Sin Título
Parte I
"La Cero Siete" es una prisión de alta seguridad para los mas peligrosos privados de libertad: sean conectes, asesinos en serie, altos mandos de organizaciones ilegales, etc.
Además de posicionarse oficialmente en Velenques como una de las mas famosas y peligrosas prisiones, la cero sietes es capaz de mantener una independencia del exterior y sustentarse fuera de las normas civiles; o en pocas palabras, el único lugar donde los conectes pueden hacer lo que les plazca pasando completamente desapercibidos y sin ser juzgados.
Para algunos considerado como un infierno en toda su expresión, y para otros, un placer vicioso del peligro.
Ya ha pasado un largo tiempo desde que sigo metido en este lugar.
Y no parece que mi condena esté cerca de terminar...
Otra vez comienza un lunes lleno de hipocresía y peligro, donde todos son falsos y tu misma sombra no es de confianza.
Mierda...
Si sigo acostado sin hacer nada me volveré pensativo y me dormiré.
Eso igualmente es peligroso, ya que podría estar muy vulnerable dentro de mi propia celda y me asesinarían sin piedad.
...: ¡Piraña!.
Me llamaron...
¿Qué mierda sucede?.
No me gusta que me llamen a las cinco de la mañana aunque conozca esa voz.
Al levantarme de la cama tomé mi pistola y revisé el cartucho para asegurarme de siempre estar cargada.
Luego de colocarle el seguro contra disparos, la guardé en mi cintura y me coloqué una chaqueta negra para evitar el frío.
Quien diría que la temperatura del sur es tan baja y distinta a otras partes de Mildram.
¿Será porque la cero siete es un lugar rodeado de montañas y vivimos cerca de grandes ríos de agua?.
Después de salir de mi casa, un conecte del primer sector estaba sentado esperándome sobre su moto.
Como sé quién es él, me puedo permitir escuchar lo que tiene que decir.
Piraña: Espero que no me hagas perder el tiempo, Buda.
Buda: ¿Estás fastidiado o qué te pasa?.
Piraña: Hermano, ya sabes que odio ser molestado en plena mañana.
Piraña: Si estás drogado, lárgate mejor a otro lugar antes de que te arrepientas.
Buda: Pero tampoco te pongas así, yo solo vengo porque ya deberías saber acerca de los nuevos ingresados y las primeras zonas; y además de buscarte como siempre lo hago.
Recibimos noticias de que la tasa de ingresados aumentaría gradualmente en la cero siete.
Pero hay mas...
Otras noticias del exterior indican que el conecte "Ardilla" planea algo grande como intenté hacerlo en mis tiempos.
No me molesta en especial, ya que aquellos quienes quieren también pueden ganar; el problema es que ese bastardo lo hace a costillas de mi antes negocio.
Como estoy aquí tengo poco control del exterior y mi influencia está fuera del juego.
De poco sirven mis antiguos seguidores y todo se puede comprar con dinero.
Tengo que aceptar la cruel realidad.
Buda: Tu posición sobre la calle es muy delicada...
Al montar en la parte trasera de la moto, Buda dice mientras la enciende.
Piraña: Ya lo sé.
La suerte es lo que define el ser conecte.
O eso es lo que yo creo...
En menos de cinco minutos llegamos a las zonas primarias de la cero siete.
Todo se divine por zonas y categorías, como se le conoce:
Zona A-1 (Recién llegados) [En proceso judicial]
Zona A-2 (Recién llegados) [En tiempo de espera]
Sigue siendo como estar en una celda esperando las buenas noticias, pero una vez que te dejan en la zona A-2 no hay absoluta garantía de que realmente este siendo procesado tu caso.
Se puede también traducir como, si ya te trasladarán a las zonas oficiales de la cero siete.
Una vez dentro, no se espera salir pronto y tan fácilmente. Si corres con la suerte de que no te asignen cargos injustos, pero ese tema no viene al caso.
Estamos aquí ya que los nuevos ingresados parecen estar en contacto con Ardilla.
Al llegar al centro de la zona A-1, muchos de los ahí presentes nos miraban alertados e incluso con miedo. Claramente por nuestro prestigio (el arma mas importante de una persona).
Es normal que me miren con miedo por que soy el conecte Piraña.
En cuenta al gordo Buda, como dice su nombre, se le ve tranquilo e inocente pero es uno de los conectes mas antiguos, sádicos y perversos del Oeste de Velenques.
Buda: Según me describieron, creo que son aquellos que están en la cancha.
En una de las canchas principales de entretenimiento, estaban cuatro hombres parados hablando entre sí de forma casual mientras observan un partido de juego que estaba llevándose acabo.
Cuando nos acercamos no parecieron reparar en nosotros y seguían casuales.
Piraña: ¿Ustedes son del bando de Ardilla?.
Ante la contundente directa, ellos se alertaron y se miraban sin saber que responder.
A juzgar por su reacción, son niños que poco saben de la calle aunque tengan apariencia de ser mayores de veinte años.
...: ¿Porqué?.
Mala elección de palabras cuando te preguntan con seriedad.
Piraña: Responde pues.
Piraña: Me estás haciendo perder el tiempo.
...: Sí, estamos con Ardilla.
Quien esta aquí eres únicamente tú, mas no Ardilla.
Piraña: Les voy a ser sincero, si quieres estar en paz una vez dentro de las zonas, me tendrán que hablar con seriedad lo que saben sobre Ardilla.
Piraña: No importa qué tan fieles sean ustedes, ya que una vez aquí dentro no tiene ningún tipo de protección del exterior. Por lo que deberían olvidar contar con la ayuda de alguien más.
Sus expresiones se volvieron rígidas aunque fingían mantener la compostura y pensaron mucho antes de cualquier palabra.
...: E-entiendo, pero... promete que contaremos con absoluta protección si te contamos todo lo que sabemos.
Piraña: No te preocupes por eso.
Mi influencia es poca pero tengo algo de poder sobre los antiguos conectes.
Para evitar que se involucren más oídos a nuestra conversación, nos alejamos un poco; y aunque vacilantes, cedieron finalmente a dar detalles.
Así por lo que parece, la situación sólo se reduce a eso.
Buda: Parece que realmente se aprovecharán de tu negocio en el Norte y quedarás sin nada.
Piraña: Ese bastardo...
No hay nada que pueda hacer y debo aceptarlo.
Buda: No pareces tan desesperado como te imaginaría anteriormente, mi hermano.
Buda: ¿Tienes algo planeado?.
Piraña: Tengo bastante tiempo encerrado aquí y eso me ha hecho pensar muchas cosas.
Piraña: Lo único que puedo hacer es mirar.
Realmente no entiendo a Buda, podemos ser amigos de la infancia pero siempre está siguiéndome.
Y una de las cosas que no me sorprendería es que un amigo te traicione, eso siempre sucede y se tiene que tomar en cuenta con antelación.
...: ¿Qué hacemos ahora?.
Estos niños realmente son nuevos aquí.
Piraña: Hermano, tu solo dirás que vas de parte de Piraña a cualquier zona y no deberían hacerte nada.
Piraña: Sólo te aconsejaré no meterte en problemas y saldrás ileso de casi cualquier situación; aunque depende mucho de ustedes.
Con esas palabras,tanto Buda como yo nos alejamos sin más.
Eso debería ser suficiente.
Buda: ¿Qué opinas?.
Piraña: ¿Sobre qué?.
Buda: Sobre lo que dijeron.
Piraña: Aún no estoy seguro si creerles, pero gran parte de lo que dijeron era cierto según se rumorea.
Pero hay algo que no me gusta del todo.
¿Por qué están ellos aquí?.
Son nuevos y poco maliciosos.
Es como si algo estuviese mal...
Ahora que recuerdo al mensaje que recibí de ella.
¿Qué habrá querido decir?.
Piraña: Involucra a estos chicos indirectamente en algo y luego mándalos a eliminar.
Buda: Entiendo.
No es por nada personal, pero así será la cosa.
Si fácilmente se abrieron con confianza ante un poco de presión, entonces no servirán en otras situaciones.