Capítulo 35 – Atrayendo el Problema

Nie Li tenía una gran precisión para la arquería. Los Simios Armados Azules Gigantes que fueron alcanzados por la flecha chillaron de dolor.

Los Simios Armados Azules Gigantes no pudieron resistir las toxinas de la Hierba Neblina Púrpura. Tras levantar las armas que sostenían, Chen Linjian y sus subordinados de rango Plata se abalanzaron sobre los Simios Armados Azules Gigantes.

¡Splash, splash!

La sangre brotaba para todos lados y empapaba a Chen Linjian y a sus hombres.

Nie Li sabe que este Simio Armado Azul Gigante en particular estaba acostumbrado a ser examinado por el Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual. El intelecto de las bestias demoníacas del tipo simio Espiritual era sumamente sorprendente. Además, su fortaleza de combate era aterradora.

En su vida anterior, cuando Ye Ziyun y los demás llegaron a las ruinas de la Ciudad Orquídea Antigua, no se encontraron con ninguna bestia demoníaca de grado espiritual. Por lo tanto, la aparición de esta bestia demoníaca de grado espiritual que habían encontrado ahora hizo que Nie Li se sintiera un poco incómodo. Nie Li refinó con desesperación la fuerza del alma que había obtenido de Chu Yuan. Si era capaz de alcanzar el rango Bronce de 2 estrellas, estaría mucho más seguro.

―¡Lo atraeremos hacia el área del fuerte! ―dijo Nie Li alzando la voz. Aquel fuerte contaba con mejores medidas de defensa, por lo tanto, podían usarlo para lidiar con ese Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual.

¡Grrr!

El Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual dio un salto y corrió hacia su dirección; levantó sus gruesos brazos y los estrelló contra uno de los hombres de Chen Linjian.

¡Bum!

El Simio Armado Azul Gigante abofeteó a esa persona en el abdomen. Este gritó, salió volando e impactó contra un árbol enorme. Al caer, su sangre comenzó a brotar.

Esa persona tenía rango Plata de 2 estrellas. La fuerza del Simio Armado Azul Gigante era demasiado aterradora. Había matado a un experto de rango Plata de 2 estrellas con un solo golpe. Nadie había presenciado una batalla así antes, por lo tanto, después de ver eso, se pusieron pálidos.

Tras matar a uno, el Simio Armado Azul Gigante no tenía prisa por atacar. El simio se quedó esperando afuera, como un tigre que espiaba a su presa para lanzar un ataque sorpresa.

―¡Maldición, ese tipo es demasiado fuerte! Además, es el líder de la población de Simios Armados Azules Gigantes. ¡Su rugido atraerá aún más Simios Armados Azules Gigantes! —dijo Nie Li frunciendo el ceño—¡Somos un objetivo demasiado grande, tenemos que dispersarnos!

Chen Linjian frunció un poco el ceño, bajó la voz y dijo—: Bien, nos dividiremos en seis equipos y nos encontraremos en ese fuerte.

El grupo se dispersó a toda prisa.

Huyan Lanruo y Ye Ziyun siguieron a Nie Li, con otros dos subordinados y una chica que tenía una relación bastante buena con Ye Ziyun.

Seis grupos de personas salieron corriendo en seis direcciones diferentes.

El Simio Armado Azul Gigante planeaba matar al grupo lentamente, uno por uno. Sin embargo, nunca pensó que se dividirían en seis equipos y correrían en direcciones diferentes. Se detuvo un momento y luego fue tras el grupo de Nie Li.

Nie Li sonrió con amargura, ¿por qué su suerte era tan terrible? De los seis equipos, ¡¿por qué el Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual tenía que ir tras ellos?!

—Ustedes vayan primero, ¡apúrense! —gritó Nie Li, mientras sacaba de su anillo interespacial unas cuantas botellas de la sustancia medicinal hecha de Hierbas Neblina Púrpura.

Ye Ziyun aminoró un poco la marcha. Ver a Nie Li de espaldas, enfrentándose al Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual, le hizo temblar el corazón.

A Huyan Lanruo se le enrojecieron los ojos: en un momento peligroso como ese, Nie Li no pensaba en su propia huida, sino que decidía cubrirlos a ellos. Estaba profundamente conmovida por la acción de Nie Li.

—¡Deprisa! ¡No se distraigan! No se preocupen por mí, tengo mi propio plan —gruñó Nie Li—. Sepárense y corran, de lo contrario no podrán salir de aquí con vida.

Ye Ziyun y Huyan Lanruo apretaron los dientes al tiempo que las lágrimas brillaban levemente en sus ojos. Dudaron por un momento, pero decidieron correr hacia el bosque.

¡Grrr!

Aquel Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual giró su mano y la lanzó contra Nie Li.

Justo cuando el brazo del Simio Armado Azul Gigante estaba a punto de golpear su cuerpo, Nie Li se lanzó repentinamente al suelo y rodó.

¡Bum!

La enorme palma del Simio Armado Azul Gigante se estrelló en el lugar original de Nie Li. Aparecieron grietas en el suelo y las rocas trituradas volaron por todas partes. Dos rocas trituradas rasparon el brazo de Nie Li e hicieron que de este brotara sangre.

El Simio Armado Azul Gigante se golpeó el pecho y dio un pisotón contra el suelo. Una vez más, giró su brazo hacia donde estaba Nie Li y lo dejó caer.

Nie Li frunció un poco el ceño. Sabía cuáles eran las debilidades de los Simios Armados Azules Gigantes. Su cuerpo liberó fuerza de alma y, de inmediato, pudo sentir el espíritu que estaba en las profundidades de la mente de este Simio Armado Azul Gigante. La fuerza de alma del simio era como una membrana semiesférica que envolvía su cabeza.

—¡Sepárate! —rugió Nie Li. Toda su fuerza de alma se reunió en un solo lugar y perforó la mente del Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual.

¡Bum!

El espíritu que estaba en el interior de la mente del Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual temblaba sin parar. Sus movimientos también se habían paralizado.

Nie Li sabe con claridad que él no era un oponente para este Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual. Después de todo, él acababa de alcanzar el rango Bronce de 2 estrellas. La carne de ese simio no podía cortarse ni con una espada. Por lo tanto, solo podía usar ataques de fuerza de alma. Aprovechando la pausa del Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual, Nie Li saltó y salió disparado hacia el bosque.

El Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual no estaba preparado y eso permitió que la fuerza de alma de Nie Li pudiera bombardear al espíritu que estaba dentro suyo. Eso provocó un caos en su mente. El Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual agitaba su cabeza sin parar y, poco a poco, sus ojos confundidos comenzaban a aclararse.

Cuando pudo ver con claridad, Nie Li ya había huido.

El Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual rugió con furia y fue tras Nie Li dando zancadas. El Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual se movía como un rayo. Todos los árboles que se interponían en su camino fueron hechos pedazos y lanzados por los aires.

Corriendo como loco y viendo que la distancia entre él y el Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual se acortaba, Nie Li se inquietó. Hizo todo lo posible por esconderse en las zonas donde la vegetación era más densa. Justo cuando Nie Li estaba a punto de salir corriendo del bosque, apareció un grupo de personas frente a sus ojos.

El grupo vestía túnicas negras. Sus caras estaban completamente cubiertas, lo único que quedaba expuesto era un poco de su barbilla. El diseño de demonios negros que tenían en su espalda era aterrador.

Sus ojos repararon en Nie Li y se sorprendieron un poco. ¿Qué hacía un niño como él allí? Además, ¿cómo se las había arreglado para llegar hasta ese lugar? Habían sido atraídos por los rugidos del Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual y habían estado siguiendo el rastro del grupo de Chen Linjian. Sin embargo, nunca pensaron que se encontrarían con Nie Li allí.

Al ver su vestimenta, a Nie Li le corrió un escalofrío. Naturalmente, reconoció esas túnicas negras. Eran el grupo más despreciable y oscuro de Ciudad de Gloria: ¡el Gremio Oscuro!

—Este mocoso podría ser un hijo de la nobleza, captúrenlo —gritó el líder, el Diácono Yun Hua. Las otras dos personas con túnicas negras fueron a rodear a Nie Li. Al ver esto, Nie Li esbozó una sonrisa extraña.

Se oyó un rugido.

El suelo tembló violentamente. El Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual salió del denso bosque, rugió y arremetió contra Nie Li.

Nie Li corrió de inmediato. Salió disparado hacia donde estaban los hombres de túnica negra.

Cuando vieron que el Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual iba hacia ellos, los hombres de túnica negra se formaron en el acto y se prepararon para resistir el impacto del simio.

El Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual rugió. Se fijó en esas personas y creyó que eran de la pandilla de Nie Li. El Simio Armado Azul Gigante de grado Espiritual saltó y se abalanzó hacia Nie Li. Al ver que el Simio Armado Azul Gigante estaba a punto de alcanzarlo, Nie Li saltó a toda prisa hacia el costado. La palma de la mano del Simio Armado Azul Gigante le rozó la espalda. Podía sentir cómo le ardía la espalda por el silbido del aire.

Por fortuna, la reacción de Nie Li había sido lo suficientemente rápida, así que el simio no cayó sobre él. De lo contrario, Nie Li habría resultado muy lastimado.

Tras fallar en su intento de atrapar a Nie Li, el Simio Armado Azul Gigante rodó hacia los hombres de túnica negra.

—¡Mátenlo! —gritó el Diácono Yun Hua con frialdad. Los hombres de túnica negra blandieron sus espadas hacia donde estaba el Simio Armado Azul Gigante.

¡Bang bang bang!

Comenzó un intenso enfrentamiento.

Al ver que la batalla entre el Simio Armado Azul Gigante y la gente de túnica negra había comenzado, Nie Li respiró hondo y sonrió.

—¡Les voy a regalar este Simio Armado Azul Gigante! ¡Antes daré un paso!

Sin prestar atención a las heridas de su cuerpo, Nie Li saltó hacia el bosque.

El Simio Armado Azul Gigante era muy fuerte. Esas personas del Gremio Oscuro no serán capaces de matarlo en poco tiempo y solo podían ver a Nie Li huyendo de ellos.

El Diácono Yun Hua se puso pálido. Había sido engañado por un niño. ¡Eso era sencillamente intolerable!

En ese momento, Nie Li vio una figura que salía de la vegetación. Si no era Ye Ziyun, ¿entonces quién era?

—¿Por qué sigues aquí? —preguntó Nie Li, frunciendo el ceño. Ye Ziyun no escuchó sus palabras y se fue.

—Me preocupaba que estuvieras en problemas, así que estaba a un lado lista para ayudarte.

Miró las heridas sangrantes que estaban en el cuerpo de Nie Li con un gesto de preocupación.

Nie Li sabía que, en este momento, Ye Ziyun no tenía sentimientos románticos hacia él. Sin embargo, cuando estuvo en peligro, ella había regresado y no se había marchado. Esto le permitió a Nie Li recordar lo que había pasado en su vida anterior. Después de que Ciudad de Gloria fuera destruida, él había seguido a la gran fuerza que salía. En ese momento, Nie Li aún era muy débil y se había perdido. Fue Ye Ziyun quien regresó y lo salvó.

La nobleza de Ye Ziyun, en ese momento, impresionó a Nie Li.

Después de eso, los dos se pusieron en contacto cada vez con más frecuencia. Aunque la diferencia de fortaleza entre ellos era muy grande, se enamoraron.

Nie Li estaba conmovido, pero no dijo demasiado.

—¡Tenemos que irnos de inmediato, de lo contrario, esa gente nos alcanzará!

—¿Esa gente? —Ye Ziyun se quedó congelada por un instante.

—Es el Gremio Oscuro. ¡Están reteniendo a ese Simio Armado Azul Gigante! —dijo Nie Li mientras tiraba de la mano de Ye Ziyun y corría.

Los dos corrían por el bosque. Nie Li la tomó de la mano y Ye Ziyun se sonrojó. Intentó luchar, pero no pudo liberarse y solo pudo dejar que Nie Li hiciera lo que quisiera. Ye Ziyun levantó la cabeza para mirar la cara de Nie Li, sin saber si este lo estaba haciendo con intención o no. Era la primera vez que un hombre la llevaba de la mano desde que era joven. La calidez de la palma de la mano de Nie Li le daba una gran sensación de seguridad.

Ambos continuaron corriendo y se dirigieron hacia el lugar designado. A medida que el cielo se oscurecía, en ocasiones, se escuchaban rugidos de bestias que venían de las profundidades del bosque, lo que le daba a ese lugar una atmósfera impresionante.

En este momento, dentro del lejano bosque, las lágrimas de Huyan Lanruo empezaron a caer. Se dio vuelta para buscar a Nie Li y lo buscó durante algunas horas, pero no pudo encontrar ningún rastro de él. A medida que el cielo se oscurecía, solo podía seguir a la gente que se dirigía hacia el lugar designado.

Más temprano, cuando había anunciado que quería perseguir a Nie Li, fue simplemente porque no estaba convencida y no le gustaba perder. Incluso había pensado dejar a Nie Li después de conseguirlo, para que llorara y le suplicara. Hasta que él se sacrificó para cubrirla. Entonces se dio cuenta de que ya no tenía ninguna de esas intenciones. Solo quería que Nie Li estuviera bien.

Sin embargo, Nie Li no solo se había sacrificado para cubrirla a ella, sino también a Ye Ziyun. Pero, naturalmente, Huyan Lanruo ignoraba la presencia de Ye Ziyun.