Por otro lado, la industria del entretenimiento comenzaría a abrir la imaginación de la gente. Si es que se les presenta opciones de lo que pueden hacer, entonces la gente comenzaría a pensar en la ocupación de ninja como algo muy poco rentable, donde arriesgas tu vida y la paga no es la mejor. Después de todo, muchos se vuelven ninjas, no por la tal llamada voluntad de fuego o cualquier ideología que implanten en las distintas aldeas, sino por la paga y la necesidad de sobrevivir.
Eso no era difícil, en el mundo anterior de Lite no había falta de animes enfocados en deportes y trabajos. Pescadores, cazadores, animadores, mangakas de cocina, ingenieros, etc. Podían nombrar un tema y seguro que había un manga o anime que tratara de ello. Lo importante era darle a las personas una perspectiva diferente del mundo.
Por las consecuencias no se preocupaba. Siempre y cuando todas esas políticas se implementen, se convertirían en cadenas que impedirían la guerra y harían que la población aumente exponencialmente.
Lo que Lite quería no era una aldea militar, sino un ejército disciplinado que siga órdenes y tenga códigos morales.
Para eso también servirá el adoctrinamiento democrático, después de todo, si los ninjas ven que en otros lugares hay diferentes tipos que son capaces de obtener poder, aunque sea por un tiempo, entonces no había razón por la que debieran resignarse a estar bajo el mando de una sola persona toda su vida. Incluso si el sistema militar funciona de forma diferente, aún se pueden hacer modificaciones que acomoden los intereses de más gente.
Eso… ¿Es eso posible? (Mito)
Mito escuchó y se quedó petrificada. A pesar de que se pasó horas haciendo preguntas y más preguntas para aclarar las dudas que tenía, aún no podía entender en profundidad los conceptos de todas las ideas que Lite le presentaba, pero eso no le impedía ver su potencial, aunque sea superficialmente.
Sí, sí es posible, lo digo porque vengo de un mundo así. Aunque no todo era perfecto, pero no hay duda de que este tipo de situaciones dejaron de ocurrir. (Lite)
*Suspirar* Ya veo porque me consideras más importante que incluso mi esposo, aunque él sea llamado el dios ninja, es imposible que te ayude a cumplir tus metas. (Mito)
Mito se preguntaba si es algo así, era realmente posible.
¿Pero qué sucedería con los jinchuuriki? Incluso si logras tu cometido, ellos seguirían siendo un factor inestable. Y no es como que pudieras soltar a las bestias. (Mito)
Bueno, esa no es mi tarea. Hay gente que se encargará de eso. (Lite)
¿Quién? (Tsunade)
Lite dirigió la mirada a Minato y Kushina. No había más palabras que decir.
Ellos también lo entendieron instantáneamente, ya sabían que el destino existía, y su hijo formaba parte de eso.
Incluso con todo lo que hice, todo se desmoronará y puede que haga incluso más daño al mundo si no lo hago con cuidado. (Lite)
¿Eh? (Todos)
Verán, la razón por la que no hice las cosas de forma distinta no es solo porque quiera mantener la ventaja que tengo de saber lo que pasará en el futuro, sino que hay algo mucho más importante, el destino. Este existe en este mundo. Todos tiene cierto rol que deben cumplir en este mundo, si no lo hacen o tratan de ir con ellos entonces solo habrá caos. Eso es porque el destino no le pertenece a una sola persona, sino que está entrelazado con todos los demás. No solo personas, cada animal, cada lugar, incluso las aldeas o clanes, todos tienen su destino. (Lite)
¿Entonces no puedes ir en contra de él? (Minato)
No, es algo demasiado misterioso en lo que no me quiero meter. Solo sé como funciona, pero no lo entiendo en absoluto. Por eso esperé hasta el ataque de la aldea para salvarlos, si no hubiera sido mucho más fácil buscar una forma de pasarles un sello de comunicación y advertirles. (Lite)
Ya veo… (Minato)
Si hago lo que quiero, entonces el destino de todos me arrastrará y tratará de volver a poner las cosas en su orden original. Por eso el cambio debe ser gradual, e incluso así, los que deben terminar el trabajo deben ser Sasuke y Naruto. (Lite)
¿Sasuke también? ¿Él en específico o los Uchiha tienen algo que ver? (Tsunade)
Oh, eres muy perspectiva. Bueno, supongo que debo contarles la historia. (Lite)
Lite luego procedió a contar en detalle la historia de Hagoromo, como sus hijos comenzaron un ciclo de conflicto que siguió incluso hasta estos días con sus reencarnaciones.
Entonces ellos deben ser los que terminen el trabajo para que su destino se cumpla, y solo entonces ya podremos trabajar como mejor nos parezca. Debo decir que sus cadenas son increíbles. (Tsunade)
Ja, ja, ja. Así es, llamarlas cadenas es un buen término. (Lite)
Ya veo, en lugar de luchar contra la corriente, la desviarán gradualmente hasta que vaya en la dirección que quieres. Pero debo decir que tienes razón, es algo realmente peligroso. Debemos hacer todo eso mientras nos aseguramos que esos dos chicos crezcan de la forma que se supone que harían originalmente. (Mito)
Lastimosamente, la vida real no es como los fanfic que leyó, donde la persona reencarnada, solo por el hecho de existir, se vuelve especial y su destino no se puede predecir. Desde el momento que entras a este mundo te vuelves parte de él. No puedes luchar simplemente contra lo que se puede considerar la voluntad del mundo entero.
Entonces fue bueno que decidieras actuar en las sombras. (Tsunade)
*Suspirar* Las cosas de las que me enteré hoy son más grandes de todo lo que pude imaginar. Pero aun así hay un problema. (Mito)
¿Cuál? (Tsunade)
Mi estadía acá, aunque los quisiera ayudar, mi tiempo es limitado. Conozco la técnica de Tobirama y no me queda mucho. (Mito)
Ah, por eso no te preocupes. ¿Acaso no has notado como eres ahora? Es imposible que alguien traído a la vida sea capas de tener dolores de cabeza o ponerse pálida. (Lite)
Ahora que lo pensaba, Mito se dio cuenta de que el pequeño tenía razón. Es solo que las sorpresas fueron tan grandes que impidieron que se enfocara en ese punto.
Si necesitamos tu ayuda, obviamente tenemos que buscar la forma de tenerte entre nosotros. Debo decirte, no fue una tarea fácil. Tu nieta casi se vuelve loca. (Lite)
Debo admitir que hicieron un buen trabajo, pero esto a los más me dará unos meses. Y no creo que eso sea suficiente. (Mito)
Por eso, tengo una teoría, pero necesitaba consultarla contigo antes ponerla a prueba. (Lite)
¿Oh? ¿Cuál es? (Mito)
Pensaba en usar Shiki Fūjin (Sello Consumidor del Demonio de la Muerte) para sellar su alma a tu cuerpo. (Lite)
Eso… eso es teóricamente posible, pero no creo que alguien deba sacrificarse, por más noble que sea tu meta, no permitiría que hicieran eso. (Mito)
Solo responda, ¿es posible? (Lite)
Todos voltearon a ver a Mito, sus miradas serias. Estaban expectantes de las posibilidades.
Eso… no lo sé, nunca antes alguien lo había intentado. Pero según mis cálculos, creo que sí. (Mito)
Bien, entonces no hay más tiempo que perder. Creo que es hora de que vayamos a descansar, hemos hablado por demasiado tiempo y creo que mamá debe estar preocupada. (Lite)
Con esas palabras, Lite se levantó de su asiento y comenzó a caminar a la salida. Lo que dijo no era mentira, él realmente estaba cansado. Durante todo este tiempo estuvo esforzando a su cerebro para formular la mejor manera de convencer a Mito.
Ella creía que su tiempo ya se había acabado en este mundo, y de no ser porque la que estuvo involucrada en este asunto era su nieta, entonces hubiera atacado a Lite y Minato en cuanto despertó. No era necesario decir que traer a la vida a un muerto es una gran falta de respeto.
Lite llegó a la puerta, la quiso abrir pero se detuvo. No volteo la cabeza, pero sí dijo lo que tenía que decir.
Minato, te encargo los sacrificios… *Suspirar* Mito, te recomiendo que descanses, mañana será tu turno de dar las explicaciones. (Lite)
¿Oh? ¿Qué explicaciones? (Mito)
Ella respondió con el ceño fruncido. Si bien nunca prestó mucha atención a la etiqueta, podía notar que la voz de Lite contenía ira, mucha ira dirigida hacia ella, pero esa falta de respeto no era algo que ella pudiera tolerar.
Lite se quedó un tiempo parado. Los demás se fueron parando para dirigirse a la salida también, cuando Lite dijo.
Sobre donde se encuentran los sobrevivientes del clan Uzumaki y los que quedaron de la limpia del clan Senju. (Lite)
Con esas palabras, Lite se retiró sin mirar atrás, dejando a una aturdida Mito, quien tenía una expresión de asombro, la cual cambio inmediatamente a culpa cuando dirigió su mirada a Tsunade.
Esta última solo apretó los puños y camino hacia la puerta. Esa mirada de Mito fue suficiente para que entendiera que lo que dijo Lite era verdad.
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Side story: Las aventuras de la pequeña Moka
Moka POV
Mi nombre es Moka, vivo en una cueva con mi mamá y mi hermano mayor Lite. Solía tener otro hermano, pero lastimosamente murió.
Actualmente, soy la líder de una organización supersecreta que se encarga de salvar al mundo de los malos.
Al principio estaba confundida de porqué me eligieron su líder, pero no pasó mucho tiempo para darme cuenta de que ellos de verdad me necesitaban.
Soy la líder porque todo lo que pido se cumple.
Hubo una vez que extrañaba mis juguetes, que se quedaron en mi casa, ahí fue cuando Lite-oniichan mando a uno de sus agentes para que me lo traiga. Otra vez quería comer otra cosa porque ya estaba aburrida de lo que cocinaban acá.
Mi mañana comienza siempre con mi madre levantándome temprano. Después de arreglarme, salgo a comer con todos los demás, siempre lo hacemos juntos, aunque a veces Tsunade-obaasan no está, pero eso no importa mucho, ella es una mujer bastante rara. Ya está un poco vieja, pero hasta ahora no se ha casado ni tiene hijos.
Después voy a mi habitación a preparar mis planes. Escribo todo lo que me enseña Lite-oniichan para estar lista para cualquier cosa. Mmm… Quiero jugar con mis muñecas por un momento, sí, trabajaré después.
No hay mucho que pueda hacer en una cueva y es cansado dirigir a personas tan poderosas, a veces tengo que ponerme ruda para que no desafíen mi autoridad.
*Sob* *Sob* *Sob* Mamá me regañó por no terminar la comida. Pero no importa, la perdonaré porque es mi madre.
En la cueva, hay habitaciones peligrosas a las que no puedo entrar, para eso están mis subordinados. Mi trabajo es dirigir, ellos se encargan de todo lo demás.
Pero igual extraño mi casa antigua, acá no puedo ver el cielo ni jugar con mis amigos. Aunque sé que es muy importante mi misión de salvar al mundo, a veces extraño esos días simples.
A veces lloro, pero es lo que debo hacer.
*Sob* *Sob* *Sob* (Moka)
Ya, no pasa nada, ya. Vamos a dormir.
Cuando me siento muy sola, mamá viene a hacerme compañía por la noche. Normalmente, trato de dormir sola como la mujer grande que soy, pero a veces la consiento y dejo que duerma conmigo.
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¿Cómo va la pequeña moka? (Minato)
Bien, aunque no me gusta la idea de tenerla encerrada todo el tiempo. (Lite)
Ja, ja, ja. Bueno, no me quejo, es divertido llamarla jefa. Tuviste una buena idea. (Minato)
Sí, ella es la que mantiene este lugar iluminado. En cierto modo, sí es la que salvará el mundo. (Lite)
Ja, ja, ja. Tal vez. (Minato)