Autónomo.

Tras salir de un baño mañanero para despertarse y estar preparado para sus habituales largos días, Víctor se vistió animado y al mirar la cama, dio un suspiro al ver que su amada no estaba presente.

No podía negar que, en el fondo, le gustaba decir que despertaba con una gran belleza en sus brazos.

Con tal pensamiento, estuvo por salir, cuando la persona de la cual estaba pensando entró a la habitación.

"Su Majestad tengo el informe de su aprendiz." Dijo Ersin con un tono solemne, que no ocultaba su sonrisa y viendo que tenía su atención, reveló. "En tan solo una noche Nicole ha logrado dominar varios grupos criminales y se ha apoderado de toda la costa de Río de Janeiro. Haciéndose con el control de los principales puertos de tráfico ilegal."

Víctor dio un silbido impresionado.

Controlar los puertos en una zona costera era lo más importante debido a que a pesar de ser un método antiguo, seguía siendo muy usado para el tráfico ilegal.

Y más cuando se trataban de bestias mágicas o seres vivos.

Una vez tomado el puerto, las otras organizaciones criminales deberían pagar o negociar para usar esas zonas o no solo se enfrentarían a las autoridades, sino que también a la nueva jefa criminal.

"Nuestros espías y los agentes ocultos de la policía han sido expuestos. La nueva líder criminal oficialmente se los ha llevado… Y nos lo ha entregado en secreto." Reveló Ersin con una sonrisa y sin poder evitarlo, precisó. "Pidió que mantuviéramos oculto ese hecho."

Ante esa información, Víctor frunció un poco el ceño.

Sus espías estaban en todas partes y había trabajado bastante para que sus guardias de las sombras pudieran tener ojos y oídos en todo el imperio.

La base de su imperio era su compleja red de información que le permitía saber cuándo un mafioso iba al baño y cuando salía… Por eso pudo controlar este lugar.

"¿Una forma de estabilizar su autoridad?" Dudó Víctor y viendo sonreír a Ersin, asintió satisfecho.

Nicole iba a ir a conquistar Río de Janeiro y la fuerza era necesaria, pero cuando la batalla terminara y los perdedores se le unieran… La mejor forma de asegurar su autoridad, era demostrando que, como su nueva jefa, era mejor.

Exponiendo a los espías y policías encubiertos, era un excelente método si se evitaba los daños, en este caso que lo entregara con vida, dejo ver que Nicole no deseaba asesinar a nadie.

Un buen método a costa del trabajo de otros y muy eficaz, Víctor no lo negaba, pero viendo la sonrisa de Ersin, estuvo claro que no terminaba con solo eso.

Controlar la costa en una sola noche era un gran logro, no había duda y Víctor estaba impresionado, pero eso era todo.

"¿Quiere saber cuánto gastamos en la misión de Nicole?" Preguntó Ersin y cuando lo vio asentir, reveló. "Nada."

"¿Cómo?" Preguntó Víctor sin comprender y frunciendo el ceño, precisó. "Debe haber usado a los guardias de la sombra, ¿no? Digo, puede que estén esclavizados, pero les pago."

Los tenía en su control, pero a la vez le pagaba para hacer ver que no era tan mal 'jefe'… Así que cualquier miembro de la guardia de las sombras, recibía un pago cuantioso.

Incluso la Reina del Norte recibía beneficios de este tipo a pesar de que públicamente estaba cumpliendo su 'condena' tratando de reparar sus 'errores'.

"Pero ella no ha utilizado a ningún miembro de la guardia de las sombras, excepto a aquellas dos que le otorgue." Reveló Ersin y con una sonrisa, se corrigió. "En realidad, sería una. Ya que Nicole no se anima a ordenarle a la Reina del Norte a pesar de que le di la autoridad para hacerlo."

Las primeras palabras lo atrajeron por completo.

¿Si era una criminal no necesitaba subordinados? Era lo básico de lo básico tener una fuerza mayor que los demás 'subordinados' poderosos o era posible que alguien buscara reemplazarla.

Y eso era más necesario al principio, la imagen personal era importante, pero la 'fuerza' grupal causaba mayor miedo.

"Al parecer su compañera de la Empresa Apicius, le dio permiso para que usara el restaurante del último piso y movilizo a individuos de diferentes partes del mundo." Dijo Ersin, revelando las cámaras de un restaurante lleno de diferentes individuos y con una sonrisa, detalló. "Pero solo fueron para dar una apariencia de poder y autoridad. Así que técnicamente, Nicole conquisto parte de Río de Janeiro con dos personas."

Junto a esas palabras, le dejo ver varios videos de diferentes ataques en diferentes zonas de la costa de la ciudad.

La forma que controlaban los daños, era espléndida, pero los criminales que luchaban eran los mismos que había participado en la reunión o algunos subordinados de ellos.

Ahora Víctor entendió por qué Ersin tenía una sonrisa animada.

Nicole no utilizó dinero del Imperio, ni pidió refuerzos de él, obtuvo ayuda por otro lado, pero todo fue al nivel de apariencia.

Ninguno miembro de la Empresa Apicius que estuvo en el restaurante, participó en el ataque o realizó una acción delictiva, simplemente comieron.

Quienes en verdad realizaron todo ese trabajo, tampoco fue Nicole en solitario, fueron los individuos que puso bajo su mando.

"Esos criminales querían demostrar su 'valor' y el de su gente, por eso movilizaron sus tropas." Dijo Ersin y con una sonrisa, comentó. "Ahora María, está consolidando las fuerzas que se han rendido o han sido dominadas bajo el poder de Nicole… No, de la 'Caníbal', Bastet."

Junto a esas palabras, Ersin volvió a proyectarle otras grabaciones.

Batallas sobre una mujer enmascarada de cabello blanco y mascará de hueso con la forma de un gato.

Fueron diferentes batallas y si al empezar su vestido blanco tenía manchas de sangre, cuando todo terminó, estaba casi rojo… La nueva criminal demostró su ferocidad en la batalla, luchando en todos los combates posibles de una forma feroz.

Los videos más actuales dejaban ver a la asesina María arreglando la tarea de consolidar a aquellos que se rindieron y se unieron, conformando la fuerza personal de la nueva jefa criminal.

Si ayer eran solo dos personas, ahora el número de criminales que estaba bajo su control directo, superaba a cualquier otra organización promedio de la zona.

Todo eso tras haber usado a otros para cumplir sus objetivos.

"Tiene una buena subordinada." Murmuró Víctor de forma honesta.

María fue entregada a Nicole, pero era una miembro de las guardias de las sombras, que había puesto bajo su control… Básicamente esclavizado.

Durante su trabajo solo era una de los tantos rangos S que cumplían con las tareas que el imperio le daba, pero ahora era diferente.

Trabajar esclavizado para un tirano no significaba que fueran totalmente efectivos, pero era diferente si trabajaban para alguien que le gustara.

Ahora María demostró que estaba esforzándose para apoyar a Nicole y si bien era difícil saber cuáles eran sus intenciones, dejo en claro que era buena en el trabajo.

Después de todo, estaba aconsejando a Nicole, apoyándola e incluso buscando cumplir las tareas que una joven heroína no podría hacer, todo mientras trataba de seguir los valores que esa jovencita tenía.

Víctor al recibir la mirada de Ersin, dio un suspiro.

"Y tengo una gran aprendiz…" Murmuró de forma honesta.

Nicole solo utilizó la información que el imperio tenía para moverse, pero todo lo demás lo hizo de cierta forma por sí misma.

Podía pensar que tuvo suerte, que recibió ayuda externa o cualquier otra excusa, pero la verdad estaba al frente de él.

Su aprendiz tenía un potencial mucho más grande de lo que él había imaginado al inicio.

******

Una risa baja sonó en la sala de un departamento en Los Ángeles.

Alice estaba mirando las grabaciones de lo sucedido con Nicole y al igual que esa joven luchadora podía mirar las cámaras, ella también.

Sin embargo, a diferencia de lo que Nicole sabia, las cámaras estaban puestas en todo el restaurante para que Alice pudiera observar todo.

Esto significaba que incluso vio a esa luchadora cuando estaba sola en la habitación privada.

A pesar de que estaba 'violando' de cierta forma la privacidad de esa luchadora, Alice lo tomó como su 'pago'.

No era algo de todos los días ver un buen espectáculo.

"Tch… Ese idiota me está pegando su estupidez." Murmuró Alice al darse cuenta de lo que estaba pensando.

Antes también posiblemente disfrutaría de una actuación de este tipo, pero ahora que ese 'idiota' estaba a su alrededor, le dio una connotación negativa.

Ver a Nicole intentar convertirse en una criminal, lidiar con los nervios y escucharla gritar dudando de lo que había hecho, era disfrutable… Y que todo se hiciera sin que esa luchadora no lo supiera, era la mayor parte del atractivo como espectador.

No obstante, con ese idiota cerca este buen espectáculo daba la connotación de manipular a otros para que se muevan según lo que ella deseaba, cuando en realidad Alice nunca insistió a Nicole, solo la apoyo.

Aunque lo disfruto… Se rio cuando vio a Nicole pronunciar su frase y seguir su consejo y en el fondo, Alice no podía negar que hubiera disfrutado si esa luchadora terminaba asesinando a alguien.

¿Estaba bien disfrutar la vida de otro como un espectáculo? ¿Observando sus errores, vergüenza y acciones, tomando todo como si fuera una gran obra de teatro?

Nicole no era una desconocida, era alguien cercana, lo suficiente como para apoyarla o aceptar sus excesivos pedidos de luchar.

Su humor empezó a decaer ante sus propias dudas, que no tendría si no fuera por ese idiota que estaba tan cerca.

"Es un idiota…" Murmuró Alice y sintiendo que una presencia se acercaba desde afuera del departamento, controló su expresión y encendió la televisión.

El departamento en donde se encontraba estaba al lado del departamento de Serafín y se utilizaban para descanso de los guardaespaldas a tiempo completo.

Prácticamente todo este piso no tenía otro residente que Serafín.

Viendo que Aurora entraba por la puerta con una sonrisa animada, Alice le dio un vistazo.

"¿Sucedió algo?" Preguntó Aurora de inmediato y frunciendo el ceño, al observar que ella estaba sorprendida, señaló. "La falta de aperitivo delata que tu humor no es el mejor."

Alice miró sus alrededores y se dio cuenta de que había acabado sus aperitivos y que no quedaba nada.

Su hermana pudo entenderla de inmediato a pesar de que había intentado controlar sus expresiones, aunque de una manera bastante extraña.

"¿Preocupada por Hermes?" Preguntó Aurora con curiosidad.

"No. Si se muere no es mi problema." Respondió Alice de forma instantánea y su tono molesto, hizo que Aurora le diera una sonrisa.

Esa sonrisa… Le causaba cierta incomodidad, ya que parecía dar a entender que ella se llevaba bien con ese idiota.

Tras reunirse e informarse con ese idiota, de su plan-espectáculo, Alice lo informó a su hermana y a pesar de que no mostró su preocupación directa, Aurora tenía sus dudas.

No obstante, cada una de esas dudas, se la estaba guardando al igual que se guardó sus comentarios de que ese idiota, la usara a ella como 'base' para su actuación de un 'idiota obsesionado'.

"¿Y cómo fue todo en el trabajo de Amber?" Preguntó Alice cambiando de tema de forma evidente.

Su hermana dio una risa baja ante su cambio de tema y por su mirada, estuvo claro que estaba conteniéndose para no molestarla.

Hasta era posible que se estuviera sintiéndose 'generosa' por no molestarla y Alice, trató de controlar el pensamiento de que la hubiera molestado más con ese pervertido cuando tuvo la oportunidad.

"Fue bien. Estuvimos arreglando las donaciones que consiguió Amber. También el diseñador de vestidos victorianos, nos pidió si queríamos colaborar para otra sección de fotos." Respondió Alice y rascándose la mejilla, murmuró. "Obtuve una oferta de trabajo como modelo."

Su murmullo lo hizo de forma casual, tratando de contener su vergüenza y a la vez dejando ver una pizca de diversión.

"Eres linda. Tienes futuro en esa clase de trabajo." Respondió Alice y con una sonrisa, comentó. "Tal vez deberías dejar el trabajo actual y convertirte en modelo. Yo puedo ser tu manager."

Las mejillas de Aurora se volvieron un poco rojas ante su comentario, pero al final se rio entretenida.

Su hermana era guapa y más que linda, era una belleza que lograba atrapar con su sonrisa encantadora.

Que pareciera delicada y fuera algo delgada a pesar de ocultar una gran fuerza, solo era otro atractivo que sería útil en el mundo de la moda.

Por supuesto, Alice pensaba que, si algún idiota se atrevía a pasarse con su hermana, los asesinaría luego de torturarlos.

Las películas que alguna vez vio que contaban del lado oscuro de esta industria todavía seguían en su mente y fueron muy explícitas a la vez que detalladas.

Normalmente una productora no aceptaría tales producciones, pero Comedus Pictures no le importaba aceptar producir esta clase de película que atacaba la propia industria.

"No sé lo que piensas, pero no seré una modelo… Y si lo fuera, no creo que recibiría ofertas de trabajo, si mi 'manager' libera esa ominosa presencia." Dijo Aurora con cierta sonrisa entretenida.

"No te preocupes, yo creare los trabajos para ti." Respondió Alice como si fuera obvio.

¿Para qué iba a esperar que otros le dieran trabajo a su hermana? Solo necesitaba usar lo que tenía para 'crear' los trabajos que necesitaba.

Al final, su hermana era tan encantadora que lograría traerle grandes beneficios.

Ese pensamiento puso de humor a Alice, que abrió una bolsa de papitas mientras era observada por Aurora que estaba llevando una sonrisa extraña.

"¿Tienes tiempo ahora?" Preguntó Aurora de repente y sentándose a su lado, explicó. "Amber estará con su manager preparando el concierto y menciono que no deseaba que asistiera debido a que quería darme una sorpresa."

La forma que dio su explicación fue tratando de ocultar su sonrisa y cierta vergüenza que estaba sintiendo ante lo que estaba haciendo Amber.

Para una cantante como era Serafín la mejor forma de mostrar sus emociones y sentimientos era por medio de una canción.

Tal vez era algo cursi, pero estaban hablando de una psiónica de rango S, cuya capacidad estaba centrada en las emociones.

Alice estaba un poco curiosa debido a que cuando estaba en la sombra de su hermana hace ya años, Amber era un rango A y ascendió después de que se hubieran separado.

"Debe querer lucirse…" Murmuró Alice y al ver a su hermana, señaló. "Después de todo, tiene a la persona que deseaba justo a su lado."

Serafín una famosa cantante que tenía de ídolo a la Primera Heroína a la cual le había dedicado bastantes canciones durante toda su carrera.

Ahora su ídolo estaba al frente de ella, sin una máscara y mostrándose como verdaderamente era… Sería imposible que Amber se contuviera y era posible que deseara expresar sus emociones.

"En fin, preguntaba si tenías tiempo, ya que arregle una reunión con el General McLean. Voy a ir a entrenar con él y pensé que te gustaría venir." Dijo Aurora, cambiando de tema de forma abrupta y esquivando su mirada, explicó. "Ya sabes, podrías verificar tu progreso y ver tus cambios… Aunque no estoy diciendo que reveles todo."

Serafín estaba preparando un concierto porque era su manera de mostrar sus sentimientos y pensamientos, pero Aurora cambió de forma abrupta el tema, dejando ver que no deseaba hablar de ese pasado.

Lo iba a enfrentar si era necesario, pero el pasado que Amber vio fue la parte más brillante y no en el momento en donde Aurora 'cayó', perdiendo su brújula y buscando venganza sin importarle las consecuencias.

"Tengo algunas cosas que me gustaría probar." Murmuró Alice tras pensarlo.

No era necesario decirle a su hermana que era lo que debía hacer con respecto a Amber y para ella, solo era necesario que ambas se pusieran hablar de forma directa para entenderse mutuamente.

Por eso, decidió seguir su juego por ahora y aceptó ir a entrenar, aunque no fuera algo que normalmente hiciera.

Además, no estaba mintiendo… Tenía muchas cosas que probar y no era normal tener un rango SS, como oponente para hacerlo.

******

Una espada liberó un aura roja que cubrió la visión del General McLean y él en vez de retirarse, balanceó su lanza.

Su aura se condensó conformando una lanza fantasma que interrumpió el corte rojo y su verdadera lanza chocó con una espada.

Deteniendo la carga secreta de esa jovencita, el General McLean dio unos pasos hacia atrás y esquivó el domo celeste que podría haberlo empujado por sorpresa.

Viendo que la jovencita se acercaba con su aura roja cubriendo su espada, el General McLean realizó un empuje.

Tres lanzas fantasmas avanzaron a la jovencita, que redirigió a una, esquivó a otra y la tercera la retuvo.

Cada lanza fantasma era letal y en este caso la lanza real fue usada por el General McLean para realizar un corte giratorio, golpeando a una criatura negra en la costilla, que trataba de atacarlo por su espalda.

"…"

Si una persona recibiera ese golpe, era posible que fuera enviado a volar si usaba una barrera y si lo recibía con su cuerpo, podría tener un corte en la costilla.

No obstante, esta vez la criatura negra de cinco metros, lo recibió con su cuerpo negro y la lanza se hundió, en la masa negra.

Antes de que él, pudiera retroceder, la masa negra se solidificó alrededor de la lanza, apretando con fuerza, a la vez que esa criatura daba un golpe.

Recibía el golpe y sacaba la lanza o retrocedía sin armas… En esa encrucijada lo trataban de poner, pero el General McLean simplemente dio una sonrisa por el buen intento.

*BOOM*

Su aura de lanza explotó liberando decenas de lanzas fantasmas que impidieron que Aurora atacara y atravesaron todo el cuerpo negro de esa criatura que Alice controlaba.

"…"

Esta vez fue la criatura negra quien dio una sonrisa a pesar de tener el cuerpo atravesado y abriendo su boca como si deseara darle un mordisco, desde el interior la lengua negra se convirtió en una lanza.

El General McLean lo esquivó con sus puros reflejos, pero esa lanza que apuntaba a su cuello cortó, superficialmente su hombro.

Sin deseos de ver en primer plano como esa criatura negra se regeneraba, él aprovechó el momento para sacar su lanza y la volvió a balancear en un medio círculo.

Aurora que estaba a su espalda, saltó para esquivar con una pirueta y en medio de su giró balanceó su espada para cortar su hombro.

El aura roja, posiblemente atravesaría su carne de forma profunda y saldría malherido… Esa posibilidad pasó por su mente y el General McLean ni se inmutó.

"¡Oh!"

Aurora dio una exclamación cuando una lanza fantasma detuvo el ataque a pesar de que la verdadera lanza estaba lejos y esa jovencita retrocedió hacia atrás realizando un salto mientras liberaba cortes verdes.

El sonido de sorpresa fue debido a que la lanza fantasma salió de la empuñadura de su verdadera lanza y se contorsionó de una forma que ninguna lanza real haría, todo para protegerlo.

Esta vez sin querer enfrentar el siguiente ataque de Alice, el General McLean utilizó su lanza principal para moverse.

*BOOM*

El golpe de una criatura gigante destrozó el lugar donde había estado y al tomar distancia el General McLean vio que los cortes verdes seguían persiguiéndolo.

Moviendo su lanza para tratar reducir el impacto, los cortes verdes al final lograron crear heridas superficiales en su mano y su cuerpo.

No importa si había una barrera o usaba su aura para golpearlo directamente, todavía continuaba alcanzándolo.

"Esa lanza me sorprendió."

Una voz vino del polvo y al momento siguiente, una espada chocó con su lanza.

Aurora estaba dando un comentario sincero y el General McLean en vez de decir algo, continúo intercambiando golpes rápidos con esa jovencita que aumentaba su velocidad.

Cada vez más rápida, buscaba superar el alcance de su lanza, tratando de acortar distancia y por su aura roja, estuvo claro que estaba preparando su ataque.

"Mi lanza fantasma no sigue reglas físicas… Y pueden moverse de distinta forma." Reveló el General McLean y sin dudarlo atacó y murmuró. "Justo así."

Con sus palabras, balanceó su lanza por el piso y diferentes lanzas fantasmas salieron desde la empuñadura, realizando un barrido desde diferentes posiciones.

Desde abajo, el medio y arriba… Aurora atravesó la tierra con su espada, creando un muro celeste para protegerse.

Detuvo varias de las lanzas el tiempo suficiente como para que la criatura negra que había saltado arriba de ella, extendiera su mano.

En vez de un puño las garras cayeron al suelo y la extraña criatura negra, se acercó a una gran velocidad, como si el cuerpo gigantesco no pesara nada.

*BOOM*

Sin embargo, la explosión y el cráter a su caída dejo ver que el peso no fue una broma.

El General McLean que se había retirado levanto su lanza, preparado para el arrebato de esa criatura negra.

Si su lanza fantasma que era un concepto que era conformado por su aura ilusoria sorprendió a esa joven al ser capaz de moverse de formas inesperadas y torcerse con cierta rareza, para él, resultaba sorprendente el trabajo en equipo.

Movimientos rápidos, y precisos que concordaban para atacar, pero a la vez buscaban proteger a su compañera, a la vez que lo presionaban de forma metódica.

"Siento que todavía guardan algunas cartas… ¿Por qué no la muestran?" Preguntó el General McLean sin ocultar su curiosidad.

Era un experimentado luchador que tuvo bastantes enfrentamientos con diferentes enemigos y que nunca dejaba de entrenar a pesar de su edad.

Aurora todavía no liberaba su aura incolora que era la más destructiva y en cuanto a esa criatura negra… Alice parecía simplemente estar acompañando a su hermana en cuanto a fuerza de batalla.

Por supuesto, a pesar de que esa criatura negra parecía estar 'jugando', sus golpes eran a matar.

¿Con qué clase de ferocidad luchaba?

Ambas lo demostraron al momento siguiente.

Empezó Alice, que cargó como si fuera una criatura aterradora y su primer golpe, destrozó el suelo mientras que, al segundo siguiente sus dedos de la otra mano se convirtieron en garras.

*BOOM*

El primer golpe destrozó el suelo desestabilizando su posición y permitiendo que su corte de garras fuera más mortal.

A pesar de tener una forma humanoide, la criatura era capaz de moverse sin estar atados a las restricciones físicas humanas.

El General McLean que había esquivado las garras, dio unos pasos hacia atrás, cuando Aurora trató de cortarlo a una alta velocidad.

Esa jovencita, sin inmutarse, volvió a balancear su espada.

Su pierna, cintura, brazo, hombro y cuello, en unos segundos, Aurora balanceó su espada buscando dar un golpe cada vez más mortal.

Un aura roja letal que debía repeler obligatoriamente, un aura verde que no importa cuánto intentaba, lo heriría de forma superficial y luego el aura celeste, que cubría la espada y convertía el ataque cortante, en un golpe contundente.

Cada ataque era hecho con la fuerza de una luchadora de rango S y con la velocidad de un espadachín del mismo rango.

Cuando él intentó contraatacar, su lanza fue desviada por una gran mano negra y esa criatura dio comienzo a su arremetida.

*BOOM*

*BOOM*

Golpes poderosos que destrozaban la tierra, la ventaja de su lanza era una broma cuando un brazo negro era capaz de alagarse para golpearlo.

La fuerza era impresionante y que los brazos pudieran girarse y doblarse, convertía a la criatura en un enemigo aterrador.

El General McLean sin querer ser detenido, retrocedió y cuando vio su oportunidad balanceó su lanza.

*Boom*

A diferencia de antes, su golpe era tan potente como para crear una fuerza expansiva y destrozar la masa negra.

Destrozó un brazo, que, al segundo siguiente, se recuperó, le cortó la cabeza y la vio caer, tan solo para ver a la criatura decapitada persiguiéndolo, mientras que la cabeza cortada rodaba con su boca abierta, buscando morder su pie.

Molesto, aterrador visualmente y feroz… El General McLean se dio cuenta la razón por la cual la 'Glotona' era tan temida.

Incluso cuando destrozó toda una pierna, la criatura negra ni siquiera se tambaleó y siguió buscando cortarlo o aplastarlo.

Para derrotar a alguien de este tipo, era posible que se necesitara un ataque lo suficiente potente como para borrar todo el cuerpo… No, tal vez seguiría viviendo.

Fue en el momento que pensaba en como derrotar a este tipo de enemigo con 'regeneración infinita', cuando esa criatura negra cambió su forma de ataque.

La oscuridad que conformaba la criatura negra se extendió por el aire como si deseara cubrirlo y el General McLean sintió el peligro de forma instintiva.

*BOOM*

Clavando su lanza por el suelo, su aura fantasma explotó liberando cientos de lanzas para todas partes, alejando a la masa negra que buscaba tragarlo.

Solo que hubo una zona en donde sus lanzas desaparecieron y el General McLean inclinó su viejo cuerpo.

"…"

En silencio dos cortes incoloros dividieron la tierra de forma perfecta, pero el General McLean en vez de suspirar impresionado por esos aterradores cortes, rodó por el suelo y empezó a correr.

"…"

Otro corte dividió el suelo en donde había estado y el peligro continuo.

De tres pasaron a cuatro y de cuatro a seis, hasta que se detuvieron en el décimo corte, cuando él parpadeó para esquivarlo.

Los últimos tres cortes fueron lanzados al mismo tiempo y no dejaban espacio para esquivar, a la vez que, al ser lanzados al mismo tiempo, golpearían a la vez con un poderío que no sería una broma.

"Es mi derrota." Dijo el General McLean.

Este entrenamiento terminaba con la condición del primero que usara 'parpadeo' para esquivar… Si alguien llegaba a ese punto, significaría que fue presionado lo suficiente como para tener que usar un comodín.

En este caso, él sintió que podía repeler dos de los tres cortes y el tercero, lo hubiera herido.

"Fueron unos cortes excelentes. ¿Esa es la sinergia que has encontrado en tus dos profesiones?" Preguntó el General McLean mirando la destrucción de los cortes.

Esos cortes eran demasiado impresionantes y destructivos… Parte de la sala de entrenamiento estaba cortada.

Un corte que cubría decenas de metros e incluso cortaba las paredes que estaban diseñadas para soportar el entrenamiento de individuos de gran poder.

Antes de que esa jovencita entrara al portal abismal fue capaz de realizar dos cortes al mismo tiempo, pero esta vez alcanzó un nuevo punto.

Le recordó cuando él, empezó a utilizar varias lanzas fantasmas al mismo tiempo… Dominar de esa forma el aura no era tan fácil y había que elogiarlo.

"Sí. Una vez que encontré mis límites en la fuerza, no me fue tan difícil realizar estos cortes… Múltiples veces." Reveló Aurora balanceando su brazo con su espada.

Esos cortes siempre fueron aterradores y mortales, pero que esta vez fueran realizados con la fuerza de un luchador, aumentaba el poderío.

"Aunque todavía estoy buscando nuevo entendimiento a mis demás auras. El aura celeste puede rodear mi espada para volverse un arma contundente, es efectiva para sorprender." Dijo Aurora y al ver que él asentía, señaló. "He vuelto mi aura roja más densa. Para en caso de encontrar una barrera como la nave de guerra, ser capaz de cortarla con facilidad."

El aura celeste era sorprendentemente efectiva y eso se debía que el golpe era dado por una luchadora de rango S.

Si alguien lo recibía de forma directa, era posible que, en vez de ser cortado, tuviera sus huesos rotos ante el golpe.

En cuanto al aura roja… Que buscara cortar una barrera de una nave de guerra, demostraba que apuntaba muy alto y lo sorprendente, era que no parecía imposible para ella alcanzarlo.

"Solo te falta tu aura verde. Será difícil reutilizarla." Dijo el General McLean.

El aura verde era útil para acosar debido a que perseguía a sus objetivos y a veces traspasaba las barreras para golpear efectivamente, pero esa capacidad no era muy fuerte contra enemigos poderosos.

Golpear al objetivo no era lo mismo que hacer daño… Un corte débil sería molesto, pero no mortal y si alguien tenía una rápida regeneración, impediría que el daño se acumulara.

Aurora asintió estando de acuerdo y el General McLean dio una mirada a la masa negra que volvió a conformar la criatura negra.

Mientras pensaba en que decir sobre esa criatura negra, Aurora giró su cabeza a la entrada y él también lo hizo.

"¿Qué tal estuvo?" Preguntó Alice que estaba entrando con una bolsa de papitas.

La forma que entraba daba la impresión de que en todo momento estuvo fuera de la barrera y…

"El rango de control es limitado. Su fuerza y regeneración también es limitada, pero es capaz de luchar libremente sin mi control directo, siguiendo mi voluntad. Aunque muestra mayor fuerza si lo controlo." Dijo Alice con una sonrisa mientras caminaba.

La oscuridad estaba conformando a esa criatura negra de cinco metros y esa jovencita estaba a varios metros.

No había ninguna sombra u oscuridad por el suelo como para decir que estaban 'conectados'.

"Lo llamo la 'Forma de Guerrero Autónomo'." Reveló Alice y sacando un gran pedazo de carne de su anillo espacial, lo tiró al pecho de la criatura y tras ver que, devorado por la oscuridad, anunció. "También se puede alimentar por sí mismo, para recuperarse."

La forma que estaba sonriendo ante su propio anuncio fue extrañamente animado.

El General McLean entendió el peligro que había sentido… Era posible que, si esa criatura lo hubiera tocado, trataría de devorar su carne para convertirlo en parte de la oscuridad.

Literalmente parte de una masiva criatura conformado por una extraña masa de color negro.

"¿Por qué tienes un pedazo de carne en tu anillo espacial?" Preguntó Aurora de forma extraña.

En vez de estar impresionado por esa criatura y el manejo de la oscuridad que claramente no era algo que antes podía hacer y que demostraba un progreso aterrador, Aurora hizo una pregunta que sería considerada rara.

¿Era posible que esa glotona hubiera dado algún gran salto en su desarrollo? Las habilidades innatas eran extrañas y la de esa jovencita lo era aún más.

Sin embargo, al final le dio curiosidad saber por qué llevaba carne cruda en su anillo espacial.

"Porque estoy intentando enseñarle a cocinar…" Murmuró Alice en respuesta y con una mirada desagradable, declaró. "Pero la oscuridad soy yo… Y yo no sé cocinar."

Ante sus segundas palabras, la oscuridad se derritió y desapareció bajo los pies de la joven que estaba dando una mirada decepcionada.

Viendo que Aurora daba una expresión extraña, el General McLean simplemente agitó su cabeza de forma inevitable.

Sintiendo que tal vez pensó demasiado sobre que esa reconocida glotona hubiera dado algún tipo de 'gran salto'.