Un mundo nuevo, un nuevo yo.

Es una sensación rara, el morir...

Las personas siempre se preguntan, ¿Cómo se siente el morir?

No se siente nada, es como quedarse dormido, al menos eso fue para mí.

Mis cuerpo dejo de responderme, al mismo tiempo que mis párpados se volvieron pesados y me invadía una muy fuerte sensación de somnolencia.

Y solo me deje llevar por ella, solo quería descansar, estaba muy cansado.

Pero ahora, no recuerdo cómo morí.

Llevo tanto tiempo en este lugar, que mi mente ha divagado mucho.

Todo es negro, no siento mi cuerpo, no respiro, solo siento que existo, tal vez, de una forma etérea.

"¡Hola!" No tengo idea de que cuántas veces he gritado eso, y sin recibir respuesta alguna. Siendo sincero, creo que ya me acostumbré.

Pero esta vez, ocurrió algo distinto.

Todo el espacio negro se llenó de grietas de color blanco, al mismo tiempo que comenzaba a emitir vibraciones muy violentas.

Todo se estaba derrumbando...

Traté de sentir pánico, pero no podía, algo me lo evitaba, como si supiera que nada puede lastimarme.

Y así finalmente, todo se quebró.

Lo que vino a mi vista fue un extraños agujero de gusano, dónde las ondulaciones del espacio y tiempo, se rompían y reconstruían.

Y por primera vez, desde que llegué a este lugar, pude sentir algo, pude sentir dolor...

Siento como si mi consciencia, fuera desgarrada, rota, reparada, y desgarrada de nuevo.

Al mismo tiempo, que siento como si mi cabeza estuviera encendida en llamas, y me hace querer gritar.

¡Esperen!

Siento mi cabeza.

Además del dolor, comencé a sentir emoción.

Recuerdos que antes estaban perdidos y dispersos, comenzaron a regresar y hacerse más claros que antes.

De repente, el dolor se multiplicó por mil, no pude evitar soltar un grito con todas mis fuerzas, para tratar de desahogar ese dolor que desgarraba mi alma.

-En algún lugar en bosque-

El cadáver de un niño de unos 11 años se encontraba en una hoguera, pero solo su cabeza.

Mientras huía por su vida, este chico tropezó, clavándose la rama de un árbol de fuego en un ojo, lo que llevo a la situación actual.

Lo positivo es que fue una muerte rápida, y ahora no puede sentir como su piel es carbonizada, hasta el punto de ser irreconocible.

El olor a carne quemada inundaba el aire circundante.

De repente, una luz verde se hizo presente en la cabeza del niño, lo que causó que todas sus heridas desaparecieran en un momento.

El fuego se apagó, y solo quedó un niño acostado en el césped, con la ropa chamuscada.

Y en ese preciso momento, el niño abrió sus ojos, dejando al descubierto, ojos negros, profundos como el abismo.

"Al fin puedo ver de nuevo..." Mi incredulidad era demasiada, recordaba haber muerto, pero ahora estoy viendo de nuevo.

Observe todo a mi alrededor.

Que bosque tan extraño... el césped era de color naranja y tenía una alta temperatura.

Los árboles estaban quemados, y las hojas que tenían en sus copas, todas eran color verde, y estaban encendidas en fuego azul.

Algo muy hermoso e imposible de ver.

"Solo con esto, se que no estoy en mi mundo anterior" La escena actual era tan surrealista, que ya entendía una parte de mi situación actual.

De repente una esfera de luz color azul se materializó en frente de mis ojos, pero tan rápido como apareció, también desapareció.

Lo que me extraño fue que dejo caer una extraña nota, que parecía estar escrita en un papiro antiguo.

Decía lo siguiente.

-Hola chico, como ya sabes, estás muerto.

Has pasado la prueba para saber si eran apto para una segunda vida, pasaste diez mil años en aislamiento total, y no perdiste la cordura.

-Eres el primero en aguantar tanto, así que ahora se te ha concedido un poder al azar, tan poderoso como te puedas imaginar, y has sido enviado a otro mundo, totalmente distinto al tuyo.

-Ten una feliz segunda vida, ya que para una tercera tienes que soportar novecientos mil años en aislamiento total y para una cuarta, no quieres saberlo. Aún tienes mucho por descubrir, espero que todo esté tiempo haya ayudado a aclarar tu mente.

-Atentamente: El pana Miguel, digo digo, Dios. Bye -.•

No pude evitar una sonrisa incomoda que apareció en mi cara.

"Gracias por la oportunidad Dios... supongo"

Me puse de pie, y mire a mi alrededor, pero todo lo que veo es el mismo extraño bosque, y decidí caminar.

"La tierra se siente cálida" Mire a mis pies, que estaban un poco sucios y descalzos, pero no le tome importancia y comencé a caminar.

Cada paso que daba se sentía calentito, un poco confortante, así que no me molestó mucho, cuando pasaron las primeras horas, y aún seguía caminando.

"Todos los árboles se ven igual..." Todo se ve igual, no importa dónde gire mi cabeza.

De repente, una extraña sensación llegó a mi.

Una sensación cálida inundó mi pecho, y en mi mente aparecieron muchas cosas, sorprendente mente, cosas de mi mundo, en su mayoría mucha información.

Hasta que una brújula se materializó en mi mente.

De la nada, una luz roja se hizo presente en la palma de mi mano, y cuando desapareció, en su lugar, quedaba una brújula.

Estaba hecha de metal, tiene un estilo más clásico.

Luego de eso, la sensación desapareció, pero no me dejó sin nada, ya que una explicación apareció en mi mente.

(La magia eres tú, y tú eres la magia, en tu interior habita el origen de todo lo mágico, úsalo como quieras y a tu favor, tu límite es la imaginación).

Mis ojos se iluminaron, al mismo tiempo que me invadía la emoción, como si fuera un niño pequeño de nuevo.

El sueño de toda mi vida se había hecho realidad, ahora puedo hacer magia. Y el límite lo pongo yo.

Mire la brújula que había invocado en mi mano, pero entonces me puse a pensar.

¿Porque debería caminar?...

Cerré mis ojos, calme mi respiración y me concentré.

La gravedad, es la fuerza que no atrae a la tierra para que no salgamos al espacio, pero si hago que surta efecto en mi por un rato, no pasará nada malo.

De repente, me invadió una sensación de ingravidez y me sentía liviano como una pluma.

Una sonrisa emocionada apareció en mi cara, flexione mis piernas y haciendo uso de mi fuerza, di un salto hacia arriba.

Y rápidamente comencé a elevarme hacía el cielo.

Los árboles del bosque el que me encontraba eran muy frondosos, y altos, probablemente unos 30 metros cada árbol

Pero luego de unos segundos, estaba por pasar las copas, pero entonces algo vino a mi mente.

"No puedo dejar pasar está oportunidad" Con solo pensamiento, hice que la gravedad me afectará solo un poco, lo cual me hacía caer un poco lento.

Y aterricé en una de las ramas superiores de los árboles, y con fuerza di un salto hacia delante.

Usé mi mente para imaginar que en mi piernas había energía que me ayuda a potenciar la fuerza de mi cuerpo.

Mis piernas se llenaron de una sensación cálida que se extendió a lo largo de toda esta, al momento de salto, salí disparado a una alta velocidad hacia delante.

Tal y como lo hacían los ninjas en Naruto.

"¡Wooohooooo!" Grite con todas mis fuerzas mientras sentía el viento en mí cara, y los árboles a mi alrededor se hacían borrosos por la alta velocidad.

Un sueño cumplido menos, tache esto es mi lista imaginaria de sueños por cumplir.

Mientras volaba por el aire, usé mis poderes para invocar un pequeño espejo, y me ví.

"Mi apariencia es igual que antes" Me decepcioné un poco la verdad, no me convertí en un adonis rompe corazones en mi nueva vida, ví mis mejillas un poco regordetas, ya que estaba un poco pasado de peso, debido a la grasa de bebé en mi cuerpo, y luego acaricie mi cabello negro, que al parecer era lo único cambiado, ya que ahora es liso.

"Espero que la pubertad llegue pronto..." Tan pronto como pudiera, también empezaría a entrenar mi cuerpo.

Quien sabe que peligros habrá en este nuevo mundo...

Y con eso me perdí nuevamente en la sensación de velocidad y adrenalina, mientras saltaba entre las ramas de los arboles.

Fin.