegaron apenas arrancó el conflicto. Lerna se acerca a toda prisa hasta aquella vara de metal gruesa que mantenía el peso de aquel. Un movimiento lo desequilibrio, pero este se sostuvo con su brazo izquierdo. Miraba el suelo y la viga que se movía y se iba doblando hasta casi romperse

- Bueno, no hay muchas alternativas. ¡Ah! Quisiera tener un momento de paz – Se dijo en cuanto un rio de sangre caía desde una herida en su cabeza cubriendo su rostro, hasta llegar a su bigotes. Me hubiera gustado ver a Caciope una vez más. Espero ella y los demás estén bien.

- ¡¡Mikonos salta aquí!! – Grita Louis, que se iban acercando Él Hace un gesto negativo, y logra señalar en una dirección el peligro que se avecinaba. Toda la patrulla del Grand Park. -