CAPÍTULO 52

Rika al darse cuenta donde estábamos se apretó aún más y la succión que daba también aumentó.

"Edward, no, los vecinos nos escucharán".

"Eso depende de ti querida Rika".

*Plak* *Plak*

Le di dos nalgadas causando que Rika se volviera a correr y sin tenerle piedad empezé a moverme.

"!!No, nos escucharán, pero, Oh Dios que bien se siente!!".

Rika empezó a chupar mis dedos que estaban cubiertos con su primera corrida mientras empezaba a gemir.

Podía ver a alguna personas pasando por la calle, Rika también se dió cuenta y se puso más cachonda.

Con mi mano libre empezé a estimular uno de sus pezones causando que la belleza bronceada se corriera.

"!!No, no, no, me voy a correr, no podré ocultar mi grito, me corrooooooo!!".

Ella dió un gran gritó al sentir el placer que le estaba dando, pero justo en ese momento puse una barrera alrededor de nosotros.

"Eres una mala chica Rika, creo que hay que castigarte, por tu culpa casi nos descubren".

Invoque los piercings dragón los cuales se pusieron en su clítoris y en sus pezones.

Ella volvió a correrse al sentir los piercings en sus zonas erógenas, entonces volví a moverme mientras jalaba los piercings.

"!!No, detente vas a estirar mis pezones, no volverán a ser normales!!".

"Ese es tu castigo mi querida Rika, haré que tú cuerpo sea perfecto para satisfacerme".

Así empezé a golpear a la hermosa Rika la cual se corría una y otra vez al sentir sus pezones ser estirados de esa forma.

"!!Detente, ya no entra más, mi útero y mi culo están llenos y siento que van a explotar!!".

Rika ya no podía pronunciar palabra alguna, la saliva y las lágrimas fluían por su rostro y sus ojos estaban rodados hacia atrás.

[Se registró a Rika Stafford como esposa del anfitrión]

[Edificio adquirido: Sala de disparo de armas]

[Iniciando construcción]

[Brindando información a las esposas del anfitrión]

"Toma Rika recibe mi semen dentro tuyo".

"!Me corro, me corro, me corroooooooooo!!".

Rika tuvo su último orgasmo al sentir que vertía otra carga dentro de ella, limpie el desorden que hicimos y nos lleve a su habitación.

La cual estaba al lado de la de Shizuka y sin más dormí con mi miembro dentro de Rika la cual escurría mucho semen de su ano y vagina.

Bueno dos días para que inicie la pandemia zombie, con esto Rika no irá al aeropuerto y podré tener a Shizuka más rápido.

System dale toda la información a Rika y también prepara mi llegada a la academia Fujimi para el día de mañana.

[Afirmativo anfitrión, se registró como alumno nuevo en la academia Fujimi]

Sonreí y me dispuse a dormir abrazando a Rika ya que mañana tenía mi primer día de clase otra vez.

Desperté al día siguiente para ver a Rika encima mío.

"Ayer si que me jodiste bien querido, no puedo caminar ahora".

*Plak* *Hyaaaaa*

"Pues es obvio con ese cuerpo tuyo, es imposible detenerse".

Mire la hora y era tiempo de alistarme para ir a la academia.

"¿Recibiste toda la información?".

"Si, me quedaré en casa y prepararé todo, cuida a Shizuka por favor".

System le dió toda la información necesaria a Rika quien se quedaría en el departamento a diferencia del anime.

"También espero conocer a mis demás hermanas".

Rika sonrió al saber que había más mujeres que habían caído a manos de su ahora esposo Dragón.

Le di un beso y apreté sus pechos causando que ella volviera a gemir para luego alistarme e ir a la academia.

Salí con cuidado ya que sentí a Shizuka dormir en su habitación, llegué a la sala y salí del departamento.

Así subí al bus y llegué a la academia Fujimi, al momento de llegar reconocí a la sexy maestra que muere al inicio del anime.

Ella tenía ojos castaños claros con anteojos, cabello castaño rojizo que mantenía en una coleta suelta.

Está tenía largos mechones colgando delante de cada oreja, y una figura corpulenta con pechos grandes.

"Buenos días sensei, soy el alumno nuevo, ¿Me podría decir dónde está la clase 2-A?".

"A-ah, s-si síganme que es mi primera clase".

La hermosa profesora parecía molesta pero al verme y escuchar mi tono cortés se sonrojo en el acto.

"Mucho gusto soy Edward Stafford, el alumno nuevo".

"Mucho gusto Edward-san, son Kyoko Hayashi, soy tutora de la clase en la que te encuentras".

Así seguimos caminando mientras excitaba a la hermosa Kyoko, quien se sonrojaba y desviaba la mirada de forma muy tierna.

Así llegamos al salón y al entrar me gané las miradas de todas las chicas, ellas me veían sonrojadas, mientras los chicos me daban miradas de muerte.

Logré reconocer a Miku Yuuki, ella tiene el cabello de color naranja claro al igual que Rei.

Pero el cabello de Yuuki es mucho más corto y usa una cinta para el cabello para mantener su cabello hacia atrás.

También tiene un par de aretes en cada oreja y un segundo arete en la oreja izquierda.

Ella estaba sentada en la parte trasera del salón, a su lado había un asiento vacío el cual decidí ocupar.

"Buenos días chicos, tenemos un estudiante nuevo así que trátenlo bien".

"Buenos días a todos soy Edward Stafford, un gusto conocerlos".

Al momento de acabar mi presentación todas las chicas dieron un gran gritó mientras se sonrojaban.

Sin más las clases empezaron sin problemas, gracias a System todo era muy sencillo.

"Hola Edward-kun, soy Miku Yuuki".

Un papel llegó a mí escrito el cual provenía del sitio de mi costado, el asiento de Miku.

"Hola Miku-san, un gusto conocerte".

Respondí al saludo y le devolví el papel, al hacerlo pude ver cómo se lamía los labios de forma erótica.

"Verás Edward-kun, ¿No quieres acompañarme en el receso?, la podemos pasar muy bien los dos".

"Me parece muy buena idea Miku-san, te espero en la azotea".

Volví a responder su mensaje mientras las clases continuaban, no podía esperar hacer mía a esta chica.

Se sabe que Miku es muy abierta con el tema del sexo, así que no será difícil hacerla fiel a mí.

A la hora del receso, salí de inmediato camino a la azotea, mientras Miku me seguía a unos cuantos metros.

"Bien Miku-san, nos divertimos"

"Vaya que quieres empezar rápido no, Edward-kun, ¿Qué diría tu novia si se enterará de esto?".

Puse una barrera al llegar a la azotea para que nadie nos pueda molestar.

"No tengo novia Miku-san".

"Vaya, entonces seré tu primera chica, esto será muy divertido".

Miku pensó que era virgen al decirle que no tenía novia, pero la verdad es que tengo muchas esposas.

Miku se acercó a mí y empezó a quitarme los pantalones, solo para sorprenderse al ver el tamaño de mi miembro.

Era por lejos el más grande que había visto en su vida, pude ver un poco de vacilación en su rostro.

Pero para mí sorpresa empezó a lamer mi miembro, pero no contento con eso empezé a violar su boca y garganta.

Al momento de correrme dentro de su garganta ella se corrió por ser dominada de esa manera.

"Verás Miku-san, soy un hombre que cuando ve algo que le gusta lo hace suyo para siempre".

Levanté a la aún aturdida Miku y la empuje contra la pared de la azotea mientras rompía su ropa.

Sus grandes pechos rebotaron al sentir que eran libres y su vagina ya estaba muy mojada.

"Y tú me gustas, así que he decidido hacerte mía y adicta solo a mí".

Procedí a apretar sus pezones mientras ponía mi miembro en la entrada de su vagina para luego entrar en su útero.

Ella no podía creer lo que estaba pasando era ella la que siempre tenía el control en el sexo.

Pero ella ahora sentía que su interior se remodelaba para el uso exclusivo de este chico.

Sintió un placer que nunca había sentido antes, ni todo el placer mezclado que recibió cuando tuvo relaciones con otros chicos se comparaba con lo que estaba sintiendo ahora.

"!!Hyaaaaaaaaaaa!!".

Se corrió al sentir su útero ser invadido, ella estaba tan apretada que parecía ser virgen de nuevo.

"Vaya quién diría que eras virgen Miku, estás muy apretada".

Me empezé a burlar de la chica que ya tenía una cara de ahegao.

"!!No, detente, mi cerebro va a explotar, estoy perdiendo fuerza!!".

"Esa es la diferencia entre los demás idiotas y yo mi querida Miku".

Empezé a jalar sus pezones mientras la basaba y la seguía penetrando aumentando cada vez más la velocidad.

La expresión de Miku era una perdida, sus ojos girados hacia atrás, y sus brazos colgaban de su cuerpo.