webnovel

CAP. 5: La dificultad del perdón

Unos minutos antes Sarah había terminado de comer y se había encerrado dentro de su habitación, acostada en su cama boca abajo y cubriendo sus orejas cos su almohada, un infructuoso intento para obviar todos esos pensamientos negativos que deseaban apoderarse de ella, luchando contra sí misma y su casi infinita negatividad, eso hasta que su celular empezó a zumbar nuevamente.

— Aaaahg, Joshua por favor…

No estaba de humor para evitar llamadas, se levantó para ir al escritorio y agarrar su teléfono solo para enterarse que la llamada no era de Joshua sino mas bien de Lily, en un segundo un muy mal presentimiento empezó a recorrer su espalda, como si de plomo se tratara, mantuvo la mirada fija en la llamada dudando en si contestar, no era habitual que alguien como Lily la llamara a ella, esperó a que denegara la llamada pero sorprendentemente no colgaba, es mas, Víctor y Grace había empleado a llamarla también, siguió esperando un poco hasta que denegaran todos la llamada pero una duda empezaba a merodear su cabeza "¿Por qué me llaman todos menos Joshua?" al surgir esa pregunta Sarah sentía como gotas de sudor recorrían su cara y sin pensarlo mucho contesto una llamada al asar de las tres que había.

— ¿¡Q- que sucede!? ¿¡Todos están bien!?

Hubo un silencio, solo se escuchaba el sonido de platos y personas hablando de fondo para después ser reemplazados con sonidos de autos pasando, sin oportunidad de hablar Lily la interrumpe con una agria y bastante seria voz, tono que había escuchado desde antes pero nunca dirigida hacia ella.

— Si, pasa algo, escúchame más te vale no colgar Sarah, esto es serio.

— ¿A- ah q- qué?

— Cállate, escúchame primero.

Se mantuvo en silencio. Era una gran fortuna no estar viendo la cara de Lily en ese instante y no tener que responder a las malas, era todo un alivio, pero aun así sentía como un nudo le apretara la garganta y con cada palabra que decía más y más encogido se hacía.

— Se que te sientes mal, se que estas mal, pero eso no te da el derecho de estar ghosteando a todos en el grupo, quizás por dos días o tres te es pasable pero ya estas armando un problema, Max y yo estamos preocupados, Joshua esta en un estado que da pena y Grace acaba de salir del hospital ayer ¿Quieres por favor hacerte presente? Se que no es la primera vez que pasa, no soy Grace para tener amnesia, pero ¡por Dios Santo!

— …

— no se que tan mal la estes pasando ¿Va? Sabes que soy mala intentando descifrar como se siente alguien específicamente, pero ya esto es pasar el limite de lo normal ¿Sabes cómo esta Joshua ahora?

— … esto…

— ¿¡Sabes cómo está el ahora!?

— … n- no.

— ¡Lleva sin dormir desde el terremoto, perdió el apetito y está más sensible de lo normal! Estábamos comiendo en la cafetería que por cierto lo acordamos por el grupo así que no puedes decir que no te invitamos, y el parecía un bendito zombie, se estaba durmiendo en medio de la conversación y ni comió ni una sola cuchara de su plato, estuvo jugando con el todo el tiempo.

— …

— Ente que Grace perdió la memoria y tu no apareces se esta muriendo de los nervios y sobre pensar, si sabes como se pone el cuándo la ansiedad lo ataca y lo sabes de sobra ¿Por qué no-?

— P- para ¿Grace qué?

— …

— ¿¡Porque no me lo-!?

— ¿Por qué no te dijimos? ¿¡COMO!? Si te desapareciste, aparte, Joshua casi que me rogo que no te lo contara para que no te estreses de más, y el que termino estresado fue el.

— ¡V- voy para allá! ¿Dijiste que estabas en una cafetería?

— Si… en Molly's… ¿¡Y como planeas llegar!? ¿Tus padres te darán permiso?... ¿Sarah?

Sarah salió corriendo y dio un portazo en la puerta de su habitación dejando a Lily hablando sola, no pensó que el desaparecer del grupo causaría tantos problemas, busco las llaves de la casa y salió corriendo de forma apresurada tanto que agarró sus lentes mientras corría y si no los agarraba de todas formas hubiera salido de la casa sin ellos. Con la culpa haciendo acto de presencia ni a sus propios padres les pidió permiso para salir, sabía que ellos entenderían.

-----------------------------------------

Lily se mantuvo unos segundos esperando una respuesta de Sarah pero al solo escuchar silencio supuso lógicamente que había ido a buscarlos, suspiro hondo y volvió adentro se la cafetería para sentarse con los chicos, al entrar de vuelta podía escuchar una conversación interesante entre ellos.

— ¿Crees que los sobres sean de mis padres?

— Yo no estaría tan seguro…

— ¿Por qué? Es lo que mas sentido tiene, yo no trabajo y no creo que alguien me regale tanto dinero así porque si, si no llega a ser un familiar, claro.

— Pues, ehm— Víctor pasa su mano por su propio pelo— no creo que deberías de ilusionarte…

— ¿Ilusionarme?

— Vaya, vaya, ¿de qué están hablando? ¿acaso te sacaste la lotería Grace?

Habló Lily con su tono característico de voz y una mirada curiosa. Los dos se les quedaron viendo, sobre todo Grace que era la que menos acostumbrada estaba a su comportamiento quien hacia una notoria mueca de confusión, aun así, quiso no preguntar por el cambio y en vez intento responder la pregunta de Lily.

— Pues, pasa que-

— Grace me estaba hablando de un juego que vio por una red social.

— Mjm, cuando no, cuando se pongan a estudiar y no a jugar todo el día Gabriel tocara las trompetas — Lily procedió a revisar su celular mientras se sentaba en una de las sillas.

— Y cuando tu sueltes el vicio al teléfono los cerdos van a volar.

— Touché…

Grace alterno la mirada entre Lily y Víctor estando obviamente desconcertada por la respuesta que le dio Víctor, el chico notando esto le topo el hombro para que la viese, cuando ya tubo captada su atención le hizo una seña para que no comentara nada al respecto, las dudas de Grace no hicieron más que crecer, después de media hora de pura conversación entre los tres y chistes bobos se escuchó una vos que la llamaba por su nombre, al voltear se encontró con un chico joven pero notoriamente más adulto que ella indicándole fuera hacia él, vacilando un poco se levantó de la silla y sin querer haciendo que la atención de Lily y Víctor se centrara en ella.

— ¡Hola Grace!

— Ou… Hola ¿Qué tal? — dijo intentando actuar como si lo conociera para no dar explicaciones.

— Yo estoy bien, gracias, quería preguntarte… ¿Cuándo vas a volver a trabajar?

— … — Grace no dio respuesta mas que una seña de confusión.

— ¿Te vas a hacer la loca conmigo? Es imposible no notar tu ausencia, desde que te fuiste el lugar perdió algo de carisma…

— P- perdón, es que me ocurrió un… bueno…

Grace empezaba a balbucear sin saber que responder ante eso exactamente, volteo a ver hacia sus amigos y ambos la estaban viendo: Lily no parecía estar menos confundida que ella, pero Víctor volvía a pasar sus dedos entre su pelo, gesto que se estaba volviendo extrañamente recurrente en él, sin que ellos les puedan ayudar decidió improvisar.

— Perdón, es que me ocurrió un accidente y estuve en el hospital.

— Oh… lo siento mucho, tomate tu tiempo para relajarte entonces, perdón por molestarte.

— ¡no, no! No es una molestia, no te preocupes.

— Entonces está bien…

El joven estuvo algo avergonzado por su pregunta. Grace volvió a sentarse con el grupo visiblemente confundida y Lily hizo lo que mejor sabe hacer, sacar información de otras personas, o sea, bombardearlas con preguntas, lo bueno es que para suerte de Grace Lily hablo en un tono de voz bajo para que el chico de antes no la escuchara. Justo al empezar las preguntas aparecían nubes negras que tapaban el sol como un presagio de una inminente tormenta.

— ¿Trabajas aquí?

— Es una muy buena pregunta, yo también quiero saber.

— … ¿Cómo puede ser que trabajabas en este lugar y no nos lo habías dicho a nadie? o al menos a mi

— No lo sé…

En medio del cuestionario sonó la campana de la puerta de la cafetería, Max estando aburrido miró a la puerta y noto una figura femenina sujetaba un mechón de su ondulado pelo marrón pareciendo ansiosa y ella miraba hacia los lados buscando a alguien, al instante pudo reconocer de quien se trataba y exclamo con enorme alegría.

— ¡Sarah!

Escuchando Sarah volteo hace Víctor y este la saludaba con la mano y una enorme sonrisa, las de más chicas voltearon a verla también, Grace no podía aguantarse la enorme curiosidad y hacia preguntas mientras Sarah se acercaba con algo de timidez.

— ¿Ella es Sarah?

— Si, es ella…

— Con razón la tenía en mi galería de fotos ¿Cuántos años tiene?

— Es un año menor que todos nosotros, es una nerd de primera.

— Bueno… si parece inteligente, y algo tímida también.

— No suele ser tan así con nosotros.

— ¿Te refieres no ser inteligente o no ser tímida?

La chica de detuvo justo en frente de la mesa en la que se encontraban, se sujetaba su brazo y con la cabeza algo baja buscando las palabras correctas para hablar, Grace la miraba con curiosidad, le recordaba fuertemente a Joshua tanto por sus expresiones como por sus gestos. Sarah hace una profunda respiración, Víctor noto de inmediato que estaba mucho más sensible de lo usual.

— Yo…

— ¿Tu?

Lily pregunto con un tono agrio de voz, dejando notar su enojo, pero era como si ella misma no se diera cuenta de lo agria que estaba siendo, tan pronto como abrió la boca Sarah bajo la cabeza y se dio la vuelta para acomodarse los lentes, sentía que era demasiado tarde para hacer algo.

— Míranos Sarah, solo discúlpate y ya.

— ¡Lily! No seas tan ruin con ella — Dijo Víctor molesto por su actitud.

— ¿Perdón? Yo no estoy siendo ruin, además ella está dando demasiadas vueltas para hacer algo, que solo lo haga y ya.

— Lily.

— No, ella esta alargando un problema, y eso no lo puedes negar.

— Pero ten un poco de empatía por ella.

— Pero Sarah no suele tardar tanto en hacer algo tan simple.

Mientras Lily y Víctor discutían Sarah miro el suelo aun estando de espaldas a ellos, se sentía terriblemente mal y no sabia que hacer, ya había causado muchos problemas, estaba convencida de que ya no la perdonarían, en especial Lily, sin darse cuenta se estaba sumergiendo y dándole la razón a su ansiedad, aun sintiéndose una completa idiota por preocuparse tanto por personas que al fin y al cabo puede dejar de hablar con ellas, pero de todas formas seguía sintiéndose horrible por sus acciones, "tal vez debería de irme y no volver a verlos, ellos pueden seguir el grupo sin mí, al fin y al cabo siempre había sido la mas disonante en el grupo, como una piedra azul entre piedras naranjas… Si me fuera de este lugar no estaría sufriendo por personas, es más ¿Por qué sigo aquí para empezar? Puedo largarme en cualquier momento, de todos modos, ya no quieren que este con ellos".

Mientras todas estas cosas pensaban por su mente decidió que ya era hora desaparecer, pero esta vez definitivamente y fue así, fue hacia la salida sin importarle en lo más mínimo que había empezado a llover, suceso que no fue ignorado por Lily.

— ¿¡A donde crees que vas!?

— Ay Lily es que tu también… — dijo Grace reconociendo su actitud acida.

Lily la siguió afuera de la cafetería sin importarle que ella también se mojara, por consecuencia Víctor también la siguió para que no se pasara con Sarah y Grace también por razón similar. Sarah seguía caminando intentando recordar el camino a casa cabizbaja y pudo escuchar a Lily gritarle a lo lejos, pero para este punto no le podría importar menos.

— ¡Sarah, detente, ven acá!

Cuando llego a estar cerca de ella el sujeto del hombro para que no se fuera a ningún lugar, por consecuencia Sarah se detuvo de golpe ya estando cansada de toda la situación y volteo a verla, se notaba una seriedad habitual en su rostro casi inexpresivo, pero si no fuera por sus lentes que protegían sus ojos de la tormenta sus lágrimas podrían camuflase con el agua de la lluvia. El rostro de Lily paso de uno serio y algo molesto una expresión aun seria, pero con notables pinceladas de preocupación, nunca la había visto llorar, ni siquiera en situaciones que se supone eran peor que la que estaba viviendo, poco a poco quito su mano de su hombro, dejándola ir.

Víctor viendo toda la escena desde la distancia de acerco hacia Lily y no estaba para nada contento, de detuvo en frente de ella y empezó a aplaudirle sarcásticamente, no parecía estar enojado con ella, mas la decepción habitaba en su mirada.

— Bravo, acabaste de hacer llorar a la chica más emocionalmente inteligente de toda la secundaria.

— …— No hubo respuesta.

— ¿Entonces? ¿No te vas a disculpar con ella?

Lily no decía nada, estaba confundida, repasaba todas las situaciones donde Sarah pudo haber reaccionado de esa manera, casos de bullyng, bromas pesadas de Víctor y Grace, incluso momentos de enojo, pero nada "¿Por qué lo haría ahora? No tiene sentido, ¿Qué le pasa? … ¿Por qué me siento tan mal?", ahora era ella la que estaba dudando entre si disculparse o no, o, mejor dicho, como disculparse, la veía alejándose a lo lejos antes de que Víctor volviera a hablar… pero por alguna razón sus palabras le dolían, no le estaba gritando ni mucho menos, pero su reprensión se sentía como cuchillos.

— ¿Vez que no es tan fácil?

— … —Lily siguió sin responder agachando la cabeza.

— Oye, entiendo que te sientas mal, se que no eres de decorar tus palabras, pero hay momentos y momentos, y este no era uno de ellos.

— Yo… no sé qué decir.

— Yo opino que deberías de pedirle perdón mañana, sino te evita, claro.

— …— Lily suspiro hondo y asintió con su cabeza antes de volver a la cafetería para esperar a que le lluvia parara.

Víctor hizo un suspiro pesado y volteo a ver a Grace: esta parecía no tener expresión y tener una mirada bacia, la misma que había visto cuando ella le estaba mirando a él, como si estuviera sumergida en sus pensamientos tan profundo que no presta realmente atención a lo que ve, y esto tenía una razón de ser.

Se encontraba en un parque, por sus manos podría apostar a que apenas era solo una niña, solo miraba sus manos que se sujetaban entre si con fuerza mientras una voz incómodamente familiar la regañaba con dureza.

— ¿¡Vez que no es tan fácil!?

— … S- sí.

— ¿Entonces?

— … — No hubo respuesta.

De un momento a otra alguien ponía una de sus manos en la barbilla obligándola a ver a la persona a quien le hablaba: era una mujer adulta con una piel similarmente blanca a la suya, completamente contrario a su corto pelo marrón chocolate, una apariencia delicada como una pluma pero que a la hora de la verdad era mas parecida a cristales rotos y afilados que a delicadas e inofensivas rosas.

— ¿¡ENTONCES, GRACE AMADEO!?

— ¡Perdón, perdón, perdón, perdón! ¡no lo vuelvo a hacer sin pedir permiso, lo prometo!

Podía sentir la respiración se entrecortaba con tan solo verla a los ojos y como sus pequeñas manos temblaban descontroladamente, todo esto mientras una voz interna le gritaba que no se atreviera a llorar. La mujer se le mantuvo mirando con una seriedad espeluznante, dejo de sujetar su barbilla para agarrarle con fuerza su muñeca, pero esta vez con un inconsistente tono dulce de voz y una sonrisa amable.

— Bien, que no se vuelva a repetir.

— S- si… n- no volverá a pasar.

— ¿Grace…?

Cuando despertó del "trance" se dio cuenta de lo que estaba pasando fuera de su cabeza: el abrigo de Víctor cubriendo su cabeza y cuerpo como si de una capucha se tratara y el mismo chico estaba agachado cerca y a su altura, tenía una mirada preocupada fijada en su rostro el cual solo reflejaba la nada absoluta, incluso… el miedo, dudaba seriamente en si debería de llamar a alguien para que la ayudara, "¿Cuántas veces le habrá pasado esto?" Mientras dudas recorrían la mente de Víctor, Grace lo estuvo viendo ya consciente, pero no menos sorprendida, se mantuvo así mirándolo hasta que dejo ver que ya estaba consciente, desviar su mirada a la pared con algo de lentitud, sosteniendo el abrigo con una de sus manos.

— Ay, gracias a Dios, pensé que te había pasado algo.

— A- ah eh… n- no…

— ¿Y que paso entonces? ¿Recordaste algo otra vez o…?

— Si, pero no te preocupes ¿Nos vamos de aquí?

— No hay nada más que hacer, pero antes de eso.

— ¿Sí?

Víctor se mantuvo observándola por un rato, se notaba que no encontraba las palabras adecuadas para decir lo que tenía que decir, por su parte Grace lo esperaba pacientemente, en un momento determinado la chica se quito el abrigo y se lo puso a Víctor en la cabeza para que no se mojara tanto, de todos los dos ya estaban empapados de pies a cabeza de lluvia, un gesto que, aunque inútil a el chico le pareció extrañamente adorable.

— Jaja, pues, lo que iba a decir— hubo un pequeño silencio entre ambos— se que no te gusta hablar te tus problemas con los de más, pero ayer te vi así y hoy ya paso dos veces ¿En serio crees que no debería de preocuparme por eso?

Víctor tenía un semblante tranquilo mientras seguía estando agachado a la altura de Grace, pero su inquietud era innegable, ya la pelinegra había dejado bastantes advertencias de algo que estaba ocurriendo y no había mencionado y su inquietud aumentaba cada vez más. Grace se mantuvo dudando, sentía que podía hacer las cosas solas, pero… algo en ella le decía que debería de al menos pedirle ayuda sin explicarle explícitamente lo que pasaba, puso sus manos en su propia cintura y la mirada al asfalto mojado pensando en las consecuencias de la acción que estaba apunto de cometer, y resolvió en asumir.

— De hecho, uhm… acuérdame hablar contigo mañana.

La expresión tranquila de Víctor se suavizaba por la preocupación, pero trato de ocultarlo de tras de una sonrisa amable, se levanto y mientras se amarraba el abrigo mojado en su cintura hablaba con Grace con un tono de voz aun con una falsa tranquilidad.

— Entiendo… mañana hay que resolver varias cosas, pero… voy a intentar hablar contigo, cuídate.

— Ok, adiós, no quiero que mañana te mate un resfriado.

— Jajaja… no, no va a pasar.

Dicho esto, el chico se da la vuelta para irse a su casa y Grace hizo algo similar, ambos yéndose por su propio camino, cada paso que daba era un nuevo charco de agua que pisaban sus pies. Se suponía que se reunieron todos para pasar un buen rato, pero que ironía, en vez de unir al grupo termino de ser algo que los separaría más de lo que ya estaban, ahora tenía mucho en que pensar.