Capitulo 24.1 Interludio de la espada.

Décimo quinto año del establecimiento del sabio reino de Lemuria, Ciudad de Ariel, mes de febrero

En las proximidades a la ciudad de Ariel, se encuentra un denso bosque que rodea toda la ciudad. Como está terminando el invierno, Kain y Rose salieron a dar un paseo en media del fresco y húmedo bosque. Ya casi no se ve nieve y todo empieza a poco a poco a florecer. Se empiezan a ver más animales, pero con su sabiduría natural, no se acercan a los humanos. Así que solo se les puede ver desde lejos, pero nunca tocarlos.

Por una lado, Kain galopa en raziel (su enorme corcel azabache) y detrás de él va Rose abrazada a su espalda. Rose por su parte, va mirado como el paisaje que avanza y escuchando como suenan los cascos del caballo. Pasan los árboles uno tras otro y de vez en cuando ve algún animal, pero este escapa y se pierde en la espesura de los arbustos. Mientras mira el bosque surgen ideas caóticas y un poco angustiosas en su corazón. Al día de hoy no ha podido vencer a su padre y cada vez que entrena con Kain, siente que se alejan cada vez más. Entonces ¿Qué hace? ¿tiene que mejorar su técnica? ¿tiene que mejorar su fuerza?, no lo sabe, pero lo que sí sabe es que no se quiere quedar atrás.

Kain no escuchaba ninguna palabra y solo siente el melancólico estado de Rose. Bajando un poco la velocidad del galope, pregunto en un tono amable -¿Qué sucede?- a lo que Rose que salía de su mundo contesto -cuando lleguemos al lugar de siempre, conversamos-

Entonces Kain apuro el paso de su caballo y galoparon hasta llegar a su lugar secreto. En un pequeño sector del bosque corre un pequeño riachuelo que termina en un estanque. Hay todo tipo de plantas a su alrededor y unos cuantos árboles caídos. Estos árboles forman un perfecto escenario donde Kain y Rose practican sus combates. Fue una casualidad que lo encontraran, pero eso no quiere decir que no sea especial. Por lo menos para ellos este es un lugar donde chocan tanto con sus espadas como con sus cuerpos.

Kain se bajó del caballo y estirando su mano espero a que Rose bajara. No obstante, ella no la tomo y se bajó por el otro lado del caballo. Hoy no estaba de ánimos para aceptar la caballerosidad de Kain. Ella es una guerrera y se puede valer por si misma o al menos, eso quiere dejar en claro.

-¿Quieres hablar o practicamos?- pregunto Kain

Rose saco las espadas de la funda del caballo, camino al cuadrilátero y tirando una para Kain lo llamo -vamos, calentemos un poco-

Kain tomo la espada en el aire y siguiendo el ejemplo de Rose subió al cuadrilátero. Puestos en guardias ambos desenfundaron sus espadas y compartieron punteros. Mientras Rose ataca, Kain esquivando y bloquea. Rose no se sentía bien y dentro de todo, hizo lo que pudo. Algo en su corazón le impedía luchar bien o al menos, ser ella misma.

Kain viendo el pésimo rendimiento, se detuvo y le dijo -descansemos- prefirió dejar hasta aquí este entrenamiento, podría pasar algún accidente si continuaban en este estado.

Pero Rose lo miro y respondió en desacuerdo -yo puedo continuar, vamos sigue adelante-.

-Lo sé, pero estas distraída y no peleas con tu fuerza habitual-

Rose bajo sus manos y entendió lo que quiso decir Kain, ella no estaba bien, se sentía débil -¿Cómo me hago más fuerte?- pregunto en un hilo de voz

Kain bajo del cuadrilátero y miro a Rose, asintió y entendiendo el significado detrás de sus palabras -no es necesario que seas más fuerte para vencer a tu padre, solo tienes que cambiar la técnica-

-Pero es la técnica del abuelo de mi abuelo. Ha pasado por generaciones dentro de mi familia, ¡Cómo podría descartarla!-

-Entonces utiliza un azadón para luchar-.

Rose escucho a Kain y sintió un dolor como si su corazón se rompiera en mil pedazos. Se sintió burlada y menospreciada. En un arranque de irá corrió a Kain y lo golpeo con su espada, pero fue desviado.

-¡Te burlas de mi por ser mujer!- le grito con furia -mi padre también quería un heredero y no a mí, pero yo no elegí nacer así. Crees que es fácil ser mujer- de esa manera, siguió golpeando y ambas espadas provocaron chispas. Un golpe tras otro fue dirigido a Kain con la intensión de herirlo, pero este no dejo que lo alcanzara.

Cuando Rose ya estaba exhausta atacar, cayó al suelo rendida y jadeando. Kain por otro lado, se arrodilló a su lado para moverle el cabello que le tapaba el rostro. No obstante, ella no le permitió tocarla y abofeteo su mano -ahora te sientes muy fuerte- dijo molesta -el gran Kain, príncipe de Lemuria, el soberano incompetente- entonces dándole la espalda, se acurruco hacia un lado y ya no lo miro más.

Kain suspiro y tomando ambas espadas las fue a dejar a la funda del caballo. Rose escucho los pasos de Kain alejándose de ella. Sintió pena y abandono, ¿Por qué se desquita con su marido? Él jamás la ha ofendido, siempre la escucha, es su compañero de prácticas y lo ama.

Kain miro a Rose llorar en el suelo acurrucada y se sintió mal. Después de pensarlo un poco, pensó que no tenía ninguna palabra inteligente de consuelo. Así que solo camino hasta ella, se acostó en el suelo y la abrazo por detrás.

Rose al sentir el calor corporal de Kain se dio vuelta y mientras compartían un abrazo, lloro.

-o-

Kain miraba el cielo azul casi limpio y solo con algunas nubes, suspiro y pregunto -¿ya te sientes mejor?-.

Pero Rose enfurruñada en su pecho, dijo -me siento horrible, sobre todo cansada-

-¿Por qué te enojaste?-

-Yo estaba tratando de hacer lo mejor posible y tu sales con pelear con un azadón. ¿No crees que es ridículo y ofensivo?- entonces Rose ocupando la antigua técnica heredada desde la reina, pellizco el estómago de Kain por burlarse.

-Ouch- respondió al ataque de pinzas de cangrejo y continuo -bueno así de ridículo pienso que te vez cuando tratas de pelear como tu padre. Te lo he dicho un millón de veces, pero eres testaruda y no cambias tu técnica-

-Pero es la tec…-

-Ya lo sé, es la técnica de tu familia y no es mala, pero no es una técnica para ti-

Se quedaron callados durante un instante y escucharon la briza de la mañana correr por entre medio de los árboles. Los arbustos se movían a lo lejos, paso un ardilla corriendo por un árbol, pero luego se perdió. Después sonó el chillido de un águila. Volaba alta y majestuosa a los lejos.

Rose con los ojos rojos al borde del llanto, pregunto -¿es porque soy mujer?-.

-Sí y no. El problema es de la técnica. Tienes que pensar que fue hecha para alguien con una masiva contextura física como tu padre y aunque tú eres alta, no podrías nunca igualar los casi dos metros de tu padre, mucho menos su musculatura-

Rose en una voz suave y sin ánimo pregunto -¿entonces qué hago?-

-Deja la técnica de tu padre y aprende una diferente, yo te la puedo enseñar-

-¿Y con esa técnica podré vencer a mi padre?-

-Sí, pero tendrás que entrenar tu velocidad y agilidad, es una técnica que se basa en estocadas que perforan un caparazón-

Rose lo pellizco otra vez y le dijo en un fuerte tono -¡me tomas por tonta!-

-No, es la verdad, ¿has visto alguna vez una tortuga grande? Miden más o menos la mitad de tu cuerpo-

-¡Mentira!, ¿Cómo pueden ser tan grandes?-

-Así de grandes son y su caparazón es tan duro como los huesos. Entonces imagínate tener una técnica rápida y ágil para perforar la armadura de un soldado y a su vez, puedes evitar sus golpes-

-¿De dónde aprendiste eso?-

-Me lo enseño un amigo hace tiempo-

Raziel en el mundo del alma. dijo (en realidad te apuñale varias veces, pero sobreviviste).

Kain al escuchar la voz de Raziel soltó una carcajada y recordó algunas cosas de tiempos antiguos. Después de salir de su ensoñación, miro a Rose y la beso en los labios -vamos- dijo -mañana volveremos con espadas acordes y te la enseñare-

-Sí. De alguna manera me dio hambre ¿comamos en el puerto?-

-Oooh y después ¿qué?- pregunto Kain con una sonrisa

-Tú sabes bien lo que viene después- dijo Rose, tomando la iniciativa, se sentó sobre Kain y lo beso hasta sentirse satisfecha.