Al mirar a Lin Fan, Hada Hongyun lanzó un suspiro de alivio. Por suerte había elegido mostrar misericordia. De lo contrario, las cosas se pondrían realmente mal si los hubiera matado.
Por otra parte, Lin Fan no estaban tan contento en ese momento.
A fin de cuentas, aquel era un problema de fuerza.
Estaba dentro de la Secta de la Nube en ese momento. No solo la fuerza del Gran Maestro era mayor que la suya, incluso algunos de los Ancianos podrían ser más poderosos que él.
Por todas las razones, debería haber matado a Fang Weifeng por sus injustificadas provocaciones que habían sucedido una y otra vez. No obstante, Lin Fan no pudo dejar la prudencia de lado contra todas las demás personas de la Secta de la Nube.
Si tuviera el poder absoluto, no habría necesitado preocuparse por ellos y podría matar a Fang Weifeng sin ningún ápice de piedad.
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