Estela al acecho

Estela parecía la esposa de un narcotraficante ya que vestía de manera muy elegante en compañía de un chico de aproximadamente 30 años, su hermana vestía de manera normal pero ver como Estela la trataba me daba incomodidad.

Es cierto que yo tenía mis debates con Ricardo, pero jamás le insultaba o bajaba el autoestima y el tampoco lo hacía conmigo, consideraba que los hermanos debían ser así ya que eran amigos y velaban por el bienestar del otro, pero ver dicha escena en como la humillaba me quería exponer y darle una buena paliza.

Les explique a las chicas de un lugar que sólo los de la hermandad podían entrar, era un pasaje exclusivo, quise ser algo dramática y les di a entender que si alguien ajeno sabía de esta puerta oculta todas corriamos peligro, en parte no era exageración, porque si pasaba otra vez real mente ellas estarían en peligro o incluso mi propia familia.

Luego de por fin entrar y seguir un largo pasillo caímos cerca de las cabañas, parecía un tramo corto pero en sí era largo, en la cabaña nos relajamos y mis tía les hicieron jurar que no dirían ni una palabra, confíe en ellas porque ya habíamos hablado y sido honestas.

Carlos a los minutos me llamo mientras las chicas descansaban de dicha presión, le expliqué todo y lo puse al tanto de la situación, Carlos me dijo que hablaría con su hermano para que nos llevará comida, esa cabaña sería nuestro refugio por el día de hoy, ya que Estela no parecía tener intención de irse.

Mi sospecha de que Luisa estaba como perro faldero era más grave de lo que imaginaba, Luisa se estaba volviendo en la hermana que tanto deseaba Estela, mi piel se erizo al imaginarme muchas cosas que aunque quisiera decirlas preferí callarlas.

Mientras hacia los tiempo recordaba los gestos de Lirio, fue cuando me dio más curiosidad de ¿Cómo Estela puede ser tan cruel con Lirio?, llame a Ricardo y escondida de las chicas le conté lo ocurrido más mi duda, accedió en averiguar la información y entendía mi preocupación aunque lo que me dijo me dejó asombrada

Voz de Ricardo desde el celular: hermanita, no todos los hermanos se llevan bien, tengo amigos que tienen hermanos y algunos de ellos envidian nuestra relación de hermanos.

Casandra: Eh!, ¿Qué quieres decir con eso?

Voz de Ricardo desde el celular: pues… no todos han tenido una buena relación con sus hermanos, han tenido peleas que se han dejado de hablar por años o meses, tranquila buscaré la información que necesitas.

Luego de colgar la llamada recibí un mensaje de Lucas quien me decía que por favor agendara su número y lo colocará como importante ya que al parecer a Carlos lo tenían vigilando y si venia a donde estábamos sólo nos metería en un lio.