SOY LO MAS PARECIDO A UN HÉROE

—¿Estás bien?

—¿Eh? Hola...

Kevin saludo brevemente a Zoe que estaba en el suelo, él asintió brevemente. Comenzó a caminar hasta donde estaba el tipo que podía volverse un león, este estaba temblando de miedo.

—¡Esp...!

Intento desesperadamente decir algo pero su voz quedó atascada en su garganta cuando un puño condensado con energía de la muerte golpeó y atravesó su pecho como si un cuchillo atravesará mantequilla caliente, no hubo resistencia solo muerte.

Kevin no quería volverse un león por lo que absorbió esa fuerza, agilidad y resistencia.

Se rió débilmente y libero sus preocupaciones.

—Ted de deberíamos salir de aquí, lo más seguro que la forma de avanzar es llendo al edificio principal, en el lateral de este edificio hay un estacionamiento que da directo con la parte trasera de ese edificio

—Creo que sería una mala idea tomar ese camino

—Si, entiendo tu preocupación pero no hay otro camino, aunque seríamos presa fácil es el más rápido ya que no tendríamos que rodear el lugar

—Bien...

Los ojos de Zoe se entrecerraron mientras observaba el Intercambio entre Kevin y Ted, ambos comenzaron a caminar hacia las escaleras mientras comenzaban a discutir entre ellos.

—Oye... Tú... ¿Puedo hacer equipo con ustedes hasta llegar al edificio principal?

Ted guardo silencio dejando la decisión de este asunto.

—¿No fuiste tú la que nos abandono primero?

—No recuerdo nada de eso...

Kevin parpadeo inocentemente viendo ese lado desvergonzado de Zoe.

—Si lo hiciste una vez podrías hacerlo nuevamente...

—Eso es... lo siento... pero, que querías que hiciera, solo al ver a esa cosa solo pensé en huir

—Solo si juras no volver a traicionarnos puedes venir

—Juro ante cualquier Dios que no lo haré

—Eso es un poco pesado, solo tenías que decir que estaba bien

El pequeño rostro de Zoe no pudo evitar sonrojarse.

—Esta bien hermano, puedes venir

Zoe casi muere al escuchar esas palabras "Hermano" ¿Que parte de ella no era femenina?

Quería decir algo pero simplemente vio como Kevin se alejaba mientras Ted le dedicaba una mirada compleja, como si estuviera viendo a un estúpido.

—¡Espera! necesito ayuda

Kevin detuvo sus pasos al percatarse de la existencia de Joan.

—Esta bien hermano salvaremos a tu amada, Ted dame la mitad de las cosas que llevas, dale la otra mitad y lleva a esa chica

Zoe sintió como obtuvo una gran perdida, pero no objetó lo que dijo Kevin, Kevin vio de reojo que ya había personas sin ninguna posibilidad de sobrevivir por lo que optó por darles una muerte rápida mientras absorbía sus poderes.

*Bam*

Kevin había acabado y regresaba a dónde estaba la posición de Zoe, Ted y Joan pero lo que vio lo hizo petrificarse.

Ted y Zoe habían soltado a Joan haciendo que está cayera de cara contra el suelo, esos dos comenzaron a entrar en pánico mientras Kevin los observará con lastima.

—Pobre chica... esté será un largo viaje

Suspirando comenzó su viaje hacia el edificio central donde estaba seguro que se reunirán la mayoría de los fuertes.

Una sonrisa salvaje y desvergonzada se dibujo en su boca mientras esperaba la oportunidad de renacer en otro mundo.

...

*Kaboom*

Tan rápido como sintió una sacudida Claire salto como un gato y se golpeó la cara con el techo, se quedó ahí arriba mirando los alrededores mientras escucho pasos que se aproximaban a su posición.

Era la figura de un hombre que estaba corriendo desesperadamente, tan pronto como llego a una intercepción su cuerpo fue cortado y su cabeza se desprendió fácilmente.

Claire había saltado en el momento oportuno y acabo con la vida de ese hombre sin pestañear, preguntándose qué pasaba dió pasos lentos pero seguros hacia la puerta que conducía al estacionamiento.

Se dió cuenta que ahora podía manipular las llamas, la espada y el viento; esta combinación era ganadora para ella pero aún así no se atrevió a ser descuidada y comenzar a vagar libremente por ahí.

Usando la magia de viento conecto su audición con la brisa de los alrededores para captar sonidos, conversaciones y en si a sus potenciales enemigos.

Mientras avanzaba captó una batalla cerca de una laguna a quinientos metros de su posición actual.

Interesada y algo cautelosa se acercó.

...

El campo de batalla dónde estaba Kevin se había convertido en algo espeluznante, la que alguna vez fue una hermosa laguna de agua cristalina ahora era un pantano lleno de lodo mugroso y agua contaminada.

Una horda de bestias alienígenas aparecían constantemente, Kevin y Zoe estaban alarmados después de todo no importaba cuántas bestias destruyeran todos estos se apilaban como montañas mientras derramaban sus órganos y fluidos corporales los cuales chocaban con la tierra y el agua haciendo que estás se pudrieran.

El hedor era tan espeso como la niebla y llenaba el aire de los alrededores como los pulmones de uno.

Todos entendieron que si respiraban parte del aire contaminado morirían envenenados.

—Kevin fue un gusto el conocerte

—Ni lo menciones hermano, el gusto fue mío

—Dejen de decir tonterías

Mientras los dos se burlaban de la situación en la que estaban Ted los reprendió por decir esas palabras, mientras que la inconsciente Joan solo podía balancear su cabeza mientras era agitada por Ted.

—Mmm~ creo que podría tener una idea... pero...

—¿Eh? ¿cuál? dilo rápidamente

Kevin comenzó a decirles que se sujetaran fuertemente a él y el entonces correría con todas su fuerzas usando sus rayos como impulso podría llegar al otro edificio sin problemas.

—Pero...

—¿Qué pasa hermano?

—Es solo que...

—Vamos hermano todos somos hombres menos Joan, no hay nada de que avergonzarnos al momento en que me sujeten...

—...

—Solo será un pequeño agarre, Ted sujeta su brazo derecho yo sujetaré el izquierdo

—Bien...

—E-esperen, Kevin eso es... yo soy una... ¡Anciano! ¡Kya~!

Zoe no pudo detener a un Kevin y a un Ted que la sujetaron sin esperar su aprobación, Kevin se preparó y salió disparado mientras Ted se aguantaba las ganas de vomitar, Zoe lloraba desesperadamente y Joan tenía la cabeza hacia atrás debido a la fuerza del impulso mientras su lengua salía de su boca.

*Crack* *Bam*

Kevin no se pudo detener a tiempo por lo que impacto de lleno la pared principal destruyéndola en el proceso y solo deteniéndose cuando se topo con una puerta de metal.

...

—¿Qué demonios?

Claire estaba sorprendida con esos idiotas, si bien al inicio le asombró la fuerza de esos dos para matar a una horda de bestias alienígenas usando dagas y un arco, su evaluación cayó hasta los suelos al ver lo estúpidos que eran.

Sin embargo su interés aumento y como habían limpiado todo el camino hasta el edificio avanzo rápidamente.

...

—Lo siento... lo siento... ¿Hermanito qué demonios comes?

—¡¿Tú?!

Kevin comentó mientras avanzaban sin molestarse en escuchar los reclamos de Zoe; ella parecía una leona a punto de devorar a una presa.

Mientras se ponía de pié usando sus ojos los cuales se activaron al sentir peligro se agachó mientras empujaba a los demás de una patada,

*Pat* *Clang*

Varias armas metálicas salieron de la pared contraria de donde estaban y se lanzaron hacia ellos con una rapidez impresionante, su cuerpo se tenso y se puso de pié usando los hombros para dar un pequeño salto, entrando en confusión Ted se percató que Kevin los había lanzado donde había un botón en la pared, comenzó a temblar indeciso entre apretarlo o no.

Zoe lo hizo a un lado y lo presionó sin importarle las consecuencias.

Justo como había predicho Zoe esas armas se detuvieron.

—Chico creo que perdí diez años de mi vida...

—Ciertamente...

—...

Los cuatro corrieron y pasaron sobre una barricada y se pusieron en guardia mientras de frotaron el pecho, la cien y la frente tratando de calmar sus palpitantes corazones.

Zoe se calmo gradualmente y se estremeció ese ataque lo tomó desprevenido.

Hecho un vistazo a los demás y los vio suspirando de alivio a los tres.

Los párpados de Joan temblaron, Ted la soltó involuntariamente y está última se cayó de cara contra el suelo.

—¿Qué demonios?

Habló mientras sufría un inmenso dolor en su hombro donde faltaba su brazo.

Después de mucho esfuerzo lograron calmarla y explicarle la situación.

—Veo... entonces, ¿tú eres Kevin? ¿Ted?

—Si...

Joan le dio el visto bueno a sus tres compañeros de equipo, se sintió agradecida con Kevin ya que logro matar a Arthur y a los otros tres hombres.

Mientras Zoe vendaba el hombro de Joan y está le reclamaba a Ted por dejarla caer, Kevin se levantó y se acercó a una esquina mientras les decía que guardarán silencio, los tres se pusieron en alerta, al poco tiempo sintieron el olor del humo vagar por el pasillo, se asombraron y acercaron lentamente a Kevin.

Cinco hombres recorrían el pasillo, cuando vieron que se habían ido sin decir nada la mayor parte de la tensión desapareció, intentaron hablarle a Kevin pero él se volvió inestable, su vista se nublo lentamente y sintió como sus párpados temblaron y progresivamente se sentían más pesadas, sabía internamente que no había ni pasado un día desde que llegó a este lugar, se sentía bastante somnoliento debido a la fatiga acumulada o tal vez por el uso excesivo de sus ojos.

—¿Debería?

Estaba atrapado entre dormir o seguir adelante, aunque el sueño era la mejor manera de refrescar su cabeza pero sobretodo sus pensamientos y ojos.

Decidió que el sueño ganará, tomó esa decisión en base a cuidar su poder ocular.

—¿K-kevin?

Zoe llamo preocupada a Kevin pero este simplemente caía en los brazos de Morfeo.

Una sonrisa irónica se dibujo en la boca de Ted mientras esté sostenía a Kevin les indicó que regresarán a buscar un lugar cómodo para descansar.

—Joan dame una mano

—¡Muy gracioso idiota!

Riéndose de sus bromas los tres regresaron a su base de operaciones para descansar.

...

Claire refunfuñó mientras veía el cansancio de Kevin, se pregunto si era el mejor momento de atacarlos para robarles todas sus habilidades y suministros.

—No, no es la mejor opción. Sin dudas ese tipo puede matarme, aunque dormido puede ser peligroso acercarme, puedo ver qué es del tipo sensorial

Suspirando se encamino hacia otro pasillo y pudo ver a otros hombres sentados mientras conversaban.

—Esto es aburrido. Espero que algo suceda pronto

—Oye no levantes ninguna bandera

—Vamos Pete, desde que salimos de ese edificio ya no hemos visto muchas personas

—Ciertamente, aparte que era esa cosa, esos tentáculos, esas cosas

—Ni lo menciones, pobre chica...

—Hablas de esa...M-Mia

—Esa tipa ciertamente era estúpida. Lo que sea, todos quería ser héroes, pero no se dan cuenta que esos son los que mueren primero

Un hombre delgado habló con tres líneas negras en su rostro, esto hizo lamerse los labios con pesar a un hombre gordo.

—Que desperdicio...

—Pero no te preocupes, aún quedan otras promesas

—Oh~ ¿De quien hablas?

—Ya sabes esa joven de sudadera, esa mujer glamorosa de enormes pechos, esa joven con mirada astuta, también está la hermana de la muerta y otras que están por ahí...

Sus risas resonaron por todo el pasillo.

—Tal Vez deberíamos ponernos de acuerdo para ver quién estará con quién

—Ciertamente, ciertamente...

Mientras se reían, un hombre musculoso bostezo y abrió tan grande la boca que un puño podría entrar.

Mientras se limpiaba las lagañas de los ojos escucharon desde la distancia fuertes gritos y pasos apresurados.

Todos se sorprendieron y se pusieron de pie mientras escaneaba los alrededores buscando la fuente del principal del problema.

—¿Qué demonios?

Un hombre escupió y no podía ver el problema, su corazón palpitaba con fuerza, sin embargo parecía que había encontrado algo entretenido, tal vez espectacular.

El ruido se acercó, Habían cuatro personas corriendo como si estuvieran siendo perseguidas por algo; había un hombre vestido de oficinista, una mujer madura con ropa casual, dos niños, una pequeña de unos cinco años que sostenía las manos de un pequeño de de unos diez años.

Corrían fuertemente, la corbata del hombre bailaba mientras instaba a su familia a correr.

—¡Vamos! ¡Corre! un poco... solo un poco más...

Dobló dos esquinas a toda prisa, pero tan pronto como llego al pasillo principal varias armas salieron disparadas en su dirección lo que hizo que frenarán en secó, con movimientos torpes el hombre logro esquivar las armas mientras que su familia no tuvo tanta suerte ya que las extremidades de los niños y de la mujer fueron cortadas.

Mientras frenéticamente movía la cabeza intentando ver si había alguna salida para su precaria situación vio al grupo de hombres que estaban sentados.

Sus ojos se iluminaron mientras comenzaba a hablar fuertemente.

—¡Ayúdenos! ¡por favor!

Con el fuerte ruido de su voz comenzó a correr mientras apretaba los dientes.

No pudo evitar llorar de impotencia, se pudieron ver varias criaturas parecidas a perros con carne podrida y piel cortada como si fuera tela desgarrada, tentáculos alienígenas salían de las columnas vertebrales chorreando baba oscura mientras exponían sus dientes caninos como si fueran navajas.

En su momento de vacilación su esposa y sus hijos ya estaban en las garras de esos monstruos.

—¡¡Cariño!! ¡¡Ayúdanos!! ¡Por favor!!

—¡¡Papi!! ¡Papi!!

—¡Padre!

—¡¡Ahhhhhhhhhhhhhhhh!!

Comenzaron a suplicar ayuda, el hombre simplemente retrocedió con grandes pasos, cuando de encontró con las furiosas miradas de los monstruos sus piernas temblaron mientras estaba petrificado al ver esos ojos rojos.

—Cari... Hi...

Estaba completamente petrificado y claramente podía escuchar los alaridos de su familia.

*Splat* *Crack* *Splat*

Rogaron desesperadamente por ayuda, el sonido de las masticadas se detuvieron pero como consecuencia el sonido de pasos húmedos, pegajosos y asquerosos comenzaron a resonar por todo el pasillo, la expresión de ese hombre cayó mientras comenzaba a llorar, lágrimas, mocos, pena, dolor, culpa y demás sentimientos se juntaron en su expresión.

Desvío torpemente su mirada al grupo de hombres que lo veían con expresiones diferentes, había burla, pena, etcétera.

—Decídete estúpido ¿vas a venir o no?

—Uh...

—Solo acércate...

Despertando de su incertidumbre, tal vez por la atmósfera amenazante y sin querer seguir viviendo se puso de pie y con pasos lentos tomó su decisión y se movió.

Los ruidos asquerosos aún se podían escuchar, era claro que esos monstruos estaban dándose un banquete con los cuerpos que tenían a su disposición, sonidos asquerosos erizo todos los vellos de sus cuerpos al ver y sentir como devoraban la carne; el hombre se derrumbó a lado de esos hombres acostándose en posición fetal y se tapó los oídos y solo recobro el sentido cuando esos monstruos se fueron dejando atrás esos cuerpos mutilados y sin vida.

...

Incluso alguien como Kevin que dormía como un tronco se despertaría debido al caos que se estaba desarrollando, cuando recupero la claridad de su mente, los gritos y alaridos de la familia ya no podían ser escuchados, se puso de pié mientras veía como Ted y Zoe observaban todo el asunto, acercándose rápidamente le indicaron que viera él mismo lo que había ocurrido.

Y había un cadáver irreconocible junto a dos cuerpos infantiles que estaban en un estado asqueroso, quedó totalmente impresionado al notar sus expresiones retorcidas, enojadas, llenas de dolor y pena; escucho un débil balbuceó.

—¡Yo! ¡Yo! ¡Yo! ¡Ellos! ¡E-ellos!

El hombre de mediana edad estaba tirado en el suelo mientras negaba frenéticamente con la cabeza, su temblor era notorio.

—No había... nada... nada que pudiera... hacer...

Estaba junto a cinco hombres pero ninguno dijo algo simplemente estaban ahí, observando como se ahogaba en sus propios lamentos.

De los cinco un hombre grande apareció empujando a todos hacia un lado, tomó lo que parecía un cuchillo oxidado y se lo enterró en el cuello perforando la vena yugular, se llevó la mano al cuello por reflejo solo para sentir la humedad de la sangre, sus ojos se dilataron mientras su vida se escapaba.

Estaba enojado, si no fuera por esas bestias que aparecieron pudo haber forzado el hecho de haber ayudado para desahogar su lujuria con la esposa e hijos del tipo.

En su último suspiro se dio cuenta que realmente murió solo.

—Pft~ Hahahahahahaha ese hijo de puta realmente era algo ¿no?

Ese hombre musculoso filtró una fría y asquerosa carcajada, no trataba de retener su risa y mucho menos su expresión divertida. Kevin frunció el ceño una cosa era matar a una persona para que dejara de sufrir pero otra era matarla para reírse de él y robarle descaradamente las habilidades que poseía.

Mientras se reía pudieron escuchar fuertes pisadas que se acercaban a ellos.

Dejaron de reír para tomar medidas en caso que se enfrentarán a un enemigo.

Una mujer glamorosa, cabello negro lacio que caía como una cascada hasta sus grandes caderas, tenía un cuerpo perfecto en forma de "S" curvas donde debía de haberlas y una cara hermosa; esto hizo que la mayoría de los hombres tragaran saliva, Kevin la recordó como la mujer que se peleó con cierto hombre en la sala principal.

Su mirada escaneó todo el lugar y dijo mientras hacia señas con la mano.

—Casi llegamos, este lugar parece el indicado

Atravesaron la pared que habían roto Kevin y los demás al hacer su entrada triunfal.

Kevin, Claire y otros pensaron que ya era imposible encontrar más sobrevivientes pero fuera de sus expectativas, apareció un grupo de unas trece personas dirigidas por esa mujer.

Las trece personas y esa mujer tenían heridas por todo el cuerpo; cortes, heridas, golpes, rasguños y moretones morados.

—¡Oh~ Dios mío! Mira quién es

Ese hombre grande que aún tenía sangre escurriendo se su mano parpadeo y exclamó sorprendido mientras se lamía los labios lascivamente.

—Te las arreglaste para sobrevivir, eh~ perra

—¿Quién eres tú?

Ella levantó su guardia mientras blandiá dos cuchillos.

Los ojos ojos de Kevin brillaron al ver qué había alguien con habilidades parecidas a la de él.

Esa mujer hizo una señal para que las demás personas se detuvieran, observando detenidamente vio el cuerpo sin vida de ese hombre y el estado asqueroso en el que se encontraban esos cuerpos en el suelo.

Pero sus bonitos ojos almendrados se entrecerrarón cuando vió la sangre gotear del brazo del hombre que sostenía el cuchillo.

—¿Qué crees que haces? ¿Porqué bloqueas el camino?

—¿Oh, esto? nada, nada~

Torpemente escondió el cuchillo ensangrentado atrás de su espalda mientras negaba con la cabeza.

Ella miro detenidamente los alrededores buscando rutas de escape o el mejor camino para adentrarse y buscar refugio.

Siendo honesta a ella le importaba un bledo la seguridad de estas personas de hecho tenía un poco de miedo.

Pero como llego a ser responsable de esas personas, muy simple, cuando recorría algunos edificios buscando comida se encontró con el estúpido que ideó hacer una barricada al inicio, parece ser que lo de ser un héroe se le subió a la cabeza y reunió a varias personas; mientras avanzaban fue herido de gravedad al enfrentarse el solo a una gorda furiosa de cucarachas monstruosas devoradoras de hombres, lo sorprendente fue que nadie lo ayudo, al parecer su gran ayuda fue emocional ya que ellos cantaban alabanzas cunado destruía a un enemigo gritando su nombre.

Pero al final la mayoría númerica de uno contra un ejército le pasó factura y quedó herido de muerte, en sus últimos suspiros le dio sus habilidades a ella y le dió el mando de las trece personas.

Esto la hizo sudar mucho y quería rechazar rotundamente pero su corazón se hablando cuando lo vio llorar y decir que ella se convierta en la heroína de todas las personas, aunque lo último le dio igual y lo vio como palabras de un niño idiota, lo primero más sus habilidades hizo que aceptará de mala gana.

—Hazte a un lado. No lo volveré a decir

—¿porqué debería? este es mi pasillo

—¿Eres idiota? no, estoy segura de que lo eres. Nada en este lugar pertenece a alguien

—Te equivocas, si yo digo que esto me pertenece así será

Entrecerró su mirada y el le devolvió una mirada divertida, un poco de ansiedad se filtró en sus bonitos ojos.

—Te diré que haremos, las personas detrás de ti podrán pasar si tú te quedas con nosotros un tiempo y nos ayudas un poco

Cuando termino de decir esas palabras ella se dio cuenta de lo que realmente quería, después de todo esa mirada lujuriosa nunca abandono su abundante pecho.

Apretó los dientes con tanta fuerza que incluso sus encías sangraron un poco.

*Tap* *Tap* *Tap*

De pronto todos escucharon húmedas y asquerosas pisadas, esto heló el corazón de todos incluidos los de Claire y Kevin que estaban viendo como se desarrollaba la situación.

—Vamos si no te apuras el monstruo llegará hasta aquí y entonces todos los tuyos morirán

'Pero ellos me importan una mierda' quería gritar esas palabras pero viendo la situación sabía que no importaba que las personas atrás de ella la traicionarían entonces porque hacer algo estúpido como decir eso, esas palabras harían que esas personas la vendieran más rápido a ese hombre.

Su mirada se volvió helada ya que se percató de los ojos suplicantes de las personas que estaban atrás de ella.

Apretó los dientes y las personas comenzaron a correr dejándola sola al poco tiempo, la sonrisa burlona del hombre se ensanchó de oreja a oreja.

—¿Viste eso? Al final, solo fuiste una moneda de cambio, ahora nos perteneces, no te preocupes no te trataré mal, después de todo tengo que cuidar lo que me pertenece

—Fue una maldita perdida de tiempo haberlos cuidado...

Ella estaba en shock, antes de que pudiera decir algo ese hombre le lanzó un puñetazo que evadió con gran dificultad, sabía que si recibía ese tipo de golpe su mandíbula se desprenderá de su cabeza.

Del rabillo del ojo vio un brillo metálico que se aproximaba a su costado inferior derecho, sujeto sus cuchillos e inyectando fuerza sobrehumana detuvo el ataque a centímetros de cortarla.

*Clang* Clang*

El hombre se sorprendió ya que sus ojos se abrieron con incredulidad y pasó a tomárselo más enserio.

Ella se percató de eso y retrocedió unos cuantos pasos, se remango las mangas exponiendo sus brazos delgados, alzó sus cuchillos y se lanzó hacia la cabeza del hombre.

Realizó un corte en diagonal pero fue detenido a duras penas, el hombre giro sobre su eje y le dio una fuerte patada en el vientre con tal fuerza que fue mandada a volar en línea recta hasta detenerse contra una pared.

Ella quería utilizar esta oportunidad para escapar, viendo su mejor ruta de escape, intento saltar y correr con toda su fuerza pero en el momento en el que se alzó su tobillo fue agarrado y usando la inercia el hombre la azotó contra el suelo.

—¡Ahh!

Grito de dolor cuando su espalda golpeó el frío suelo, sintió como dentro de su cuerpo era sacudido violentamente, el hombre volvió a levantarla y la estrelló contra la pared que estaba a lado, sin darle tiempo a descansar volvió a estrellarla contra el suelo pero está vez la soltó haciendo que ella rebotara en el suelo, una delgada línea de sangre caía de su nariz y boca.

Fue sometida cuando intentaba pararse y el hombre piso con fuerza su cabeza impidiendo que se moviera por el dolor, su cráneo se agrieto mientras hacia ruidos extraños.

—¡Ahh!

—Estúpida perra, tienes agallas lo reconozco, es por eso que me gustas más

—...

Sin poder responder sus pulmones expulsaron una gran cantidad de sangre, no pudo aguantar más y lágrimas comenzaron a caer comenzando a lamentarse toda su vida.

—Tú. ayudame a quitarle la ropa

Ella no podía creer lo que podía escuchar aunque una gran parte sabía que esos hombres iban tras su cuerpo era difícil para ella aceptar está situación.

Sus compañeros rápidamente desgarraron la falda de la mujer exponiendo sus hermosas piernas y muslos regordetes, vellos traviesos se exponían de su braga, al ver tanta piel los hombres tragaron saliva ruidosamente mientras ya no podían evitar imaginarse cómo era entrar en esa cueva húmeda.

—¡D-dejame ir! ¡M-maldito!

Trato de forcejear desesperadamente usando sus piernas en un intento de escapar, sin embargo como premio fue golpeada en la boca del estómago, viendo esta oportunidad los demás sujetaron sus brazos y piernas inmovilizándola, terminaron de despedázarle la falda, le quitaron las zapatillas con plataformas finas; la ropa de su pecho tenían un sin fin de rasgaduras, así que todo fue visible, incluso si uno miraba bien podría encontrarse con una aureola rosada.

Comenzaron a reírse de ella, un aroma a rancio golpeó su cara casi haciéndola vomitar, vio como dos hombres se bajaron los pantalones exponiendo esas armas que podrían entrar en su cueva húmeda.

Comenzando a lamentarse y contemplado el hecho de que ahora seria la mujer de estos hombres al menos hasta que ganará poder y los matará o tal vez debería suicidarse mordiéndose la lengua para ahogarse con su propia sangre.

—Mami...

Ella susurró ligeramente pero fue escuchado por casi todas las personas presentes, a decir verdad tenía miedo a la muerte pero eso no quería decir que preferiría una vida de esclava sexual.

—¿M-mami? ¿escucharon eso? Hahahahahahahahahahahahaha eso fue realmente adorable

Riéndose histéricamente de ella, no pudo evitar negar con la cabeza, sabía que su destino estaba sellado y en este momento en lo único que pudo pensar era en la hermosa sonrisa que su madre siempre le daba, quería volver a sentirse cálida, quería que alguien la ayudará. Dejando escapar un suspiro estaba a punto de cortarse la lengua pero se percató de una sombra oscura como la noche y vislumbro dos dagas plateadas.

Ella pudo verlo a la perfección un joven de cabello negro que expulsaba ligeras telarañas de electricidad, tenía la parte superior del cuerpo expuesta y rasguños y moretones podían observarse, vestía un pantalón negro algo desgastado, sus ojos grises emitían un ligero brillo dorado, no supo porque pero su corazón se aceleró cuando vió que alguien respondió a su llamada de auxilió.

Levantó sus dos dagas y parecía que podían cortar toda la oscuridad que la aquejaba con su misteriosa luz.

Las hojas se movieron con rapidez y dejo ver dos arcos plateados cuando Kevin dio un paso adelante, el hombre salto hacia atrás y alzó su cuchillo, Kevin movió su cuerpo hacia la derecha con una finta atacó el área donde estába el hígado, al no poder esquivar del todo recibió un gran corte que lo hizo vomitar una gran cantidad de sangre, a gran rapidez Kevin se acercó a los hombres que sostenían sus brazos y piernas, con un movimiento rápido logro rebanar el miembro del hombre, gritando y chillando de dolor recibió una patada en la cara la cuál hizo que su cuello mirara su espalda.

Kevin no era un buen samaritano o un héroe, realmente no le interesaba lo bueno y justo, de hecho el quería vivir según sus creencias y ahora viendo lo que se desarrollaba la situación podría importarle menos la vida y muerte de estos hombres, de hecho todo era ganancias; podría asegurarse las habilidades de estos tipos, aumentar su forma de pelear y porque no, ayudar a esta hermosa mujer.

Se sorprendió al absorber las habilidades del tipo con el miembro fuera, ahora podía controlar el elemento hielo, sentía que si pudiera entrenar más este tipo de poder llegaría a poder utilizar el agua como derivado.

Los ojos de Kevin coincidieron con los de ella y el hecho de querer sacar beneficios de ella se esfumó de su mente, después de todo si hiciera eso que diferencia habría entre él y esos hombres. Como consecuencia de esto sus emociones se agitaron, no sabía porque pero su corazón salto, al ver a esa mujer en ese estado de debilidad una emoción de querer portegerla, cuidarla brotó de él, pensó que era la pubertad pero luego lo descartó, creyó instantáneamente que esa mujer le hizo algo, tal vez una habilidad esto lo hizo apretar los dientes en furia pero lo descartó al ver a dicha mujer mirándolo como si suplicara para que no se fuera.

Verificó con sus ojos y vio un hilo que unía a esa mujer y a él, un hilo rojo con ligeras manchas azules.

Sabía que el color rojo era lo más parecido a amor o sentimientos y el color azul no estaba seguro de que era realmente pero lo había visto en esa maid que le ayudo.

Suspiro y calmo sus emociones, se paró delante de ella mirando a los hombres que aún quedaban y al líder se estaba reincorporando.

—Oye maldito, ¿qué crees que haces?

Mientras Kevin hablaba ese hombre le dio una mirada espeluznante pero no logro perturbar la tranquilidad de Kevin, a juzgar por su expresión no podía entender lo que sucedió, un mocoso logro herirlo gravemente esto lo hizo enfadar sintiéndose avergonzado.

—¿Mocoso quién te crees que eres?

—Yo pregunté primero...

Se reincorporo pero por alguna razón la voz de Kevin impactó sobre él de una forma en la que le resultaba difícil mirar a los ojos a Kevin, su cuerpo tembló de miedo; siendo honesto quería huir una mujer no valía la pena si llegara a morir antes de disfrutarla. Sus instintos le decían que se largará, que evitará un enfrentamiento frontal contra Kevin, pero su orgullo le decía ¿porqué tener miedo de un mocoso salido de la nada?

—Qué maldita broma chico, llámame papá en este momento

Habló de manera arrogante mientras los hombres atrás de él e inclusive Claire y los demás que estaban ocultos no pudieron evitar soltar un suspiro de admiración pero también negaron la cabeza como si hubieran visto a un retrasado que no conoce nada del mundo.

—¿Qué pasa mocoso, quieres pegarme? ven inténtalo...

Kevin hizo un movimiento con su mano.

*Pah*

La cabeza del hombre que estaba a su lado se desprendió de su cuerpo al recibir una fuerte bofetada de parte de Kevin.

Gracias a su fuerza la cabeza explotó como un tomate salpicando sus compañeros, se intento poner en guardia pero sintió como su nariz era golpeada, todos fueron tomados por sorpresa, gritaron de dolor mientras la sangre salía furiosamente de sus narices.

La velocidad de Kevin sorprendió a todos, estando tirado en el suelo ese hombre se llevó la mano a la nariz en un burdo intento de detener el sangrado, se deslizó a cuatro patas intentando huir.

—¿Qué pasa papi, a dónde vas? Ven acércate...

En un movimiento rápido lanzo su cuchillo e intento lanzar su puño hacia la cara de Kevin, el simplemente lo vió y suspiro, detuvo el cuchillo con una de sus dagas y usando la otra logro rebanar en más de tres cortes el brazo derecho de ese hombre para terminar y rematarlo le dio un fuerte rodillazo en la mandíbula haciéndolo vomitar sangre y algunos dientes.

Con un movimiento rápido le cortó el cuello a ese hombre y a sus acompañantes.

Ella estaba aturdida cuando se dio cuenta de lo que estába pasando. Ni siquiera pensó en ocultar sus bragas o parte de sus pechos, Kevin le tendió la mano y ella la agarró docilmente y usando la mano libre uso la pared para sostenerse como también para ponerse de pie.

Observó detenidamente a Kevin antes de hablar.

—G-gracias... Muchas gracias...

Gruesas gotas de lágrimas se derramaron de sus bonitos ojos, haciéndola llorar con toda honestidad.