Capítulo 35

Guardo a todas mis chicas, todas las cosas que traen los soldados que las acompañan y a todas las mujeres que han traído las esclaviza y las capturó según van llegando.

Cuando veo que han llegado todas me transportó a Temiscira, una ciudad a orillas del mar negro, que está gobernada por mujeres guerreras y habitada por mujeres esclusivamente.

Lejos de la ciudad libero a todas mis chicas y me miran, parecen querer preguntar donde estamos ahora y que ha pasado con la ciudad de Esparta, donde estábamos antes, pero solo me miran y esperan.

"Volveremos a Esparta en dos días, al alba del tercer día, ahora estamos en Temiscira, ciudad de las amazonas." (yo)

"Ahora vamos a montar el campamento, cenar y a descansar, mañana visitaremos la ciudad, quiero estar descansado para desafiar a cada mujer de la ciudad a un combate por el dominio personal y de la ciudad." (yo)

"Si son la mitad de orgullosas y guerreras como dice la leyenda no negarán este desafío" (yo)

Lucilla, que estaba a mi lado me mira y me dice.

¿Ahora voy a tener como nueras y hermanas a las amazonas?

"Jajaja, con más de 600 nueras actuales y las que van a aparecer desde este viaje, te preocupan unas mujeres guerreras que odian a los hombres y piensan que son mejores que ellos en todo." (yo)

"¿Podemos desafiar las nosotras?" (Oritia y Antianira)

"Es cierto que vosotras sois amazonas y semidiosas, de otro mundo." (yo)

"Esta bien, pero solamente si vuestra igual en este mundo está presente, actuareis en mi nombre y sin las armas y armaduras." (yo)

Cenamos y nos acostamos y pasamos la noche tranquilamente.

Ding, a media noche, misión diaria actualizada

Misión diaria.

Conviertete en rey de una ciudad.

(Esto no tiene nada de aleatorio, ese maldito dios MF está jugando conmigo, pienso para mí) (yo)

Le enseño el dedo del medio al aire, por que se que me esta mirando.

Por la mañana todo está tranquilo y desayunamos sin prisas, recojo el campamento y traigo las monturas y los carros.

Acarició a mi unicornio hembra, y pienso que ya va siendo hora de ponerle un nombre o preguntarle si tiene uno.

"¿Tienes algún nombre?" (yo)

La unicornio sacude la cabeza.

"¿Quieres que yo te ponga uno?" (yo)

Ella asiente con la cabeza varias veces.

"A partir de ahora tu nombre será, Dulce" (yo)

Ella asiente y mueve la cola de felicidad.

Me subo en ella y empezamos la marcha lentamente, cuando llegamos a las puertas de la ciudad nos están esperando.

No se ve un solo hombre y no detectó ninguno en el radar en todo el mapa de la ciudad.

Hago una señal a las chicas para que esperen y yo me adelanto con dulce hacia las puertas.

Una mujer me grita desde lo alto de la muralla.

"No permitimos hombres en la ciudad, deja a todas las mujeres que te acompañan y marcharé o muere." (amazona #1)

Me quedo un momento mirando a las amazonas con los arcos en la muralla y a la amazona que me ha gritado, después de unos minutos en los que nadie dice nada y las estoy impacientando a propósito.

Otra amazona me grita.

" ¿Estas sordo, te hemos dicho que te marches?" (amazona #2)

Alzó mi voz y grito para que me escuchen bastante lejos, con voz profunda y solemne.

"Yo, Pedro señor de reino de jade violeta, desafío a combate singular a la reina de las amazonas y a todas las amazonas de Temiscira, sobre los derechos de posesión personal y de reinado."

"El ganador de cada combate gana el derecho de posesión personal del perdedor así como todas sus posesiones."

Se hace un silencio sepulcral, ni un solo ruido puede escucharse tras mi desafío a toda la ciudad y su reina.

Su orgullo, su honor y su creencia en su superioridad no las permite rechazar el desafío.

Tras unos momentos muy tensos.

Una voz potente viene del otro lado de la muralla.

"Valientes palabras para un hombre mortal." (amazona #3)

"Yo, Otrera, reina de las amazonas, en mi nombre, y como reina de todas las amazonas, acepto tu desafío, lucharás contra todas las amazonas en combate singular, desarmado completamente, sin descanso hasta luchar contra mi en último lugar.

" El perdedor será esclavo del vencedor y todas sus posesiones, también pasarán a ser del vencedor."

"¿Tenéis algún lugar donde realizar las luchas de desafío dentro de la ciudad? O¿vais a ir saliendo una a una?" (yo)

Me desnudo, dejándome puestos solamente los calzoncillos.

Le hago entrega de mis cosas a Litsa y me quito también los calzoncillos y se los entrego, dejando libre de restricciones mi miembro colgante, que es imponente aún estando en reposo.

Me acerco desnudo a las puertas y estas comienzan a abrirse.

Salen varias amazonas con lanzas y escudos y me rodean.

"Ahora debes seguirnos a la arena, donde comenzará tu primer combate, y seguramente el último." (Otrera)

"Antes de que llegue la media noche de hoy seré tu rey y te montaré como una bestia en celo, hasta que supliques clemencia." (yo)

"Eso ya lo veremos, no eres el primer loco en decir semejantes palabras, pero ninguno ha conseguido derrotar a ninguna de las amazonas desafiadas." (yo)

Llegamos a una plaza con un foso bastante amplio y profundo, está embarrado y se nota que se emplea muy frecuentemente.

Sin que nadie me diga nada saltó al foso y caigo de pie con agilidad felina.

Allí espero a la primera amazona que me enfrente.

Es una hermosa mujer de piel bronceada y pelo moreno hasta la espalda, recogido con una especie de coleta con aros de metal.

Tiene un cuerpo atlético y bien tonificado, sus pechos, cuño y caderas son abundantes y bien redondeadas, los abdominales son perfectamente visibles y marcados.

También está desnuda al igual que yo.

No está depilada pero eso no me impide apreciar su hendidura y la belleza de sus apretados muslos.

Ahora me vienen a la cabeza videos por no de lucha libre entre hombres y mujeres.

Donde el hombre debe follar a la mujer y ella evitar ser follada.

Con ese pensamiento mi pene que permanecía en estado dormido, empieza a despertar y a ampliar su envergadura.

Llegando a las nueve pulgadas y sin estar totalmente duro.

La amazona me mira asustada al verlo crecer de repente cuando ella desciende al foso.

"No te preocupes seré gentil, digo con un tono burlon, para que se enfade." (yo)

Ella carga hacia mi e intenta tirarme al suelo para intentar cortar mis movimientos, yo la evitó y hago que tropiece y se caiga.

Me subo a su espalda y sujeto sus brazos por detrás de su espalda sin llegar a dislocar los hombros.

"¿Te rindes? (yo)

"En tus sueños."(Amazona #4)

"Tu lo has querido" (yo)

Con una de mis manos sujeto sus dos brazos en su espalda y con la otra colocó la punta de mi pene en el entrada de su ano.

"Tu última oportunidad de rendirte, después no me detendre aún que me pidas misericordia." (yo)

"No me das ningún miedo, nunca me rendire." (Amazona #4)

"No vengas llorando y digas que no te avise después." (yo)

Con mi pene apuntando a su ano, empiezo a empujar lentamente pero sin pausa mis caderas en su dirección, y empiezo a introducir la punta de mi pene en su cuño virgen.

Ella empieza a gritar que me detenga entre gritos de dolor.

Yo no hago caso de sus gritos y forcejeo por liberarse y continuo entrando sin prisa pero sin ningún indicio de detenerme.

Adapto el tamaño de mi pene a una pulgada más grueso y 3 pulgadas más largo.

Llegando a medir casi 13 pulgadas.

Ella sigue gritando de dolor y pidiéndome que me detenga, ha notado el aumento de grosor y ahora grita más fuerte.

Vas a partirme en dos, ahhhh, sácala de mi culo, auuuuhhhh, eres un animal, arhhh, por favor, Arghhhhhhhhh.

Llevo metido la mitad aproximada de mi pene y continuo metiondolo sin pausa, ella sigue gritando y todas las amazonas que lo ven están avergonzada y asustadas de lo que le está pasando a su compañera, y el dolor que debe de estar pasando.

En unos minutos llego hasta la base de mi pene, habiendo metido todo en su interior, ella ahora ya no grita, parece que ha perdido las fuerzas para gritar y solo da pequeños gamidos.

Mis huevos están apoyados contra la zona que separa su culo de la raja de su coño chorreante.

Como veo que ya no forcejea, suelto sus brazos y agarró bien sus caderas con las dos manos y saco ligeramente el pene de su culo y lo vuelvo a meter.

Una y otra vez, cada vez saco un poco más que la vez anterior y lo vuelvo a meter todo hasta que mis huevos chocan contra ella.

Después de más de 50 entradas y salidas su ano ha empezado a alojarse un poco, ahora entra y sale más fácil.

Ella está produciendo ruidos que ya no se distinguir si es dolor, placer, ambos o está en un estado de semi inconsciencia.

Meto mi pene en su culo casi desde la punta hasta la base cada vez más rápido.

Ahh, ah, Ahh, ahhhg, Ahh, ahhhahh, ah, ahhh, ahhhhrg, por favor, me rindo. (amazona #4)

"Te avise que una vez que empezara llegaría hasta el final, tendrás que aguantar hasta que me corra en tu culo." (yo)

"Por cierto ¿como te llamas? Suelo preguntar el nombre antes de romper el culo a mis mujeres pero contigo hago una excepción."

"ahhh, ahhhh, ah, arhh, mi, ahhh, nomb, ahhhrrrrg, nombre, ahhhahh, ahhh, ah, es, ahg, ahhh, ahhhha, mi culooooo, ahhhahh, mi, ahhhh, es, ahhhg, Clonia." (Clonia)

La meto de una embestida fuerte hasta la base de golpe y aguanto apretando mientras me corro dentro de ella y la lleno el interior pintando la de blanco las tripas.

Saco lentamente mi pene de su culo y plop suena un sonido de subcion cundo termino de sacarlo.

Ella está derrumbada en el suelo con el culo abierto y mi semen se asoma.

Tengo el pene sucio, de su interior y mis fluidos.

"Ella ha admitido la derrota y ya no puede pelear, que venga la siguiente." (yo)

Bajan dos amazonas con miedo a mi pene y recogen a su inconsciente compañera para sacarla del foso y llevarla a recuperarse.

Ninguna de ellas quiere ser la siguiente en bajar a pelear.

" No tengo todo el día, si no bajáis a pelear asumo que os rendis antes de luchar y soy el vencedor." (yo)

Eso las despierta un poco y varias se preparan para luchar contra mi.

La segundo que baja también y tiene la piel bronceada pero el pelo es rubio.

Es un poco más alta que Clonia pero también está bien dotada y es atlética.

No carga contra mi de forma imprudente como Clonia y se acerca poco a poco para intentar agarrarme y arojarme al suelo en una especie de llave con zancadilla.

No consigue moverme y es ella la que termina tirada en el suelo conmigo encima de ella, inmovilizandola.

"Tu te vas a rendir o quieres acabar como Colonia." (yo)

"Esa es una amenaza vacía, se que los hombres una vez que usan su parte inferior, enseguida se queda blando y no pueden hacer nada con eso hasta que descansan." (amazona #5)

"¿Eso quiere decir que no te rindes?" (yo)

"No me rindo ante ti, obligame si puedes. (amazona #5)

" ¿Cuál es tu nombre?, a Clonia le costó mucho decirlo una vez que empezó a gemir de placer y dolor." (yo)

"Polemusa" (Polemusa)

"Bien pues te voy a demostrar, que no soy como esos hombres que has oído y que mi pene es inigualable, su resistencia no tiene fin." (yo)

Vuelvo a su tamaño normal mi pene, activo de forma disimulada la habilidad de limpieza sobre el para borrar los rastros de la vez anterior.

Lo colocó en la entrada da de su coño y le doy a elegir, ¿que prefieres, por el culo o sexo normal?

Ella ve que tengo el pene duro y no ha perdido su fuerza y se empieza a asustar.

Tartamudea pero no dice nada.

"Como no te decides, ya lo hago yo." (yo)

Pongo la punta de mi pene en la entrada de su vajina y la frotó en sus labios y su clitoris, la frotó un par de veces y con los líquidos que empiezan a salir de su interior, lubrico mi pene.

Después de frotar lo varias veces más, ella ve que verdaderamente no ha perdido la fuerza y en un intento de detenerme dice rápidamente.

"Me, ahhhhhhhhhhhhhhhhh." (Polemusa)

Meto el pene de golpe hasta el fondo, haciéndolo dilatarse y expandirse rápidamente sus labios y su interior de golpe y a la fuerza.

Su virginidad se ha perdido y está sangrando por su pérdida y por varios desgarros internos.

Sin dejar tiempo para que se acostumbre empiezo a entrar y salir de ella y a moverme rápidamente.

No quiero que dure tanto como antes.

Me pongo de pie con el pene dentro de ella u la levanto conmigo le cojo las piernas y la levantó.

Empiezo a follarla a toda la velocidad que puedo mientras la cargo y sostengo sus muslos con mis brazos.

En 15 minutos de mezcla de agonía y algo de placer, me corro en su interior y lleno toda su vajina de espera y sangre ya que ella no ha parado de sangrar.

La dejo en el suelo y sin que nadie se entere uso una curación en su interior para curar sus desgarros internos, pero no la pérdida de la virginidad.

"La siguiente, grito con el pene en alto y ensangrentado." (yo)

Otra chica baja a enfrentarme y acaba exactamente igual que Polemusa, a los 20 minutos se la llevan y vuelvo a gritar por la siguiente.

La cuarta chica después de que la inmoviliza y mi pene sigue estando grande y duro se rinde, cuando esta se rinde, las 17 siguientes hacen lo mismo después de que las inmovilizo.

A las 37 siguientes solo las dejo inconscientes después de que bajan y me intentan golpear o estrangular.

Cuando el número va por 183 las guerreras empiezan a escasear, ahora es una princesa llamada Hipolita a la que dejó jugar un rato y crea que tiene posibilidades.

Después la dejó inconsciente igual que al resto.

Ahora baja otra princesa llamada Penthesilea.

Como estoy empezando a cansarme, aunque me agrada mucho la vista, no me faltan mujeres y quiero terminar rápido.

La dejo inconsciente antes de que pueda hacer algún movimiento, dándole un golpe en el cuello.

"La siguiente." (yo)

Las que quedan admiten la perdida sin siquiera bajar y solo queda por rendirse la reina Otrera.

"No puedo creer lo que ven mis ojos, has vencido a todas mis amazonas, algunas en un estado lamentable, y aún puedes permanecer en pie, pero tu suerte acaba conmigo, voy a vengar y recuperar el orgullo de las amazonas venciendote y convirtiendote en mi esclavo."

Son casi las 10 de la noche y faltan un poco más de dos horas para que termine la misión diaria.

" Si te derrotó seré el rey de las amazonas, Así como su señor y tu señor, estas preparada para lo que ta te dije esta mañana."

Antes de la media noche te habrás rendido, yo seré tu rey y tu señor, pero no voy a dejar de follarte tan fuerte hasta que el sol vuelva a salir nuevamente." (yo)

"Primero tendrás que vencerme." (Otrera)

Voy andando lentamente hacia ella y dejo que me golpeé con todas sus fuerzas, ni siquiera intento evadir el golpe y no siento más que un ligero cosquilleo en los lugares donde me golpea.

Intenta agarrarme el cuello para afixiarme y que quede inconsciente, pero no consigue apretarme el cuello ni siquiera usando toda su fuerza.

Durante más de cinco minutos, intenta todo lo que se le ocurre para derrotarme , pero aunque no muestro ninguna actitud de defensa, no consigue nada más que cansarse.

"Ahora es mi turno." (yo)

la agarró y la atraigo hacia mi y la abrazo.

"Eres un monstruo, ningún hombre mortal es tan fuerte." (Otrera)

Teniéndola abrazada, la levantó una pierna y colocó mi pene para entrar en su coño, no es virgen, ya ha sido madre de dos hermosas princesas, pero esta muy apretado como si lo fuera.

Empiezo a deslizar mi pene en su coño y a meterlo entero, me sorprende que acepta totalmente mi longitud de diez pulgadas sin ningún problema.

Lo meto totalmente y entonces adapto el tamaño y el grosor a su interior y un poco más para que fuerce un poquito y me apriete más.

Ella nota el cambio de tamaño y se sorprende que aún pueda crecer más de lo que ya era.

Se nota su experiencia pero después de una cuantas rondas, de arremeter salvaje contra su útero, esta llegando al límite de sus fuerzas, y sólo ha pasado una hora y poco.

No pierdas la resistencia tan rápido, solo nos hemos corrido tres veces, y la noche acaba de empezar.

Ella está agotada y se rinde.

"Tu ganas, las amazonas ahora son tus esclavas y eres su rey." (Otrera)

Ding misión diaria completa.

Recompensa: Cupón de lotería x3.

Ella se recuesta en mi y me abraza con intención de descansar.

"Otrera, soy un hombre de palabra, y te he prometido, no dejar de follarte hasta que el sol salga por la mañana." (yo)

Ella me mira horrorizada, y deseando que mis palabras sean solo una broma para asustarla.

Pero ve mi sonrisa y mi cuerpo como si acabará de empezar y pide piedad y descanso.

Sin mostrar misericordia comienzo otra ronda ahora manteniéndola alzada completamente y abrazada a mi como un koala, pero sin detener el golpeteo de mis caderas y sin dejar por un momento de meter y sacar mi pene de su coño.

Cuando vuelvo a descargarme en su interior, y ella está más cansada y solo me agarra con fuerza, le pregunto al oído suavemente.

"¿Quieres que deje descansar tu coño?" (yo)

Si por favor ya no aguanto más.(Otrera)

Ella se relaja sobre mí cuerpo cuando saco de su vajina mi pene y empieza a caer todo lo que había dentro al suelo.

Después colocó la punta de mi pene, aún en apogeo en la puerta aún cerradada de su ano, que se estremece por la presión en su entrada.

"No por favor, eso está sucio, y no estoy preparada." (Otrera)

No escucho nada de lo que dice, empiezo a meterla lentamente y a dilatar por la fuerza su apretado agujero.

Arhhhhhhhhh, me vas a partir el culo.

Sigo sin parar hasta la base de mi pene.

Para tener un mejor acceso y ángulo de entrada, la dejo en el suelo, donde se pone a cuatro patas e intenta escapar gateando.

La atrapó, la vuelvo a meter la polla en el culo de un solo empuje y empiezo a follar su culo como una bestia.

Los gritos y gemidos mantienen a toda la ciudad despierta toda la noche.

Con el primer rayo de sol que aparece en el cielo, ella suspira de alegría y alivio, por haber terminado la noche.

Hace un esfuerzo enorme por girarse, me mira y la abrazo, ahora puedes descansar.

Apoya la cabeza sobre mi pecho y se duerme de inmediato, sin importarle que aún está en el foso o la gran imagen que muestra de su cuerpo desnudo y mi pene aún dentro de su culo caliente.