Mientras descansaba, Alexander comenzó a reflexionar sobre su situación actual. Se dio cuenta de que las habilidades que había adquirido eran mucho más poderosas de lo que había imaginado. Su cuerpo se había transformado en una máquina de matar, y tenía una fuerza y velocidad que nunca antes había experimentado.
Alexander decidió que era hora de poner a prueba sus nuevas habilidades y descubrir hasta dónde podía llegar. Empezó a practicar sus movimientos y habilidades, experimentando con diferentes técnicas y estrategias.
decidió que iba a seguir entrenando y mejorando sus habilidades, sin importar el costo. Estaba decidido a convertirse en el campeón mas poderoso ya que nada iba a detenerlo.
Y así, Alexander continuó su viaje hacia la oscuridad, sin saber lo que le esperaba en el futuro.
En su camino para encontrar información sobre su paradero, Alexander llegó a una gasolinera. Había muchos productos de todo tipo en la tienda, pero lo que más le llamó la atención fue un periódico con fecha del 2003, lo cual significaba que había pasado 20 años desde que fue publicado o avia viajado 20 años al pasado . Lo más interesante del periódico era que, entre las noticias sobre la nueva tecnología y política "actual", había un titular sobre una extraña muerte donde a la víctima le sustrajeron toda la sangre de su cuerpo.
Alexander se detuvo a pensar sobre las posibles razones detrás de la muerte. Al ser transportado a un mundo ficticio, las posibilidades eran pocas. Una de ellas era una serie de vampiros o una película, pero no era fan de ese tipo de historias antes de ser transportado.
Decidió robar comida y bebidas de la gasolinera, aprovechando su velocidad para poder tomar cosas sin que se de cuenta y mi habilidades para pasar desapercibido. También robó el celular del empleado, pero luego lo tiró ya que era una mierda que no servía para nada, un viejo modelo Nokia.
Alexander se quedó mirando la carretera durante más de 5 minutos hasta que finalmente llegó el automóvil que sentía. Mirar más de 5 km era una locura
ya que podía sentir la presencia de cada animal desde sus pisadas, hasta aquella larba arrastrándose por el bosque así como cada esencia, ya que cada cosa o cada ser desprende una exencia, desde que ss dulce hasta amarga o asqueroso. lo asqueroso son los vamprios ya que cuando peleaba con ellos verlo era repugnante.
no se si era por el echo de que matan gente y toman beben su sangre queda igual
la gente normal Parecía que ellos eran los más afectados por su extraña existencia, ya que el trabajador de la gasolinera estaba muy asustado con su presencia.
Para aliviar eso, Alexander usó sus habilidades para crear un pequeño domo alrededor de él que mantuviera cualquier esencia o aura que saliera de su cuerpo, evitando así dos cosas: la posibilidad de que lo atacaran y el miedo de las personas a su alrededor.
Mirando el auto que se acerca peligrosamente a Alexander, estira la mano y levanta el pulgar pidiendo aventón, y por suerte el auto se detiene a su lado.
Mirando el auto con las ventanas polarizadas, se ve a la persona dentro bajando la ventana y mostrando al conductor: una mujer de unos 22 a 25 años, con cabello rubio, ojos azules y una piel pálida muy hermosa. Sin pensarlo dos veces, Alexander entra al auto con ella.
Una vez dentro del auto, un silencio incómodo se hace presente. Alexander decide hablar primero: "Muchas gracias por ayudarme, de verdad, gracias", dice Alexander, mientras espera que la chica hable.
"No hay problema", dice la mujer.
"Ehh... ¿Cómo te llamas?", pregunta Alexander con un toque de nerviosismo en su voz, ya que la situación se está volviendo incómoda.
"Me llamo Rebecca, ¿y tú?", dice Rebecca con un tono neutral.
"Llámame Alexander, Rebecca. Y a dónde te diriges? Estoy un poco perdido", pregunta Alexander.
"Estoy en camino a mi casa en la ciudad", responde Rebecca.
"¡Perfecto! Entonces, ¿puedo acompañarte? Estoy buscando algo de información en la ciudad", pregunta Alexander con una sonrisa.
Rebecca duda por un momento, pero después de mirar a Alexander a los ojos, se siente cómoda con él y acepta. La conversación fluye entre ellos y hablan sobre diversos temas, desde sus gustos musicales hasta sus pasatiempos.
"¿Tú también te gusta la música?", pregunta Alexander, tratando de iniciar una conversación.
"Por supuesto. Me encanta la música, especialmente el rock alte y la música clásica", responde Rebecca con una sonrisa en su rostro.
"Sí, a mí también me gusta el rock, especialmente bandas como Radiohead y Muse", dice Alexander con entusiasmo.
"¡No me digas! ¡También son mis bandas favoritas! ¡Tenemos mucho en común!", responde Rebecca emocionada.
La conversación continúa así durante el resto del camino hasta que finalmente llegan a la ciudad. Rebecca invita a Alexander a su casa y él acepta con gusto, emocionado por haber encontrado una persona con la que tiene tanto en común..