A Mike Baylor no le importaban en absoluto los pensamientos de Jordan. Quería decidir directamente la solución, ¡lo que enfadó mucho a Jordan!
¡Bam!
Jordan también estaba enfadado. Puso la taza de té sobre la mesa con fuerza.
—¡No estoy de acuerdo!
Antes, Jordan había dicho con tacto que volvería a considerarlo. Sin embargo, como Mike Baylor era tan dominante, Jordan no se anduvo con ceremonias y ¡le rechazó directamente!
—¿No estás de acuerdo?
Mike Baylor miró a Jordan con incredulidad.
Jordan dijo:
—Así es. No estoy de acuerdo con tu gran plan, ni con repartir una cuarta parte de la línea de sangre dorada. No creo en la ridícula teoría de que cinco mutantes puedan despertar a la poderosa diosa del Lago Inmortal.
Jordan dijo directamente sus verdaderos pensamientos, provocando el estupor de la Doncella de la Luna.
La Doncella de la Luna preguntó:
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