"..."
Alexander miró al Buda que habló, y luego a los demás Dioses y pequeños espíritus que le miraban aterrado, porque sus instintos les gritaban que se alejasen de ese hombre que podía matar sus almas divinas...
Y por último, miró a Susanoo.
El Dios de las Tormentas.
Un Dios con su propia Facción oculta.
El Dios más poderoso de Japón y uno de los seres más poderosos del mundo...
...Siendo ahogado lentamente por su mano...
"Suspiro, no debes arrodillarte, gran Buda, no merezco que hagas algo así."
"¡Guahh...!"
Susanoo se vió liberado al momento siguiente porque Alexander lo dejó ir, y enseguida activó su poder divino.
Ley del Overlord.
Alexander tampoco se quedó atrás y sus pupilas se volvieron claramente grises en cuanto activó activamente su Habilidad más poderosa.
Aunque, para su sopresa, Susanoo rápidamente, a una velocidad que era prácticamente invisible para el ojo humano, tomó la mano de Amaterasu y ambos desaparecieron con un destello de ese lugar...
Alexander bien pudo detenerlo, pero en parte porque el Dios Buda real se había arrodillado delante de él, y en parte porque la expresión de Susanoo mientras desaparecía era una expresión sombría e indefensa, casi como si se hubiese dado cuenta de que había chocado con una superficie de acero... fue que lo dejó ir.
Además, según lo dicho por el real Buda en sus ojos, matar a Susanoo podría ser especialmente dañino para Amaterasu... y si bien a Alexander no le habría importado esto, todavía le importaban demasiado su familia como para al menos, sin importar lo que piense de esas personas, "no dañar a los que ellas aprecien", o sus amigos...
Alexander sabía que Susanoo era inteligente, y podía darse cuenta de que frente a él no había nada que pudiera hacer. De hecho, estuvo a su merced y a punto de ser asesinado por él. Creía que Susanoo no era lo suficientemente estúpido como seguir buscándole problemas.
¿A qué le temen más todos los seres?
Eso es a lo desconocido.
Y en el caso de los Dioses, esto es incluso más cierto. Porque saben más, porque no son ignorantes del mundo que los rodea.
"....."
Alexander estaba tranquilo, y el lugar estaba en tanto silencio que todos allí ni siquiera podían respirar.
Una reunión del Sintoísmo ordinaria, se había vuelto tan caótica como podía ser.
Mientras pensaba, Alexander sintió unos brazos temblorosos que envolvieron su cuerpo, así como unas tetas enormes que se presionaban y se aplastaban a su espalda.
Él se rió, "Yasaka, ¿estás bien?"
Ella asintió con un pequeño movimiento de cabeza, enterrándose aún más en la espalda grande justo frente a ella.
...
Yasaka en este momento no sabía qué pensar, qué sentir, o qué expresar.
Desde pequeña, ella se había valido por sí misma y había luchado todas las batallas en solitario.
Había estado en peligro innumerables veces, pero nunca vió con sus propios ojos una amenaza tan descomunal como justo la acababa de ver. Y, al mismo tiempo, tampoco había sido protegida tan ferozmente por alguien, mucho menos, alguien que ella quería y amaba tanto que se estaba dando cuenta, hace mucho tiempo había pasado el límite de obsesión...
Ella amaba localmente a Alexander, él era lo que ella necesitaba más que el aire.
Ella literalmente no "dependía", en palabras exactas, de la existencia de Alexander, pero era lo más valioso que sostenía.
Kunou también era su hija, y ella la amaba, pero eso era una clasificación completamente diferente a Alexander, el cual no podía parar... aterradoramente, de querer más y más...
¿Era posible este sentimiento?
¿Cómo Yasaka podría expresar el sentimiento que tenía en su pecho en este momento?
¿Cómo ella podía llamarle a aquél que se llevó todas sus cargas pesadas que la habían formado como persona?
¿Por qué ella sentía que no podía respirar?
No era demasiado sorprendente.
Simplemente su hombre la había protegido de las malas intenciones de otro hombre.
Pero, esto era algo que Yasaka, en todo lo que quedaba de su larga vida, dudaba poder olvidar.
Este momento fue el momento más romántico, satisfactorio, aterrador, y tranquilizante que Yasaka había vivido, todo en solo unos pocos minutos...
La imagen de este hombre, la imagen de su espalda ancha frente a ella, le habían hecho comprender a Yasaka...
... Que había sido afortunada de haber nacido como mujer, y de haberse enredado con el destino de este hombre...
.......
Yasaka lentamente levantó la cabeza y miró a Alexander.
Como usual, pero peor, mientras Alexander y Yasaka se miraban fijamente sin hablarse física o telepáticamente, un campo literal de amor se extendió con ellos como centro.
Los ojos de Yasaka casi parecían estrellas mirando estúpidamente a Alexander, y los ojos suaves de Alexander correspondían en menor, mucha menor intensidad, los sentimientos que ella le quería trasmitir...
Todo esto...
"Ehmm..."
"..."
"Compañero humano..."
Mientras los Dioses y espíritus presentes no sabían que cara poner.
Incluso el Buda principal que todavía estaba arrodillado, el Buda del Amor, todavía sudaba bastante por lo increíble de toda la situación en general.
¿De una reunión del Sintoísmo ordinaria, a casi un desastre, y ahora a un romance?
Por favor, tengan en cuenta la fragilidad del corazón de este viejo y humilde monje...
Mi frágil corazón no puede aguantar estos vientos jóvenes y tormentosos...
Es cierto que dije que el cuerpo se beneficia del movimiento y la mente se beneficia de la quietud, ¡pero ya estoy demasiado viejo para estas cosas!