86. Demonio

—Trevor ya estaba gravemente herido, había sacrificado su cuerpo para usar su hechizo en la segunda etapa.

—Cuando los sables atravesaron su corazón y la vida comenzó a abandonar su cuerpo, miró profundamente a los ojos de Noah.

Estaban fríos y enfocados y ya se habían movido hacia sus próximos objetivos, ni siquiera le dignó con una última mirada.

—Por alguna razón, sintió que la huida de Noah estaba asegurada.

—Será la mayor tribulación de la familia Balvan —pensó.

Las cuchillas fueron retiradas de su cuerpo y él cayó muerto en el suelo.

—Lena estaba confundida.

Se había girado para ayudar a su hermano pero luego la serpiente negra desapareció y reapareció en la posición opuesta.

Desplegó instintivamente un escudo de agua para cubrirse a sí misma y a los otros dos descendientes.

Una fuerte fuerza golpeó el escudo que hizo que se doblara hacia el área segura detrás de él.

—Lena se concentró y convocó al látigo de agua dando órdenes a los dos chicos.

—«Necesito su ayuda. Utilizad todo lo que tengáis para atacarle y confiad en los elementos protectores de la familia para manteneros vivos. Yo le enfrentaré de frente, vosotros os ocupad de la bestia mágica».

¡Otro impacto resonó en el escudo y lo destrozó!

Assea salió disparada de las gotas cristalinas de las que estaba hecha y la tez de Lena palideció debido al colapso de su hechizo.

Sin embargo, no tenía tiempo para preocuparse por su estado y levantó su látigo para bloquear la carga del compañero de sangre.

Soportó su asalto y su látigo se enredó en su cuerpo pero luego una figura salió disparada de él.

Noah saltó hacia Fabian y descargó un doble corte descendente.

Levantó sus brazos en pánico y un sonido metálico resonó desde su choque.

—En el brazo izquierdo de Fabian, apareció un corte profundo mientras una membrana azulada cubría el lugar donde los sables golpearon.

'¿Qué diablos son esas cosas?' se preguntó.

El ataque debería haber partido al noble en dos, pero cuando el daño superó una gravedad determinada, la membrana se mostró para prevenirlo.

Neil saltó hacia él blandiendo una espada ropera adornada con gemas azules.

Noah la desvió pero luego las gemas parpadearon y dispararon un rayo de luz siguiendo la trayectoria de la espada de Neil.

Noah estaba desprevenido y fue golpeado superficialmente en el hombro.

Retrocedió al percibir la desconocida amenaza y dispararon balas de agua en su dirección.

—El cuerpo de Assea apareció y fue atravesado por las balas.

Hubo un momento de silencio después de eso ya que no se lanzaron ataques desde ambos lados.

Noah miró desde detrás de Assea y vio que los tres nobles empuñaban armas resplandecientes.

Lena había sacado un látigo negro con inscripciones en él, Neil tenía su espada ropera, y Fabian sostenía una corta espada blanca con ambas manos.

—Lena comenzó a hablar:

—«Tengo que admitir que tu fuerza es notable, pero puedes ver claramente la ventaja que dan los números y la riqueza».

A Noah no le importaba gastar tiempo hablando.

Neil y Fabian estaban ambos heridos y estaban perdiendo sangre mientras su cuerpo rellenaba automáticamente «Aliento».

—«Lo que queda de tus números son dos críos inexpertos. En cuanto a la riqueza...»

Enfocó su mirada en sus armamentos.

—«¿Por qué ninguno de vosotros usa sables? Realmente quería un nuevo juego de ellos»."

"Meneó su cabeza para burlarse de ellos.

Lena vio que él había cerrado los ojos y apresuradamente sacó una píldora de su anillo espacial.

Estaba a punto de comerla cuando unos negros cortes vinieron en su dirección obligándola a tirar la píldora para bloquear los ataques.

Noah había cargado de nuevo enviando a Assea sobre Lena para mantenerla ocupada mientras intentaba romper las defensas de los otros dos nobles.

Neil era fácil de manejar, simplemente tenía que evitar que la espada ropera apuntara hacia él.

Con su experiencia de batalla, lidiar con una arma tan mal manejada era fácil.

La habilidad de la espada de Fabian, sin embargo, era un poco más molesta.

Cubrió a su portador con un escudo circular blanco que absorbía la mayor parte de la fuerza detrás de los golpes de Noah.

Incluso cuando Noah lograba perforar el escudo, la capa protectora azulada aparecería, anulando cualquier daño.

Mientras tanto, Lena estaba destruyendo el cuerpo de Assea una y otra vez.

Cada vez que su látigo golpeaba, las inscripciones se iluminaban para amplificar el poder del impacto.

Assea era golpeada enviando olas de dolor al mar de conciencia de Noah, no era rival para Lena.

Viendo que Noah no podía lograr herirles seriamente a corto plazo, los dos nobles comenzaron a perder su miedo a sus cuchillas y se centraron solo en atacar.

«Está poniéndose problemático», pensó Noah.

Estaba uno contra tres, así que su consumo de «aliento» era mayor.

No quería prolongar la batalla más de lo necesario.

«Supongo que tenía que intentarlo en algún momento», pensó.

Dentro de su esfera mental, el diagrama en su primera runa de Kesier se iluminó y el nivel del mar comenzó a disminuir a gran velocidad.

Noah envió un corte negro en dirección de Neil.

El descendiente se había acostumbrado a confiar en la protección de la membrana para entonces, por lo que ni siquiera intentó bloquear el ataque.

Lena tenía sentidos más agudos y sintió un sentido de peligro del corte.

Estaba a punto de gritar algo cuando Assea saltó sobre ella de nuevo.

El golpe golpeó el abdomen de Neil y chocó con la capa invisible de defensa.

Sin embargo, de él brotó humo negro que corroía la membrana creando una apertura para el golpe.

El ataque de Noah cortó el cuerpo de Neil en dos.

Un noble de una familia noble de tamaño mediano murió.

—¡NEIL! —gritó Lena.

Lena gritó de dolor al ver la muerte de su hermano y se volvió a mirar a Noah con ira.

Lo que vio, sin embargo, la hizo temblar de miedo.

El cuerpo de Noah estaba cubierto de humo negro parpadeante.

Se cernía justo sobre su piel formando una especie de armadura temblorosa.

El humo negro sobresalía en sus sables y solo sus ojos azul hielo permanecían visibles en su rostro.

«¿Qu-?», pensó Lena.

Incluso sus pensamientos se detuvieron al ver la figura demoníaca.

Luego, el hombre dijo algo con una voz baja y rasposa.

—Forma demoníaca —murmuró Noah."