Capítulo 14: Konoha 

3° Persona

Pasaron dos días desde la muerte del cuarto Hokage.

La reconstrucción de la aldea se estaba llevando lenta pero constantemente. Esto afectó sobre todo a los grandes clanes, quienes son los que tienen sus propiedades en la zona central.

Cuando las aldeas vecinas, tanto de las otras grandes naciones como de los países pequeños se enteraron de lo que sucedió, se apresuraron a andar a sus mejores espías para poder averiguar los daños de la aldea y ver si había alguna forma de sacar provecho de su situación. Sobre todo de cuantas bajas tenían, ya que incluso si no podían hacer algo directamente, atacar sus finanzas al robar los contratos para los ninjas que originalmente pertenecían a Konoha con la excusa de que su fuerza militar fue reducida no era imposible.

Grande fue su sorpresa al enterarse de que los daños fueron mínimos. Los más afectados era,n obviamente, los encargados de las aldeas que más diferencias tuvieron con Konoha durante la guerra, Kumogakure y Iwagakure, sin embargo, no importaba cuanto berrinche hicieran, nada iba a cambiar las cosas.

Ellos los únicos que estaban enojados con la situación. Un cierto tipo con un parche en el ojo y un brazo vendado tampoco estaba teniendo la mejor de las expresiones, esto es debido a que después de la muerte del cuarto Hokage, inmediatamente se convocó a todos los altos mandos de la aldea, Esto es para decidir quién iba a tomar el cargo Hokage ya que no se podían permitir que el puesto este vacío ni siquiera por un día más para evitar crear más inestabilidad en los corazones de los aldeanos. Normalmente Se podrían dar el lujo de esperar un poco más para tomar este tipo de decisiones tan importantes, sin embargo, el hecho de que el fin de la guerra y este hecho hayan sucedido un periodo de tiempo tan pequeño hace que no se puedan tomar este tipo de riesgos.

Lo malo es que para este tipo con un parche la mayoría de los que se encargaban de decidir estaban del lado de que el tercero vuelva a tomar las riendas de la aldea una vez más. La principal razón fue que él había dejado el puesto hace tan solo un año y no costaría tanto acostumbrarse a su mandato otra vez.

Lo que más lo enojaba era que el cuarto se había ido como todo un héroe sin permitir que la aldea sufriera ningún tipo de pérdida en su fuerza militar, lo cual hizo quedar al tercero como alguien sabio que supo elegir bien a su sucesor, dándole así más credibilidad en esta elección.

En cuanto al señor feudal, él recibió las noticias inmediatamente por medios especiales y mandó su respuesta indicando que podían llevar las elecciones a cabo sin muchas preocupaciones. Los señores feudales, dueños de cada nación, podían verse como tipos engreídos que solamente se habían malgastar el dinero y aprovecharse de sus súbditos, sin embargo, para mantener el poder es importante saber cómo manejar las situaciones súbitas de forma correcta, y en este caso en especial entendió qué más que preocuparse por no encontrarse en una reunión, lo mejor era permitir que ellos hicieran como mejor les pareciera y luego ejercer su autoridad por distintos medios políticos, ya que no podía permitirse que el país del fuego entre en una crisis interna.

Todos estos no hicieron más que enojar a Danzo, quien por fin había visto una oportunidad de hacerse con el puesto con el que soñó por tantos años.

En esta situación específica su plan era contactar a Tsunade y chantajearla con su información para que lo apoye en su candidatura, sin embargo en Tantos meses en que la estuvo buscando no pudo hallar ni un solo rastro de ella. Él creía que sería fácil encontrarla, ya que no era secreto que pasaba su vida emborrachándose y apostando. Lastimosamente no pudo realizar ese plan y ahora se lamentaba de haber actuado contra Orochimaru tan rápido debido a que si hubiera sabido que Minato iba a ganar de forma tan contundente, entonces lo hubiera dejado quedarse como una carta bajo la manga para posibles situaciones, lastimosamente su hambre por el poder y su mente tan estrecha lo dejó ahora sin ningún apoyo.

En cuanto a los consultores de con hoja, conocidos Como los dos ancianos, no podían estar más contentos con el suceso de hechos actuales. Ellos conocían muy bien a Hiruzen y sabían que con él al frente no tendrían problemas en mantener su estatus alto y continuar con sus actividades corruptas. De hecho estaban hartos de Minato debido a que por sus ideales tan puros chocaban regularmente en lo que hacer y no hacer en la aldea.

Los que peor lo estaban pasando en este tipo de situación eran los clanes que se encontraban en la zona destruida. Todas sus propiedades y negocios comerciales se perdieron y recuperarse iba a tomar bastante tiempo. Además de eso, con el cuarto de la cabeza se dieron cuenta de que la actividad económica estaba creciendo a un ritmo acelerado, y estaban agradecidos por las nuevas políticas, y ahora con el tercero no saben si esto continuará así.

Lo peor era que los clanes que se encontraban en el centro eran justamente los más grandes y los que tenían mayor poder no solamente militar sino también económico, lo que hizo que cualquier cambio brusco sea un gran problema para la aldea en general. Todos saben que la economía es la base para la militarización, y sin la primera la segunda no puede desarrollarse, sin embargo, ahora que todos los negocios de estos clanes estaban destruidos, no tenían forma alguna de mantener sus operaciones normales, de hecho, incluso conseguir comida era un lujo en estos momentos, y sus ahorros irían mayormente a la reconstrucción de la infraestructura, por lo que la aldea era la que tendría que proveerlos por algún tiempo, lo cual generaría un gran déficit en sus cuentas.

Otro punto a tener en cuenta sería el calmar a los pobladores. Estos eran la verdadera fuerza detrás de Konoha, ya que gracias a ellos movía la economía y era, de hecho, de las personas comunes, de donde salía la mayor cantidad de ninjas, ya que no importa qué tan poderoso sea un clan sus integrantes eran una minoría en comparación a toda una aldea. Y ahora esas mismas personas estaban aterrorizadas con una gran posibilidad de que se vayan a vivir a otro lado, después de todo, que algo tan grande suceda en la supuesta mayor potencia militar del mundo era algo que no dejaba a nadie tranquilo.

Lo que tranquilizaba a los altos mandos era que la cantidad de casualidades civiles fue increíblemente de baja al haber evacuado cuando comenzaron las explosiones, los únicos que corrieron la desgracia de perecer fueron los que pertenecieron al grupo que se encargó de detener a la bestia hasta que llegue el cuarto, por lo que a pesar de que muchos estaban asustados al menos tenían la seguridad de que la aldea sabía cómo responder rápidamente ante situaciones inesperadas.

El único que no estaba tranquilo con este análisis era Shikaku, quién sabía perfectamente la verdadera razón por la que fueron capaces de evacuar a todos a salvo. Desde ese día, él ha pasado todos y cada uno de sus retos libres en pensar en quién fue capaz de organizarse semejante plan para ayudar a la aldea desde las sombras. Shikaku, después de varios análisis, sabía muy bien la primera onda de explosiones fue de un aliado, ya que los tiempos y el orden eran demasiado perfectos para hacer una casualidad. por lo que ahora una de sus mayores metas era saber quién fue ese sujeto o sujetos. Él, Shikaku Nara, no podía simplemente dejar a alguien que era capaz de predecir u obtener información de un ataque a tal gran escala libre por ahí. Esta era su responsabilidad como estratega y consejero de la aldea.

Esta fue la situación en los primeros dos días desde que ocurrió la tragedia. Ahora, en una sala de reuniones improvisada en lugar de la mansión del Hokage, en un área despejada de escombros, se encontraban reunidos los mayores líderes de la aldea.

Al principio ellos mismos trataron de dilatar el tiempo hasta que se elija un nuevo líder, esto con el fin de proponer a los candidatos que den mayores beneficios a cada grupo. Sin embargo el momento de organizar la reconstrucción, distribución de alimentos, distribución de herramientas, organización de limpieza, etcétera; se dieron cuenta de que como cada uno trabajaba como un grupo independiente, organizarse era prácticamente imposible y cada zona estaba produciendo resultados muy disparejos. Esto era un peligro ya que al no haber alguien de un mayor Rango, los clanes podrían aprovechar para ganar mayor autoridad dentro del área de la que eran encargados.

Por suerte el tercero, quién ya tenía experiencia en este tipo de situaciones, notó rápidamente el problema antes de que se convirtiera en algo más grande, así convocando a todos y llegando a la situación actual. De discutió mucho sobre quién debía encargarse ahora de ser el protector de Konoha, lastimosamente aparte de Hiruzen y Danzo, no había nadie más que pueda ser capaz de cargar con tal responsabilidad.

Lo que salvó a la aldea fue la increíble mala reputación que Danzo tenía con la mayoría de los clanes debido a muchas disputas que tuvieron en el pasado, eso al querer más poder e influencia sobre ellos.

Hubo muchos que propusieron que Jiraiya fuera quién se hiciera cargo, lastimosamente él no se encontraba en la aldea y era muy difícil contactarse con él En tan poco tiempo.

Por otro lado, otra persona que también tenía un dolor de cabeza grande, era el tercero, quién tenía las esperanzas de que alguno de sus dos estudiantes volviera para hacerse cargo de este problema. Él ya se consideraba una persona mayor y no quería ponerse bajo tal estrés en sus últimos años, sobre todo ahora que había perdido a su esposa.

De hecho, Lite trató de pensar en algún plan para salvarla, sin embargo no podía arriesgar tanto tiempo de preparación solamente por una persona. Además, en el caso de cualquier ninja, él nunca se sentiría culpable por tratarlos de cualquier forma, ya que ellos mismos fueron los que decidieron vivir de esa misma manera. Por lo que para él la esposa Hiruzen no era Inocente de nada.

Por todo eso, el tercero se encargó de buscar por todos lados a Tsunade y tratar de contactarse con ella por los medios que ella misma había dejado, pero estaba destinado a decepcionarse.

En pocas palabras, la aldea en general era un desastre en este momento, y solamente por el respeto que aún le tenían al cuarto por su sacrificio, es que no habían entrado en una anarquía.

Esto se difiere mucho de la historia que Lite conocía, donde el problema más grande era la pérdida de vidas, y en este caso la moral de la gente.

Después de horas y horas y horas y horas y horas y horas y horas de discusión, al tercer día se anunció que Sarutobi Hiruzen volvería al puesto.

Esta noticia no tardó más de una hora en llegar a todas las partes del continente con diversas respuestas de parte de cada uno de los líderes.

Esto hizo fruncir el ceño a algunos y a soltar carcajadas a otros. Los primeros Por qué tuvieron una mala experiencia con él durante la guerra y los segundos al saber que el el profesor ya no era el mismo de antes, su corazón había envejecido, y ya no tenía el mismo impulso para tomar decisiones difíciles. De hecho, en esta misma última guerra, se había demostrado que las decisiones que antes podía tomar fácilmente, como mandar a la muerte a varios batallones enteros por una ventaja táctica mayor, ya no las podía hacer. Esto hizo que lo que pudo haber sido una victoria un poco más definida, llegue a ser lo que fue al final.

Después de todo, en una guerra, el general tiene que ser lo suficientemente cruel como para tomar decisiones aún en contra de sus principios.

Los que no estuvieron contentos con la poca cantidad de bajas, en este mismo momento se encontraban frotándose las manos al saber que solamente tenían que esperar por la oportunidad correcta para sacar grandes ganancias.

De esta forma, con un corazón intranquilo, se realizó la coronación del Tercer reinstalado en el poder.

Lastimosamente para Hiruzen, esto fue algo que en el futuro hubiera deseado nunca haber hecho ya que perdería todo lo que aún le quedaba.

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Espero que les guste. :D