Jiang Liam

Evans se mordió los labios para que el dolor lo despertará del sueño pero solo logró lastimarse el labio. Fue en ese segundo que comprendió que no se encontraba en un sueño, todo lo que estaba sucediendo frente a suyo era real, tan real que comprendió de inmediato que iba a morir.

Evans iba a morir y su cuerpo estaba paralizado impidiendo que tan siquiera se apartará del camino.

Resignandose a su destino Evans cerró los ojos y esperó el doloroso impacto del monstruo pero el dolor no llegó desde el frente, llegó desde un costado.

Evans abrió los ojos sorprendido para encontrarse rodando en el suelo fuera del camino del monstruo.

"¿Estás bien?"

Solo ahora Evans se percató de un chico asiático acostado junto a el mirando fijamente al monstruo mientras hablaba con el.

"¿Quien eres tu?" Fue lo único que se le ocurrió decir ante el repentino giró de los acontecimientos.

El chico le tapo la boca con su mano e hizo un gesto de silencio con su dedo en los labios. Lentamente dirigiendo su dedo en dirección hacia el monstruo que había pasado de largo y se estrelló contra la pared al otro lado del pasillo.

El corazón de Evans se detuvo por un momento al observar como el monstruo prácticamente había traspasado la pared dejando un gran hoyo en el.

Si el hubiera Sido embestido por el monstruo lo más seguro es que estuviera medio muerto.

Tomando una respiración profunda Evans aguanto la respiración mientras el mismo se tapaba la boca por miedo hacer algún ruido.

El monstruo estaba desorientado moviendo la cabeza en todas direcciones.

"El no puede vernos pero si escucharnos." Susurró a su oído el chico asiático. "Ahora mismo está desorientado pero pronto descubrirá nuestras presencia por los latidos de nuestros corazones."

Evans trago saliva.

"Por eso tenemos que salir de aquí." El chico afirmó al levantarse del suelo y tenderle una mano.

Ambos caminaron muy lentamente y en puntillas para no realizar ningún ruido, cuando creían que ya se habían distanciado lo suficiente comenzaron a correr por los pasillos.

El chico asiático era muy rápido y Evans solo pudo seguirle el pasó y confiar que sabía lo que hacía. Después de unos minutos dejaron de correr y caminaron pero no hablaron nada en el camino.

Evans supuso que era por miedo a ser descubierto por otro monstruo, así que siguieron su camino hasta encontrar unas escaleras que subieron. Tan solo después de subir cuatro pisos, el chico cruzo varios pasillos y entro en una habitación muy parecida a la habitación de la cual Evans había salido.

Una vez adentro el chico suspiro y sonrió.

"Nunca creí encontrarme con uno tan pronto."

"¿Que?" Preguntó Evans que no alcanzo a escuchar bien sus murmullos.

"Nada, nada." El chico meneo la mano en el aire mientras sonreía despreocupadamente. "Aún no nos hemos presentado: mi nombre es Jiang Liam."

"Soy Evans Ryder." Evans respondió por instinto dándole la mano pero está quedó en el aire.

Jiang Liam se dió cuánta de la creciente incomodidad de Evans al mantener su mano estirada y la tomo con una sonrisa de disculpa. "Lo siento pero no estoy acostumbrado a este tipo de saludo." Dijo al tomar su mano e inclinarse levemente.

"Ohh ¿Entonces eres nativo asiático? pensé que solo tenías ascendencia, por tu fluido español." Evans se sorprendió mucho ya que Jiang Liam no poseía ninguna clase de acento extranjero.

"No, no." Jiang Liam sacudió la cabeza indefenso. "No sé hablar español. Ni siquiera se decir hola."

Evans lo miro como a un loco y espero a que riera confirmando la broma. Una mala broma pero al fin y al cabo una broma.

"El único idioma que entiendo es el chino mandarín." Jiang Liam extendió las manos en explicación. "Cada vez que dices una palabra te escucho hablar en mandarín. Supongo que cada que me escuchas puedes hacerlo en español."

"¿C-Como es eso posible?" Preguntó Evans aún sin creerselo por completo.

"No sé. No es para nada lógico." Jiang Liam sacudió la cabeza. "Pero ¿que lógica hay en nuestra situación? fuimos transportados a este lugar de la nada y hay monstruo horrorosos cazandonos, no podemos analizar está situación de una forma lógica. Diría que el podamos entendernos es lo menos increíble en nuestra situación."

"No puedo creerlo." Evans se dejó caer de espaldas contra la pared.

"¡Creelo!" Le respondió Jiang Liam.

"Es solo una expresión ¡idiota!" Evans lo señaló con el dedo. "No soy un estúpido para no creer lo que está frente a mis ojos, solo que todavía lo encuentro increíble."

Jiang Liam se sentó al lado de Evans y suspiro. "La voz en el parlante dijo que teníamos que sobrevivir, supongo que de esos monstruos."

"Es obvio." Respondió Evans con la cabeza gacha.

"Pero nunca dijo nada sobre derrotar o matar a esos monstruos." Jiang Liam susurró. "¡Eso es raro!"

Jiang Liam observó atentamente la expresión de Evans pero este simplemente no le dió importancia al asunto.

"Lo que sea." Se encogió de hombros. "¿Que vamos hacer?"

Jiang Liam entro en el baño de la habitación. Segundos después salió con dos palos de madera.

"No tenemos otra opción que bajar, dijo señalando al suelo.

"¿Estás loco?" Evans tomó una de los palos y lo balanceó. "¡Allá abajo está ese monstruo!"

"¡Lo sé!" Asintió Jiang Liam. "Pero la voz en los parlantes nos pidió sobrevivir, pero no dijo exactamente cuánto tiempo." Jiang Liam se mostró preocupado." No he podido encontrar un solo alimento en los apartamentos que he ingresado y no hay agua tampoco, sin comida y agua sobrevivir más de tres días será imposible."

Evans levantó una ceja para después fruncir el ceño con molestia. "Ahora que lo dices, tengo hambre."

"Una razón más para bajar." Respondió Jiang Liam.

Evans realmente no quería hacerlo pero no podía negar la lógica de Jiang Liam. Sabía que no podía confiar ciegamente en alguien pero el tipo literalmente le había salvado la vida.

Con Jiang Liam dirigiendo el camino, Evans salió del apartamento con un fuerte y nervioso agarre sobre su palo.

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