Capítulo 29 – De vuelta en las calles

El sol había salido y con ello llego la fecha de partida. Levante a Julia y Alejandra.

Leo: Alejandra te quedas a cargo y eres la responsable de cuidar a Melissa y a Kitty.

Saque de mi inventario un cuchillo de cocina y se lo entregue.

Leo: Confió en ti.

Volví a agitar mis manos y saqué algunas raciones de comida para sobrevivir por dos días.

Leo: En caso de que tardemos mucho te dejo estas raciones. Cuídalas y no permitas que otros las vean.

Alejandra ya había experimentado la crueldad de este mundo por lo que sabía muy bien lo cruel que podía ser el ser humano.

Alejandra: ¡Déjamelo a mí!

Asentí y me fui con Julia hacía el punto de reunión que era la sala de espera del hospital.

Al llegar pudimos observar al anciano y anciana despidiéndose mientras esta última lloraba y le daba una bendición al anciano. El carnicero estaba ansioso, el policía se aseguraba de tener su daga lista en todo momento y cristina me miraba de mal humor por alguna extraña razón.

Diana: Ya estamos todos reunidos es momento de partir.

Con esas palabras listas adoptamos una formación estándar. En el frente estaba el Policía y yo. Luego en el medio el anciano, Diana y Cristina. Por último, cuidando la retaguardia estaba Julia y el carnicero.

Decidimos adoptar una formación estándar de los juegos de rol. En donde el sanador y mago debían ser cuidados y protegidos. Nos dirigimos con dirección al este.

Mientras tanto en el ala oeste del hospital

¿?: Vice director, Acabamos de recibir un informe que vieron a un grupo de personas salir del ala este.

Gordo: Déjalos, están desesperados por comida por lo que debieron de haber salido a buscar. Cuando fracasen…. ¡JEJEJE!

El gordo se lamio los labios de una forma que le causaría repulsión a cualquiera que lo vea. Esto se mostraba en la cara de disgusto del seguidor.

¿?: Vice director nuestras reservas de alimentos también están empezando a escasear.

Gordo: Manda a un grupo a fuera a buscar comida. Si no regresan son bocas menos que alimentar.

El subordinado salió y el gordo empezó a pensar con que belleza podía divertirse hoy.

Punto de vista Leo

Llevábamos diez minutos caminado con mi guía fue fácil encontrar rastros y señales de bestias. Por lo que pudimos evitar algunos conflictos. Era algo complicado el tener que parar a cada rato solo porque un goblin pasaba. Sin embargo, la finalidad era evitar el conflicto y evitar bajas.

No fue hasta que doblamos una esquina que un esqueleto armado con un escudo y una espada nos estaba esperando completamente tendido en el piso.

El esqueleto se levantó y las cuencas de sus ojos se iluminaron con un fuego rojo sangre.

Esqueleto: KIKIKIKI

El sonido de sus huesos crujir se podían escuchar. El esqueleto evadió completamente sin sentidos debido a que no estaba emitiendo solido u olor alguno.

Todos nos pusimos en posición de combate.

Policía: ¡Intimidación!

El policía se lanzó contra el monstruo después de haber atraído la atención del esqueleto. La daga que cargaba estaba fuertemente agarrada con su única mano. Pero para el esqueleto esto fue fácilmente bloqueado con su escudo y contra atacado con la espada en su otra mano. El policía podía ver su final a manos del esqueleto. Al ver esto no pude evitar suspirar.

Leo: Esprintar, ataduras de sombra.

La sombra se envolvió alrededor del esqueleto y detuvieron la espada a centímetros del rostro del policía.

Me acerque y golpee al esqueleto con el hacha. Sin embargo, fue bloqueado por el escudo con algo de dificultad. La sombra aun mantenía atada a la criatura.

Anciano: ¡Bala de roca!

Una formación de color café con intricados círculos se formó desde la mano extendida del viejo. Esto provoco que una roca del porte de una manzana saliera disparada a gran velocidad hacia el cráneo del esqueleto.

El esqueleto grito empujo su escudo hacia mí. Esto genero una onda de choque que desvió la bala de roca lo suficiente como para que no golpeara su cráneo.

Leo: ¡Refuerzo físico!

Mientras mi hacha aun bloqueaba su escudo y las sombras ataban su otra mano lance un puñetazo a la cara huesuda de esta cosa. El cráneo del esqueleto salió disparado y golpeo el pavimento de la calle.

El cuerpo del esqueleto se tambaleo y cayó al piso. Ayude al policía a ponerse pie.

Policía: Gracias…

Leo: No vuelvas a hacer eso. Esa fue una estrategia estúpida.

Policía:…

Leo: ¿?

Anciano: ¿Qué pasa?

Leo: No eh recibido la notificación de eliminación.

Julia/carnicero/anciano/policía: ¡!

Volteé solo para ver al esqueleto recoger su cráneo y colocándolo en el mismo lugar.

Esqueleto: ¡KKKIIIIKIKIIKIKIIIII!

El grito del esqueleto fue ensordecedor tuve que taparme los oídos para poder resistir ese grito. Cuando termino dos esqueletos más salieron de los edificios aledaños.

Leo: Anciano, te dejo mi espalda, Mario protege a Diana y al anciano, Milton te voy a dar otra oportunidad.

Me lance hacía el esqueleto que tenía en frente.

Leo: Julia te dejo a uno de los esqueletos.

Julia: ¡Déjamelo a mí!

Balanceé el hacha con la habilidad de refuerzo muscular activada. Antes de que el hacha impactara con el escudo detuve el ataque generando torción y lanzando una patada giratoria en su lugar. Mi pierna impacto contra el escudo desbalanceando al esqueleto. Aprovechando el momento lance atadura de sombras mientras me reincorporaba en el aire y balanceaba el hacha hacia la cabeza del esqueleto. Sin embargo, no utilice su lado filoso. Al contrario, utilice su lado llano. Quería romper esa cabeza para ver si así se podía recuperar.

El hacha impacto el cráneo mandando astillas y pedazos a volar por todas partes.

Sistema: Felicitaciones al usuario por derrotar a un soldado esqueleto (E)

Sistema: La habilidad Devorar ha sido activa

Sistema: se ha obtenido 0.3 puntos de defensa. Debido al alma dañada se ha obtenido 1 fragmento de habilidad (1/10)

Sistema: La experiencia es repartida con el usuario Julia.

Julia por otro lado había corrido hacía el pero no encontró brechas en el esqueleto.

Leo: ¡Julia usa el pomo del cuchillo para romperle el cráneo!

Julia: ¡Esta bien!

Parecía que Julia lo tenía bajo control. Por lo que decidí evaluar la situación de Milton. El policía estaba siendo repelido por el escudo del esqueleto cada vez que él era bloqueado el esqueleto lanzaba un ataque su espada. Pero el anciano lanzaba una bala de roca obligando al esqueleto a cancelar el ataque y esquivar. Esto era un punto muerto.

El rostro del anciano parecía pálido y cansado. Lo más probable era que se estuviera quedando sin mana. Al fin y al cabo, yo había pasado por eso.

Leo: ¡Anciano para!

Use esprintar disminuyendo la distancia entre el esqueleto y yo. Cuando el esqueleto iba a bloquear el ataque de Milton agarre su cráneo y lo impacte contra una pared rompiéndolo en pedazos.

Sistema: Felicitaciones al usuario por derrotar a un soldado esqueleto (E)

Sistema: La habilidad Devorar ha sido activa

Sistema: se ha obtenido 0.3 puntos de defensa. Debido al alma dañada se ha obtenido 1 fragmento de habilidad (2/10)

Sistema: La experiencia es repartida con el usuario Julia.

Recogí las armas de los soldados esqueletos derrotados y los almacené. Luego verifique el avance de Julia como parecía bien preste un poco de mi atención al anciano quien estaba bebiendo un poco de agua que le había dado Diana. Milton por otro lado me miraba perplejo.

Milton: ¿Por qué hiciste eso? ¡Ya lo tenía!

Leo: Mira

Apunte al anciano que se sentó en la acera mientras tomaba grandes bocanadas de aire.

Leo: Tu ineptitud causo que el anciano gastara mucho mana solo para salvar tu vida.

Milton miro al cansado anciano lo que provocó que apretara con más fuerza la daga.

Leo: Vas a cambiar de lugar con Cristina.

Cristina: ¿Yo?

Algo nerviosa Cristina dio un paso hacia adelante.

Leo: Si tú.

Milton: ¡Pero Cristina no tiene habilidades!

Leo: Lo sé.